PROGRAMAS DE AJUSTE ESTRUCTURAL 5.1 Estrategia Política 5.1.1 Estrategia sectoriales La estrategia constituye tanto la visión de lo que el sector debería ser en el futuro como el mapa de ruta que muestra cómo alcanzar dicha visión. Su punto de partidas en la situación actual de la agricultura y la problemática que enfrenta. La formulación de una estrategia puede estar motivada por una situación de crisis agrícola o por otros problemas que llevan a la decisión de realizar cambios fundamentales. Para que la estrat3egia resulte exitosa mayormente se requiere el apoyo de los principales actores, los agricultores. Pueden existir varias visiones estratégicas del desempeño de la agricultura; pero, una de las características que definen la estrategia es por quien y para quien es formulada. La estrategia debe representar el compromiso de las autoridades del sector de llevar a cabo determinadas reformas y por tanto la participación del gobierno es un requisito sine qua non para su elaboración. Por otra parte, una estrategia formulada en parte por los productores y que responde a una de sus principales inquietudes, tiene mayores posibilidades de llegar a ser realmente operativa que otra elaborada únicamente por funcionarios gubernamentales o por expertos académicos. Por lo tanto, las estrategias más exitosas generalmente resultan de la colaboración entre diferentes instituciones y grupos de la sociedad. La estrategia tiene que ser realista, por lo mismo, su visión del futuro debe estar basada en los puntos fuertes y las potencialidades del sector. Una estrategia que no ofrezca la visión de un futuro mejor, respaldada por políticas concretas para alcanzarlo, difícilmente podrá motivar la participación de la población rural en su implementación. La estrategia puede ser definida como un plan que especifica una serie de pasos o de conceptos nucleares que tienen como fin la consecuencia de un determinado objetivo. También puede ser entendido como el proceso a través del cual se prevé alcanzar un cierto estado futuro. En las estrategias agrícolas la visión del futuro debe establecer la dirección de los cambios anticipados, las nuevas prioridades que caracterizan el crecimiento en el futuro. Una de las mejores guías para la dirección de los cambios son las ventajas comparativas del sector, esto es, los rubros de producción en los cuales puede competir más eficazmente a largo en los mercados mundiales. La identificación de las ventajas comparativas del sector es un paso esencial hacia la definición explicita de los objetivos nacionales del sector. Por lo mismo, los objetivos, los objetivos deben incluir el incremento de la productividad, principal requisito previo para que crezca el ingreso, y la reducción de la pobreza. Estas son las metas económicas clásicas de la eficiencia y equidad. El objetivo de productividad comprende tanto los adelantos tecnológicos (aumento de rendimientos) como el desplazamiento de los patrones de producción hacia cultivos de más alto valor u otros productos. Por otra parte, si no se especifica los instrumentos concretos de las políticas, y no se toman en cuenta las opiniones de los agricultores en tales decisiones, resultara difícil implementar la estrategia. Las políticas y las inversiones públicas constituyen medios para implementar una visión. En todo el mundo los gobiernos tratan de utilizar cada vez más instrumentos indirectos de políticas, en vez de controles directos. Por consiguiente, el tipo de visión expresada en la estrategia se está apartando de la proyección de detallados sistemas de producción o de niveles productivos. Están siendo desplazados por instrumentos indirectos de política que mejoran los mercados desplazados por instrumentos indirectos de política que mejoran los mercados de recursos y de productos agrícolas, con el propósito de promover la equidad y la eficiencia. Los principales grupos de instrumentos de política incluyen a las políticas de incentivos (que operan principalmente a través de políticas macroeconómicas y de comercio exterior) los sistemas de mercado, la tenencia de la tierra, las políticas de riego, el sistema financiero rural y el sistema para la generación y transferencia de tecnología agrícola. Las políticas públicas son acciones de gobierno con objetivos de interés públicas que surgen de decisiones sustentadas en un proceso de diagnóstico y análisis de factibilidad, para la atención efectiva de problemas publicas específicos, en donde participa la ciudadanía en la definición de problemas y situaciones Los temas abordados por las estrategias conciernen crecientemente a las instituciones, las En algunos contextos se invierte la utilización de los términos “estrategia” y “política”, de modo que el concepto más amplio denomina “una política agraria”, consistente en “estrategias operaciones” para cada área. ley4es, los mercados y la dotación de recursos. Esta última incluye no solo a la tierra, el riego y el trabajo rural, sino también a las capacidades administrativas y de gestión de los agricultores. De manera creciente se reconoce que la agricultura es solo una parte de la economía rural y que la estrategia debería contener un programa de desarrollo rural en sentido más amplio, incluyendo la creación de oportunidades económicas para la población rural que no posee tierras. En su aspecto operacional, la estrategia agrícola constituye un paquete integrado de políticas para el sector, complementado por un programa de inversión. Algunas de esas políticas pueden ser diseñadas para aplicación inmediata o en el corto plazo, pero normalmente la mayoría representa reformas profundas cuyos efectos se sentirán de manera creciente en todo el sector a lo largo de muchos años 5.1.2 ¿Por qué una política agrícola? Algunas veces los macroeconomista y funcionarios públicos ponen en duda la razón de ser la política agrícola. Se arguye que los requisitos básicos par a una exitosa transición económica o experiencia de desarrollo son una correcta política macroeconómica, la máxima privatización posible de las empresas públicas, y la eliminación de reglamentaciones y otras intervenciones gubernamentales dañosas. De acuerdo con este punto de vista, no habría necesidad de una política sectorial per se, una vez que los mercados sean liberalizados y la estabilidad macroeconómica garantizada. Entonces ¿Qué hace a la agricultura diferente a la industria textil, la industria cementera o el negocio de restaurantes, en términos de política económica? Como respuesta se afirma a veces, que la prioridad de la agricultura para los responsables de las políticas deriva de que produce alimentos, segundo en importancia solo al agua dulce para la supervivencia humana. Este argumento es válido hasta cierto punto. Es relevante principalmente para las zonas rurales pobres de los países de más bajos ingresos, que tienden a producir mayormente para el autoconsumo. Pero se hace menos aplicable a medida que la economía mundial se integra y el comercio exterior de alimentos se expande en casi todos los países. Se acepta cada vez más que las nutriciones de la mayoría de las familias pobres dependen más de sus ingresos y condiciones de salud que de si producen o no alimentos básicos. Ejemplo, los productos agrícolas pueden elevar sus ingresos familiares de manera significativa pasando de cultivar maíz y cebada a sembrar otros productos para la venta. Desde luego, la agricultura es la fuente principal de ingreso y empleo en el medio rural, de hecho, en los países más pobres es a menudo la mayor fuente de empleo de toda la economía. El crecimiento agrícola es también el camino principal para reducir la pobreza, tanto en la zona rural como en las urbanas. Existen otra razón asicas para considerar a la agricultura como un aspecto central de la política económica. Ningún otro sector esta tan profundamente interconectado con el resto de la economía. La agricultura usa varios recursos vitales que son limitantes y agótales: agua, tierra, bosques, reservas petroleras. Estos son precisamente los recursos naturales cuya utilización de ah demostrado muy difícil de sujetar a las reglas del mercado. El enfoque de no intervención absoluta, o de la política de laissez faire, ha demostrado ser insostenible en todos los países pues invariablemente lleva a la sobre explotación de estos recursos. Además de ser un empleador principal de fuerza de trabajo, el sector desempeña un papel igualmente importante en la balanza comercial de muchos países y es el mayor usuario de tierra fetales. Así mismo, la contaminación de la tierra y el agua como resultado de las actividades agrícolas y ganaderas pueden afectar severamente a las comunidades urbanas, si no se establecen políticas apropiadas para amortiguar el daño. Es más, existe otra razón por el que la agricultura difiere de oros sectores de la economía. La mano de obra y el capital pueden trasladarse de una industria a otra, de una actividad de servicios a otra, con diferentes grados de facilidad o de dificultad, y regresar si las circunstancias lo aconsejan. Sin embargo, una vez que los trabajadores salen de la agricultura, es muy costoso y extremadamente difícil que regresen. Otra razón para formular políticas agrícolas es que en la mayoría de los países las instituciones económicas son menos desarrolladas, y las reglas de juego económicas menos articuladas en la zona rural que en las urbano-industriales. En efecto, la dispersión geográfica de las explotaciones, redes de caminos poco desarrolladas y carencia de otros tipos de infraestructura pueden determinar que el acceso de los agricultores a los mercados sea incierto y caro. En consecuencia, existen muchas razones para priorizar el desarrollo de políticas agrícolas. Las políticas agrícolas tendientes a mejorar la comercialización están normalmente vinculadas a las relativas al comercio internacional, a las políticas para fomentar la competencia en las Institución económica. Es un concepto de la ciencia económica, definido por la escuela denominada institucionalismo económico como la forma en que se relacionan las personas en su tendencia natural mediante la búsqueda del poco interés individual. Se entiende por instituciones las normas, usos y costumbres que rigen las relaciones sociales y económicas entre los miembros del grupo. El beneficio de una institución aumenta con la eficiencia que esta genera en la economía y con la reducción de sus costes de transición y de costes de información; lo que estará en relación directa con la experiencia que acumulen los agentes económicos y con la transparencia y sencillez de las reglas del sistema; y en relación tuviera con el número de individuos que la ejecutan. agroindustrias y a la política de financiación. 5.2 Características de los instrumentos de la Política Agrícola 5.2.1 Tipos de Políticas Agrícolas La concepción de la política agrícola está experimentando cambios en todo el mundo. Históricamente, uno de los principales instrumentos de la política agrícola ha sido el gasto público. Algunas de las formas más prominentes de gasto han sido las inversiones en infraestructura para propósitos tales como riego, almacenamiento, transporte y mercadeo; la provisión directa de crédito a los productos y subsidio privado; la financiación de la investigación, la extensión, y la producción de semillas, etc. La segunda clase principal de medidas de política ha considerado frecuentemente en controles; principalmente sobre los precios y el comercio, pero a veces sobre el acceso a tierras y agua de riego, y también sobre los propios niveles de la producción. El uso de este instrumento de política viene siendo gradualmente eliminada en la mayor parte de América Latina. La tercera clase principal de instrumentos de política en muchos países ha sido la gestión directa de la producción y el mercadeo a través de empresas de propiedad del Estado, que han actuado en un amplio abanico. La tenencia en la mayor parte de los países es a reducir la propiedad pública de activos en el sector. En este marco, la importancia de la política agrícola aumenta por el hecho de que los niveles de los precios y los volúmenes del comercio responden esencialmente a las políticas macroeconómicas y a las condiciones de los mercados internacionales. Una tarea principal de la política agrícola es mejorar el funcionamiento de los mercados de producción y factores en el medio rural, con atención especial al acceso y a las condiciones de la participación de las familias pobres en dichos mercados. En algunos casos, esto requiere inversión en infraestructura, pero casi siempre también requiere buenas políticas. Los mercados de factores incluyen los de tierras, capital financiero, mano de obra y, en algunos casos, agua de riego y condiciones ambientales. La participación de las familias rurales en el mercado de trabajo, por ejemplo, se pueden mejorar mediante programas de capacitación y extensión agrícolas. Otra tarea principal de toda política agrícola moderna es promover el desarrollo de instituciones adecuadas para satisfacer los requerimientos de la economía rural en expansión, desde el mercadeo hasta el suministro de servicios, y financiación de la producción. La política macroeconómica es aquella que afecta a un país o una gran región en su totalidad. Se ocupa del régimen monetario, fiscal, comercial y cambiario, así como del crecimiento económico, la inflación y las tasas nacionales de empleo y desempleo El aumento de la capacidad institucional requiere desarrollar y refinar las reglas de juego para la economía de mercado, y fomentar el respeto en dichas reglas. Esta tarea esencial puede resultar muy difícil en sociedades en las cuales el respeto de la ley en zonas rurales es limitado o el sistema judicial es débil y no hay suficiente medio para respaldar las obligatoriedades de los contratos. Algunos ejemplos de instrumentos de política agrícola en economías de mercado son los aranceles de exportación, reintegro de aranceles cobrados e insumos de las industrias de exportación, precios de garantía al nivel de las unidades agrícolas, reglamento sobre la calidad de los alimentos, reglamento del sistema de registro de tierras, leyes de protección del medio ambiente rural, políticas de asistencia alimentaria a los pobres, etc. 5.2.2 Políticas, programas y proyectos Los programas son limitados en el tiempos y recursos. Requieren la participación activa del gobierno, y terminan cuando se acaba la financiación. Las políticas son permanentes, por lo menos hasta que se diseñe y ponga en práctica u nuevo sistema de políticas. No siempre requiere gastos del gobierno. por ejemplo, una ley que elimina las restricciones a la importancia no requieres gastos o personal para implementar. Las políticas frecuentemente implican un costo por los usuarios de servicios públicos, los productores en general, los agentes del mercadeo, los consumidores y otros grupos de la economía Los programas consisten en actividades directamente administradas, que requieren una interacción directa con agricultores, instituciones financieras y otros agentes privados de la economía. Muchas políticas, al contrario, ejercen su influencia indirectamente y consisten en la definición de las reglas del juego económico a través de leyes decretos y reglamentos. Los proyectos, al igual de los programas, están limitados en el tiempo y son intensivos en el uso de personal. Usualmente involucran un componente significativo de inversión. Dependen de la cuenta de capital del presupuesto público, mientras que los programas utilizan la cuenta corriente. Sin embargo, algunos programas también incluyen gastos de inversión, de modo que la distinción entre proyectos y programas no siempre es precisa. Frecuentemente se necesitan tanto programas como proyectos para implementar las políticas de una estrategia. En la jerarquía de decisión gubernamentales, los programas y los proyectos normalmente están subordinados y derivan de las políticas, las cuales, a su vez, se formulan en el marco de la estrategia. 5.2.3 Los principios de la política agraria (a) Sustentabilidad económica. La estrategia debe encontrar maneras de procurar beneficios económicos reales al sector rural. Si bien la disciplina fiscal es importante, aquello significa, entre otras cosas, no sujetar al sector a los recortes fiscales a los programas de ajuste estructural. (b) Sostenibilidad social, La estrategia debe encontrar maneras de procurar beneficios económicos reales al sector rural. SI bien la disciplina fiscal es importante, aquello significa, entre otras cosas, no sujetar al sector de los recortes fiscales de los programas de ajuste estructural. (c) Sostenibilidad fiscal. No se deben emprender políticas, programas y proyectos cuyas fuentes de financiamiento no sean plenamente identificadas (d)Sostenibilidad institucional. Las instituciones creadas o apoyadas por las políticas deberían ser capaces de sostenerse por sí solas en el futuro. Por ejemplo, las instituciones financieras que solamente otorgan crédito a los agricultores sin la capacidad de captar deposito, no tiene muchas posibilidades de sobrevivir a la larga. (e)Sostenibilidad ambiental. Se deberían aplicar políticas que fomenten el manejo de bosques y reduzcan a niveles manejables la contaminación de las fuentes de agua y degradación del suelo.
5.3 Políticas Agrícolas y Marco
Macroeconómico 5.3.1 La vinculación de los precios A largo plazo, todos los sectores de la economía se benefician de contextos macroeconómicos caracterizados por precios relativamente estables, lo cual favorece al ahorro, las inversiones y las oportunidades en el comercio exterior. Sin embargo, hasta la fecha, muchos de los países en desarrollo no han alcanzado todavía una configuración macroeconómica optima, y los caminos tomados para perseguirla difieren entre los países. Tradicionalmente se pensaba que la relación entre objetivos macroeconómicos y desarrollo agrícola significaba optar entre la estabilidad y el crecimiento económico. Mayores gastos fiscales en la agricultura estimularían la expansión del sector, aun con el riesgo de crear o profundizar el déficit fiscal y por lo tanto alimentar la inflación. En realidad, esta relación es más imaginaria que real, por dos razones; Primero, la experiencia mundial durante la última década ha confirmado que la estabilidad económica, reduciendo la incertidumbre y estimulando el ahorro y la inversión, constituye de por si un impulso poderoso para el crecimiento.