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Una vida dedicada "al encargo del Señor": el presidente Thomas

S. Monson muere a los 90 años


El presidente Thomas Spencer Monson, decimosexto presidente de la Iglesia, murió el
martes 2 de enero de 2018 en su casa de Salt Lake City. Él tenía 90 años.

El presidente Monson conocía bien el gobierno de la Iglesia, no solo a través del


conocimiento recogido a través de historias escritas, sino también a través de la
experiencia personal.

Llamado al Quórum de los Doce a los 36 años, pasó 54 años como Autoridad General,
incluidos 32 años en la Primera Presidencia, los últimos casi 10 años como Presidente
de la Iglesia. Fue consejero de tres presidentes de la Iglesia: segundo consejero del
presidente Ezra Taft Benson y del presidente Howard W. Hunter, y durante casi 13
años primer consejero del presidente Gordon B. Hinckley.

Tras la muerte del presidente Hinckley, el presidente Monson fue separado el 3 de


febrero de 2008 como presidente de la Iglesia.

Incluso antes de la era de su ministerio como Autoridad General, dedicó su vida al


encargo del Señor, de servir como presidente del quórum de diáconos de su barrio
cuando era joven, a servir como obispo cuando tenía poco más de 20 años, a presidir
una misión. en sus primeros años 30, para convertirse en miembro del Quórum de los
Doce Apóstoles de alrededor de 30 años, a los 36 años.

El presidente Monson tenía todas las características de un siervo modesto del Señor.

En 1997, se le pidió que describiera cómo había sido llamado ser un Apóstol del Señor.
No respondió la pregunta directamente, sino que habló de "ser llamado por Dios" en
términos más generales, de una manera que cada miembro con un llamado podría
entender. Habló de ser llamado como obispo de un barrio de 1.080 miembros a la edad
de 22 años. Dijo: "Tenía una gran responsabilidad por el bienestar ... Cerca de un tercio
del barrio estaba representado por familias antiguas y dos tercios por un población
transitoria. Por qué fui seleccionado, no puedo decírselo "(Gerry Avant, notas de la
entrevista de Church News, agosto de 1997).

Durante una conversación con Church News, reflexionó sobre la ocasión en la que, en
solo unos días, durante la conferencia general de abril de 2008, los miembros de todo el
mundo levantarían sus manos en una asamblea solemne para mantenerlo como
presidente de la Iglesia.

Cuando se le preguntó sobre sus pensamientos y sentimientos relacionados con el


momento en que se dio cuenta de que iba a ser el próximo presidente de la Iglesia, el
que posee todas las llaves del sacerdocio, el presidente Monson dijo: "Siempre he
seguido la filosofía, 'sirve donde tú se llama, no donde has estado o donde podrías
estar. Sirve donde te llaman.

"Lo hice como obispo, como miembro de la presidencia de estaca, como presidente de
misión y como apóstol. No lo sabía, pero el presidente Hinckley me sobreviviría.
Algunos mueren jóvenes, otros mueren más viejos "(Gerry Avant, Church News, 5 de
abril de 2008).

Durante sus años como Autoridad General, el Presidente Monson voluntariamente, y


con entusiasmo, sirvió en donde fue llamado. Como miembro del Quórum de los Doce
Apóstoles, supervisó las misiones de la Iglesia en el oeste de los Estados Unidos, el
Pacífico Sur, México, América Central y Europa. Después de varios años y siguiendo la
política de rotación, las misiones europeas se transfirieron a otro miembro de los Doce.
Sin embargo, el élder Monson retuvo la responsabilidad de todos los países detrás de
la Cortina de Hierro. Jugó un papel decisivo en la construcción del Templo de Freiberg
Alemania, se desempeñó como presidente del Comité de Publicaciones de las
Escrituras y supervisó el proceso que resultó en las nuevas ediciones de las Obras
Estándar de la Iglesia. Tuvo un papel importante en la supervisión y expansión del
programa de bienestar de la Iglesia, y su trabajo humanitario y proyectos de desarrollo
en todo el mundo para ayudar a los necesitados, independientemente de su fe.

Desde sus días como obispo hasta sus años como presidente de la Iglesia, su nombre
estará vinculado para siempre a esfuerzos compasivos, servicio a los demás y un fuerte
deseo de ayudar a los indefensos, alimentar a los débiles y ayudar a los que sufren.
aflicciones Demostró ese servicio de la manera más efectiva en una base uno a uno.

Nadie puede contar la cantidad de veces que el presidente Monson realizó visitas
personales a los hogares o las cabeceras de los hospitales para ofrecer consuelo, alegría
y bendiciones, o se tomó el tiempo de escribir una carta o llamar por teléfono a alguien
que necesitaba una comunicación amistosa. En una conversación de 1998, la hermana
Frances Johnson Monson (1927-2013) dijo que había visto a su esposo "trabajar casi
hasta el cansancio ya que ha ido a bendecir la vida de los necesitados" (Gerry Avant,
Church News, 2 de mayo). 1998).

En una entrevista con motivo de su 81º cumpleaños, le pidieron que describiera cuál
sería el regalo ideal que los miembros de todo el mundo podrían darle. Sin dudar un
momento, dijo: "Haz algo por alguien más ese día para mejorar su vida". Encuentre a
alguien que está pasando por un momento difícil, o está enfermo o solo y haga algo
por él. Eso es todo lo que preguntaría "(Gerry Avant, Church News, 23 de agosto de
2008). Su respuesta estuvo de acuerdo con el carácter de un hombre que dedicó su vida
a servir a los demás.

El presidente Monson siempre estaba ansioso por escuchar las impresiones para servir
a otros En una entrevista, un año después de ser sostenido como presidente de la
Iglesia, Church News señaló que solo hay muchas horas en un día e incluso que el
profeta es un mortal que tiene tiempo y energía limitados y, sin duda, debe haber
ocasiones. cuando siente que no puede actuar siguiendo una indicación. Él respondió:
"No quiero llegar a ese punto" (Gerry Avant, Church News, 31 de enero de 2009).

En una ocasión anterior, dijo: "No hay nada como estar al servicio del Señor Jesucristo,
y todos tenemos ese privilegio". Cuando se le preguntó si tenía un deseo con respecto a
su futuro, dijo: "Quiero vivir lo mejor que pueda y hacer más por los demás, siempre
que sea posible ". (Gerry Avant, Church News, 25 de agosto de 2007).

En 1997, cuando estaba por cumplir 70 años, Church News le preguntó al presidente
Monson cómo le gustaría ser recordado. Él respondió con una breve frase que captó la
esencia de su vida: "Hice lo mejor que pude".

https://www.deseretnews.com/article/865694631/A-life-spent-on-the-Lords-errand-President-
Thomas-S-Monson-dies-at-age-90.html

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