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CTP El Detoxificante Perfecto
CTP El Detoxificante Perfecto
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Ya en el siglo XIX el biólogo, médico y fisiólogo francés Claude Bernard, postuló que
lo que ocasiona la enfermedad no son los gérmenes (bacterias, virus, etc.), sino el estado
del medio interno del cuerpo o “terreno”, que ha perdido la capacidad para combatir a
los agentes invasores. Los higienistas afirman que los mencionados gérmenes, sólo
pueden vivir en un “terreno toxémico o sucio”. El término “terreno” se refiere a la
célula y al espacio extracelular, a través del cual a la célula le llegan los nutrientesy
también productos tóxicos exógenos y hacia el que la célula expulsa sus productos de
desecho endógenos.
Según el estado de su “terreno”, entre otras cosas, la persona puede gozar de buena o de
mala salud, ya que los organismos patógenos sólo se desarrollan cuando se produce un
desequilibrio del medio interno del organismo, que permite la proliferación de
microorganismos patógenos. Esto explica porqué los virus, por ejemplo, afectan a unas
personas y a otras no. El virus proliferará su potencial patógeno únicamente en un
organismo que no puede defenderse; es decir, si el “terreno”, por la razón que sea, está
debilitado o “sucio”.
También elaboró la vacuna contra el ántrax y contra la rabia y con sus ideas contribuyó
al desarrollo posterior de los antibióticos. Resumiendo: Si mantenemos limpio el
terreno, los microbios no pueden proliferar y por tanto la salud no se resiente y no se
manifiesta ningún síntoma de ésta proliferación. En consecuencia, nuestro sistema
defensivo se mantendrá robusto y no será tan necesario estimularlo.
La gran mayoría de las sustancias tóxicas presentan tres características: son liposolubles
(atraviesan fácilmente las membranas celulares), apolares (no son solubles en agua) y se
reabsorben a nivel del túbulo renal (vuelven a la sangre y no se eliminan por la orina),
por lo que pueden permanecer largo tiempo en el organismo.
Para reducir la posibilidad de que una sustancia produzca una respuesta tóxica en el
organismo, podemos hacer dos cosas: Disminuir la cantidad de sustancia que le llega a
los tejidos, en su forma activa, y disminuir el tiempo que dicha sustancia permanece en
contacto con los tejidos. Esto lo podemos lograr mediante la disminución de la
capacidad de difusión de la sustancia e incrementando su velocidad de eliminación (esto
es lo que hace el CTP).
Uno de los mecanismos más importantes, a través del cual el organismo se defiende e
impide que las sustancias tóxicas le generen daño, es el denominado de
Biotransformación.
CTP-El Detoxificante Perfecto, actúa a este nivel, estimulando las enzimas de la fase II
lo que produce, entre otras, dos acciones muy beneficiosas:
Favorece y aumenta las reacciones a través de las cuales las sustancias tóxicas se
hacen más hidrosolubles, mejorando su excreción y así evitamos el acumulo de
estas sustancias en las células del organismo.
Estimula la captación y neutralización de radicales libres e inhibe su formación
(acción antioxidante indirecta). Además, potencia la acción de otros
antioxidantes y los regenera.
Esta planta hasta ahora, era conocida fundamentalmente por su efecto diurético,
(Navarro et al, 1994), por su capacidad de disolver los cálculos de las vías urinarias y
también por su aplicación en el tratamiento de la hiperplasia de próstata (Martínez
Caballero et al, 2004).
La molécula que presenta una mayor actividad es el CETP, pero no está presenta en la
planta. Procede de la degradación espontánea de la sinigrina (ésta sí presente en el
Lepidium latifolium) y se origina al trocear, licuar, etc., la planta por acción enzimática,
o también ya dentro del aparato digestivo por la misma acción, como se ha explicado.
En condiciones normales, es la molécula que se forma en menor cantidad, cuando la
sinigrina se degrada, pero conformado el Lepidium como está en el CTP, hemos
conseguido que la práctica totalidad de la sinigrina, se convierta en CETP dentro del
sistema digestivo.
Como se ve, a partir del glucosinolato sinigrina (sustancia inactiva), por acción de la
enzima mirosinasa, podemos obtener dos compuestos activos, el isotiocianato de alilo y
el epitionitrilo. La tendencia natural de la sinigrina es formar isotiocianato de alilo,
porque presenta menos requerimientos para su producción (solamente un pH neutro y la
mirosinasa). Sin embargo, a nosotros nos interesa por su mayor capacidad detoxificante,
el CETP, que necesita más elementos para su síntesis (una proteína epitioespecífica,
hierro (ión ferroso) y un pH ácido que aporta el estómago). Lo que nosotros hacemos es
aportar al glucosinolato sinigrina esos elementos para derivar la reacción hacia la
producción de CETP. Así generamos únicamente CETP.
En nuestro laboratorio, durante varios años
hemos intentado obtener un extracto de Lepidium latifolium especialmente rico en esta
molécula y estandarizado, pero por su volatilidad es prácticamente imposible garantizar
su presencia a lo largo de la vida de un producto comercial, por mucho que lo
protegiésemos. Todo ello nos ha obligado al complejo desarrollo de un producto,
CTP-El Detoxificante Perfecto, que garantice la cantidad de CETP necesaria para
que presente la actividad detoxificante a lo largo del tiempo, que al final y debido
por la novedad de la que se trata, ha cristalizado en una patente.
El Lepidium latifolium como tal, es conocido por ciertos beneficios para la salud desde
hace miles de años, pues es ya recogido por Dioscórides en sus textos sobre plantas
medicinales.
En Soria Natural, nos centramos en su estudio a partir de las experiencias que, como
ya hemos dicho, desarrolló nuestro departamento de I+D+i en colaboración,
primero con la Universidad de Santiago de Compostela, durante 3 años, y después
con el Centro de investigación del Cáncer de Salamanca (C.I.C.), dependiente del
Consejo Superior de Investigaciones Científicas (C.S.I.C.), durante 7 años, sobre su
actividad beneficiosa en ciertos casos de cáncer, lo cual nos animó a entrar de lleno en
el estudio de sus actividades, y una de ellas, en especial por tratarse de una crucífera,
debía ser la actividad detoxificante celular. Los primeros ensayos se desarrollaron en el
año 2000, en el entonces nuestro pequeño laboratorio de I+D+i, realizando pruebas in
vitro con cultivos celulares de tumores malignos humanos, tratados con jugos frescos y
extractos de 97 plantas medicinales, de las que la bibliografía manifiesta la posibilidad
de tener propiedades apoptóticas, hasta que se llegó a la conclusión que la planta que
presentaba mejor actividad apoptótica en varios tipos de células cancerígenas, era el
Lepidium latifolium, dependiendo de la parte de la planta empleada.
Hasta ese momento, el sulforafano, el componente más estudiado del brócoli, era la
principal molécula que se había significado con propiedades detoxificantes sobre la
célula, por
lo que consideramos que la mejor manera de testar el era comparando su actividad con
la del sulforafano (Abdull Razis AF, De Nicola GR et al, 2011; Abdull Razis AF, Iori R
et al, 2011; Higgins LG, Kelleher MO et al, 2009; Angeloni C et al, 2009; Choi S, Lew
KL et al, 2007; Jo EH, Kim SH et al, 2007; Singh SV et al, 2005; Misiewicz I et al,
2004; Zhang Y and Callaway EC, 2002; Shapiro TA et al, 2001; Brooks JD et al, 2001;
Gamet-Payrastre L et al, 2000; Fahey
JW et al, 1997).
Como se puede ver, no rompemos la integridad de la planta, ya que a través del extracto
seco liofilizado de hojas jóvenes de Lepidium latifolium, el organismo recibe los
beneficios de la sinergia de todos los componentes que contiene el Lepidium, tanto
conocidos como desconocidos. Únicamente reforzamos la acción de determinados
principios activos (mirosinasa y proteína epitioespecífica) y añadimos otros (vitamina C
y hierro) para “dirigir” la síntesis en el organismo de CETP y así potenciar su
efectividad. El pH ácido lo aporta el estómago, cuando está vacío antes de comer, razón
por la que se aconseja tomar el comprimido unos minutos antes de las comidas, junto
con un vasito de agua para favorecer su disgregación.
Sinigrina 30 mg
Mirosinasa 5 UI
Proteína epitioespecífica 200 μg
Ión ferroso 7 mg
Vitamina C 40 mg
Como ya hemos comentado y todos sabemos, hoy por hoy nos encontramos expuestos a
numerosas sustancias tóxicas que habitan en el ambiente y que pueden ingresar en el
cuerpo a través de tres vías principalmente: los pulmones (por el aire que respiramos), el
tracto digestivo (por el alimento que ingerimos, los líquidos que bebemos, o por las
partículas de polvo o aire que tragamos) y por la piel (por las sustancias peligrosas que
tocamos o que están disueltas en el agua en la que nos lavamos), así como a toda una
serie de toxinas endógenas, provenientes de nuestro propio metabolismo.
El CTP presenta una acción antioxidante indirecta, evitando el ataque y daño de los
radicales libres a los componentes celulares (ADN, proteínas, lípidos). Pero además, es
capaz de aumentar el glutatión reducido (GSH), un importante antioxidante intracelular.
Con la ingesta de CTP, se previenen los posibles daños ocasionados por el deterioro de
la piel y ayuda a mantenerla en un estado óptimo. CTP protege a la piel, estimulando,
de manera natural, la capacidad detoxificante de las células de la dermis, como nunca
antes se había conseguido, lo cual favorece la eliminación de toxinas evitando que se
acumulen, retrasando de manera importante el envejecimiento y convirtiendo en real el
aforismo de “embellecer desde el interior”, ya que la piel es un reflejo de como se
encuentra nuestro medio interno.
Con el uso de nuestro preparado CTP, estamos potenciando la propia capacidad que
tiene nuestro cuerpo para mantener y disfrutar de un elevado nivel de salud. Es
además una herramienta que se puede utilizar para eliminar las toxinas acumuladas y
activar nuestro bienestar, además de mejorar los trastornos de salud crónicos y
degenerativos con gran eficacia, realizando una limpieza del terreno que ayuda en gran
medida al restablecimiento de la salud.
Modo de empleo:
Precauciones:
La enzima quinona reductasa puede ser inhibida por la capsaicina y la cafeína. Por
tanto, mientras se tome el CTP se aconseja no consumir alimentos que contengan dichas
sustancias como chiles, guindillas y alimentos picantes similares, café, etc.