Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Zacarías 13.1 En aquel tiempo habrá un manantial abierto para la casa de David y para los habitantes de
Jerusalén, para la purificación del pecado y de la inmundicia.
El bautismo se prescribió a los prosélitos (quizás a.C.) para incorporar a los gentiles en la comunidad judaica.
SIGNIFICADO
El bautismo es la puerta de entrada a la comunidad del nuevo PACTO, que permite a los que pasan por ella experimentar
los beneficios de dicho pacto.
Juan el Bautista insistió en que se bautizaran los judíos. Cristo se sometió al bautismo con el que inició su identificación pública
con los pecadores, identificación que culminó en la cruz.
¿QUE ES EL BAUTISMO?
El bautismo es una ordenanza del Señor, por la cual aquellos que se han arrepentido y vienen a la fe, expresan su
unión con Cristo en su muerte y resurrección, al ser sumergidos en agua en el nombre del Padre, y del Hijo, y del
Espíritu Santo.
Es una señal de pertenencia al nuevo pueblo de Dios, el verdadero Israel, y un emblema de sepultura y lavamiento,
representando la muerte a la vieja vida de incredulidad, y la purificación de la contaminación del pecado.
1. LO QUE NO HACE EL BAUTISMO POR AGUA.
No Salva
EJEMPLO: El la Ladrón. Lucas 23:39-43 “39 Y uno de los malhechores que estaban colgados le injuriaba, diciendo: Si tú eres
el Cristo, sálvate a ti mismo y a nosotros. 40 Respondiendo el otro, le reprendió, diciendo: ¿Ni aun temes tú a Dios, estando en
la misma condenación? 41 Nosotros, a la verdad, justamente padecemos, porque recibimos lo que merecieron nuestros hechos;
mas éste ningún mal hizo. 42 Y dijo a Jesús: Acuérdate de mí cuando vengas en tu reino. 43 Entonces Jesús le dijo: De cierto te
digo que hoy estarás conmigo en el paraíso.
1 Corintios 1:14-17 “Doy gracias a Dios de que a ninguno de vosotros he bautizado, sino a Crispo y a Gayo, 15 para que
ninguno diga que fuisteis bautizados en mi nombre. 16 También bauticé a la familia de Estéfanas; de los demás, no sé si he
bautizado a algún otro. 17 Pues no me envió Cristo a bautizar, sino a predicar el evangelio; no con sabiduría de palabras,
para que no se haga vana la cruz de Cristo.
La salvación no se gana por obras ni ceremonias (como se podría ver el bautismo).
Efesios 2:8-10 “8 Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; 9 no por
obras, para que nadie se gloríe. 10 Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios
preparó de antemano para que anduviésemos en ellas.
2. ES UN TESTIMONIO DE ARREPENTIMIENTO
Hechos 2:38 “Pedro les dijo: Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los
pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo.
2. ES EL EJEMPLO DADO POR CRISTO Mateo 3:16 Y Jesús, después que fue bautizado, subió luego del agua; y he
aquí los cielos le fueron abiertos, y vio al Espíritu de Dios que descendía como paloma, y venía sobre él.
Marcos 1:9-10 Aconteció en aquellos días, que Jesús vino de Nazaret de Galilea, y fue bautizado por Juan en el
Jordán. 10 Y luego, cuando subía del agua, vio abrirse los cielos, y al Espíritu como paloma que descendía sobre él.
Cristo no tenía necesidad alguna de hacerlo, pero lo hizo para darnos ejemplo. 1 Juan 4.17 pues como él es, así
somos nosotros en este mundo.
3. FUE PRÁCTICA ESTABLECIDA EN LA IGLESIA PRIMITIVA. Hechos 2:37-41 “Al oír esto, se compungieron de
corazón, y dijeron a Pedro y a los otros apóstoles: Varones hermanos, ¿qué haremos? 38 Pedro les dijo: Arrepentíos,
y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y recibiréis el don del
Espíritu Santo. 39 Porque para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos, y para todos los que están lejos; para
cuantos el Señor nuestro Dios llamare. 40 Y con otras muchas palabras testificaba y les exhortaba, diciendo: Sed
salvos de esta perversa generación. 41 Así que, los que recibieron su palabra fueron bautizados; y se añadieron aquel
día como tres mil personas.
Hechos 16:30-34 “y sacándolos, les dijo: Señores, ¿qué debo hacer para ser salvo? 31 Ellos dijeron: Cree en el Señor
Jesucristo, y serás salvo, tú y tu casa. 32 Y le hablaron la palabra del Señor a él y a todos los que estaban en su casa.
33 Y él, tomándolos en aquella misma hora de la noche, les lavó las heridas; y en seguida se bautizó él con todos los
suyos. 34 Y llevándolos a su casa, les puso la mesa; y se regocijó con toda su casa de haber creído a Dios.
Hechos 18:8 Y Crispo, el principal de la sinagoga, creyó en el Señor con toda su casa; y muchos de los corintios,
oyendo, creían y eran bautizados.
II. OTRA PREGUNTA MUY FRECUENTE ES ESTA: ¿Cuál es la manera bíblica del bautismo? Es decir ¿en qué forma
debemos hacernos bautizar?
1. SIGNIFICADO DE LA PALABRA. Bautizar, es de origen griego y significa “sumergir” o “zambullir”. Era palabra de uso
constante en la vida diaria.
2. LA ENSEÑANZA DE LAS ESCRITURAS. Las descripciones del bautismo dadas en el nuevo testamento
presuponen la inmersión. Mateo 3:6 y eran bautizados por él en el Jordán, confesando sus pecados. 16 Y Jesús,
después que fue bautizado, subió luego del agua; y he aquí los cielos le fueron abiertos, y vio al Espíritu de Dios que
descendía como paloma, y venía sobre él.
Juan 3:23 “Juan bautizaba también en Enón, junto a Salim, porque había allí muchas aguas; y venían, y eran
bautizados.
Hechos 8:38-39 “Y mandó parar el carro; y descendieron ambos al agua, Felipe y el eunuco, y le bautizó. 39 Cuando
subieron del agua, el Espíritu del Señor arrebató a Felipe; y el eunuco no le vio más, y siguió gozoso su camino.
3. EL SIMBOLISMO DEL BAUTISMO PRUEBA LA INMERSIÓN. Romanos 6:4-5 “Porque somos sepultados
juntamente con él para muerte por el bautismo, a fin de que como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del
Padre, así también nosotros andemos en vida nueva. 5 Porque si fuimos plantados juntamente con él en la semejanza
de su muerte, así también lo seremos en la de su resurrección;
Colosenses 2:12 sepultados con él en el bautismo, en el cual fuisteis también resucitados con él, mediante la fe en el
poder de Dios que le levantó de los muertos.
4. LA PRÁCTICA DE LA IGLESIA PRIMITIVA. Hay muchos testimonios de los primeros cristianos. Además, en las
excavaciones se ha encontrado con frecuencia tanques o piscinas junto a cada templo cristiano, lo que prueba que se
practicó la inmersión, por lo menos en los primeros siglos, hasta que la iglesia de roma comenzó a emplear otros
sistemas.
¿CUÁLES SON LOS REQUISITOS PARA EL BAUTISMO?
Hechos 2:38 “Pedro les dijo: Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de
los pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo.”
Hechos 16:31 “Ellos dijeron: Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo, tú y tu casa.
Gálatas 3:27 “porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos.”
1 Juan 5:1 “Todo aquel que cree que Jesús es el Cristo, es nacido de Dios; y todo aquel que ama al que engendró, ama
también al que ha sido engendrado por él.
Juan 3:16,36 “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel
que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna./ 36 “El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que
rehúsa creer en el Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él.
Arrepentimiento
Introducción
Arrepentimiento es un cambio radical en la naturaleza del corazón de las personas, en cuanto al tema del pecado. Todos
nacimos en pecado. Por naturaleza amamos el pecado. Nos entregamos al pecado tan pronto como podemos actuar o
pensar, al igual que un pajaro puede volar, y un pez nadar. Nunca existió un niño que necesitara ir a la escuela o recibir
instrucción para que aprendiera la falsedad, egoísmo, cólera, voluntad propia, glotonería, soberbia y necedad. Estas
cosas no son adquiridas por medio de malas compañías, o aprendidas gradualmente por un largo curso de instrucción
enfadoso. Brotan por si mismas, aun cuando niños o niñas son criados como hijos únicos. La semilla en ellos es
evidentemente el producto natural del corazón. La capacidad de los niños para hacer cosas malas son prueba irrefutable
de la corrupción y caída del hombre. Ahora cuando nuestro corazón es trasformado por el Espíritu Santo, cuando este
amor natural al pecado es arrojado afuera, entonces toma lugar el cambio que la Palabra de Dios llama "arrepentimiento".
Pueden ser llamadas en una palabra, una persona arrepentida.
Pero no me atrevería a dejar el tema así. Este merece una investigación mas intima y minuciosa. No es seguro tratar
con declaraciones generales, cuando doctrinas de este índole son manejadas. Tratare de tomar tema del arrepentimiento
en pedazos, disecar y analizar delante de sus ojos. Les mostrare las partes y porciones de las que el arrepentimiento
esta formado. Me esforzare para mostrar algo de la experiencia de cada persona verdaderamente arrepentida. - Sendas
antiguas “arrepentimiento” P. 405, 406 -
#1 Verdadero Arrepentimiento Comienza con un Conocimiento del Pecado.
Verdadero arrepentimiento comienza con un conocimiento del pecado. Los ojos de la persona arrepentida son abiertos.
Ven con espanto y confusión lo largo y ancho de la santa ley de Dios, y la extensión, la enorme extensión, de sus propias
transgresiones. Descubre, para su sorpresa, de que al creer de si mismo como una " especie de buena persona," y una
persona con un "buen corazón," se dan cuenta que han estado debajo de un enorme engaño. Se dan cuenta que, en
realidad, son malvados, y culpables, y corruptos, y perversos en los ojos de Dios. Su orgullo es derrumbado. Sus
elevados pensamientos se esfuman. Se da cuenta de cuan enorme pecador es. Este es el primer paso del verdadero
arrepentimiento.
Resumen
El verdadero arrepentimiento nunca llega solo en el corazón de la persona. Siempre viene con un compañero- un bendito
compañero. Siempre viene acompañado de una fe viva en nuestro Señor y Salvador Jesucristo. Dondequiera que hay
fe, hay arrepentimiento, dondequiera que hay arrepentimiento siempre hay fe. Yo no decido qué es lo primero- si el
arrepentimiento viene antes de la fe, o la fe antes de arrepentimiento. Pero me atrevo a decir que las dos gracias nunca
se encuentran separadas, una de la otra. Así como no se puede tener el sol sin luz, o hielo sin frío, o fuego sin calor , o
agua y sin humedad- usted nunca encontrará la verdadera fe sin verdadero arrepentimiento , y usted nunca encontrará
el verdadero arrepentimiento y sin una fe viva. Las dos cosas siempre van lado a lado.
--
Antes de pasar al argumento de más peso, lo que enseña la Escritura, creo que vale la pena
ver brevemente ver la historia. La Didaché, el documento más importante de la era
postapóstolica, probablemente escrito entre el 100-110[1], enseña que “Antes del bautismo,
el que bautiza y el que ha de ser bautizado, ayunen, y asimismo otros que puedan hacerlo.
Mandas ayunar al bautizando uno o dos dia ́ s antes”.
A través del Nuevo Testamento, resulta evidente un patrón de arrepentimiento y fe antes del
bautismo. En la Gran Comisión, Jesús instruye a los discípulos a que “Vayan, pues, y hagan
discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del
Espíritu Santo, enseñándoles a guardar todo lo que les he mandado…” (Mat. 28:19-20). En
este mandato, el bautismo está claramente atado al mandamiento de hacer discípulos. Una
lectura natural de este texto es que Jesús está ordenando a que aquellos que creen el
evangelio (esos nuevos discípulos) sean bautizados, a quienes se les ha de enseñar lo que
Él ha mandado.
Unas cortas semanas luego de este suceso, Pedro predicó su primer sermón a los Israelitas
en Pentecostés. Allí, él presentó a Jesús como el Mesías prometido en el Antiguo
Testamento, quien fue crucificado y ahora es el Señor resucitado. Muchos creyeron sus
palabras, y le preguntaron qué debían hacer (Hch. 2:37). ¿La respuesta de Pedro?
“Arrepiéntanse y sean bautizados” (Hch. 2:38). Aquí tenemos una predicación del evangelio
(Hch. 2:14-36), un llamado al arrepentimiento, y “Entonces los que habían recibido su
palabra fueron bautizados” (Hch. 2:41).
Más adelante en el libro de los Hechos, Felipe ejemplifica una vez más este patrón. En
Samaria vemos que “cuando creyeron a Felipe, que anunciaba las buenas nuevas del reino
de Dios y el nombre de Cristo Jesús, se bautizaban, tanto hombres como mujeres” (Hch.
8:12, énfasis añadido). Más adelante en este mismo capítulo, vemos al Eunuco tratando de
entender una profecía sobre Jesús en el Antiguo Testamento (Hch. 8:31-35). Cuando Felipe
le explica el evangelio, el Eunuco es bautizado allí mismo (Hch. 8:36). Que el Eunuco era un
creyente genuino es enfatizado por la mención de Lucas al decir que él “continuó su camino
gozoso” (v.39), siendo el gozo una característica común de fe salvadora en Hechos.
Hechos 10 también muestra un suceso interesante de bautismo, otra vez con Pedro.
Mientras el apóstol luchaba con entender el lugar de los gentiles en la iglesia naciente,
Pedro observó cómo el Espíritu Santo descendió sobre un grupo de gentiles luego de haber
creído (Hch. 10:44). Nota lo interesante de las palabras del Apóstol: “¿Puede acaso alguien
negar el agua para que sean bautizados éstos que han recibido el Espíritu Santo lo mismo
que nosotros?” (Hch. 10:47). ¿Cuál es la razón por la que ellos podían ser bautizados, a la
luz de lo que Pedro dice? Que ellos también habían recibido el Espíritu Santo, lo cual ocurre
en la conversión.
Por supuesto, no podemos asumir que la narrativa de Hechos es normativa para la iglesia
hoy. Que algo ocurriera una vez no significa que siempre ocurriría así. Sin embargo, hemos
visto un patrón de la fe precediendo el bautismo en Hechos, y aunque no sea normativo o
definitivo, tampoco podemos ignorarlo. Por su parte, en Mateo vimos un mandamiento de
nuestro Señor. Y si pasamos a las Epístolas, también veremos una unión entre conversión y
bautismo.
Así lo presenta Romanos 6:3-4: “¿O no saben ustedes que todos los que hemos sido
bautizados en Cristo Jesús, hemos sido bautizados en Su muerte? Por tanto, hemos sido
sepultados con El por medio del bautismo para muerte, a fin de que como Cristo resucitó de
entre los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en novedad de
vida”. Aquí el apóstol está igualando el ser bautizados con el estar en Jesús y con el
caminar en novedad de vida así como Él fue resucitado. Es evidente que este es un
lenguaje de regeneración y nuevo nacimiento en Cristo. Pablo está diciendo que los sujetos
del bautismo son los mismos sujetos que han experimentado regeneración.
Un pasaje más que debemos notar es Gálatas 3:26-27, donde Pablo dice que “todos
ustedes son hijos de Dios mediante la fe en Cristo Jesús. Porque todos los que fueron
bautizados en Cristo, de Cristo se han revestido”. En esto contexto, el apóstol está
argumentando que la fe es la manera de estar en Cristo y de pertenecer a Dios. Entonces
Pablo enseña que el ser “bautizado en Cristo” significa tener fe en Él. Dado que un infante
no puede profesar fe en Cristo, este pasaje está mostrando una vez más que los candidatos
apropiados para el bautismo son aquellos que ya están “en Cristo”: los creyentes.
En conclusión
Hay otros ejemplos más de bautismos en el libro de los Hechos y en 1 Corintios que
incluyen casas completas, lo que podría haber incluido niños. Pero ninguno de estos casos
prescribe el bautismo de infantes, y al menos dos de ellos pueden explicarse[2] sin gran
dificultad. Por otro lado, la idea de que el bautismo substituye la circuncisión, si bien es
atractiva y tiene cierto amparo en Colosenses 2:11-12, pasa por alto que Romanos
2:29 y Filipenses 3:3 presentan la circuncisión del corazón como el paralelo
Neotestamentario de la circuncisión en el Viejo Pacto.
Por lo que ya vimos, el patrón del Nuevo Testamento es uno de fe salvadora precediendo el
bautismo. Este no es un asunto de tan poca importancia como que podamos simplemente
ignorar. Pero tampoco debe separar nuestra comunión con hermanos Reformados que
concluyen diferente, y de quienes tenemos muchísimo que aprender.
--
El verbo principal es “haced discípulos”: habiendo ido, “haced discípulos de todas las
naciones”. Los participios que definen aquí son “bautizándolos” y “enseñándoles”. Así que a
la iglesia se le ordena hacer esto por todos los discípulos. Hacer discípulos a todas las
naciones incluye bautizarlos.
Y el período de tiempo es definido por la promesa de ayuda por parte de Cristo en el versículo
20: “y he aquí, yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo”. La promesa
durará tanto como el mundo. Así que la ordenanza que nos va ayudar a obedecer durará
tanto como el mundo. Por tanto, el bautismo es un mandamiento, y una ordenanza del Señor
Jesús, a realizarse haciendo discípulos hasta que Cristo regrese en el fin del mundo.
¿O no sabéis que todos los que hemos sido bautizados en Cristo Jesús, hemos sido bautizados en su
muerte? 4 Por tanto, hemos sido sepultados con El por medio del bautismo para muerte, a fin de que
como Cristo resucitó de entre los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en
novedad de vida.
En un contexto más amplio de Romanos, creo que sería un error decir que el bautismo en
agua es el medio por el cual somos unidos a Cristo. En Romanos, la fe es el medio por el cual
somos unidos a Cristo, y justificados. Pero mostramos esta fe, decimos esta fe
y representamos esta fe y simbolizamosesta fe, con el acto del bautismo. La fe une a Cristo, el
bautismo simboliza la unión.
Una analogía sería decir: “con este anillo los desposo”. Cuando decimos que no queremos
decir que el anillo o el uso del anillo en el dedo es lo que nos hace estar casados. No, muestra
el pacto, y simboliza el pacto, pero los votos que hacen el pacto, son los que construyen el
matrimonio. Así sucede con la fe y el bautismo.
Así, de la misma forma, Pablo está diciendo: «Con este bautismo ustedes están unidos a
Cristo”. Y el aspecto en que nos enfocamos aquí es que somos unidos a él en su muerte,
sepultura, y resurrección. “hemos sido sepultados con El por medio del bautismo para
muerte, a fin de que como Cristo resucitó de entre los muertos por la gloria del Padre, así
también nosotros andemos en novedad de vida”. Así que el bautismo representa la muerte,
sepultura, y resurrección. Cristo fue sepultado y resucitado para novedad de vida.
En el bautismo, por fe, somos unidos a Cristo en su muerte, sepultura, y resurrección. El
bautismo representa, dramáticamente, lo que sucedió espiritualmente cuando usted recibió a
Cristo. Su viejo hombre o incredulidad y rebelión e idolatría murieron, y surgieron un nuevo
hombre y una nueva fe y una nueva sumisión y comenzó a atesorar a Cristo. Eso es lo que
usted confiesa al mundo y a los cielos cuando es bautizado.
Que ellos hayan descendido “al agua” tiene más sentido si ellos hubieran descendido a
sumergirle, no a rociarle. De la misma forma dice en Juan 3:23: “Juan también bautizaba en
Enón, cerca de Salim, porque allí había mucha agua”. Usted no necesita mucha agua si está
rociando. Solo necesita un jarro.
Así que realmente hay muy poca controversia en cuanto a si esta era la forma en que la iglesia
primitiva bautizaba. Ellos lo hacían sumergiendo al nuevo creyente en agua para representar
su muerte y resurrección con Jesús.
en El también [en Cristo] fuisteis circuncidados con una circuncisión no hecha por manos, al quitar el
cuerpo de la carne mediante la circuncisión de Cristo [así que Pablo habla en términos de una
circuncisión “no hecha por manos”, la circuncisión hoy tiene significado para los cristianos, no como
un acto físico, sino como un acto espiritual de Cristo en que quita el viejo cuerpo pecaminoso y nos
hace nuevo, es prácticamente sinónimo del nuevo nacimiento, luego habla del bautismo];
12 habiendo sido sepultados con El en el bautismo, en el cual también habéis resucitado con El
por la fe en la acción del poder de Dios, que le resucitó de entre los muertos.
Así que la imagen de la circuncisión está muy relacionada con la imagen del bautismo: “[…]
fuisteis circuncidados […] habiendo sido sepultados con El en el bautismo”. El viejo “cuerpo
de carne” fue quitado en la conversión, usted murió y resucitó de nuevo, en un bautismo.
¡POR LA FE!
Pablo muestra el mismo modo de pensamiento acerca del bautismo y la fe en Gálatas 3:26-
27: “pues todos sois hijos de Dios mediante la fe en Cristo Jesús. 27 Porque todos los que
fuisteis bautizados en Cristo, de Cristo os habéis revestido”. Nos volvemos hijos de Dios
mediante la fe, y no de otra manera. Entonces dice “porque”, relacionando esta forma de
volvernos hijos de Dios con el bautismo: “Porque todos los que fuisteis bautizados en Cristo,
de Cristo os habéis revestido”.
Esa explicación con la palabra “porque” solo tiene sentido si el bautismo se entiende como
una expresión de fe: “todos sois hijos de Dios mediante la fe en Cristo Jesús. 27 Porque todos
los que fuisteis bautizados en Cristo, de Cristo os habéis revestido”. O cambiándole el
sentido: como ustedes fueron bautizados en Cristo, entonces sabemos que en Cristo todos
son hijos de Dios mediante la fe ¿Por qué? Porque esto es lo que significa el bautismo:
ustedes fueron bautizados en Cristo mediante la fe. El bautismo sin fe era inconcebible para
Pablo.
LA MEMBRESÍA DEL NUEVO PACTO ES MEDIANTE EL NACIMIENTO ESPIRITUAL
Así que cuando ocurrió el cambio en la historia redentora del antiguo al nuevo pacto, y de la
circuncisión al bautismo, hubo un cambio desde el enfoque étnico de Israel donde solo los
hombres tenían la marca de la membresía en el pueblo, hacia el enfoque espiritual en la
iglesia de todas las naciones donde tanto hombres como mujeres pueden llevar la marca de
membresía en el pueblo, es decir, el bautismo.
http://www.desiringgod.org/messages/what-baptism-portrays?lang=es