Está en la página 1de 4

Productos de repostería

Son los productos alimenticios elaborados básicamente con masa de harina,


fermentada o no, rellena o no, cuyos ingredientes principales son harinas, aceites
o grasas, agua, con o sin levadura, a la que se pueden añadir otros alimentos,
complementos panarios o aditivos autorizados y que han sido sometidos a un
tratamiento térmico adecuado.

Función del chef repostero


Son los encargados de preelaborar, preparar, presentar y conservar toda clase de
productos de repostería y definir sus ofertas, aplicando con autonomía las técnicas
correspondientes, consiguiendo la calidad y objetivos económicos establecidos y
respetando las normas y prácticas de seguridad e higiene en la manipulación de
alimentos

1. UTENSILIOS PARA MEDIR INGREDIENTES.


En el artículo anterior sobre ingredientes de repostería y en los consejos para elaborar un
bizcocho perfecto, ya hablamos sobre la importancia de utilizar las cantidades exactas de
cada ingrediente tal como nos indican las recetas. Para conseguir medirlas correctamente,
necesitaremos unos utensilios básicos que nos ayuden:

– Báscula: Es un básico en nuestra cocina, y no sólo para la repostería. Las más habituales
son las que pesan hasta 4-5kg, te será muy útil a la hora de pesar los ingredientes. Lo mejor
es hacerse con una buena báscula digital, nos ayudará a medir los ingredientes con mucha
más precisión que una de aguja. Cuando la compres, revisa también que pueda medir en

distintas unidades: gramos, litros, o incluso onzas y cups, te facilitará la vida


– Jarra medidora: Son muy útiles a la hora de medir líquidos: leche, agua, aceite… Podemos
hacernos con una profesional (las hay que incluso incorporan medidor digital en el mango) o
incluso utilizar el vaso de las batidoras de brazo, que también suele incluir las marcas de
medidas en mililitros.Algunas jarras también nos ayudan a medir ingredientes básicos como la
harina, el azúcar o el arroz, aunque si no incorporan la báscula digital en el mango, no son
demasiado precisas.
– Cups y cucharas medidoras: Ya hablamos de las cups en el
artículo sobre medidas y equivalencias en repostería. Muchas recetas extranjeras (sobre todo
americanas e inglesas) miden los ingredientes en esta medida. 1 cup equivale a 250ml de
líquido. Si no quieres volverte loca haciendo cálculos en la cocina y midiendo ingredientes en
distintas unidades, sería muy interesante que te hagas con un conversor de medidas de
repostería (hablamos de diferentes aplicaciones para móviles que lo hacen en el nº 3 de
Sweet Magazine) o bien con un juego de tazas y cucharas medidoras. ¡Verás la diferencia!
Recuerda que si tienes dudas a la hora de pesar y medir los ingredientes o convertir medidas
de recetas extranjeras, nuestro artículo sobre Medidas y equivalencias en repostería te
ayudará mucho.

2. UTENSILIOS PARA MEZCLAR


INGREDIENTES.
– Cuencos o bowls: Necesitaremos un juego de diferentes medidas de cuencos y bowls
donde depositar nuestros ingredientes ya pesados y tamizados, y también donde mezclarlos.
Existen bowls de múltiples materiales: plástico, madera, porcelana y cerámica, acero
inoxidable… Los de plástico son muy útiles, sobre todo los especiales para repostería que
incluyen un asa para volcarlos y gomas en la parte inferior para que no se deslicen libremente
por el mármol. También es útil contar con bowls de acero inoxidable, que ayudan a mantener
el frío o calor en determinados ingredientes que lo necesitan (como la nata a la hora de
montarla, que debe estar muy fría).

– Batidora: existen muchos tipos de batidoras, pero básicamente se distribuyen en 2 tipos:


eléctricas y manuales. Entre las batidoras eléctricas podemos encontrar multitud de modelos
para todos los bolsillos: desde las batidoras de mano más económicas, que puedes encontrar
desde unos 30-40€; hasta las batidoras tipo “stand-mixer” como la Kitchen Aid, Bomman o
Bosch Mum, cada vez más extendidas y de gran ayuda en la cocina para obtener resultados
muy profesionales. Estas batidoras suelen costar desde los 150€ hasta los 500€, dependiendo
del modelo y la potencia que tengan. Por nuestra parte te recomendamos hacerte con una
Kitchen Aid, si bien su precio es algo mayor que el de otras máquinas, te aseguramos que su
potencia y durabilidad bien lo valen, es la mejor inversión que puedes hacer en repostería, una
máquina que te durará toda la vida.
– Tamizador: la mayoría de ingredientes secos de repostería tienen que pasar por un proceso
de tamizado, como ya te contamos en el artículo sobre ingredientes de repostería y cómo
obtener un bizcocho perfecto. Para hacerlo, existen varias opciones. Podemos hacernos con
un tamizador clásico “de taza”, con un sistema que te permite tamizar los productos con un
sistema incluido en su asa, o bien podemos utilizar un colador muy fino y pasar los
ingredientes a través de su red con ayuda de una cuchara o espátula.
– Espátula: Una buena espátula de silicona nos ayudará siempre en la cocina, no sólo para
elaborar nuestra repostería. Utilízala para ayudarte a verter los ingredientes, a terminar de
mezclarlos manualmente, para bajar los ingredientes pegados en los laterales del bowl de
mezclado… Este es uno de esos utensilios a los que sacarás más partido, invierte en una
buena espátula y verás lo útil que puede llegar a ser.

3. UTENSILIOS PARA TRABAJAR LA MASA.


– Rodillo: Un buen rodillo es esencial si queremos trabajar cualquier masa de galletas,
hojaldre, pan… que necesite ser estirada. Existen rodillos de múltiples materiales, como la
madera, cerámica, mármol, acero inoxidable… Para empezar, puedes hacerte con un buen
rodillo de madera, y más adelante, según vayas haciendo dulces más elaborados, adquirir
otros rodillos que necesites.

– Cortadores: Para las masas que necesiten corte


con formas determinadas (por ejemplo, las galletas) necesitarás un juego de cortadores. Hay
cortadores de plástico, cobre y acero inoxidable, entre otros. Los más recomendados son los
de acero inoxidable, ya que permiten un mejor corte sin rebabas. Para mantenerlos como
nuevos por mucho tiempo, límpialos con un paño húmedo y sécalos bien antes de guardarlos.

4. UTENSILIOS PARA HORNEAR.


– Papel de horno: Tiene muchas aplicaciones, desde ponerlo debajo de un bollo o panadería
al hornear para evitar que se pegue, hasta ponerlo en los moldes de bizcochos para ayudar a
desmoldar. Se puede comprar en cualquier supermercado, y es realmente útil en la cocina.
– Moldes: Para hornear tus bizcochos y cakes, necesitarás moldes. Existen moldes de
cerámica, aluminio, silicona… dependiendo de lo que quieras hornear en ellos. Por ejemplo,
moldes lisos para layer cakes, moldes de silicona para pequeños pastelitos, moldes de bundt
cakes, moldes rizados para pies… ¡El mundo de los moldes merecería un capítulo a parte!
Para empezar, nuestro consejo es hacerte con un par de moldes redondos lisos de distintas
medidas, y uno alargado. Si vas a hacer cupcakes, también existen moldes de aluminio o
silicona donde puedes introducir directamente las cápsulas, para que no se deformen.
– Bandeja: Para hornear galletas, una buena idea es utilizar una bandeja de horno. Existen
bandejas especiales (antiadherentes y con un diseño especial para mejorar el horneado y la
circulación del aire) sobre las que puedes colocar directamente tus dulces. En caso que no
dispongas de una, también puedes utilizar la bandeja de tu horno y cubrirla con papel de
horno, para evitar que se te peguen los dulces.– Rejilla enfriado:Cuando sacamos nuestros
dulces del horno, en multitud de ocasiones hay que dejarlos enfriar o reposar. Para no
colocarlos directamente sobre el mármol (que podría dañarlo) y para mejorar el enfriado por la
circulación del aire, podemos utilizar rejillas especiales para enfriar nuestros dulces. Si no
dispones de una, también puedes apañarte con la rejilla del horno, por el momento. Pero
verás que es un utensilio muy barato (puedes adquirirlas desde 6€) y muy útil en la cocina.
5. UTENSILIOS PARA DECORAR Y MONTAR.
– Espátulas: Además de las espátulas de silicona, para el montaje y decorado de nuestros
dulces también hay espátulas metálicas (de acero inoxidable). Éstas no s ayudarán a distribuir
las cremas y nivelarlas, a aplicarlas sobre cupcakes o cualquier otro dulce… Una buena
espátula, ya sea lisa o acodada (con ángulo de unos 45º) nos ayudará enormemente en la
cocina y en la repostería.

– Manga pastelera: Y cómo no, el clásico de la


repostería: una buena manga pastelera. Para distribuir cremas y masas, o para decorar
cualquier dulce. Una manga acompañada de unas buenas boquillas no puede faltar en tu
repertorio. Existen mangas de tela y de plástico desechables, te recomendamos las segundas
para tu comodidad y por higiene. Complementadas con un adaptador y unas boquillas de
calidad, tendrás el mejor accesorio de repostería que pueda existir.
– Brocha silicona: nos vendrá de maravilla para pincelar los dulces con huevo, para
almibarar nuestros bizcochos, para limpiarles las migas o incluso para repartir glaseado. Ten
una buena brocha a mano siempre y ayúdate de ella para aplicar cualquier ingrediente líquido
o cremoso.

También podría gustarte