Está en la página 1de 50
EMV ANANTH RINT Ce ESTUDIOS ETNOGRAFICOS PO Ce CCM Lol ae eC LCA EST Lac oe b Douglas, Bohannan, Murphy, y Steward Prologados por Jestis Contreras Compilados por J. R. Llobera SUBSISTENCIA DE LOS BOSQUIMANOS !KUNG: ANALISIS DE INPUT-OUTPUT ** I Inrronucci6n Este arfculo examina las bases ecol6gicas de un sistema econdmico de caza y recoleccién mediante un andlisis de input-output del trabajo y el consumo. El primer objetivo de este cjercicio es esborar Ia estrategia de subsistencia que permite a los bosquimanos ‘kung, disponiendo tan s6lo de Ia tecnologia més simple, vivir bien en el riguroso medio-ambien- © te del desierto de Kalahari. El segundo objetivo es mostrar que 1os bos- quimanos presentan una forma clemental de vida econémica. Y el tercer ‘objetivo es srazar, desde el punto de partida de los primates, el otigen y fevolucién de las relaciones energéticas humanas, La metcdologla que he utilizado es una adaptacién de Jos modelos transaccionsles de la economia de input-output (Leontief 1966) y de Ia energética exol6gica (Gates 1962; Kleiber 1961). Desde el principio debe Ihacerse uni distincién esencial entre estas dos perspectivas. Los ecé Jogos roman como unidad de estudio una especie que tiene relaciones 2, La investigacién de campo sobre los hosquimanos (aposto de 1963 a enero 1965) fue generosamente costeada por una becs de la U. S. National Science Foun 8 tinaladh «Studies in the Evolution of Human Behavior». A Irven DeVore, principal investigador de este proyecto debo especial agradecimiento por su infatigne ayuda y buenos consejos. Las primerss versiones de este artiulo fueron presen. fen le Conferencia de Ecologia Cultural, Ottawa, agosto de 1966, yen el se ario universitario sabre Sistemas Ecofépicos y Evolucién Caltural de ta Univer. ide Columbia, enero de 1967. Por sus crtces constructivas estoy en denda eon: Bates, Matio Bick, David Damas, Henry Harpending, Marvin Harts, June Helm, lone Howell Lex, G.P. Murdock, Rober: Murphy, Robert Netog, Roy Rappaport 'H, S. Smithers, Louise Sweet, A. P. Vayda y E. Z. Vost. PEESES a 35 Be mantiene gracias a la energla que se absorbe en el curso de las actividades tendentes a conseguir comida para sus miembros. En este caso, el centro se sitda en los intercambios teficos interespecies (Rappaport: 1967, pp. 18 419). Los economistas, por el contrario, se centran en las relaciones de in- tercambio dentro de una sola especie. La unidad productiva, como una industria en el sistema econémico norteamericano, se mantiene mediante los inputs de ottas unidades productivas, y a su vez destina sus outputs a otras tunidades similares o al sector de Ia del sistema econémico (Leontief 1966, pp. 14-20). Consideradas ecolégicamente, estas transaccio. res pueden entenderse como una forma altamente evolucionada del inter- cambio intraespecie. ‘A primera vista, Ia conexién entre, por ejemplo, las relaciones entre el predador y In presa en la sabana africana y las relaciones entre las unida- des industrisles del sistema econémico notteamericano parecen demasiado remotas pata que merezca la pena examinetlas. Sin embargo, esta conexién se catga de significaci6n cuando se considera en tétminos evolutivos. Antes que nada, una poblacién humana, como cualquier poblacién. animal, tiene que gastar energfa en forma de trabajo para incorporar energia a través del consumo. En este aspecto, Ia energética se aplica con igual raz6n al estudio del hombre que al estudio de otros animales. No obstante, en un aspecto importante, las relaciones energéticas hu- mants son tinicas entre todos los animales superiores, Mientras que todos Jos organismos vertebrados adultos no-humanos constituyen una unidad de subsistencia autosuficente, un gran porcentaje del gasto de energia del hombre se dedica a alimentar a otros, y un gran porcentaje del consumo individual consiste en. alimentos producidos por otros. Ast que, para los Fhumanos, la unidad minima de subsistencia auténoma supone por lo menos tun grupo social, tal como Ja familia 0 Ia cbanda», y en la mayor parte de Jos sistemas cconémicos implica a cientos de millones de personas. Este he- ho central del consumo cooperativo ha sido denominado «divisién del tz2- Bajo ¢ «interdependencia econémica», y el estudio de las ttansacciones ¥ asignaciones generadas de esta forma constituye In base de la ciencia eco- ‘némica. Sélo en el caso del hombre estos intercambios iniraespecie se ban vuelto extraordinariamente ubicuos y complejos, hasta tal punto que, en realidad, los damos por supuestos. Sin embargo, esta forma de intercam- bio tréfico es precisamente el lugar donde Ia adaptacién animal y Ia adapta- cién humana divergen por primera vez. Y éste es el punto en que el estu- dio enérgetico y Ia economia convergen. En términos evolutivos, el origen de Jo que lamamos el sistema eco némico es un fendmeno relativamente recientc. Aparece en el pleistoceno, probsblemente hace menos de dos millones de afios, cuando los primeros hombres comenzaron a reunit los recursos y a partir de aquel momento rompieron In sutosuficiencia individual de los animales. Habirualmente se supone que lis mujeres fueron los primeros ° « 1, Dobe—aveisi OR aa at aS ae 2 Dobe—womi//eve 5 72 6 5 1 % 12 14 462 3) lange bo 160 95561 Me sea 4 Bate—bome 3B Oo 30 Soa. .490 itz ana 5, BatoLiceko 1) 3.0004 01 ee a © 6 tabi—Kambara 3350100 9 3 4 WO TF tgcee—iise PTO sr ood Aaa, eal B Igose—ilay 060140 0 1 909 % lgoeKonguods 93 405 7 0 9 1 8 579 fai/ai—/ nla 12403 40 1 dna oem sifci— aba 12.1) Qt 23a eene fsifti—romawn 4 9:1 3:10 2 8 1 0S 5. fafa 2 5a reine ee DM. fijsi—romer 4 62 6 8 1 7 4 8 oul ca cimpancnios 29 “72-9 46 «80 12 248 12% 61% * Divsiones de edad: j6venes, 0-15 afos adultos, 1659 aos ancianos, + 60 afos ** ectivos Dependientes ‘adultos jvenes y ancianos CCuudro TI. Censo de la zona del Dobe pot unidades exstemtes ottos grupos Mujeres Totales ‘#20. ¥ ANON Varnes “Mla Residentes que viven com lor banties existen 21 grupos, M2729 38 1B Tih Abternontes existen 6 grupos OSS Ue Emigrastes : qxisten 3 grupos 107 0 6 ‘Tota Ts, mb y Ue 3448 2 27 64 2 ‘Total general de poblacisn 6 120 1 7 14 1 425) a ‘pamentos, es posible utilizar los datos del censo para calcular el porcen. “Trecho de cue Ia porosidad de Ja arena es tan grande que Ja lnvia xépida- taje de productores de alimentos y el porcentaje de personas dependientes. cs absorbida y es minima la cantidad que corre por la Los efectivos comprenden el 61,3 por ciento (152 de 248) del total de Is jsamicntos permanentes sélo existen donde han quedado al descubierto poblacién de los campamentos; en otras palabras, cada tres individuos vt “fos estratos ealizos subyacentes, Tks aportan la subsistencia de dos dependientes. Lo sotprendente es la am. Debido a estos factores del terreno, la distribucién de las fuentes de plia vatiacién del porcentaje de individuos sles entre los distintos cam- ‘agua es, con gran ventaja, el determinante ecolégico més importante de pamentos. En el campamento N° 11 (Cuadro 1), por ejemplo, tres indi- Ia subsistencia de los bosquimanos. La disponibilidad de alimentos vege- viduos ditiles se mantienen a si mismos y a seis dependientes (33,3 por tales tiene una importancia secundaria, y el mimero y Ia distribucién de ciento de individuos ‘iiles), mientras que en el campamento N° 8, diez fos animales de caza tiene escasa importancia. Puesto que los campamentos de los once miembros (90,9 por ciento) son iitiles. Estas variaciones eren osquimanos, por necesidad, estén pegados a las fuentes de agua, sdlo ‘més aparentes que reales, no obstante, puesto que los grupos estaban pueden exslotar aquellos alimentos vegetales situades a una distancia ra onstantemente cambiando de composicién y el resultado neto era crear gonable 2 rie de estas fuentes, Los recursos alimenticios situados mis allé grupos de trabajo en que Ia relacién entre individuos dtiles y dependientes de una distancia a pie razonable, rara vez se explotan. s€ aproximara a la media La vids de los campamentos que rodcan los ocho embalses permanen- ‘Ademds, estos datos muestran una proporcién entre los sexos favorable tes eparecen como puntos negros en Ia Figura 1. Durante los siete meses de forma poco habitual a las mujeres. En cl total de la poblacién, la pro- | sec0s del afio, desde abril hasta octubre, estos poz0s eran las tinicas fuentes pporcién entre los sexos es de ochenta y cuatro hombres por cien mujeres dde agua permanentes y todos los campamentos bosquimanos se: localizaban a proporcién segin los grupos de edad es: dentro de an citculo de una milla de radio alrededor de los pozos, Durante “fas Hluvias de verano (noviembre-marzo) aparecian embalses estacionarios joke 86 hombres / 100 mujeres © de agua en otros lugares y virtualmente todos los bosquimanos se iban @ ‘Adultos 83 hombres / 100 mujeres Ancianos 80 hombres / 100. mujeres Estos datos seiialan un mayor indice de mortalidad de los varones de todos los grupos de edad; aungue es posible que la proporcién entre los sex0s sca andmala cn los nacimientos, dando lugar 2 un exteso inicial de ‘mujeres sobre hombres que nazcan con vida, Otra posible explicacién con- siste en la préctica del infanticidio de los varones. Sin embargo, Ia inci dencia global del infanticidio (asf como del invalidiidio y el senilicdio) es tan pequefia, que es improbable que esta préctica por sf sola pueda explicar a desigual proporcién sexual del grupo inmaduro. IV PAUTAS DE SUBSISTENCIA ESTACIONALES El desierto de Kalahari septenttional se caracteriza por un verano ct Turoso con una estacién lluviosa de cinco meses, de noviembre a maiz, tun invierno frio y seco de abril a agosto, y une primavera calurosa y seca de septiembre a octubre. Durante ls primavera y el verano la temperatura diurne oscila entre un minimo de 60° F y un méximo de 100° F, regis- trindose a la sombra temperaturas de hasta 108° F. En invierno, la osci- Jacién diuma es entre un m{nimo de 30° F a un méximo de 78° F. Las precipitaciones annales oscilan entre seis y diez. pulgadas. El terreno arenoso y suelto sostiene una sorprendente abundancia de vegetacién, a pesar del 2 Figs 1 Inns de a wilacn de a cere ey fn. de distancia a los pozos permanentes. i B La necesidad de agua potable definia esttictamente Jas zonas que Ios individuos podian explotar para obtener alimentos, En la Figura 1 se se- fialan tres divisiones: 1) Los circulos sombreados cubren las zonas que se encuentran a un dia de camino, es decir, dentro de un radio de seis mi- Tas, de los pozos permanentes. Esta zona, de unas 600 millas cuadradas, sostiene a los 248 bosquimanos de los campamentos durante la mitad del afio. Por tanto, la densidad efectiva de In poblacién durante la estacién seca cs de 42/100 millas cuadradss, 2) Los circulos no sombreados compren. den Jas 400 millas cuadradas adicionales situadas dentro de un radio de seis milles de los grandes pozos estacionarios estivales. Estas zonas sos nen ala mayor parte de Ia poblacién residente durante la otra mitad del sho. 3) Por tiltimo, las lineas de puntos abarcan todas les zonas situadas dentro de un radio de veinte millas de las aguas permanentes, No se ob- servé que ningiin bosquimano acampase o recclectase fuera de esta linea de puntos, y de hecho las demés zones definidas de esta forma rara vez tran utilizadss por los bosquimanos. Por tanto, alrededor de 1000 millas cuadradas bastaban pare sostener a toda la poblacién, ademés de a los vi- sitantes, con una densidad efectiva de 25 personas por 100 millas cuadra- das, es decir, de cuatto millas cuadradas por petsona. El Cuadro TIT muestra el verdadero ndmero de residentes junto a cada ‘pozo durente la estacién seca de 1964. Dos de los pozos, el Ixabe y el Mabopa, no tienen ningtin campamento independiente de residentes. Los ‘otros seis pozos sostuvieron a los 248 bosquimanos de los campamentos. a poblacién media permanente por pozo fue de cuarenta y ocho personas y le oscilacién entre un minimo de dieciséis en !angwa y un maximo de noventa y cuatro en /ai/ai. Estas diferencias de la poblacién estable pue- den reflejar diferencias en la densidad de alimentos, Es probable que los noventa y cuatro residentes en /ai/ai cuvieran mis comida més cerca de ‘Gusdro TIT. Gifs y distibucién de los bosquimanos y bantées residentes por los pozos de agua ablacién Node de ler Otros Total Nombre del_pozo * exmpamentos campamentos hosquimanot hquimanos antler Dobe 2 37 Bh 7 ee fangwa 1 16 B 8 & Bure 2 30 2 2 a lui 1 19 = 19 6 ‘pose 5 2 9 4 18 Bila 5 4 B 107 a ‘abe ps 8 8 2 Mahopa = & 3B B B Toles 4 248 8 336 340 = Para la localizacién, véase Figura 1 “4 que en el pozo de !angwa, con sélo diecistis residentes, Dobe, con una ‘poblacién estable de treinta y siete, era el més préximo a la medi, y fue | sometido a un intenso examen sobre la relacién entre trabajo por Ia. sub- © sistencia y consumo de alimentos El campamento sirve de base a sus miembros, Todas las mafianas al | gunos individuos salen » recoger alimentos vegetales y/o a cazar_ani Tales, y todas las tardes los trabajadores vuelven al campamento y reénen Jos recursos recogidos con los de todos los demés y con los de los “bros que se quedaron. La obtencién de alimentos no es una actividad coo- “perativa, Los recolectores salen en grupos de dos o tres y cada mujer © tecoge alimentos veactales por su cuenta, Los cazadores suelen operar indi. ¥idualmente © por parejas, y cl éxito de la caza depende en gran medida de Is habilidad personal pata el rastreo y del entusissmo de'los perros de caza; no existen pruebas de que el esfuerz0 coordinado produzca més fearne que cl esfuerz0 individual. INo obstante, Ia cooperacién se pone claramente de manifiesto en ef onsumo de alimentos. No s6lo retinen las familias la produccién del dia, sino que todo el campamento —lo mismo los residentes que los invitados— omparten 2 partes iguales la cantided total de comida disponible, La co- ida de la tarde de todas las familias se compone de partes de los slic | entos de todas las demis familias residentes. Los alimentos se reparten f@rudos 0 bien son preparados por quien los recoge, y luego repartidos. Existe una constant circulacién de nueces, bayas, raices y melones de un | fiego familiar a otro hasta que todos los residentes han recibido una (cf. Marshall 1961), A Je mafana siguiente, una combina- 1 de aprovisionadores sale del campamento y, cuando vuelven al final del dia, se tepite la distribucién de comida. Excepto en el ctso "de un golpe de suerte, como cézar un gran ungulado, Ia comida rara vez fale de los mites del campamento, No obstante, la gente se traslada con cia de un campamento a otro. Por tanto, los limites del campa- Mento pueden considerarse determinados por los limites del grupo que time cooperativamente; y el tamafo de la unidad de consumo depen- er del nximero de personas presentes un dia dedo, : recursos alimenticios de la zona del Dobe son a la vez vatiados | Y sbundantes. Contabilicé mas de 200 especies de plantas y 220 de anima- Be Seed ee J begs Ue 1963, es 8121 © tas, ochenta y cinco especies veyetales y cuarenta y cuatro especies “Blimules estan clasifcadas por los bosquimanos. como comestbles, El Los éeterminantes ccolégicos y demogriicos de la estractara te ss y demog: del grupo 45 ‘alimento bésico es la mez mangongo (mangetti mangetti), Ricinodendron rautanenii Schinz, ella sola constituye la mitad 0 dos tercios del peso de Ja dicta total de vegetales. Esta especie era tan abundante, que millones de nucces caian al suelo todos los aiios para quien quisiera recogerlas. La ‘energie que ptopotciona la came de Ja muez es realmente grande: 600 cals./ 100 g. (véase seccién VITT) Dé Jos noventa y cuatro animales consideridos comestibles, s6lo diez especies de mamiferos eran normalmente cazados para comida. Las diex especies, puestas por su orden de importancia en la dieta, son: cerdo s vaje, kudu, diuker, sebeco, ganso, bucéfalo, liebre spring, puercoespin, 00 hormiguero y liebre comin. ‘VI EsrRATEGIA RECOLECTORA Se observ que los bosquimanos eran muy selectives en sus hébitos alimenticios. Demuestran fuertes preferencias y aversiones en cucstién de comidas, y las ochenta y cinco especies vegetales consideradas comestibles estaban claramente clasficadas con respecto a su deseabilidad: gusto, valor nutritivo, abundancia y faclidad de recoleccién, Por regla general, l gente tiende a comer sélo los alimentos més abundantes y sabrosos disponibles, dejando de lado los alimentos menos deseables. Puesto que cl otro factor importante de subsistencia era la distancia entre la comida y el agua, es posible resumir ef principio bisico de le estrategia recolectora bosquiraana fen una tinica frase: En un momento dado, los miembros del campamento brefieren recoger y comer los alimentos descables que estén a la menor distancia de las aguas permanentes. Dado este principio, Ja situacién éptima se presenta cuando el agua permanente y las nueces mangongo estén juntas, y la peor situacién se presenta cuando el agua y las nueces estén muy distantes. Las dinémicas de Ia situacién de subsistencia resultan claras cuando comprendemos que 1 alimento que puede consumirse en una semana esté en funcién de lo ‘que ya se ha comido en las semanas anteriores, TLo caracteristco es que los bosquimanos ocupen un campamento du- ante un petiodo de semanas 0 meses y se coman los recursos que Jo ro- dean, Pot ejemplo, en un campamento en los bosques de nucces (que forman una estrecha franja a lo largo de las crestas de las dunas fijes, véase Figura 1), los miembros agotan las nueces dentro de un radio de tuna milla en Ia primera semana de ocupacién, de dos millas en In segunda semana, y de tres millas en la tercera semana, Conforme pasa el tiempo, Jos miembros del grupo deben alcjarse mis y més para legar hasta las rnueces, y Ia distancia de ida y vuelta en millas es una medida del (dias/hombre de consumo) es 10 x 30 300 eCuintos dias/hombre de trabajo sern necesarios para abastecer 300 ddias/hombre de consumo? Si todo el mundo trabaja todos los dias duran- te el perfodo de treinte dias, entonces: T=10x3 y S$ a iS 300 = 300 aa 300 = 1,00 Puesto que todo el mundo trabaja todos Jos dias con objeto de comer todos los diss, el valor de «S» es la unidad. “Fjemplo 2. Si todo el mundo trabsja dias aleernos, entoncea: L 5 _ 10x15 300 =05 9 El Ejemplo 1, en que todo el mundo trabaja todos Jos dias, no es simplemente un caso hipotético. De hecho, «S = 1,00» es aproximadamen, te Ia situacién de los primates no humanos (y de la mayor parte de los ddemés vertebrados) en la que cada animal (excepto los pequeios lactantes) Fecoge su propia comida todos los dias del sfio. Para los monos y los simios (DeVore 1965) el valor de se aproxima a la unidad y el ver dadero valor de «S» simplemente esté en funeiéa del porcentaje de pe uefios en lactancia de Ja poblacién. El grupo de cinocéfalos, por ejemplo, sale de Ja zona de dormir todas Jas mafienas y pasa el dia moviéndose en grupo por su campo de accida (Hlall y DeVore 1965, p. 70). Aunque se mantiene la cohesiSn espacial del grupo, cada miembro de la banda acta como una unided auténoma de Ssubsistencia, recolectando y comiendo sus propios alimentos micatras se desplaza. No hay intercambio de comida entre los individuos y verdadera. mente se trata de una cxistencia «de Ia mano a la boct». Lo dicho no sig. nifica que Ia subsistencia sea precatia para los cinocéfalos y otros prima. tes, Por el contrario, el animal individuelmente considetado puede empleat tan s6lo unas cuantas horas del dia en recoger alimentos, y esta actividad esté intercalada de periodos de actividades sociales, comportamientos se. ules y competitivos, y de suefio. Lo que importa es que el ritmo del trabajo es tal, que cada individuo debe hacer su trabajo de subsistencia todos los dias de su vida adulta El ritmo de trabajo del grupo humano es radicalmente distinto. Todas las sociedades humanas destinan algunos dias al trabajo y otros al oco, ¥en todas las sociedades humanas unas personas ttabajan més que otras, No obstante, la formulacién «S = 1,00» puede considerarse el punto de ppattida desde el que ha evolucionado el hombre. Compartir la comida for ma parte del puiado de instituciones humanas bisicas que también in cluye la divisiGn del trabajo de subsistencia, Ia base hogatefa, los atilugios lementales de transporte (para llevar alimentos a Ie base para su re- ‘Patto) y el prolongado mantenimiento de los individuos jévenes y ancianos ‘no productives. Estos desartollos representan un paso cufntico en los Aasuntos humanos, pues su presencia significa que 10 todos los individuos tienen que trabajar todos los dias. La consecuencia inmediata de la division del trabajo fue que el valor de 4S», el indice del esfuerzo de subsistencia, debi6 caer de forma radical durante les primeras fases de la evolucién de los homfnidos. Es el mo- ‘mento en que se mantienen tnidas la economia humana y le energética animal. Las consecuencias a largo plazo de Ja divisién del trabajo son multiples, £1 intercambio abre la posibilidad de formas cada vez més com- plejas de acumulacién de excedentes, sea con la finalidad de reparttlos fntte un grupo social més amplio o con Ia finalidad de consumitlos los propios productores en un momento posterior. Por tanto, junto con la evo- Iucién econémica, una de las dimensiones importantes que puede rastreatse 50 iad TW Joma bora en Dobe po de i at conte Nepwent dl Dobe dune pada de 2 ds % Se lod denen, 68 o 8 ade Conse per Dishombe Li de out a. oo oe 7 4 9 2B & ccd oa es i Poa tee eet Fk oe re ee ee ae Be 3 eo ee fe Se ; is ee oe) a ae Agosto 1 ora te 35 8 u 3 + Cada eouade de i clumoa 3 equiva «ta uma de fs entradas de Ia = Tumnas 1 y 2 de su misma fecha. Ta wenn TT (1519 de jlo) presents un ono de eblo etaaent bajo. Eirlipde aes ‘comida el 12 y el 17 de julio, dando eee 8 oe “titan eer demain ee el pss se le Sean Too se be ico oy dice fier de le proposcn Gate ¥ cs la creciente sepatacién entre la produccién de alimentos y su asignacién a Jos consumidotes, Formalmente, el sistema econémico de los bosquimanos !kung corres- ponde a una temprana ctapa de esta tendencia, puesto que la relacién entre la produccién y el consumo de alimentos es inmediata en el espacio y el tiempo, Los alimentos producidos por el grupo local se consumen dentro de sus limites, habitualmente en las cuarenta y.ocho horas posteriores @ su produccién. La principal tarea, pues, consiste en utilizar Ja férmula para el andlisis de la subsistencia de los tung. En cualquier grupo humeno autosuficiente, la magnitud de «S» (el es fuer20 de subsistencia) esté en funcidn de la facilidad 0 dificultad de ali- mentar al grupo, Podrfa suponerse que los cazadores-recolectotes como Jes bosquimanos tkung, con una tecnologia simple, que viven en un me dio ambiente desietto marginal, tienen dificultades para conseguir los ali- mentos; en consecuencia, el indice del esfuerzo de subsistencia deberfa ser relativamente alto, En un grupo de diez personas, por ejemplo, si los seis adultos tienen que trabajar 5/4 dias a la semana para sostenerse « s{ mismos y a los cuatto dependientes, entonces el valor de «S» seria aproximadamente 0°5 Una semana Iaboral de 54 dias no es excesiva desde el punto de vista de los estandards occidenteles industriales. Por otra parce, si la semana Ieboral sélo tuviera tres dias de duracién, entonees el valor de «S» descen- deria_a 0,26. El caleulo del verdadero nivel del esfuerzo de subsistencia es, desde Juego, un problema empirico, El Cuadro IV tabula el diatio laboral de ‘cuatro semanas del campamento del Dobe durante cl perfodo comprendido entre el 6 de julio y el 2 de agosto de 1964. Se elzié este perfodo porque no corresponde a la época més fécil ni a la mas difcil del afio en cuanto a la subsistencia, y abarca un perfodo de transicién de las mejores a las peo- res condiciones. La columna 1 presenta el nidmero de adultes presentes cada dfa en el campamento, y Ia columna 2 el nimero de nifios. La columna 3 tabula el ‘ndmero de diss/hombre de consumo (e incidentalmente documenta. las varlaciones diatias del tamafto de! grupo). La columna 4 da el néimero de Personas que salieron a por comida cada dis, La columna 5 cataloga el output de carne, en libras de porcién eruda comestible, pot dia, El Cusdro V es un resumen, por semanas, de la jornada de trabajo. El tamafio medio del grupo (columna 1) oscila entre 25,6 y 35,6; la ver. dadera suma del personal disponible rara vez era la misma dos dias se- guidos, La semana Iaboral (columna 7) oscila entre 1,2 y 3,2 dias de tra. bajo por adulto. En otras palabras, cada individuo productivo se man- 52 CCuadro V. Resumen de la jornada laboral de Dobe De 8 @ BO mw 2 2 dee $8 oe 2p 488 j 22a a gu 2 2450 a, 7s 'S aug 1 He iM. @ 18) on ead 612 julio) (23.29) T m1 Dw «12 OM (9 jl) in it Se: ae) re (wae le) ety iv eg ee ow, 52 Ost (27 Jao gum) 320) ‘semanas Tous 309 5623046617845 Totals ajustados* BT Bi 6856025 05 + Véave now ** del Cusdro IV. CLAVE: Columoa 1: tamafo medio del grupo = tots! disshombre de consumo T CColumes 7: semana laborsl = nimero de dias Iaborables por semana y por salto: diashombre de trabajo Else 6 mks eel tate soni a phair rie oe ‘dias hombre de consumo (es der en la mana I, el valor de «Se = O21, dei 21 dias de trabajo en 100 das de concomo o Bena t di de trabajo en 5 las de conto) tiene a sf mismo (sea hombre 0 mujer) y a sus dependientes y todavia tiene entre 31% y 5% dias disponibles para otras actividades. El Indice del Esfuerzo de Subsistencia (columna 8) oscila entre 0,11 y 0,31. Por ejemplo, durante la Semana T (6-12 de julio), se invirtieron treinta y siete dias/hombre de trabajo para proporcionar 197 dias/hombre de consumo. El valor $= 0,21 indica veintiin dias de trabajo por cien dias/hombre de consumo; 0 bien que cada dia de trabajo proporcioné comida para el trabajador y otros cuatro dependientes. Durante Ia Semana IV (27 de jue io de agosto), setenta y siete diss/hombre de trabajo. porporcionaron 249 dias/hombre de consumo, con un valor de «S» de 0,31 (31 dias de trabajo parx 100 dias de consumo). El input de trabajo durante In Se- mana IV cs el 50 por ciento mayor que en la Semana J. sta elevaciOn tefleja la cteciente dificultad de conseguit alimentos, aunque, planteado en términos del tiempo real dedicado a Ia bisqueda de comida, la media pasa de dos a tres dias por semana para el trabajador individual. Al calcular el valor medio global de «S» para este perfodo, he omi- 33 tido Ja Semana Il por las razones anotadas (Cuadro IV, : tanto, el Indice del Esfuerzo de Subsistencia ve eed ee quimanos thang es 0,23, Puesto que los mieinbros no productivos suponen £33 % dd a poblacin, ca forma de expresar el Indice es decir que el 5% de ia poblcin eb cl 36 % del empo y o 35% dee gate Dos de las condiciones ecoldgicas anteriotmente sefialadas se represen. tan en ls jornada laboral. La primera semana ocucte en la situacn IL fn que Ia comida es abundante pero sélo se dispone de ocho pozos de agua, La gente hace viajes de ida y vuelta a los bosques de nueces, dands lugar a un valor $ = 0,21. Al llegar a la cuarta semana ha aparecido la situacién II; ya no es posible legar hasta las nueces en el dia, puesta que se ha agotado el espacio comprendido en el radio de siete millas. Le distancia de ida y vuelta a las nucces més prérimas supone més de catorce mills y la curva de «costes» de las nucces ha hecho una subida brosca (véase Figura 2). El mayor valor de «S» (0,31) reflea un notable incre mento de los viajes que incluyen cid, iento de los vijes que inclayen perocacén pare llegar los bosques VII Inpur-ourrur: sivenes caxénicos ete a ee cee Boel nau ea re ee tease ea Passe asl ies mat casi aoe core, ed ite te tm os eal Tos principales constituyentes de la dicta du 1. nueces mangongo 33% 2, cane 37% 3. otros alimentos vegetales 30%, 100 % Darante el tiempo del trabajo de campo no se hiciex foe tes calércas. Resultaba dificil cuantificar In ingestiGn datia de ae de un individuo, puesto que se consumfan durante un petiodo de vatias 5. Al caleular cl Indice, sélo he tenido el trabaj i | li, slo he tendo en cet el aso relent dena 4 ccet nli Hl tepo gw te emia cy mena ge enor os bili, apc oto de pepsi emi Ne eae al calcular las necesidades caléricas (seccién VIII), he incluic us energlt ‘que se gasta en tales actividades. a uae 4 ‘entte el final de la tarde y la noche, y constaban de pequefias por- ‘de las provisiones de las distintas familias. Sin embargo, como Jos Glimentos se reparten equitativamente por todo el campamento, era posible “Galcular aproximadamente el: consumo per capita midiendo el peso total Ge la comida entrada al campamento y dividiéndolo por el nimero de per fonas participentes. Una cifra neta de entrada per capita se calculé dedu- iendo los velores de los desperdicios (trozos incomestibles, huesos, cés- ‘caras, etc.) y pérdidas en las operaciones de cocina, Sigue una descripcién de los métodos utilizados y de los resultados obtenidos. 4, La mez mangongo, que constituye el slimento basico, es especial. ‘mente apropiada para este tipo de anilisis; es facil de contar y de pesar ¥ se sabe con exactitud el porcentaje comestible, La nuez consta de una ‘efscata exterior dura y una cfscara interior blanda (ambas no comestibles) y una semille de carne de nuez comestible. Toda la nuez pesa 5,0 g. y la fame comesiible supone el 14% del peso total, o sea 0,7 g. (Anon. 1917; observaciones sobre el terreno, del autor). Un kilogramo contiene aproximadamente unss 200 nueces, Cada Kilo- jgramo de nucces enteras rinde 140 g. de carne de nuez. Pesé a diario la farga total de nueces trafdas por una muestra de mujeres. La recolecci6n diatia, por una mujer, de nucces enteras pesaba entre 10 y 15 kg, aunque se registreron cargas de nueces enteras de hasta 20 kg. Cada carga contenia tuna media de 2.500 nueces enteras, asi como pequefias cantidades de otros, ‘alimentos, Puesto que la porcién comestible de la nue entera es el 14 %, ada 12,5 kg. de carga de nueces enteras contenfa 1.750 kg. de carne de ‘muez.comestble. También se hicieron anotaciones del mimero de nueces cascadas y ‘comidas por los individuos y por las familias en un solo dia, Las mujeres asin cierta cantidad de nueces en los carbones del hogar durante unos mic ‘mutos antes de comerlas. Las nueces son iguelmente sabtosas crudas, pero fl breve toitado sirve para suprimir algo del jugo y facilita romper Ja dura céscara exterior. Luego se abre Ia nuez rompiéndola, utilizando como imattillo un guijarro calizo del tamafio de! pufio y un blogue calizo plano algo mayor 1 modo de yunque. La céscara es extremadamente dura, 1o que explica las notables propiedades de conservaciGn de las mangongo. Las Inueces son perfectamente comestibles después de levar un afio caldas en el suelo, | El ritmo de cascar y pelar se hace a una media de cinco o seis mueces Por minuto y varia poco de una mujer a otra. En una hora, tuna mujer abre y pela unas 300-360 nueces, 0 sea una octava parte de une cage, y une hora de pelar proporciona 210-252 g. de mueces comestibles. Par: tiendo de les anotaciones sobre el ritmo del pelado y el tiempo que se dedicaba a pelar, y a partir de los pesos totales de las nueces trafdas al ‘campamento, se observ5 que les bosquimanos comfsn alrededor de 300 ‘ueces por persona y dia, lo que significa unos 210 g. de came de nuez, 55 De este modo, una carga de nueces enteras alimentaria a una familia de cuatro personas durante dos dias, quedando un pequefio remanente para el tercer dia. Los componentes de la carne de nuez han sido determinados (Web- met 1931, vol. 2, p. 678)¢ y puede calcularse su rendimiento nuttitivo (Oser 1965: 1336)." El rendimiento es de 600 (+ 1 %) calotias por 100 g, de parte comestible, y el rendimiento proteinica es de 27 g. por 100 g. El valor calérico de las mangongo es muy comparable con el de especies cul- tivadas de nueces, como las almendras (600 calorias por 100g.) las nue- ces del Brasil (653) y los cacahuetes (583). Sin embergo, en protefnas ex- cede los niveles de estas nueces (27 % en la mangongo versus una media del 19 % en las otras especies). 2, Se efectuaron contajes completos de todos los animales de caza cobrados y de las cantidades de carne traidas al campamento del Dobe du- ante el perfodo de veintiocho d{as de jornada laboral. Dieciocho animales, totalizando 206 kg. de carne comestible, fueron cobrados y consumidos por los miembros de! campamento.* Dividiendo esta cifra por los 866 dias/ hhombre de consumo (véase anteriormente), resulta unc asignaciOn di de 256 g. de carne sin guisar por persona. Incluso concediendo un 10 % de pérdidas en las operaciones de cocina, el rendimiento calérico de esta asignacién se valoré en unas 690 calorfas (de acuerdo con un indice de 300 calorfas por 100 g. cocidos). El contenido de proteinas se calculé en un 15 % del peso, o sea en 34,5 g. por porcién guisada. 3. La restante porcién vegetal de Ia dieta consistia en pequefias cat- tidades de veinte especies de rafces, melones, gomas, bulbos y frutos se- 0s. No se hicieron mediciones celéricas sobre estos alimentos y su ren- Aimiento cal6tico global se estimé en 100 calorfas por cada 100 g. El endimiento de proteines es omisible y se valoté en un 1 por cient. En el Cuadro VI, las tres principales fuentes de slimentos (carne, nue- ces mangongo y alimentos vegetales) se ponen juntas con objeto de mos- trar la aportacién de cada una de ellas a la dieta de los bosquimanos y para poder deducir Ia entrada daria per cepa de calostas y proteinas. Los resultados muestran una asignacién diaria de 2.140 calorias y 93,1 gramos de proteinas por persona. Debido al alto valor proteinico de las mangon- go, el consumo de proteinas es desacostumbradamente alto, incluso pata Jos esténdars americanos. Tampoco era de esperar que un pueblo de ca- 6 Grasas 59,496, proteinas 27%, fbras crudes, 59%, ceniza 3,02 7, Se utilizaron, modificadas, las férmulas de Arwatcr que utiliza la RAO, be scat en Tos siguientes valores: 837 cal/g. de grase, 34 cal/e, de proveina, ‘8, Lae proporciones comesible/desperdicios fueron calculadas por R. HL. S. Smi- ther para diversos mamiferes 56 Guadro VI. Nivees calércos y proteinicos de ta dieta de Jos bosquimanos kung, julioagosto de 1964 eM Soo ene Porcentaje Consumo per capita Calorias Case de me ee ‘ de comtribucién a Peso en Protelngs en por persona oa 1a diew ramos ramos y dla Came 37% 230 M3 60 Nusess mangons> 3% 210 567 1260 Otros vegetales 30% 190 19, 190 Total, de todos fos orfgenes 100% 60 Da 2140 zadores obtusiera una proporcién tan alta de proteinas de vegetales en ngar de animales. Pr aSaisfecr el coasume de 2.140 calories las cigencis enenpsica él grupo? Los bosquimanos son de pequefia estatura y poco peso. La altura media de los varones adultos es de 157 centimetros y el peso de unos 46 kg., y en las mujeres de 147 centimetros y 41 kg, (Bronte Stewart et dl, 1960). Las necesidades del metabolismo basal de los individuos de tal altura y peso se calculen en 1.400 calorias por dia para los hombres ¥ 1.100 eslorias por dia para las mujeres (Taylor y Pye 1965, pp. 45-48). Pera caleular las necesidades cal6ricas diarias del grupo estudiado como ‘conjunto, es necesario tomar un peso medio de acuerdo con el poreen- taje de cada clase de edad-sexo de Ia poblaci6n. Puesto que 1a poblacién fonsta de un 30 por ciento de hombres adultos, 35 por ciento de mujeres adultas y 35 por ciento de nifios menores de quince afios (véase Cuadros Ty Tl), la media de necesidades energéticas diatias de un grupo de treinta ¥ twa personas es de 61.300 calorias y, para cada miembro del grupo, de tunas 1.975 calorias. El produsto per capita de alimentos durante el periodo estudiado se ‘alculé en unas 2.140 calorias (Guadro IV) y, por tanto, resulta claro ‘que el output de alimentos excede las necesidades energéticas en casi 165 ‘ellotfas por petsona y dia La conclusién que puede sacatse es que los osquimanos no subsisten por debsjo de los estandars al borde de Ja indi- Sencia, como generalmente se ha supuesto.? los bosquimanes, entonces hay que postular un input laboral todavia infetior os aos de precipitacones medias o més alts. 37

También podría gustarte