Nuestra alma espera a Jehov; Nuestra ayuda y nuestro escudo es l (Salmos 33:20).

Reflexin: Luego de elaborar un plan con Dios para cumplir nuestros objetivos,
viene la parte ms difcil, y es la parte de tomar accin. Tener grandes sueos y
que estos se queden en palabras, papeles o solo deseos en lo ms comn del mundo. A
los seres humanos nos cuesta mucho persistir, tomar accin porque el miedo nos
controla, nos da miedo el fracaso, el qu dirn, nos da miedo arriesgarnos y
preferimos quedarnos paralizados, as tengamos un sabor de frustracin en la boca
pero es que nos da miedo arrancar, salir de la zona de confort, de nuestra zona
conocida, pesa ms el miedo que todos los sueos y deseos que tengamos. En
ocasiones damos ese primer paso, pero apenas vemos alguna dificultad desistimos.
Pero vale la pena quedarnos paralizados por el miedo y que nuestras vidas sigan
hacia el rumbo no deseado? Nos hemos imaginado vivir todos los das de nuestra
vida anhelando alcanzar nuestros sueos pero sin la suficiente fuerza para dar el
primer paso? Pensemos Cuando estemos viejos, podremos decir que hicimos todo lo
que queramos o que no lo hicimos por miedo y ahora ya no hay tiempo? Superar la
barrera del miedo es difcil, pero no imposible. Por eso antes de pretender tomar
accin debemos orar fervientemente a Dios, para que nos llene de fortaleza para no
desfallecer ante las dificultades, para que nos ayude a perfeccionar la paciencia y
la perseverancia en nuestras vidas, para que nos ensee que el camino no ser
fcil, pero tampoco ser imposible de recorrer. Dios no quiere que tengamos una
vida llena de tristezas y amarguras, no quiere que tengamos corazones frustrados y
desmotivados, no vinimos a este mundo para sobrevivir en l, vinimos al mundo para
vivir. Dios nos ha prometido que cumplir las peticiones de nuestro corazn,
confiemos en el Seor, Por qu nos da miedo arriesgarnos? Acaso no tenemos un
Dios Poderoso que quiere ayudarnos y nos alienta a esforzarnos? Tenemos una sola
vida, no esperemos a ser viejos para preguntarnos qu hubiera pasado si? Nuestro
Padre puede reorganizar nuestros planes y acomodarnos la estrategia pero a la final
nos cumplir. l siempre quiere nuestro bienestar, confiemos en el Seor y
aprendamos a ser pacientes, disciplinados y perseverantes. Dios te Bendiga.