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Esto no significa que no tenga la preparación profesional para hacer lo que hago al día de hoy, es
que simplemente de nada te sirve saberlo si lo que hay que arreglar está dentro de ti, no de mi.
¡Logra
Me dedico desde más de hace 12 años al Fitness. Incluso antes de lo que conoces ahora.
una
Empecé en el mundo del Fitness a los 15 años, vendiendo suplementos de gimnasio en
gimnasio, moviéndome en transporte público y a pie.
Empecé a agarrarle gusto al aspecto del deporte y la nutrición cuando empecé a ver que mis
mentalidad
consejos y mi apoyo generaban cambios en las personas que están a mi alrededor.
Fitness en
especializaba.
Han pasado más de 12 años desde entonces y hoy puedo decirte que estoy en el mejor punto de
mi vida. Dirigiendo una empresa internacional de Fitness, asesoría y desarrollo humano que ha
7 pasos!
logrado los cambios en la gente que apenas yo pude soñar desde pequeño.
A mí no me interesa lo que hayas hecho antes, el mucho o poco talento que tengas, los recursos
tan abundantes o escasos que puedas obtener.
Fitness Coaching es la empresa que desarrollé, formé y crecí desde que apenas era una
semillita en mi cabeza.
Ahora es la empresa de consultoría en Fitness con más alcance e influencia del país.
¿Quién soy?
Mi nombre es Fernando Estrada.
Esto no significa que no tenga la preparación profesional para hacer lo que hago al día de hoy, es
que simplemente de nada te sirve saberlo si lo que hay que arreglar está dentro de ti, no de mí.
Me dedico desde más de hace 12 años al Fitness. Incluso antes de lo que conoces ahora.
Empecé a agarrarle gusto al aspecto del deporte y la nutrición cuando empecé a ver que mis
consejos y mi apoyo generaban cambios en las personas que están a mi alrededor.
Han pasado más de 12 años desde entonces y hoy puedo decirte que estoy en el mejor punto de
mi vida. Dirigiendo una empresa internacional de Fitness, asesoría y desarrollo humano que ha
logrado los cambios en la gente que apenas yo pude soñar desde pequeño.
A mí no me interesa lo que hayas hecho antes, el mucho o poco talento que tengas, los recursos
tan abundantes o escasos que puedas obtener.
Fitness Coaching es la empresa que desarrollé, formé y crecí desde que apenas era una
semillita en mi cabeza.
Ahora es la empresa de consultoría en Fitness con más alcance e influencia del país.
¿Cómo lo sé?
- No necesito un reconocimiento (aunque los tengo).
- No necesito que la prensa escrita y digital lo menciones (aunque ya lo haya hecho).
- No necesito ser millonario (aunque estoy en proceso de).
Lo único que necesito es que TÚ cambies la manera que tienes de pensar, sentir y de verte
ante el espejo.
Puede que hayas pasado por muchos nutriólogos, entrenadores, médicos y en general los
resultados hayan sido mínimos.
No importa el pasado que hayas tenido, simplemente en este momento puede que tu figura no
sea la mejor.
No importa la exactitud, sino el cómo te sientes en este momento con tu figura, salud y
autoestima.
Tu historia puede que suene excepcional, sin embargo te diré algo... Después de más de 10 años
de estar en el mundo del Fitness he encontrado un común denominador en estos casos...
Crees que tu problema es tan grande que no tiene solución y, sobre todo, que es único.
Ante eso... te sientes desamparada, sola y que nadie te aprecia. Sin embargo, siempre hay
momentos en los cuales te levantas, te llenas de coraje y empiezas una vez más.
Un hábito es aquello que nos hace la vida más fácil. El hábito es cualquier comportamiento
repetido regularmente, que requiere de un pequeño o ningún raciocinio y es aprendido más que
innato.
Un hábito positivo es aquel que hemos adquirido para mejorar o para cuidarnos de una manera
establecida.
Por ejemplo: el hábito de levantarte temprano, el hábito de tomar agua, el hábito de correr por
las mañanas.
Un hábito negativo es aquel que hemos adquirido de manera indirecta para obtener satisfacción
instantánea.
Por ejemplo: el hábito de fumar, el hábito de no hacer ejercicio, el hábito de no cuidarte el fin de
semana.
Dicen que los hábitos tardan entre 21 a 28 días en formarse. Eso es una MENTIRA.
Un hábito necesita ser repetido de manera constante entre 57 a 61 días, ya que la autopista
neuronal requiere recodificarse y construir nuevas conexiones neuronales para que sea efectivo.
2. Organiza tu día
Uno de los objetivos que siempre planteo a la hora de mejorar tu estilo de vida es desarrollar un
plan para volverte más organizado.
La organización será la clave maestra para que puedas lograr cualquier cosa en tu vida.
Sin organización, ni las 24 horas del día te van a rendir en lo que quieres hacer.
¿Te ha pasado que te levantas con todos los ánimos un día y la cantidad de pendientes que
tienes que hacer te abruma?
¿Te ha pasado que empiezas un plan de alimentación y no sabes ni por dónde hay que cambiar?
¿Te ha pasado que quieres empezar a hacer ejercicio y no encuentras el momento adecuado?
Esto pasa muy frecuentemente en todas las esferas de tu vida, tanto en tu salud como en la
parte personal, laboral, familiar y financiera.
No significa que por no saber organizarte para hacer un plan de alimentación o ejercicios seas
una persona desorganizada. Es que simplemente en el enfoque que le estás dando a este
cambio esté la clave para que puedas ser igual de organizada en todos los aspectos de tu vida.
La organización juega un papel clave en cualquier proyecto.
¿Crees que el automóvil que conduces haya podido ser construido sin organización?
¿Crees que la computadora que usas o el celular que tienes contigo haya existido sin procesos?
¡Claro que NO! Lo mismo es con el Fitness. Si fallas en la organización, por más que las cosas
sean “perfectas”, en algún punto vas a estrellarte.
Todos tenemos las mismas 24 horas; el cómo tú priorices y organices tu día dictará por
completo tu éxito en la vida.
3. No te des por vencida
Y un día después de trabajar durante semanas o meses por el cuerpo que quieres, te miras al
espejo y te das cuenta que sigues igual.
Sin embargo, esto que pasa son MOMENTOS y es normal en cada etapa de tu transformación
física. Nadie dijo que fuera fácil, sin embargo, no ganas nada diciendo que está difícil.
Debes de tener mucho cuidado en todo lo que pides o que deseas, ya que incluso las cosas que
no quieres se vuelven realidad. Te lo digo por experiencia propia.
¿De qué te sirve rendirte? ¿Vas a ganar algo? ¿Vas a hacer las cosas más rápido?
Si te rindes ahora que estás luchando todo lo poco o mucho que hayas logrado se irá por el
caño. Todas las horas de sudor, esfuerzo, preparación de comidas, sacrificios y demás serán en
vano.
Tus ilusiones, tus anhelos y tus sueños se opacarán y se guardarán en el cajón de la amargura.
¿Te das cuenta? No vale la pena rendirte. Rendirte no hará que las cosas sucedan. Y la gente
que se rinde es la que demuestra que no quiere realmente el resultado por el cual iniciaron este
proceso.
4. Toma el riesgo
Ya te sientes lista. Esa energía va aumentando.
Sientes un calor que va subiendo por tu abdomen, luego por tu pecho y te vas dando cuenta
que empieza tu corazón a latir más rápido mientras tus ojos brillan, tus manos se empiezan a
mover… A temblar.
No hay nada seguro, incluso la muerte puede que no sea segura ya que somos energía y la
energía no se crea ni se destruye, sólo se transforma.
- No calcular los gramos que tienes que perder cada semana para llegar a tu meta.
- No calcular los pesos que necesitas invertir y si vale la pena hacerlo porque te vas de viaje la
próxima semana.
- No es planear en exceso las cosas para que el “riesgo” baje.
¡NO!
“Tomar un riesgo es visualizarte con ese cuerpo increíble que quieres, sentir la arena entre tus
dedos, el sol en tus hombros, el olor del bronceador en tu piel, los lentes en tus ojos y sentir la
espectacular brisa en tu cuerpo. Ese cuerpo Fitness estilizado, armónico y saludable con ese
traje de baño que tú creías que era imposible que te encaje perfectamente.”
Esa imagen debe ser lo suficientemente poderosa y debes tenerla presente a la hora de tomar el
riesgo de trasnformar tu cuerpo de una vez por todas.
Sin importarte si por alguna razón las cosas no salieran tan bien.
Sin importarte si el tiempo que te tomará (aunque claro, es importante tener fechas clave en
mente).
Sin importarte los recursos de que debas de invertir (te debe de importar lo que debes de hacer
por conseguirlos en caso necesario).
Sin importarte lo que tus padres, novio, hermanos o amigas puedan decir de esto.
5. Rompe con la rutina
Suena el despertador, te levantas a las 7:00 AM, desayunas lo de siempre… Ese plato de cereal
con leche deslactosada light o un plátano o un café amargo y te vas a tus actividades.
Pasas horas sentada, ya sea en la escuela o en el trabajo, aburrida o con millones de pendientes.
Llega la hora de la comida, miras tu celular y te das cuenta que ya es más de la mitad del día.
Efectivamente, con hambre revisas qué comer o vas a tu casa.
Te das cuenta que es la misma comida de todos los días. Comes de manera rápida y hasta
atascarte, te da sueño y aún así tienes que regresar a tus actividades cotidianas.
Termina tu día a las 6 o 7 y tus amigas te buscan para el tradicional martes o jueves de amigas.
Tú lo único que quieres es dormir o comer chucherías hasta caer rendida.
¿Te suena conocido o familiar? Te aseguro que si no lo es ahora, por lo menos lo has vivido en
alguna ocasión.
¿Por qué? Porque la rutina te MATA. No estamos haciendo referencia a las rutinas de procesos
o de ejercicios que son VITALES para poder hacer las cosas de manera eficiente.
¡NO! Estoy hablando de esa aburrida rutina diaria, sin chiste, de manera automatizada, sin
sentimientos nuevos, sin nuevos retos.
Entre más tiempo lleves en esta rutina, más te va a costar romper el comportamiento
automático; por lo tanto te va a costar cada vez más proponerte y conseguir las cosas que
quieres o sueñas.
Para poder empezar a transformar tu cuerpo, incluso si ya estás en el proceso, debes de romper
tu rutina diaria.
Sí... La zona de confort, esa área tan grande o pequeña como el miedo que sientes a la hora de
hacer algo nuevo, algo que no es habitual para ti.
6. Olvida tus límites
Pasa una chica increíble caminando por la playa o ves en un video en YouTube una espectacular
mujer y lo primero que piensas es:
“Maldita... ve ese cuerpazo, yo ni volviendo a nacer lo consigo”.
“De seguro está operada y por eso se ve así”.
“Claro, como ella vive de su imagen y su cuerpo por eso está así”.
“Yo ni con 1000 horas de cardio lograría ese cuerpo”.
“Requiero ser muy disciplinada para lograrlo, no creo poder”.
“Me gusta demasiado la comida, es mi debilidad”.
Y la lista podría continuar hasta darle la vuelta al mundo o llenar el espacio de tu disco duro.
Los límites muchas veces son puestos en nuestra mente por las personas de las cuales nos
rodeamos. Muy pocas veces los límites que tenemos en nuestra cabeza o mente son por
experiencia propia.
Una creencia es un sentimiento de certidumbre acerca de algo. Es lo que “creemos” que debe de
ser o que va a pasar.
Las limitantes son todas aquellas que nos impiden lograr las cosas que queremos en nuestra
vida. Son todas aquellas “frases” que circulan en nuestra cabeza cuando nos enfrentamos a
algo nuevo o inclusto a algo desconocido.
Las capacitantes son todas aquellas que nos hacen sentir más seguros, más dispuestos o
más fuertes. Son todas esas frases que nos motivan y que nos hacen acceder a nuestro poder
interno que es prácticamente ilimitado.
Si quieres romper tus límites debes desafiar tus creencias limitantes y, sobre todo, analizar de
dónde vienen la mayor parte de estos límites. Muy probablemente crees cosas que ni tu mismo
te has cuestionado.
7. Luce espectacular
Hemos llegado al paso final y por ende me extenderé un poco en el mismo.
Quieras o no, una de las principales razones por las cuales empiezas un cambio en alimentación,
ejercicio o como quieras llamarle, es por lucir increíble.
Eso de lo hago “por salud” es un cuento que sólo le creo a las caricaturas que por cierto no veo.
Dicen que el 90% de la autoestima y autoconcepto de una mujer está basado en su imagen.
¿Qué tan cierto será esto? TÚ sabes la respuesta.
Esto no significa que seas superficial o fría. No. Estoy hablando de que a TODAS las mujeres les
encanataría verse increíbles, sin importar la edad, condición socioeconómica, estado civil o lo
que sea.
Desde muy temprana edad las mujeres se caracterizan por ese cuidado en su imagen personal y
corporal.