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INFORMATICA
Mauricio Isaid Domínguez Soberanis UNIDAD 3
ADMINISTRACION PARA LA INFORMATICA
Tabla de contenido
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La administración estratégica es una herramienta importante para las empresas, ya que juega un
papel importante dentro de su desempeño, ya que con estrategias bien diseñadas logran conquistar
su mercado.
Una de las principales razones del por qué el empleo de estrategias es importante para las
organizaciones y que sin duda alguna nos deja mucho que decir y que pude marcar el desempeño
de la organización, es que a través de estas se puede determinar el éxito o el fracaso de la
organización, debido a las condiciones a las que se enfrentan las organizaciones y al desempeño que
ellas tengan.
Otro factor que le da valor a la administración estratégica es que las organizaciones siempre se
encuentran en constantes cambios, por lo que es necesario tener herramientas que le permitan a
los gerentes variables para decidir qué hacer y cómo hacerlo, por lo que se enfrenta de mejor
manera la incertidumbre del ambiente de la empresa.
Además de ello el uso de buenas estrategias permitirá a la empresa mejor y mayor conocimiento
de la organización así como lo que está pasando, es decir, tener mejor divulgación de la información,
lo que le permitirá la reducción de gastos, el mejor desempeño de sus empleados debido a que no
se perderá le tiempo en planear las actividades o estrategias puesto que estas ya estarán
establecidas previamente, se llegar una división y coordinación del trabajo.
Pero sin lugar a duda la administración estratégica es de vital importancia porque a través de ella
se encuentran involucradas la mayoría de las decisiones que toman los gerentes con las actividades
empresariales, de las organizaciones.
MISION
La misión expone el porqué de la existencia de la organización y el qué debe hacer. Por ejemplo, la
misión de una aerolínea nacional podría definirse como: satisfacer las necesidades de individuos y
viajeros de negocios en cuanto a transporte rápido, a un precio razonable y hacia los principales
centros del país.
VISION
La visión, también llamada “visión de futuro”, es una formulación de la situación futura deseable
para la empresa. La visión puede ser expresada en una o varias frases redactadas de manera
atractiva y motivadora. Al ser la visión una situación futura deseable, es una especie de gran objetivo
a lograr y, por eso, es la inspiración y el marco para definir objetivos y metas más específicas. Aunque
la visión debe tener un carácter duradero, suele actualizarse regularmente o redefinirse cuando las
circunstancias estratégicas de la empresa así lo requieren.
VALORES
Los valores, también llamados “valores corporativos, empresariales u organizacionales”, son las
creencias (el credo) acerca de las conductas consideradas correctas y valiosas por la empresa. De
los tres elementos mencionados, los valores son los que tienen mayor permanencia. No se trata de
una declaración circunstancial o de conveniencia, sino de creencias básicas, esenciales, que tienen
valor intrínseco.
Los valores instrumentales u operativos asociados a la forma de pensar y hacer las cosas con que la
organización pretende afrontar las demandas de su entorno e integrar sus tensiones internas para
alcanzar su visión y su misión, los cuales se ponen de manifiesto en la etapa de implementación de
las estrategias de la organización.
Esta se lleva a cabo mediante un determinado proceso, constituido por una serie de fases o etapas
que habrá que desarrollar en su totalidad.
Este proceso incluye tres dimensiones diferentes: económica, política y organizativa o burocrática.
La dimensión económica, es aquella que se ocupa del estudio de las variables técnico-económicas
de la empresa, ofreciendo una visión racional y formal de la empresa.
La dimensión política, es aquella que se encarga del estudio de las variables sociopolíticas y
culturales, mediante esta la empresa valora la influencia que las personas internos como empleados
y directivos, como externos que son propietarios, clientes, proveedores y estado, ofreciendo su
funcionamiento y estrategia.
Por último la dimensión organizativa actúa de enlace, de nexo de unión entre las dos dimensiones
anteriores permitiendo definir la estructura organizativa, los estilos de dirección y liderazgo y la
propia cultura organizativa de la empresa.
La elección de la estrategia implica la compresión de las bases subyacentes para la estrategia futura,
tanto desde el punto de vista de la unidad de negocio como desde el punto de vista corporativo, y
de las opciones para desarrollar la estrategia, tanto en función de la dirección en que esta debe
moverse como de los métodos de desarrollo.
Al máximo nivel de una organización existen cuestiones relativas a la estrategia corporativa, que se
ocupan del alcance de las estrategias de la organización. Esto incluye decisiones sobre la cartera de
productos y/o de los negocios y la amplitud de los mercados. Así, pues para muchas organizaciones
las estrategias de internacionalización son una parte clave de la estrategia corporativa.
La estrategia corporativa también se ocupa de las relaciones entre las partes independientes del
negocio y de cómo la empresa “matriz” añade valor a las mismas. Por supuesto existe el peligro de
que la matriz no añada valor y sea meramente un coste para las unidades de negocio. Estará por
tanto destruyendo su valor, hay distintas formas de resolver estas cuestiones.
La puesta de la estrategia en acción se ocupa de garantizar que las estrategias están funcionando
en la práctica, y lleva varios pasos:
Diversificación
La diversificación se define como una estrategia que aleja a la organización de sus mercados y
productos actuales. La diversificación aumentara la diversidad que debe supervisar la sede.
Primeramente hay que saber que un método de desarrollo es un medio para poder aplicar
cualquiera de las direcciones estratégicas mencionadas con anterioridad, se pueden dividir en tres
tipos:
Desarrollo Interno: se produce cuando se desarrollan las estrategias partiendo y desarrollando las
propias capacidades de la organización.
Alianzas estratégicas: estas se producen cuando dos o más organizaciones comparten recursos y
actividades para aplicar una determinada estrategia, estas actualmente están adquiriendo mayor
popularidad, pero también son importantes en el sector público, como medio de resolver
determinadas cuestiones sociales.
Sabemos porque algunas estrategias tienen más éxito que otras, esto es gracias a los criterios de
éxito, que son aquellos que nos permitirán evaluar la probabilidad como su nombre lo dice de éxito
de las diferentes opciones estratégicas, existen tres principalmente:
El ajuste de la estrategia que hace referencia a si dicha estrategia es adecuada a las circunstancias
en las que se encuentra la organización.
Consiste en utilizar criterios racionales para elegir una estrategia. De esta forma, los objetivos de le
empresa se utilizan para valorar las diferentes opciones. Asimismo, este planteamiento puede
eliminar gran parte de la subjetividad que representan otros métodos. Así, se debe tener en cuenta
que la planificación formal y la evaluación de la empresa son esenciales para elegir una estrategia,
sea cual sea el planteamiento dominante para su selección.
Lo que uno mide, es lo que logrará. Así, si usted mide únicamente el desempeño financiero, solo
obtendrá un buen desempeño financiero. Si por el contrario amplía su visión, e incluye medidas
desde otras perspectivas, entonces tendrá la posibilidad de alcanzar objetivos que van más allá de
lo financiero.
Esta es la idea fundamental del artículo que en 1992 Robert Kaplan y David Norton escribieran en
Harvard Business Review, titulado "TheBalancedScorecard - Measuresthat Drive Performance" (El
BalancedScorecard - Mediciones que llevan a Resultados).
Perspectiva financiera:: aunque las medidas financieras no deben ser las únicas, tampoco
deben despreciarse. La información precisa y actualizada sobre el desempeño financiero
siempre será una prioridad. A las medidas tradicionales financieras (como ganancias,
crecimiento en las ventas), quizás se deba agregar otras relacionadas como riesgo y costo-
beneficio.
Perspectiva del cliente: cómo ve el cliente a la organización, y qué debe hacer esta para
mantenerlo como cliente. Si el cliente no está satisfecho, aun cuando las finanzas estén
marchando bien, es un fuerte indicativo de problemas en el futuro.
Perspectiva interna o de procesos de negocio: cuales son los procesos internos que la
organización debe mejorar para lograr sus objetivos. Debemos preguntarnos: "Para
satisfacer a los accionistas y clientes, en que procesos de negocio debemos sobresalir?".
Perspectiva de innovación y mejora: cómo puede la organización seguir mejorando para
crear valor en el futuro. Incluye aspectos como entrenamiento de los empleados, cultura
organizacional, etc.
Las medidas puramente financieras toman el punto de vista de los accionistas de la empresa. En
general, son excesivamente de corto plazo, y muy vulnerables ante las variaciones del mercado
accionario. Por lo tanto, evitan que los gerentes y directores consideren las oportunidades a largo
plazo. De allí que una herramienta que "equilibre" estas mediciones con otras, haya sido tan
atractiva desde su aparición en el mercado.