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Hay tres categorías principales de valores del Tesoro negociables: letras del
Tesoro, pagarés del Tesoro y bonos del Tesoro (T-bills, T-notes y T-bonds
respectivamente). El valor nominal/principal de un solo valor del Tesoro a partir
del 7 de abril del 2008 es de $100, que es la suma m ínima que usted puede
invertir. También puede invertir más, en incrementos de $100 cada uno – por
ejemplo, $200, $300, y así sucesivamente. En efecto, si así desea, puede
comprar hasta $5 millones a la vez de cualquiera de estos valores.
Las letras del Tesoro, los pagarés del Tesoro y los bonos del Tesoro se
diferencian básicamente en cuanto a sus plazos de vencimiento, que se
extienden desde varias semanas hasta muchos años. Por lo tanto, cada uno
de estos valores es apropiado para un objetivo distinto de inversión.
Las letras del Tesoro (T-bills) son inversiones en obligaciones a muy corto
plazo que se venden con vencimientos de 4 semanas, 13 semanas y 26
semanas. Cuando se trata de estas letras del Tesoro, usted no percibe pagos
regulares de intereses como sería normalmente el caso con bonos. En vez,
usted recibe el interés una sola vez, al concluir el plazo.
En vista de que las letras del Tesoro vencen a corto plazo, están poco
expuestas a la inflación y a los riesgos de las tasas de interés. Por lo tanto,
estas letras del Tesoro sirven como punto de referencia para medir el riesgo
que involucran otras inversiones. Generalmente pagan tasas comparables con
Los letras del Tesoro son a menudo apropiadas para objetivos financieros que
exigen inversiones de alta liquidez y bajo riesgo. Así es que usted podría
utilizar letras del Tesoro en un fondo de emergencia, como vehículos para
guardar dinero mientras escoge su próxima inversión, o para ahorrar para
objetivos a corto plazo, tal como la compra de un automóvil.
Los pagarés del Tesoro ofrecen una gama de opciones de mediano plazo: 2, 5
y 10 años. Pagan intereses dos veces al año a tasas que son fijadas en el
momento de emisión. Cuando los pagarés alcanzan su vencimiento, a usted le
es reintegrado su valor nominal completo.
Los bonos del Tesoro a menudo son atractivos para aquellos inversionistas que
suelen comprar y mantenerlos, sin especular, hasta su vencimiento, ya que
ofrecen una fuente de ingreso regular a través de un per íodo amplio sin el
riesgo de incumplimiento. El interés que pagan tiende a ser mayor que el de
Aunque las tasas de interés de los TIPS son fijas durante todo el plazo, el
principal de estos valores es ajustado dos veces al año. El ajuste se basa en
cambios en el Índice de Precios de Consumo (Consumer Price Index), que es
el medidor más importante de la inflación en los Estados Unidos.
Pero si los precios caen, durante un período de deflación – lo cual tiene menos
probabilidades de suceder que la inflación – entonces ocurre la situación
opuesta: su principal es rebajado y el interés que recibe también disminuirá, ya
que se fundamentará en el monto menor del principal. No obstante, si en el
momento del vencimiento su principal ajustado de acuerdo con la inflación
resulta ser menor que el principal original, a usted le será reembolsado ese
principal original, lo cual le brinda algo de protección contra una posible
deflación.
Sin embargo, los TIPS tienen una desventaja: la tasa de interés que pagan los
TIPS es sustancialmente menor que la tasa que rige para los valores del
Tesoro de condiciones similares pero que no están protegidos contra la
inflación. A fines del 2007, por ejemplo, la tasa para un recién emitido pagaré
del Tesoro con plazo de 10 años era de 4,25%, mientras que la tasa para un
TIPS con el mismo plazo era de 2,625%.
Para crear STRIPS, un solo valor del Tesoro se divide en valores separados,
uno para el reintegro del principal y uno para los pagos pautados de intereses.
Esencialmente, estos valores obran como valores del Tesoro de cupón cero, y
usted recibe un reintegro del principal más el interés solamente una vez, en la
fecha para la cual esos pagos hubieran sido exigibles. Usted puede comprar
STRIPS únicamente a través de bancos y casas de corretaje, pero no
directamente a través de la Tesorería.
Al igual que todas la inversiones, los valores del Tesoro lo exponen a ciertos
riesgos, incluyendo la posibilidad de rendimientos menores de lo anticipado y
las impredecibles fuerzas de la oferta y demanda que afectan al mercado de
estos valores. Pero debido a que son emisiones del gobierno federal, también
gozan de una fuerte reputación de seguridad.
Riesgo crediticio
Aunque el riesgo crediticio de cero hace que los bonos del Tesoro sean más
seguros que los bonos de empresa y los bonos municipales si usted los
mantiene hasta su vencimiento, recuerde que, al igual que sucede con todas
las inversiones, menor riesgo significa menor rendimiento potencial. Para
decirlo de otra manera, entre más segura la inversión, menor el interés que
tiene que pagar el emisor para atraer a los inversionistas. Por eso es que los
bonos del Tesoro generalmente pagan tasas de interés más bajas que otros
bonos que ofrecen condiciones similares.
A pesar de que los valores del Tesoro se encuentran libres de riesgo crediticio,
no son inversiones sin riesgo alguno. Como todos los empréstitos, los valores
del Tesoro están sujetos al riesgo de las tasas de interés, lo cual significa
El riesgo de las tasas de interés aumenta con la longitud del plazo. Por
ejemplo, si usted es titular de un pagaré de 2 años, la tasa de interés
permanece inalterable solo durante ese período relativamente corto. Su
principal le será restituido al vencimiento de los 2 años y entonces usted podrá
reinvertirlo a la tasa de interés que rige en ese momento. Pero si usted
mantiene un bono que vence dentro de 30 años, estará percibiendo la tasa de
interés asignada durante largo tiempo. Si usted necesita el dinero, es posible
que tenga que vender su bono de largo plazo con descuento.
Otro aspecto del riesgo de las tasas de interés es el riesgo de reinversión. Por
ejemplo, si su bono toca a su vencimiento y usted desea reinvertir en otro bono,
la tasa de interés en ese momento puede ser más baja que la tasa que usted
había recibido para el bono anterior. Por lo tanto, es posible que usted tenga
que reinvertir a una tasa menor o escoger otra inversión que no sea tan
apropiada para el logro de sus objetivos financieros y tampoco para la
Una técnica que se puede emplear para manejar este tipo de riesgo de las
tasas de interés es la de escalonar las fechas de vencimiento. En vez de
invertir su principal completo en un solo bono, usted divide el total en distintas
partes y compra varios bonos con diferentes condiciones de manera que se
venzan por orden – digamos con uno o dos años de diferencia entre un
vencimiento y otro – tal como los peldaños de una escalera. A medida que van
venciendo, usted reinvierte en otro bono con el mismo plazo de vencimiento.
Un fondo escalonado es una forma de diversificar, la cual le ofrece una entrada
regular de efectivo para ser invertido a las tasas de interés actuales y al mismo
tiempo le suministra ingresos derivados de inversiones con una combinación de
tasas diversas.
El riesgo de inflación es otro factor que hay que considerar si usted está
invirtiendo en valores del Tesoro. Si el costo de los bienes y servicios está
aumentando más rápidamente que el rendimiento de sus inversiones,
entonces, aunque parezca que su dinero esté acrecentando, la realidad es que
su poder de adquisición irá disminuyendo progresivamente. Por ejemplo, si su
empréstito del Tesoro está pagando un interés fijo de 3% por año, pero el
índice de inflación anual también es del 3%, entonces, después de pagar
impuestos, su dinero en realidad estará perdiendo poder adquisitivo con cada
año que pasa.
Riesgo de redención
Algunos valores del Tesoro emitidos antes de 1985 son redimibles, lo cual
significa que el emisor – en este caso el gobierno federal – puede decidir
reintegrarle su inversión antes de lo programado. La redención de su valor del
Tesoro puede descarrilarle sus planes financieros, particularmente si usted
contaba con que su inversión le pagaría intereses por un cierto número de años
y que vencería en una fecha específica. Si una emisión es redimida, lo más
probable es que las tasas de interés hayan caído, y que usted se verá en la
necesidad de reinvertir su principal por un interés más bajo. Para compensar
por este riesgo, los valores del Tesoro redimibles generalmente ofrecen
rendimientos mayores que otros valores del mismo plazo que no pueden ser
redimidos.
Las emisiones nuevas de valores del Tesoro se venden por subasta. Las
subastas son programadas regularmente y usted puede participar como
persona individual/natural mediante su cuenta Treasury/Direct o Legacy
Treasury Direct. También participan inversionistas institucionales, tales como
bancos, fondos de inversión y fondos de jubilación.
Por ejemplo, en abril del 2009, el rendimiento más alto para un pagaré de10
años fue del 2,950%, el más bajo del 2,550%, y el mediano del 2,879%. Los
postores competitivos cuyas licitaciones estuvieron por debajo del 2,950%
recibieron sus pedidos completos, y alrededor de 33% de los postores quienes
licitaron a un nivel más alto tuvieron igual éxito. En vista de que el 2,950% fue
la licitación máxima aceptada por la Tesorería, todos los postores exitosos
reciben el provecho de ese rendimiento a pesar de que cuando licitaron
estaban dispuestos a aceptar un menor porcentaje. Debido a la manera en que
la Tesorería subasta sus empréstitos, aunque usted compre un pagaré o bono
del Tesoro en el momento de su emisión, el precio que pague puede ser mayor
o menor que el valor nominal. Eso se debe a que la tasa de interés – o sea, el
porcentaje de su valor nominal que la inversión paga en intereses – y el
rendimiento son establecidos por la subasta.
Demanda variable
Pero cuando a los otros mercados no les va tan bien – por ejemplo, si el
mercado de valores/acciones se mueve lentamente – entonces los
inversionistas no cosechan los rendimientos esperados a pesar de los riesgos
que han asumido. Pueden estar preocupados particularmente acerca de la
posibilidad de perder su principal. Lo que sucede entonces es lo que se
denomina un repliegue hacia la calidad, durante el cual los inversionistas
Otra razón por la cual la demanda para los valores del Tesoro puede variar es
que las tasas de interés cambian. Esta fluctuación afecta todos los
empréstitos. No obstante, los cambios en las tasas de interés no afectan todos
los valores del Tesoro de la misma manera, ya que el riesgo respecto a la tasa
de interés que corre cualquiera de dichos valores depende de su fecha de
vencimiento. Por ejemplo, las letras del Tesoro (T-bills), cuyo plazo de
vencimiento es el más corto, se encuentran menos vulnerables que los pagarés
del Tesoro (T-notes), y los pagarés del Tesoro (T-notes) son menos
vulnerables que los bonos del Tesoro ( T-bonds), que tienen el plazo de
vencimiento más largo.
Mercado secundario
Los valores del Tesoro son inversiones de alta liquidez. Nuevas emisiones son
ofrecidas de acuerdo con una programación regular, y hay un enorme mercado
de compradores y vendedores quienes comercian diariamente con un gran
volumen de valores ya existentes. Eso significa que los valores del Tesoro son
fáciles de comprar y vender y que los costos de negociarlos generalmente son
bastante bajos. Esta liquidez es especialmente importante si usted necesita
vender una inversión rápidamente – por ejemplo, si necesita efectivo para una
emergencia o para una compra importante, si descubre otra oportunidad de
inversión que le conviene más para su plan financiero, o si desea comerciar
estos valores para obtener una ganancia.
Los valores del Tesoro también ofrecen ventajas fiscales. Auque, sin embargo,
se requiere que usted pague impuesto sobre la renta federal por los intereses
que recibe, y eso a la tasa que se le cobra regularmente, no obstante, esos
intereses están eximidos del pago de impuestos sobre la renta tanto estatales
como municipales.
Además, las reglas para la compra de bonos de ahorro difieren algo de las
reglas para la compra de valores del Tesoro. En primer lugar, únicamente
residentes de los Estados Unidos, ciudadanos de los Estados Unidos que viven
fuera del país, y empleados del gobierno de los Estados Unidos pueden ser
titulares de bonos de ahorro. Ese no es el caso con valores del Tesoro, los
cuales pueden ser adquiridos por una persona sin condición de ciudadanía,
residencia o empleo. Los bonos de ahorro también pueden ser propiedad
directa de menores de menos de 18 años, mientras que los menores en
general no pueden ser propietarios directos de valores.