INSTITUTO PROFESIONAL DE COMERCIO DE SANTIAGO

MÓDULO: Derecho procesal

DOCENTE: María Cristina Ramírez Locher

El PROCESO

CONCEPTO. Desde el momento en que se produce la violación de un derecho, su titular recurre a la protección del Estado, quien se
la proporciona a través de los órganos en quienes reside la función jurisdiccional. La manera de provocar esta protección es
deduciendo una demanda, que es el modo normal de ejercer la acción, y se manifiesta posteriormente en un acto del tribunal que
recibe el nombre de sentencia.

Ahora bien, entre la interposición de la demanda y la dictación de la sentencia se desarrollan una serie de actos de carácter procesal,
cuyo conjunto recibe el nombre de PROCESO, noción de carácter amplio que comprende un conjunto sucesivo de actos de las
partes en un conflicto de relevancia jurídica, de ciertos terceros y del tribunal desarrollados ante este último, de acuerdo con las
normas de procedimiento que la ley en cada caso señala, a través del cual, el Juez desempeña la función jurisdiccional que le ha
encomendado el Estado, cuyo ejercicio concluye con la dictación de la sentencia definitiva, en la cual, éste consigna la solución
del asunto controvertido.

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Partes: son las personas entre las cuales se plantea la disputa de relevancia jurídica y quienes solicitan sea resuelta por un
tribunal conforme a Derecho. Su actividad de inicio y de desarrollo del proceso es lo que constituye la acción procesal.

Tribunal: es el órgano estatal que debe emitir como resultado de su propia actividad y de las partes, y haciendo aplicación de las
normas jurídicas respectivas, la decisión de resolver la controversia, estableciendo el derecho de cada una de ellas. Esta actividad
es la llamada jurisdicción: facultad emanada del Estado, por la cual, el conocimiento de las causas civiles y criminales, de
juzgarlas y de hacer ejecutar lo juzgado pertenecerá exclusivamente a los tribunales.

La noción de proceso no es lo mismo que juicio, dado que juicio, causa o pleito, es la controversia actual que se produce entre
dos o más personas sobre un derecho y que se somete al fallo de un tribunal. Por tanto, PROCESO es el género y JUICIO es la
especie.

Todo tribunal tiene jurisdicción y competencia.

La jurisdicción: es la facultad de conocer las causas civiles y criminales, de juzgarlas y de hacer ejecutar lo juzgado pertenece
exclusivamente a los tribunales que establece la ley. Artículo 1º C.O.T.

La competencia: es la facultad que tiene cada juez o tribunal para conocer de los negocios que la ley ha colocado dentro de la
esfera de sus atribuciones.

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Los procesos se clasifican en: ordinarios, especiales y sumarios.

- Procesos ordinarios: son aquellos que en su tramitación, se ajustan a las normas generales de procedimiento.
Por ej. los juicios de arriendo regulados por el Código de procedimiento Civil.

- Procesos especiales: son aquellos que, en su tramitación, se ciñen por normas especiales.
Por ej. Los jueces árbitros están regulados por los procedimientos que establece el Código Orgánico de Tribunales.

- Procesos sumarios: son aquellos cuya tramitación está fundamentada exclusivamente en la rapidez o celeridad.
Por ejemplo: el juicio de cobro de honorarios de los abogados está regulado por las normas de los procedimientos sumarios del
Código de Procedimiento Civil.

PRINCIPIOS FORMATIVOS DEL PROCESO

Hemos visto que el proceso está constituido por una serie de actos ejecutados por las partes y por el juez, los que tienen como
denominador la sentencia. Pero éstos actos no se desenvuelven arbitrariamente sino con estricta sujeción a la Ley; la cual, para
regular el proceso debe fundarse en ciertos principios denominados principios formativos del proceso, que a continuación se
enumeran:

1.- Principio dispositivo

2.- Principio inquisitivo
3.- Principio de orden consecutivo legal
4.- Principio de la preclusión
5.- Principio de la bilateralidad de la audiencia
6.- Principio de la oralidad y de la escrituración
7.- Principio de inmediación
8.- Principio de probidad o buena fe

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DESARROLLO

1.- Principio dispositivo: significa que el impulso procesal es exclusivo de las partes. Por ejemplo en materia civil, el juicio
comenzará por demanda del acto o demandante. En materia penal: sólo la víctima u ofendida por un delito puede iniciar querella por
ejemplo en caso de violación (acción penal privada).

2.- Principio inquisitivo: significa que el impulso procesal se entrega exclusivamente al juez, es lo que se llama actuar de OFICIO o
de propia iniciativa. Por ejemplo, el juez civil podrá rechazar de oficio la demanda que no cumpla con los requisitos del artículo 254
del Código de Procedimiento Civil. El materia penal, por ejemplo, un juez de garantía podrá invocar los derechos del imputado.

3.- Principio de orden consecutivo legal: es la secuencia de actos que se suceden progresivamente en el proceso a través de
diferentes etapas cuyo objetivo es la resolución de un conflicto sometido a la decisión del tribunal.

4.- Principio de la preclusión: consiste en la extinción de una facultad procesal por no haberla llevado a cabo en la oportunidad
legal correspondiente o por haber realizado alguna actuación incompatible con ella.
Como el proceso, por norma general, tiene un orden señalado por la ley, una vez que ha transcurrido la oportunidad en que
correspondía efectuar una actuación determinada se dice que esa oportunidad "precluye". Así, si el demandado no contesta
oportunamente la demanda, precluye su derecho de hacerlo posteriormente.
En cuanto a acto incompatible podemos señalar por vía de ejemplo que precluye la oportunidad de solicitar el abandono del
procedimiento, si el demandado efectúa en forma previa cualquier otra actuación que no sea la de solicitar ese abandono.

5.- Principio de la Bilateralidad de la audiencia: implica el derecho de las partes de saber de la existencia de un proceso seguido
en su contra, así como la posibilidad de ser oída en el mismo. No es necesario que la parte comparezca efectivamente al proceso
para que se cumpla el principio de la bilateralidad, sino que basta que tenga la posibilidad de hacerlo.
En nuestro ordenamiento jurídico el principio general aplicado es el de la bilateralidad de la audiencia, pudiendo señalarse al
respecto que en materia civil la primera notificación que deba practicarse a la persona o personas a quienes pueda afectar el
resultado del proceso debe ser personal. Si no se notifica legalmente una demanda al demandado, no va a nacer una relación
procesal válida. Por otro lado, si el demandado es legalmente notificado y no concurre al tribunal, ése se declarará en rebeldía y en
su ausencia le afectarán todas las resoluciones que dicte el tribunal.

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6.- Principio de la oralidad y escrituración: conforme a la oralidad, la comunicación entre las partes entre sí, así como entre éstas y
el juez, se lleva a cabo verbalmente y conforme a la escrituración, por esa vía.
En los procesos civiles por regla general prevalece la escrituración de las diligencias, sin perjuicio de aquellas actuaciones
verbales que se transcriben en actas que se levantan al efecto (protocolización).

En materia penal, predomina la oralidad, sin perjuicio de la escrituración de ciertas diligencias como la sentencia definitiva.

7.- Principio de inmediación: consiste en el tribunal tiene un contacto directo con las partes así como con las probanzas que se
rinden sin la participación de intermediarios, principio que se encuentra estrechamente vinculado a la oralidad.
En contraposición, tenemos el principio de mediación por el cual, el juez no tiene vinculación directa con las partes ni con los
medios probatorios, produciéndose esa vinculación a través de escritos o de la intervención de terceros.
En materia civil estos dos principios se encuentran entremezclados, existiendo algunos procedimientos en los que la
inmediación es mayor que en otros; así, por ej. en el procedimiento sumario el art. 632 parte diciendo que el procedimiento será
verbal, si bien las partes pueden presentar minutas escritas. En el procedimiento ordinario, en cambio, la demanda, contestación,
réplica y dúplica son escritas; la prueba testimonial y confesional son orales.

8.- Principio de probidad o buena fe: las partes deben llevar a cabo las actuaciones que les corresponden de buena fe, no
permitiéndose que el proceso sea utilizado con la finalidad de obtener fines ilícitos. De acuerdo con este principio, se contempla la
posibilidad de anular las sentencias que se hubieran obtenido fraudulentamente; ello a través del recurso de revisión de sentencias
definitivas.

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LOS PROCEDIMIENTOS

Conjunto de formalidades preestablecidas por normas jurídicas, que el ordenamiento jurídico opone a disposición de las personas
para constituir junto al respectivo tribunal, el proceso jurisdiccional.

Clasificación

a.- Procedimientos civiles:

Son aquellos procedimientos que sirven para solucionar conflictos que dicen relación con el Derecho Civil y el Derecho Comercial.
Están regulados principalmente en El Código de Procedimiento civil.

b.- Procedimientos penales:

Son aquellos procedimientos que sirven para decidir si una persona ha incurrido en un hecho ilícito penal y en consecuencia
imponérsele la sanción o castigo correspondiente. Están regulados principalmente en el Código de Procedimiento Penal.

c.- Procedimientos laborales:

Son aquellos procedimientos que sirven para solucionar conflictos de acuerdo a las normas del Derecho del Trabajo. Se encuentran
regulados por el Código del Trabajo.

Atendiendo al objetivo perseguido, se clasifican en:

a.- Procedimientos Declarativos:

Son aquellos procedimientos que persiguen la obtención de una sentencia, que declara el derecho de las partes. Por ejemplo, juicio
ordinario de mayor cuantía.

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b.- Procedimientos ejecutivos:

Son aquellos procedimientos que se caracterizan por perseguir el cumplimiento forzado de una obligación, frente a la negativa del
obligado, respecto de un derecho preestablecido, indiscutible o indubitado. (título ejecutivo). Están regulados en el Código de
Procedimiento Civil.

FIN

MCRL/ julio de 2017

Fuentes bibliográficas: Manual Derecho Procesal, Casarino Viterbo, Editorial Jurídica.
Los procedimientos Declarativos, Alex Carocca.
Código de procedimiento procesal civil. Editorial Jurídica de Chile.

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