Está en la página 1de 1

7 de septiembre de 2015

QUE ALGUIEN MUEVA ESA SANDA!


En el bosque vivan cientos de pequeos insectos y bichitos. Era un simple bosque
abandonado, pero resultaba un lugar perfecto para vivir, donde slo haba que tener cuidado
de no maltratar las flores. Por eso los escarabajos, que eran los ms fuertes, eran los
encargados de vigilar que nada aplastara las flores.
Pero una maana, las flores amanecieron aplastadas por una enorme sanda Qu tragedia!
Era una fruta tan grande que ni el escarabajo ms grande, ni los cinco escarabajos ms
grandes, ni siquiera todos los escarabajos juntos, pudieron apartarla de all.
Los insectos ms fuertes pusieron toda su energa en la tarea, pero no consiguieron nada:
los escarabajos queran que todos los bichitos empujaran muy fuerte a la sanda. Los
insectos ms listos aplicaron su inteligencia a encontrar soluciones, y tampoco tuvieron
xito. Finalmente, otros bichos opinaban que mejor deban huir del bosque en vez de mover
la sanda.
Y en medio de tantas penas, a una pequea hormiga extranjera se le ocurri cmo llevarse
la sanda.
Hicieron falta muchos insectos para calmar a los escarabajos e impedir que aplastaran a la
chistosa hormiguita. Pero result que la hormiga no estaba bromeando, porque al final del
da apareci acompaada por miles y miles de compaeras. Y en perfecto orden, cada
hormiguita y cada bichito se acercaron a la sanda, mordieron su trocito, y se lo llevaron por
donde haba venido.
- Pero si as no avanzas nada! - le dijo un saltamontes a una hormiga que par un segundo
a descansar -. La sanda est igual ahora que antes de tomaras tu trocito.
- Segurrrro? Humm...- respondi con un extrao acento, como si nunca lo hubiera
pensado. Y, sin darle ms importancia, retom su marcha.
Pero algo debi hacer aquel trocito, porque slo unos das despus no quedaba ni rastro de
la gran sanda. Y desde entonces, los bichitos e insectos del bosque aprendieron que era
mejor ponerse de acuerdo entre todos cuando haya problemas.

También podría gustarte