CONCLUSIONES

La empresa como tal tiene varios momentos de esparcimiento para sus empleados, lo que
debería llevar a que las personas que trabajan en ella tengan una excelente relación con su
jefe, pero tantos años realizando los mismos tipos de distracción han logrado que sus
empleados caigan en la rutina.
Los programas que se tienen asignados como distracción no se toman en cuenta a las mujeres,
lo cual es muy fastidioso para ellas, porque al no compartir momentos de esparcimiento, hace
que las empleadas no trabajen adecuadamente ya que se encuentran en un ambiente de estrés.
Mo Martin ha sido un excelente vicepresidente de ventas desde que ocupó el puesto hasta
unos pocos años atrás, ya que menciona que está cansado, y viejo para continuar con lo
mismo y siente que ya no puede lograr llevar las cosas como lo hacía antes.

RECOMENDACIONES
Debería dar paso a que nuevos profesionales ocupen el lugar del vicepresidente de ventas,
esto se lo haría por medio de entrevistas y personal especializado para poder contratar a un
vicepresidente que pueda lograr acoplarse a la organización.
Tener en cuenta que las mujeres forman parte importante de las reuniones o momentos de
esparcimiento que ofrece la empresa, formular un programa en el cual solo mujeres disfruten
de sus tiempos libres en la organización, y también no olvidarse de que cuando haya
programas para todo el personal se incluya actividades para las mujeres.
Dar capacitaciones en esos tiempos de esparcimiento sería una buena opción para que a más
de que adquieran conocimientos nuevos puedan compartir tiempo con sus compañeros y su
nuevo vicepresidente.