CAPITULO 8: Personalidad dependiente

Se preocupan por los demás en exceso y anteponen el bienestar de estos al suyo propio, sea cual sea el corte
personal o para su identidad. Siempre están ayudando y dando y se comprometen con sus relaciones
interpersonales. Básicamente viven su vida a través de los demás, y para los demás, a quienes ofrecen calidez,
ternura y consideración. Cuando las personas que les importan están felices, ellos también lo están. Tienen a adoptar
un papel más pasivo en sus relaciones: ceden ante las opiniones y deseos de aquellos a quienes aman. Prefieren
armonía en sus relaciones, cuando hay desacuerdo tienen a disculparse, aunque fuese el otro quien debiera asumir
dicha responsabilidad.

Son incapaces de adoptar cualquier iniciativa o dar una dirección a su vida. En vez de ello, se unen a personas a las
que consideran competentes y seguras de si mismas y solicitan constantemente consejo y reafirmación antes de
hacer cualquier cosa. En realidad, toman prestados los talentos, capacidades y fortaleza de los otros, a menudo para
solucionar problemas triviales (como qué comer)

Criterios DSM- IV para trastorno de personalidad por dependencia

Una necesidad general y excesiva de que se ocupen de uno, que ocasiona un comportamiento de sumisión y
adhesión y temores de separación, que empieza al inicio de la edad adulta y se da en varios contextos, como lo
indican cinco (o más) de los siguientes ítems:

1) Tiene dificultades para tomar las decisiones cotidianas si no cuenta con un excesivo consejo y reafirmación
por parte de los demás.
2) Necesidad de que otros asuman la responsabilidad en las principales parcelas de su vida.
3) Tiene dificultades para expresar el desacuerdo con los demás debido a temor o a perdida de apoyo o
aprobación (no se incluyen temores o retribución realistas)
4) Tiene dificultades para iniciar proyectos o para hacer las cosas a su manera (debido a falta de confianza en
su propio juicio o en sus capacidades mas que una falta de motivación o energía)
5) Va demasiado lejos llevado por su deseo de lograr protección y apoyo de los demás, hasta el punto de
presentarse voluntario para realizar tareas desagradables
6) Se siente incomodo o desamparado cuando esta solo debido a sus temores exagerados a ser incapaz de
cuidar de sí mismo
7) Cuando termina una relación importante busca urgentemente otra relación que le proporcione el cuidado y el
apoyo que necesita.
8) Esta preocupado de forma no realista por el miedo a que lo abandonen y tenga que cuidar de sí mismo.

DE LA NORMALIDAD A LA PATOLOGÍA

Dentro de las variantes normales, el estilo fiel es muy afectuoso y solícito, antepone el bienestar de los demás al suyo
propio. El estilo conformista es similar al fiel, esta construido alrededor de rasgos de cooperación, consideración y
amabilidad. En lugar de arriesgarse a molestar a los demás, se adaptan a sus preferencias para ser compatibles con
las personas que los rodean.

Entre las variantes normales encontramos individuos capaces de mantener una empatía genuina y con gran
capacidad de amar de forma incondicional y duradera. Además, están entre las personas más fiables modestos,
gentiles, no les gusta criticar. Son fáciles de complacer, exigen poco. Son personas de buena voluntad y se alegran
por la suerte de los demás. Caritativos con los demás, siempre ven el lado positivo de la vida, recalcan virtudes que
ven en los otros.

Estos rasgos pueden desencadenar en patológicos. Los dependientes tienden a fundir su propia identidad con la de
otras personas, por lo que la idea de separación les provoca una ansiedad intensa. Cuando una relación se acaba se
sienten dominados, utilizados, anulados, desesperados. Como confunden límites entre ellos mismos y os dejas, la
perdida de una relación acaba siendo perdida de sí mismos.

Cada uno de los trastornos se sitúa en un conito. Por ej mientras que en el TP la persona desea lograr protección y
apoyo hasta el punto de realizar tareas desagradables (c.5) en el estilo el sujeto es muy considerado y en ocasiones
se sacrifica, anteponiendo los intereses de los demás. Así, con cada criterio.

VARIANTES DE PERSONALIDAD DEPENDIENTE (Combinación con otras personalidades)

Dependiente inquieto

Combinación dependiente y evitadora. Suele encontrarse de una forma extrema en contextos institucionales en las
que se atiende a pacientes ambulatorios crónicos. Muchos se mantienen en estado parasitario y dependiente debido
a las compensaciones y los requerimientos institucionales. Han adquirido un patrón de evitación de interacciones
sociales.

Aprensión subyacente que les provoca falta de iniciativa y evitación ansiosa de la autonomía. Se les desconcierta con
gran facilitad y experimentan sensación generalizada de pavor. Particularmente vulnerables a ansiedad de
separación y temor a perdida de apoyo. A veces expresa esos temores con ira.

Dependiente acomodaticio

Es mas sumiso y agradable, busca mas afecto, cuidado y seguridad que otros subtipos. Temor a ser abandonado
hace que sea demasiado complaciente y servicial. Similar al histriónico dado que son amigables, preocupados por la
aprobación externa, buscan evitar conflicto. Sin embargo, los dependientes tienden al autosacrificio y adoptan el
papel de persona inferior y subordinada. Son compasivos con las necesidades de sus parejas haciendo que estas se
sientan más fuertes y competentes. Dejan responsabilidades en manos de otros; a diferencia de histriónico que
adopta una postura más activa.

La mayoría son acomodaticos por una razón, la afabilidad pretende hacer que los demás tomen el control, con lo que
consiguen compensar su incompetencia. La culpa, enfermedad, ansiedad, depresión son habituales, pero tienen una
finalidad.

Dependiente inmaduro

Prefieren actividades infantiles, encuentran satisfacción relacionándose sobre todo con niños y sienten gran rechazo
por actividades y responsabilidades adultas. No solo son dependientes debido a que son infantiles en su visión de las
cosas y su grado de consecución de objetivos, sino que parecen satisfechas por el hecho de ser así. Algunos
simplemente carecen de ambición y energía, otros son demasiado pasivos.

Dependiente torpe

Combinación con esquizoide. Ambos presentan falta general de vitalidad, tendencia a fatiga, debilidad general en la
expresión y espontaneidad. Sin embargo, dependiente es capaz de empatizar y entender las emociones básicas de
los demás. Simplemente suelen desconectarse de las exigencias del mundo que los rodea; al no querer enfrentarse
con la realidad, van por la ida como sonámbulos, no quieren implicarse en nada ni pensar demasiado.
Dependiente sin identidad

Idealización e identificación total son aspectos primordiales. Están subordinados a los demás de forma mas
exagerada. Vínculos adquieren un nuevo significado para estos individuos, que se fusionan de tal forma con los
demás que se pierden a si mismos en el proceso. Niegan e ignoran sus propios potenciales. Mediante esta fusión le
proporcionan sentido a su existencia, adquieren estabilidad emocional y objetivos en la vida. A pesar de la perdida de
identidad, muchos parecen satisfechos con su estilo de vida dedicado al autosacrificio. Cuanto más unidos están al
objeto idealizado, mas vinculados se encuentran desde el punto de vista emocional y mas se sienten como personas
de valor en el mundo. (ej madres que viven a través de la vida exitosa del hijo) Debido a que adquieren identidad a
partir de fuentes externas, vulnerables a la perdida.

ANTECEDENTES HISTÓRICOS

Pese a los repetidos intentos de desarrollar el concepto de una personalidad antisocial exenta a las implicaciones de
insania moral, esta ideal siguió influyendo en concepciones posteriores, entre las que se encuentran las de
dependiente, que estuvieron contaminadas por la idea de que dichas personas simplemente reflejaban una variante
rara de degeneración moral.

Kraepelin y Schneider, por ej, hicieron pocas referencias a la necesidad y búsqueda de apoyo externo, haciendo
hincapié en la voluntad irresoluta de éstos y la facilidad con que podían ser influidos por los demás. Para estos
teóricos de los primeros tiempos, los tipos “abúlicos y de voluntad débil” estaban predispuestos a conductas poco
adecuadas desde el punto de vista social como adicciones y robo. A menos que estuvieran motivados por fuerzas
externas poderosas, estas consecuencias no son características de la personalidad dependiente.

PERSPECTIVA PSICODINAMICA

Según la teoría psicoanalítica clásica, la personalidad dependiente se caracteriza por la fijación durante la etapa oral,
la primera etapa del desarrollo psicosexual. Al igual que cualquier tipo de carácter psicosexual, la fijación puede darse
o bien mediante gratificación, que da lugar a rasgos oral-receptivos, o bien mediante frustración, que da lugar a
caracteres oral- sádicos.

Si se produce pasividad- inactividad se pone de manifiesto mediante la creencia implícita que siempre existirá una
figura, representación de la madre, dispuesta a satisfacer sus necesidades. Estos niños se convierten en adultos que
nunca han sido destetados. Simbólicamente esperan que sus madres los alimenten siempre y si sienten indefensos
cuando dejan de hacerlo. (dependiente)

Por el contrario, siempre se ha pensado que la frustración durante la etapa oral provoca una ambivalencia constante
entre el hambre y la hostilidad. Al llegar a adultos parece que siempre necesitan algo más, pero se muestran hostiles
incluso cuando sus necesidades están cubiertas. La fijación oral lleva entonces a una conexión entre personalidad
dependiente y negativista.

Las personalidades dependientes tienden a hacer hincapié en dos mecanismos de defensa. Debido a que sean
seguir siendo infantiles, no desarrollan las defensas más evolucionadas de los adultos normales.

El primero es introyección, de ahí su necesidad de fusión con otras personas competentes. Cuando se ven a sí
mismos ven inadecuación e incompetencia, que reflejan su carencia básica de habilidades y conocimientos. Esta
introspección genera sentimientos de minusvalía y terror de la posibilidad de que los abandonen. Así, el vinculo que
obtienen es más que una relación normal. En primer lugar, tratan de interiorizar la identidad de otra persona para dar
lugar a una fusión de más débil y más fuerte. En la economía de la relación el dependiente toma prestada potencia
habilitad autoestima y proporciona a cambio su voluntad de estar al servicio de los objetivos de los demás. En
segundo lugar, tienden a idealizar a sus parejas, no la conciben como ser humano con puntos fuertes y débiles, le
otorgan poder casi omnipotente. Los dependientes no superan con facilidad sus idealizaciones tempranas; continúan
exagerando la realidad de sus parejas. Además, esta ilusión fortalece todavía mas su creencia de que el protector
tiene el poder de mantenerlos seguros y alejados del peligro.

Otra manera de afrontar un mundo problemático y hostil es simplemente negar que es hostil. Aunque la introyección
genera sentimientos tranquilizadores por estar unido a una persona poderosa, no es capaz de eliminar todas las
fuentes de ansiedad. En consecuencia, hacen uso extremo de la negación, para amortiguar cualquier sentimiento de
fatalidad que la introyección no pueda eliminar (para protegerse de las dificultades objetivas, para mantener la ilusión
de una utopía interna sin problemas debido a las exigencias externas y a la cruel realidad) y, por otro lado, para evitar
reconocer sus propios impulsos hostiles. Para ellos la ira es amenazadora, porque debilita su idea del que el mundo
adulto sea realmente una extensión del patio de recreo y porque si permite sentirse ira empezaran a surgir preguntas
como ¿de que son capaces los demás? ¿Cómo se sienten en realidad? No se puede dejar que estos pensamientos
accedan a la consciencia ya que destruyen con eficacia la ilusión de seguridad y protección característica del
dependiente.
PERSPECTIVA INTERPERSONAL

Sullivan descubrió la personalidad inadecuada, personas que aprendieron su indefensión a partir del ejemplo parental
y que necesitan a una persona más fuerte para que tome las decisiones por ella. Leary sistematizo muchos aspectos
y desarrollo el circulo interpersonal. El dócil dependiente se caracterizaba por una conformidad confiada n estadios
mas adaptativos de funcionamiento y por una dependencia indefensa en estadios más patológicos.

Al actuar como personas débiles, expresar sus dudas, mostrar actitudes de sumisión, buscan la respuesta
interpersonal complementaria en los demás, es decir, buscan cuidados, protección, muestras de fortaleza y
confianza. Bajo calidez y afabilidad, descansa una búsqueda constante de aceptación y aprobación que se
manifiestan sobretodo en situaciones de estrés. En estos momentos los dependientes intentan aproximar todavía
mas respuestas interpersonales mostrenco incluso aún más apego a indefensión.

Las formulaciones interpersonales del desarrollo de personalidad dependiente hacen hincapié en la sobreprotección
parental, la excesiva preocupación y cuidados y en la desaprobación activa de la autonomía como las principales vías
de desarrollo. Los recién nacidos están indefensos y dependen por completo de sus cuidadores. En la etapa de los
primeros pasos comienzan a desarrollar su propia independencia y sienten curiosidad por el mundo que los rodea.
Sin embargo, algunos padres no permiten que sus hijos se desarrollen con independencia. En vez de permitir que la
curiosidad surja de manera natural, complacen todos sus hábitos y necesidades, memorizan las idiosincrasias de sus
ritmos biológicos y de su temperamento y están siempre preocupados porque se sientan cómodos. De hecho,
consiguen anular cualquier necesidad de explorar el mundo que tenga el niño porque los padres se avanzan para
dárselo todo. Están tan consentidos que no tienen ninguna razón para desarrollar las competencias que necesitarían
mas allá del microcosmos que sus cuidadores han creado. Como consecuencia, no se produce la creciente
sofisticación que acompaña a la madurez psicológica debido a que las etapas evolutivas nórmale se alargan de forma
interminable. Por fortuna, algunos acaban resintiéndose a esa intrusión protectora y desarrollan de forma satisfactoria
su propia identidad, separándose o rebelándose.

Sin embargo, otros nunca se apartan y siguen dependiendo del cuidado y protección de figuras mas poderosas. Los
padres a menudo desalientan de una manera patológica la independencia por miedo a “perder a su bebé”. Rara vez
lo pierden de vista y se muestran ansiosos porque los retos madurativos normales son inevitablemente dolorosos
(como si el hecho de aprender a andar en bici le pudiera perjudicar o dañar). Muchos niños disfrutan de este apego y
atención exageradas.

También existen factores aleatorios que pueden desempeñar un importante papel en el desarrollo: enfermedades
poco frecuentes o complicaciones físicas prolongadas en la salud del niño que llevan a que lo protejan más. En
ocasiones circunstancias como un padre que va a la guerra, sufre un accidente grave o fallece hace que se genere
una simbiosis emocional.

Entonces, los padres desempeñan un papel primordial en la aparición de esta patología, aunque también pueden
contribuir otros miembros de la familia y hasta determinadas experiencias con el grupo de compañeros. (ej si un niño
es dominante o agresivo el otro puede verse obligado a buscar a sus padres en busca de protección)

En la misma línea que Leary, Benjamín subrayaba que el dependiente al principio es una persona cálida, que recibe
cuidado y atención y establece vínculos normales. Mas tarde, los cuidadores no dejan que el niño desarrolle
autonomía. A medida que el niño crece, el grado de cuidado y protección se mantiene constante, acaba por
transformarse en control, se denomina “educación inflexible”. A su vez, el centro conduce a la sumisión, y al mismo
tiempo todos los intentos para recuperar autonomía hallan como respuesta la culpabilidad. El resultado es un niño
sumiso para quien estar controlado es normal y para quien la independencia viola las normas lo que crea
sentimientos de culpa.

PERSPECTIVA COGNITIVA

La estrategia interpersonal de los dependientes, diseñada para asegurarse atención y protección, tiene importantes
consecuencias negativas en su autoimagen y desarrollo cognitivo. La apariencia indefensa que proyectan acaba
afectando el concepto que tienen de si mismos. Se ven como personas débiles, frágiles, inadecuadas, ineptas o
incompetentes. Con el fin de controlar su vulnerabilidad prefieren no mirar demasiado a fondo dentro de si mismos y
limitar la conciencia a las cosas agradables de la vida.

Los esquemas de los dependientes incluyen cualidades positivas y negativas. En el lado positivo se ven a sí mismos
como personas consideradas, reflexivas, cooperadoras. Las buenas cualidades que se atribuyen se compensan con
varias creencias. En cuanto a creencias básicas: “estoy totalmente solo”, o “estoy totalmente indefenso” “solo puedo
funcionar si tengo al lado alguien competente”. El nivel instrumental consiste en mensajes imperativos como “no
ofendas a la persona que cuida de ti”

Debido a que otras personas siempre acuden en su ayuda, pueden desarrollar pocas habilidades de afrontamiento
que vayan mas allá de las habilidades básicas.
Fleming indica numerosas distorsiones cognitivas que mantienen el trastorno. Dos parecen cruciales: los
dependientes se consideran “inherentemente inadecuados o indefensos” y los defectos que perciben en su mismos
los llevan a concluir que deben buscar a alguien que pueda manejar los problemas de la vida en un mundo peligroso.
Entre la premisa y la conclusión descansan varios errores lógicos que distorsionan la realidad y que por lo tanto
invalidan todo el argumento. Ante todo, se encuentra el pensamiento dicotómico. Si no hay nadie que cuide de el se
siente solo pro completo en el mundo.

El pensamiento dicotómico conduce a una tercera distorsión: siempre tienen ideas catastróficas, sobre todo respecto
a relaciones. Cualquier variación en sus relaciones es catastrófica, supone un abandono total, una prueba clara de
que son inútiles y no merecen que nadie los quiera.

¿Cómo desarrollan sus caminos dicotómicos y catastróficos? La respuesta podría encontrarse en las creencias
básicas de sus ciudades quienes a menudos y convierten en un modelo de los procesos de valoración sean los
cuales se manifiesta al futuro dependiente que su vida será un estrecho camino en el que deberá evitar una crisis tras
otra.

Un segundo aspecto de la cognición de los dependientes es su estilo cognitivo, caracterizado por patrones de
pensamiento que probablemente permanecerán siendo globales y difusos. Los individuos introspectivos buscan sin
cesar dentro de si y se crean ideas acerca de quienes son, que quieren llegar a ser, que esperan de la vida. Los
dependientes rara vez miran hacia el interior por lo que acaban por desarrollar ideas vagas acerca de su identidad y
dirección.

Sabes que hacer y por qué hacerlo tiene que ver con el juicio y se basa en conocer las posibilidades alternativas, qué
probabilidades de éxito o fracaso tiene cada una de ellas y por qué. Un buen juicio requiere suficiente confianza en
uno mismo como para elaborar un plan razonado y que pueda ser sometido a evaluación por parte de las personas a
quienes afecta. La mayoría de los dependientes nunca adquieren la capacidad para llevar a cabo este tipo de juicios
tan sofisticados. Los demás o bien asumen que los dependientes son incapaces o toman ellos el control y deciden.
En cualquier caso, se encuentran encapsulados en un mundo que desalienta activamente el desarrollo de la
sofisticación cognitiva. Esto no significa que estas personalidades sean ignorantes o incultas.

El punto clave de su cognición reside en construir un mundo simplista pero mucho mas manejable, al no haber
evaluaciones complejas. Desde el punto de vista cognitivo, necesita la simplicidad al igual que el compulsivo necesita
un mundo interno de orden.

PERSPECTIVA EVOLUTIVA Y DEL NEURODESAROLLO

Constituye uno de los 4 tipos de personalidad con problemas interpersonales. En la teoría evolutiva, esta
personalidad se formula como un patrón pasivo-dependiente (pasividad implica tendencia a adaptarse al ambiente)
disponen su vida de tal modo que se aseguran la ayuda constante, protección y guía a partir de su entorno, buscando
un héroe todopoderoso que le salve de las batallas competitivas de la vida, estrategia contraria a las personalidades
activas.

La maquinaria biológica que ha heredado un individuo puede predisponerlo a percibir y reaccionar ante determinadas
experiencias de una forma que pueda conducirle a aprender un estilo de comportamiento pasivo y dependiente. La
dependencia en si o se hereda nunca, pero ciertos tipos de cualidades genéticas tienen alta probabilidad de
evolucionar hacia patrones característicos de esta personalidad.

Parece plausible que los lactantes que reciben una cantidad adecuada de estímulos de refuerzo pero que obtienen
esos estímulos casi exclusivamente de una misma fuente, por lo general la madre, presentarán una predisposición a
desarrollar rasgos dependientes. Debido a esta falta de variedad, establece un vinculo concreto, una fijación, una
fuente de objetos determinada que excluye a las demás. Así, varios factores pueden conducir a este vínculo
exclusivo.

Muchos jóvenes que en las etapas iniciales no se sentían especialmente cercanos a sus madres también acaban
desarrollando el patrón de dependencia: las experiencias que conducen a estas conductas pueden surgir con
independencia que haya existido o una fase inicial de vinculación exclusiva con la madre. Los talentos deficitarios del
propio niño y su disposición temperamental tales como inadecuaciones físicas, miedo a nuevos retos, angustia
cuando se los deja solos, pueden conducir a este tipo de patrón. Algunos niños, debido a su temperamento
constitucional o aprendizaje temprano suscitan en los demás un comportamiento protector, sus padres pueden haber
accedido de mala gana a hábitos de sobreprotección porque el niño los ha forzado a hacerlo.

Luego los jóvenes reafirman sus capacidades de cremento e intentan hacer cada vez mas cosas solos. Esta
progresión normal puede verse interferida por las ansiedades excesivas de los padres. Por último, debido a la
facilidad con la que los niños pueden obtener gratificaciones simplemente apoyándose en sus padres, abandonan
sus esfuerzos hacia la independencia, nunca aprenden recursos para actuar por sí mismos.
Diferencias con otras personalidades afines

Histriónica. Suelen ser fáciles de distinguir, aunque comparten determinadas características. Ambos tienen gran
necesidad de aprobación social y afecto. Ambos intentan agradar a las personas a las que están vinculadas y su
búsqueda de amor los lleva a negar sus propios pensamientos y sentimientos, sobre todo cuando pueden desagradar
a su compañero. Ambos evitan establecer una identidad de si mismos para que nadie pueda objetar nada. Ambos
son sensibles a la desaprobación.

La diferencia básica reside en su estrategia interpersonal para hacer que otros sean el centro de sus vidas.
Dependientes se apoyan pasivamente en otros, mediante su actitud de indefensión potencian que los demás sean
activos, que intercedan por ellos para manejar su vida. Por el contrario, los histriónicos son activos. En lugar de
situarse al margen de las cosas toman la iniciativa para modificar las circunstancias de su vida y se aseguran de que
las atenciones y aprobaciones que necesitan de los demás sean para siempre. El dependiente suscita atención, pero
el histriónico la provoca. Dependientes se caracterizan por sumisión, autoanulación, docilidad, mientras que el
histriónico es gregario, encantador seductor. Si no consigue reclamar atención el histriónico se mostrará resentido,
mientras que el dependiente temerá expresar ira a sus cuidadores.

Evitadora. Ambos pueden parecer tímidos, carecen de confianza, temen a la crítica, necesidad de protección y
cuidado. Sin embargo, dependientes se muestran así para fomentar que los demás se inmiscuyan y tomen el control,
no adoptaran esta táctica sin creer que los demás son dignos de confianza. Es receptivo a las propuestas
interpersonales. Por el contrario, los evitadores se distancian porque temen el rechazo y la evitación, no confían en
las otras personas. Los dependientes son incapaces de tomar la iniciativa para su propio bienestar, mientras que los
evitadores desean desesperadamente desarrollar sus potenciales y pueden actuar de manera autónoma cuando se
están sometidos a valoraciones sociales.
Masoquista. Ambos se anulan a si mismos y adoptan papel sumiso, pero por diferentes razones. Masoquistas
trabajan para su propio beneficio, pero se sienten culpables o temerosos del éxito y limitan sus oportunidades.
Mientras que los dependientes se abandonan a la pasividad, los masoquistas se esfuerzan activamente por
conseguir ser pasivos.

Limite. Comparten temor a ser abandonados. Limite confunde fronteras entre si mismo y los demás. Expresan ira con
facilidad, son inestables emocionalmente y a menudo intimidan a los demás con su intensidad mientras que
dependiente rara vez se muestra enérgico. Limite puede manipular a su compañero para evitar abandono,
dependiente espera pasivamente a ver qué pasa y confía en que todo ira bien. Dependiente funciona bien mientras
su cuidador le proporciona guía, limite inestabilidad emocional que refleja nivel superior de descompensación
psicológica.

Vías de expresión de los síntomas

Ansiedad

Especialmente vulnerables a presentar trastornos de ansiedad, en especial, trastorno de angustia y agorafobia. Gran
parte de la ansiedad asociada con la posibilidad de ser abandonados, de ser incapaces de afrontarlo e incluso de
sobrevivir. Sus escasas competencias pueden generarle preocupación respecto al rendimiento en tareas.

Si las amenazas a su seguridad se dan en situaciones concretas, pueden presentar fobias específicas. No solo
centran las ansiedades en una amenaza concreta, sino que también informan a los demás, de una manera muy
objetiva, sobre el tipo de estimulo que trata de evitar.

Para muchos, la sola idea del abandono o de quedar indefensos se puede volver tan real que desencadena crisis de
angustia. Algunos pueden utilizarlas con fines manipuladores, como prueba concreta de situación incapacitante que
no les permite asumir responsabilidades y como manera de suscitar protección y compasión por parte de los demás.

El temor suele ser tolerable siempre que va acompañado de la presencia tranquilizadora de un compañero. Desde
psicoanálisis funciona como figura materna protectora que alivia la ansiedad fóbica estimulada por la dependencia
infantil.

Depresión

Desesperanza e indefensión como dos componentes básicos y la depresión. Ambas características muy relacionadas
con la personalidad dependiente. Debido a que tienen pocas competencias solo pueden mantener escasas y
restringidas relaciones, así como un sentido de indefensión absoluta. Así mismo al no tener posibilidad de aprender a
conducirse en las complejidades de la vida es muy fácil que acaben en la desesperanza.

Si la persona esta deprimida, la dependencia complica el camino hacia la recuperación. Los acontecimientos
adversos son especialmente desoladores para las personas deprimidas cuyos recursos de afrontamiento y
motivación ya están limitados.

Trastornos de la conducta alimentaria

Aunque hay una relación apreciable, se trata de una relación bastante modesta y no especifica.

Síntomas físicos

Como no pueden afrontar el mundo con eficacia, tomar las riendas de su propia vida y cambiar sus circunstancias de
forma directa, deben hacerlo de una manera indirecta. En teoría, deberían presentar síndromes cuya finalidad fuera
eximirles de las responsabilidades y estrechar aún más los lazos de unión con sus benefactores, con lo que doblarían
sus beneficios secundarios. Los trastornos fóbicos son una forma de hacerlo, los físicos otro. Desde el punto de vista
funcional, son casi equivalentes salvo por una excepción, el trastorno de ansiedad deja al dependiente predispuesto a
la culpa y a ser objeto de burla, bien por ser débil o bien por negarse a ajustarse a un nivel de madurez adulta.

No obstante, la relación entre dependencia y trastornos físicos no esta muy clara. Síntomas suelen suscitar
compasión y lealtad por los demás. Las enfermedades desvían la atención del verdadero origen de la aflicción, el
sentimiento de que los demás podrían perder el interés y de que los vínculos de unión están sufriendo una presión o
están fallando. Por otra parte, para algunos dependientes la simulación de trastornos físicos supone una agresión
hacia si mismos por ser tan indefensos e impotentes, disfrazada en forma de enfermedades corporales. La mayor
parte del tiempo, la relación entre dependencia y trastorno físico funciona de forma inconsciente, sin embargo, es
posible que casos especialmente graves puedan simularlos para adoptar el rol de enfermo y manipular.

TERAPIA

Suele tener buen pronóstico, aunque al tener sus sistemas de apoyo social intactos, muchos dependientes no
buscaran terapia, sus necesidades de apoyo y guía ya las satisfacen los demás. Es poco frecuente que acudan a
terapia, pero si lo hacen es porque algún aspecto de su mundo social se ha visto alterado. El terapeuta se convierte
en una especie de cuidador sustituto que los escucha con atención y les ofrece aceptación, seguridad empatía para
contrarrestar la critica y culpabilidad que acumulan en si mismos. Además, por lo general, los dependientes están
dispuestos a confiar y hablar y el terapeuta dispuesto a escuchar. Proceso rápido y seguro.

Trampas terapéuticas

La disposición del dependiente por agradar al terapeuta junto a la promesa de una mejoría rápida son las principales
limitaciones para que la psicoterapia sea eficaz. El dependiente habla cuando es necesario hacerlo y escucha cuando
debe hacerlo, sigue todas las instrucciones.

En muchos casos se siente que se ha encontrado al paciente soñado. Por ej los terapeutas narcisistas están
tentados de tomar las riendas, ser directivos para responder el mensaje subyacente del dependiente. Es fácil que se
generen relaciones terapéuticas patológicas, donde lo único que hacen es trasladar el patrón dependiente
repitiéndose el circulo vicioso. Resultados similares son probables en terapeutas con fuertes necesidades maternales
cuya inclinación interpersonal es proporcionar mas apoyo del que sería habitual.

Estrategias y técnicas terapéuticas

Objetivos son los mismos que para cualquier otra personalidad: los pacientes solo pueden convertirse en una
variante mas funcional de si mismos; no pueden transformarse en algo distinto por completo. Cada tipo de
personalidad debe aprender a desempeñar sus potencialidades y a minimizar sus debilidades. Como ocurre en todos
los TP, la clave reside en tratar la patología de la personalidad de manera simultanea en múltiples áreas, aunque las
combinaciones y el orden exacto en que se deben aplicar estas técnicas dependen del individuo concreto.

Dese el punto de vista interpersonal, tienen que aprender a interactuar con los demás de un modo en que fomenten
su individualización en lugar de la sumisión. La clave para un resultado positivo radica en usar la dependencia de
forma moderada. Terapeuta esta obligado a proporcionar una respuesta asocial, es decir ser sensible a los matices
emocionales de la relación terapéutica (trasferencia- contratransferencia) y a relacionarse con el dependiente de
modo que este avance hacia su autonomía. Se puede establecer una jerarquía de los comportamientos asertivos e
independientes que producen ansiedad para afrontarlos de forma gradual. Los modelos y representación de roles
permiten que practique las habilidades necesarias para la independencia que deberá aplicar a la vida, así como
nuevas formas de relacionarse. La terapia de grupo puede ser muy eficaz, grupos suelen ser acogedores por
naturaleza y los miembros mas veteranos suelen ser expertos para identificar patrones de relación desadaptativos.

La eficacia de las técnicas interpersonales puede combinarse con técnicas cognitivas que ayudan a enfrentarse al
pensamiento dicotómico propio del dependiente. Estas técnicas son mas útiles al principio de la terapia dado que
este tipo de pensamiento puede contribuir a la creencia de que el objetivo de la terapia es la independencia y, en
consecuencia, la soledad, cuando en realidad consiste en profundizar de forma paulatina en las competencias
adaptativas. Puede pedirse registro de percepciones y sentimientos en diario de pensamientos y se pueden procesar
los contenidos para aclarar los pensamientos automáticos que los llevan a funcionar con sumisión.

Sea cual sea la técnica cognitiva utilizada, el objetivo es implicar de forma activa al dependiente a una forma más
activa de resolución de problemas que le permita darse cuenta de que la vida no consiste en llevar una existencia
repleta de indefensión y aislamiento, de forma que cada vez consiga tener una imagen de si mas competente. En la
terapia se puede usar al terapeuta para llevar a cabo la comprobación de la realidad de sus pensamientos
automáticos.

Las técnicas interpersonales y cognitivas soy útiles para ayudar a los individuos a que entendían los patrones
disfuncionales, pero no explican la base evolutiva a partir de la cual aparecen. La exploración psicodinámica puede
ayudar a que entendían el origen de dichos problemas, aunque seguramente la mera introspección no será suficiente
para provocar un cambio en la personalidad. Si se consigue que entienda el papel que desempeñaron sus cuidadores
cuando eran pequeños, entenderán que el futuro esta determinado pro el pasado. Entender el papel de la
introyección y la idealización es importante para interrumpir la aparición de nuevos patones de relación patológicos.,

La solidez de los beneficios se demuestra al acabar el tratamiento. Para el dependiente, el final de la terapia significa
una pérdida del vínculo con el terapeuta y un posible retorno a los sentimientos de soledad e indefensión.

 Numerosos trastornos de personalidad tienen diagnósticos similares en los niños. El trastorno de ansiedad
por separación proporciona una etiqueta diagnostica para niños que experimentan una acusada ansiedad al
separarse del hogar o de las personas a quienes están vinculados. Aunque la ansiedad pro separación refleja
una patología del vínculo, los teóricos distinguen entre apego y dependencia, siendo apego por lo general
positivo asociado a una relación exclusiva de proximidad que aumenta los sentimientos de seguridad en el
individuo y la dependencia como comportamiento generalizados que no se dirigen hacia un individuo
especifico, sino que persiguen suscitar asistencia, guía y aprobación.
La definición de TP por dependencia parece incluir componentes del apego y de la dependencia. Es posible
diagnosticas a las personas dependientes de dos maneras: o bien sufren los efectos de un vinculo inseguro o
bien carecen de confianza y seguridad en si mismas. Esta dualidad puede ayudar a explicar resultados de
algunas investigaciones que demuestran que muchos pacientes adultos que pueden ser diagnosticados de
padecer un trastorno de ansiedad por separación, no padecen trastorno de la personalidad por dependencia.