c

c



 

La ciencia realmente es algo que causa mucha curiosidad por parte de

los niños estudiantes, nosotros funcionamos como niños exploradores,
en donde por lo general tratamos de entender nuestro entorno, algunas
veces observamos detenidamente los acontecimientos y objetos que
constantemente nos rodean, hasta que algún día llegamos a una
conclusión de los que fue ver y vivir estos eventos y accidentes.

Sabemos que las verdades absolutas no existen, que todo está en un

constante cambio, al parecer el mismo universo evoluciona para
encontrar su propia perfección, y así a su vez toda la vida que se
encuentra dentro de él parece hacer lo mismo.

Muchas veces, cuando por fin llegamos a una conclusión, luego de

pensar, analizar y observar, por un tiempo bastante considerable, no es
raro ver y sentir días, meses o tal vez años después, que nuestras
concepciones y nociones que en un principio dimos por hechas, cambien
de repente, esto es lo que yo llamaría paradigma personal no aprobado.
A lo que se le llamaría paradigma, según Kuhn en su libro ³Las
estructuras de las revoluciones científicas´ son a las concepciones y
métodos o patrones aceptados por una comunidad científica, en este
caso el nuestro, nuestra concepción, que indirectamente será controlado
por el paradigma vigente en el momento de crearlo, (pues este
paradigma nos hará pensar de determinada manera) en un principio no
tendrá la aprobación de determinada comunidad científica, hasta que
presentemos por medio de métodos científicos y guiados por el mismo
paradigma que rige los métodos de investigación, las pruebas que
argumenten nuestra particular visión del mundo, del tema que
queremos tratar.

Los paradigmas que han recorrido la historia de la humanidad, han

cambiado con el paso de tiempo, de manera fantasmagórica y fugaz,
muchas veces ni la sociedad sintió su cambio, aunque si los utiliza y los
vive. Las revoluciones científicas que se han apoderado de la ciencia,
causaron cambios magnos en nuestro ambiente, en la manera de cómo
pensamos y de cómo actuamos, en definitiva han transformado la vida
en que vivimos.

Cada vez que surge un nuevo paradigma, cada vez que surge una nueva
percepción, cada vez, cambia el mundo. ³Antes veía un planeta, hoy veo
un satélite´, frase de Copérnico, que infiere un cambio de verdades, en
donde indirectamente está reconociendo, que sus conocimientos
anteriores estaban equivocados y eran diferentes a los que poseía en el
momento de pronunciar dicho enunciado, en esta frase Copérnico hace
alusión a luna.

Gracias a Dios, los paradigmas son incompletos, aunque a primera vista

y presentación no lo parece, pero después, cuando otro intrépido llegue
a cuestionar lo obsoleto, podremos deleitar un cambio, una revolución,
que ineludiblemente expandirán nuestras fronteras y la manera de ver
al mundo, y con ello una nueva sociedad; Es precisamente es aquí a
donde quiero llegar, a la responsabilidad social que tiene los
paradigmas, al peso que cargan en los hombros, a los posición de estar
entre la espada y la pared, entre la transformación del mundo para
³bien´ o a negar una verdad que posiblemente pueda lastimar, a esta
especie tan débil y delicada, como somos nosotros los seres humanos.

La concepción que se tenia del derroche de materiales y gasto excesivo

lastimó el medio ambiente en que nos encontramos, y ahora parece ser,
que corremos tras paradigmas ecológicos, que ayuden a nuestro
moribundo planeta. Los paradigmas evolucionan, dependiendo del
contexto histórico en el que nos encontremos, y nosotros estamos frente
al abismo de una hecatombe ambiental.

Por ello la importancia de conocer la historia de los paradigmas, en el

que hacer del maestro. Esto permitirá comprender la ciencia, su
evolución y su método. Podremos entender culturas antiguas y conocer
las consecuencias que esta tuvo en nuestro actual modo de vida, y como
esto afecta esta transformación constante al estudiante con quien
tratamos. Por ello la importancia de elegir a los paradigmas de
investigación en el aula, que cumplan con las características de ser
flexibles.

Mañana todo cambiara, la verdad no sé si para bien o para mal, todo

depende de nuestra capacidad de conciencia y de nuestro verdadero y
sincero sentimiento de querer mejor, este regalo tan valioso, que nos
dio nuestro amoroso padre Dios.

Oscar David Rojas Aguilar

PFC Escuela Normal Superior ³San Pedro Alejandrino´

Marzo de 2010

A.M.D.G.