Hernán Arrichetta – UNA - Taller de Dramaturgia I - prof.

Ariel Barchilón

El Balcón

Federico esta sentado en el balcón de un departamento en el primer piso

donde transcurre un cumpleaños, es viernes a las doce de la noche. Esta con una
silla de madera traída de adentro, del living comedor que da al balcón. Fuma en paz
y observa el entorno, él fue solo para encontrarse con una mujer.

FEDERICO: (observa de cerca una rama que entra sobre el balcón, entra Paula
fumando) Hola..

PAULA: (levantando la mirada del celular, lo mira de soslayo y se apoya en la

baranda) ¿fumando también?

FEDERICO: (esboza una sonrisa y mira su reloj, Paula arroja el cigarrillo sobre unas
macetas, se incorpora de la baranda y se acerca a Federico dando la mano y mira la
rama del arbol) es extraño el árbol, ¿no? parece un buen árbol… las plantas están
bastante secas.. pero el árbol parece de los buenos (se saca el pullover. Paula se da
vuelta hacia Federico y lo mira adusta) ba.. las plantas no están tan mal y el árbol no
es tampoco muy bueno…Si es así, no es muy bueno. No, me equivoqué, es de los
buenos, si si, en serio. (Paula mira a Federico) yo quería.. que bueno que viniste, no
se si vos, por ahí tenés ganas o no, había algunas cosas que… pensaba.. (se lleva
la mano a la cabeza). Todo siempre y cuando vos no tengas que irte, o no quieras
simplemente, ¿no? (Paula lo mira sin contestar, se da vuelta y mira la calle apoyada
en la baranda) ¿tenes un cigarrillo?

PAULA: (permanece inmóvil un segundo y luego gira hacia Federico ) ¿estas

resfriado?

FEDERICO: no para nada.. (Paula mira fijo a Federico ) no me siento muy bien, pero
no, no estoy… me cuido solo yo, no es malo cuidarse solo, tengo que hacerlo, si no,
¿no? no hay nadie que me.. sabes que quizás si esté, ahora que veo, un poco como
congestionado o algo.. debe ser un resfrío, si seguro que es como vos decís, estoy
resfriado (se acerca a la rama del árbol y pone un pie sobre una maceta, mira a
Paula esperando. Paula hace un gesto con la cabeza hacia adelante. Federico saca
rápido el pie de la maceta y toca con timidez la planta.) esta no esta seca para nada,
tiene buenas flores, bien verdes las hojas y bastante alta también, con una macetita
tan chiquita, quien diría , ¿no? (Paula inclina la cabeza y mira hacia la calle
nuevamente. Federico sigue la mirada de Paula y saca hojas de la rama del árbol
que tapan su vista, las sostiene el la mano. Mira el suelo) no da que las tire en el
suelo, están secas y el suelo lleno de hojas pero.. mejor las tiro adentro en un tacho,
¿no? (Paula niega con la cabeza) esta mal tirarlas acá en el suelo..(sonríe y mira
las hojas en su mano y el suelo, acomoda las hojas sobre la silla. Paula sonríe) yo
quería decirte si vos.. (Paula mira fijamente la silla y Federico imita la mirada de P.
Ella limpia la silla con un soplido, se inclina y mira la zapatilla de Federico. Él mira a
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Paula siguiendo su mirada. Paula limpia rápido la zapatilla de él con su pie) gracias,
esta bien, esta limpia, una hoja no es nada, no importa.. (Paula mira a Federico ) yo
estoy acá en realidad para decirte algo, tengo que hablar por que sino no se donde
estoy y que pasa o me pasa, porque yo no quería venir a acá, digo: si quería, te
encontré de casualidad … , es obvio, claro.. (hace una pausa. Paula permanece
inmóvil contra la baranda) estas como con un algo que te inquieta… ¿tenes frio?

PAULA: a veces, ahora no...

FEDERICO: ¿no queres que vayamos adentro al cumpleaños? (Paula mira a

Federico ) yo no comí nada antes de venir, vos me parece que estas sin hambre, a
mi me da hambre cuando estoy sin hablar, por eso estaba sentado, porque cuando
hablo siempre me paro, hay que pararse para hablar, ¿no? para decir algo, si es
necesario decirlo, también. Adentro la fiesta esta buena…

PAULA: esta cerca…

FEDERICO: podríamos entrar, ¿que te parece? (Paula niega con un dedo) no, no
entremos mejor, no te emociona mucho el cumpleaños.. yo parado me contracturo
un poco pero, estoy mas atento, eso debe ser por el humor (ríe y luego interrumpe la
risa) no todos tienen buen día pero vos tenes… energía, se ve.. (Paula mira fijo el
suelo. Federico sigue la mirada de Paula. Ella mira a Federico esperando. Él agarra
la silla y la acomoda para sentarse, mira la baranda y luego a Paula. Ella mira la
baranda y hace un gesto con la mirada. Federico agarra la baranda primero y luego
se para, se le pega pintura descascarada y revisa su mano, la sopla y caen restos
de pintura en la manga del pullover de Paula, luego mira a ella, saca un pañuelo de
papel de su bolsillo y limpia los restos de pintura de la manga, se para con estos en
la mano, mira a Paula) los tiro a la calle.. (Paula niega con la cabeza. Federico los
guarda en el bolsillo. Paula asiente con la cabeza) este balcón parece mas chico
porque están estas ramas del árbol que entran sobre el balcón.. (Paula mira a
Federico) el árbol este tiene muchas ramas hacia acá por la humedad, supongo que
debe ser por los días de lluvia, seguro se juntan los días de lluvia con los de sol y las
plantas y el árbol crecen mas.. a vos no te gusta la lluvia me parece, se te nota, esta
bien, a todo el mundo no le gusta y no tiene porque gustarle, no dije que tenes mala
cara, quizás si hubieras tenido otra fiesta…

PAULA: si, podría ser ...

FEDERICO: quizás si fueras mas amiga de la cumpleañera, ¿no? ¿queres dar una
vuelta por ahí? es una lastima que la gente no aproveche los cumpleaños y haga
algo bueno, ¿no te parece? a ver si todavía por invitar mucha gente se te rompe la
casa, como si durara un día entero la fiesta.. (se ríe y hace un gesto de exageración.
Paula se pone seria) yo no me enojaría con vos si haces una, vos tenes amigos, me
corrijo, vos tenes miles de amigos que son muy divertidos (Paula mira a Federico)
nosotros también estaríamos divertidos en la fiesta, si estuviéramos nos… seriamos
muy divertidos..
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PAULA: son pavadas lo que decís.. (se acerca a la silla y se sienta alejando las
ramas, mira a Federico)

FEDERICO: estas ramas no estan bien (empuja las ramas por las puntas. Paula le
saca las ramas de las manos y las traba entre si) gracias (se limpia las manos en el
pulóver) estaba esperando tu ayuda.

PAULA: ¿la mia?

FEDERICO: solo no puedo

PAULA: ¿sos solitario?

FEDERICO: no, no soy solitario. A veces me aíslo un poco por el humor. Soy, creo,
buen amigo, quizás los pensamientos, deforman un poco la amistad.

PAULA: muy rápido no sos.

FEDERICO: si, no, muy rápido no soy! ( Paula se apoya en la baranda y mira a
Federico) me gustan reuniones mas tranquilas, a mi no me importa la fiesta, les
importa a los que están adentro, pero me gusta esta fiesta, yo voy mucho a las
fiestas..

PAULA: a vos no te gustan las fiestas (se pasa la mano por las piernas, se toca el
muslo y estira el pantalón)

FEDERICO: que buen pantalón, ¿te lo regalaron, o lo compraste vos? no creo que te
lo hayan regalado, tu ropa la seleccionas mucho seguro. Es como que un medico no
toque a su paciente y tenga un empleado que lo haga, él, el medico es el que sabe.
En cambio un albañil si puede mandar a otro que compre ladrillos, no importa quien
vaya, un ladrillo es un ladrillo. Es mejor ser albañil la verdad, no tenes que estar ahí
siempre, una pared la levanta cualquiera, en cambio quien opera bien a un paciente,
ni siquiera siendo medico operan bien a los pacientes, pero tienen que estar ahí.
(Paula se cruza de brazos apoyándose en la baranda y mira a Federico) vos no
tenes mucho animo ahora, ni ganas de nada.. seguro que no tenes! yo si tengo…
no, no tengo…, para nada, seguro que no tengo.. (Paula se sienta en la silla y
señala la calle. Federico mira a la calle y mira a Paula. Ella le hace un gesto para
salir a la calle) me parece que no te entiendo bien que queres con la calle, yo no
conozco por acá, nunca salí por acá..

PAULA: salgamos a la calle (se da vuelta e intenta entrar al depto. esperando a

Federico)

FEDERICO: ¿porque queres irte ahora?

PAULA: no te atreves (se aplasta contra la pared)

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FEDERICO: irnos ahora quedaría mal, después, en un rato.. (se ríe) aunque si, en
realidad esta fiesta no da para mas… (Paula señala la calle) bueno, salgamos a la
calle, si que me atrevo, pero es que irnos así quedaría mal ahora..

PAULA: se te hace tarde..

FEDERICO: si, ya se, y bueno, esta mal, puede ser, bueno vamos, pero tiene que
ser mas tarde, ahora no… no me importa salir en cualquier momento, no es
necesario esperar… pero ahora justo, podemos esperar un momento mas oportuno!
(Paula mira a Federico) esperemos a que saquen la torta, mira como están todos
sentados, nos van a ver yéndonos alevosamente.., soplan las velas y vamos…
(Paula suspira profundamente) voy a entrar y empezar a sugerir que vayan
redondeando, vos no te pongas así, (toma el hombro de Paula), ya se como hacer…
no es bueno tu estado, es malo que pierdas el humor… no es tan malo porque
sino… esta bien porque esta fiesta la verdad… a mi no me afecta tu mal humor… yo
me pondría también así, que queres... (Paula agarra una flor y la huele mirando a
Federico) perdoname, (Federico acerca su cara a la de Paula y endurece el gesto)
… que colores tiene esta flor..!

PAULA: está muy abierta…

FEDERICO: eh… si… es una flor excelente, tiene bordes negros alrededor de los
pétalos, que son bastante tornasolados y con pequeñas vetas, como si fueran ojos
maquillados, realmente, excelente flor, no te pares quédate, voy para adentro… Me
dejaste mudo, nunca enmudezco, ahora pareces mas tranquila con la flor,
oliéndola… ¿te quedó un cigarrillo? (Paula bufa) ¿que, tenes hambre? ( amaga a
irse adentro, dice para si) que cerca que estuvo… voy para adentro y vengo. (agarra
a Paula, luego se detiene.) vos me odias, ¿no? (Paula niega con la cabeza. Federico
vuelve a agarrar a Paula) no sabes el hambre que tengo! no te vayas, tenes mejor
cara ahora! me acabo de dar cuenta que sos alta, estuve mirando para arriba todo el
tiempo… me gusta que seas alta, en realidad no miré muy arriba, sos un poco mas
alta, nada más. No te importa a vos tu altura, ¿no? algo te tiene que parecer…
(Paula se acerca a la baranda y se saca el pullover que tira sobre la silla. Federico
levanta el pullover de la silla, lo limpia un poco y lo acomoda en el respaldo) el
asiento de la silla esta sucio, te limpio el pullover un poco porque se le pegaron
restos de hojas, te lo dejo acá…

PAULA: (señala la rama del árbol) correla de ahí.

FEDERICO: entonces el pullover te lo pongo mas atrás, con la silla. (agarra la rama
del árbol e intenta doblarla para alejarla de la silla y le corta algunas hojas) ahí
quedo bastante apartada de la silla! (tose debido al polen que despidió la rama, se
sacude las manos de a una en su pantalón y se acerca una de las hojas a la nariz
para olerla. Aparta rápidamente la hoja y estornuda estrepitosamente.)

PAULA: (aparta la cara y se tapa la nariz) ¡no estornudes sobre el pullover!

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FEDERICO: bueno, está bien, me vino de repente.

PAULA: devolveme el pullover.

FEDERICO: lo hubieses acomodado vos entonces, te digo: lo puse ahí para que no
se le peguen hojas, nada más. Lo podes agarrar vos si queres. Digo porque
conviene que lo dejes ahí por las hojas. Podría ponerlo mas lejos si queres. ¿Te lo
devuelvo? (Toma una manga del pullover y la mira) Que manga larga que tiene. Esta
bien porque tenes brazos largos vos también.

PAULA: Tenias que decirme algo…

FEDERICO: Vos también podes decirme a mi (agita la mangas del pullover) ¿porque
no me decís? (Paula mira seria a Federico) ¿queres que te diga ahora? Está bien,
no tengo problema. Lo limpio bien al pullover para que no me digas nada después.

PAULA: sacudile mas las mangas también.

FEDERICO: ahí ya esta bien limpio, las magas ya están. Sino quedan estiradas y
este pullover te queda perfecto, tenes un cuerpo muy bien proporcionado.

PAULA: decime.

FEDERICO: si, muy, muy bien proporcionado. Que queres que te diga. Te voy decir,
si. Vos queres, ¿o no?. (se señala la cabeza). Yo no estoy tan bien proporcionado,
desde acá hasta acá. (se ríe fuerte). Pero no siempre es necesaria tanta belleza. Yo
soy menos atlético. A mi me divierte que no me vean atlético, pero después ven que
tengo algo. Me encanta que se sorprendan al verme poco atlético pero que
igualmente me destaco. Tengo habilidad destacada para todo lo que hago. No
necesito andar diciendo nada, yo hago lo que hago y listo, soy desenvuelto. Pero no
me gusta sentirme menos porque la gente me prejuzga, eso si.

PAULA: Decime.

FEDERICO: Bueno, te digo.

PAULA: Decime.

FEDERICO: ¿Hablamos sentados? ¿queres sentarte? (sonríe) no puedo hablar así.

(Paula se sienta en la silla y mira a Federico) te cuento… ¿desde cuando? ¿desde
hace un mes? (Paula se encoge de hombros, se acerca con la silla a Federico. Él
comienza a chasquearse los dedos y se aparta un poco de Paula)

PAULA: Quedate quieto... (Federico suena sus dedos mas fuerte y le tiembla la
mandíbula.)

FEDERICO: (se aquieta un poco) claro, si, es mejor hablar tranquilo. ¿Mira si voy a
poder hablar bien estando nervioso? (Paula mira a Federico. Él acaricia a Paula y
engancha su reloj pulsera en un aro y lastima a Paula. Intenta desenganchar el aro y
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empeora el dolor de Paula y rompe el aro.) Perdoná, lo quise desenganchar hacia

abajo, había visto que se había trabado del lado de arriba (aprieta los dientes.) Igual
no me fui, estoy con lo que te quería decir todavía. Pero no te voy a dejar así, con
las orejas desparejas. ( le quita el aro roto enganchado al reloj y se aparta un poco
con el aro, mira la oreja de Paula) es sang.. no, no es, no fue para tanto.. (sonríe a
medias.) No te muevas, no es nada, apenas un rasguñito, te curo con esto, un
pedacito de pañuelo de papel, uno nuevo eh, esta nuevo el pañuelo, sin usar. Ya
esta, no paso nada, te curé. No se nota para nada el rasguño. Soy un experto en
curar cosas chiquitas así, como cuando me afeito, ¿viste? siempre pasa cuando te
afeitas. Ya esta curada la oreja, en unos minutos como si nada queda (se le cae el
aro al suelo, lo aparta con el pie y gira para recogerlo. Lo limpia con el resto del
pañuelo y lo endereza dejándolo mas corto.) Listo, ya arreglé el aro también! (Paula
se toca en el lóbulo de la oreja sin aro) no te preocupes, no fue nada, no te toques
(intenta agarrar la mano a Paula. Ella se levanta de la silla) porque te levantas así?
no tenes que ponerte tan mal. La oreja esta bien. (intenta cubrir mas el lóbulo de la
oreja con papel del pañuelo) a mi me parece que se curó, no sangra nada, ya está
bien. (mira a Paula y endurece el gesto) hasta las orejas tenes lindas. (toma del
brazo levemente a Paula) te queda mejor un aro solo.

PAULA: (alza la mano lentamente) no me toques más. ( se acerca al vidrio del

cerramiento que da al living para mirarse)

FEDERICO: te puedo seguir contando, iba a empezar de hace un mes… (Paula mira
a Federico) por favor, dejáme que te siga hablando, no terminé con lo que te
empezaba a contar, el aro te lo puedo arreglar en un rato, le falta una piecita nada
mas, que debe estar en el suelo o la silla, ¿porque no te sacas el otro? te ves mejor
sin aros, son muy grandes…, yo también usaría aros! pero mas chicos (rie
angustiado. Paula se saca el aro de la otra oreja) si, te ves mucho mejor sin ningún
aro, me gusta muchísimo! (Paula se aparta del vidrio en el que se reflejaba. Él
retrocede) resultó buena la cura con el papelito,.. voy a tener que remar mucho,
¿no? vos a mi me vas a dejar para siempre con esto, digo porque hice una atrás de
la otra, cada vez peor; pero no estuvo tan mal para romper el hielo (ríe), mas o
menos en realidad, porque te lastimé un poco. ¿Te gusta así sin los.. como te ves?
(Paula mira fijo a Federico) yo quise tocarte el pelo que tanto me.. porque quería
decirte… que se yo… (la mira aterrado) podrías usar el pelo corto, no quiero
aconsejar tu estética, para nada, no necesitas nada vos, si tenes un montón de
pretendientes, en serio, soy honesto, si todas las miradas son para vos siempre,
como no vas a saber que te miran todo el tiempo, no los ves porque corren los ojos a
tiempo, a nadie le gusta ser atrapado, es muy peligroso, podes quedar prendido en
un toque. No te deshagas de mi, si queres salto del balcón y desaparezco, estamos
en el primer piso. Puedo hacerlo, en serio. Fui torpe, no me di cuenta que te
enganchaba el aro, te hice un rasguño muy chiquito, no fue nada, se cura para
mañana si queres. No fue que te arranque el lóbulo, o la oreja entera. Te pusiste
como si te lo hubiera hecho a propósito. Sos exagerada. No, no sos exagerada. Esa
zona de la oreja duele mucho! En una semana queda perfecto. Que en una semana,
no!. En uno o dos días!. (Paula señala la silla a Federico) ¿te traigo algo de adentro?
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(mira hacia adentro del cumpleaños) ¿que me siente, decís? (Paula asiente con la
cabeza) con un rasguñito que me hagas quedamos a mano, tampoco me tenes que
sentar como si me fueses a que se yo.. (se sienta) rasguñame suave y listo. (Paula
le anuda el pullover sobre los ojos y gira alrededor de la silla revolviendo y tirando
suave del pelo a Federico. Él levanta la cabeza buscando a Paula, que acerca y
aleja su cara de la de él, rosándola un poco) ¡sacame el pullover! (Ella parada detrás
le agarra las manos y le respira en la oreja un momento, de golpe muerde fuerte el
cuello de Federico, él grita de dolor.)