Está en la página 1de 10

CORRUPCIÓN Y CONTROL EN

LA ORGANIZACIÓN POLICIAL PREVENTIVA

MAURICIO INTRODUCCIÓN
LÓPEZ ALVARADO*
Una de las percepciones sociales más cómunes con respecto a la institución
policial preventiva en México —y en general en toda Latinoamérica— es que los
individuos que en ellos laboran ejercen de manera sistemática la corrupción.1
Sin embargo, la corrupción en la organización policial preventiva puede ser más
o menos generalizados dependiendo de los contextos locales del grado de tole-
rancia que la ciudadanía muestra con respecto a la corrupción y del control que
la propia institución e instancias civiles y gubernamentales ejercen sobre el
ejercicio de la discrecionalidad de los elementos policiacos.
El grado de relación que los policías mantienen con las comunidades donde
laboran puede jugar un papel importante para controlar los actos corruptos de
los elementos policiales. El sentido de pertenencia y de servicio a la comuni-
dad, así como la estrecha relación y vigilancia que esta tiene sobre las acciones
de los policías son decisivas en el actuar del elemento policial. Esta es la idea de la
policía comunitaria que en la actualidad se puede observar en varios países
democráticos.2 Pero también puede observarse de manera natural en algunas
ciudades de dimensiones pequeñas donde las autoridades pertenecen a la mis-
ma comunidad. Empero, es más difícil observar en ciudades grandes donde el
policía es un individuo que no es conocido por los habitantes de la comunidad
y su identidad y arraigo es débil. En este sentido, el control sobre la conducta
del policía queda prácticamente en manos institucionales.
Los mecanismos de control institucional en materia de corrupción en los
cuerpos de seguridad preventiva de las ciudades de dimensiones mayores tie-

* Departamento de Estudios Sociourbanos, Universidad de Guadalajara,


mauricioudg@hotmail.com.
1 Esta percepción es alimentada por noticias periodísticas y una gran cantidad de
libros que han denunciado las redes de corrupción en diversos cuerpos policiales
del país, entre otros véase a Artega y López, 1998; Zamarripa, 1993 y Zepeda, 2004.
2 Véase a Rico, 1998.

ACTA REPUBLICANA POLÍTICA Y SOCIEDAD AÑO 6 ■ NÚMERO 6 ■ 2007 47


nen que ver sobre todo con la imple- tenga el cuidado de respetar posicio- el trabajo policial es constante y, por
mentación de un sistema de sancio- nes ganadas, ya sea evitando mover y lo tanto, las oportunidades para ejer-
nes y de recompensas que parten de afectar intereses de ciertos policías que cer la corrupción son amplias.
la vigilancia al agente que ejerce la con el anterior mando habían estable- También debemos entender que los
corrupción a través, sobre todo, de un cido compromisos laborales o ya sea propios policías y sociedad pueden
instancia interna comúnmente deno- negociando privilegios con nuevos su- hacer una diferenciación de grado al
minada Dirección de Asuntos Internos bordinados que pueden y están dis- momento de calificar la corrupción. Es
y Jurídicos. puestos a realizar aquellas tareas común que las corporaciones hagan
En los últimos años prácticamente operativas que requieren habilidades y una distinción entre aquellos actos
en todas las ciudades del país se ha destrezas especiales. La negociación de corruptos que van en contra del siste-
buscado fortalecer el control de la dis- puestos y privilegios puede debilitar o ma normativo, y que por lo tanto con-
crecionalidad de los policías a través fortalecer la autoridad del mando en llevan un riesgo para la institución y
de esta instancia. Su proceder casi turno, pero también la negociación para las personas, y aquellos otros que
siempre es reactivo, pues actúa sólo en puede involucrar cierta tolerancia y representan una ganancia personal que
caso de denuncia y, en este sentido, permisividad para obtener ganancias aparentemente no afecta directamen-
funge más como un mecanismo para extraposicionales al cargo por concep- te a terceros. Entre los policías esto
lidiar con las denuncias ciudadanas y to de corrupción. se conoce como la obtención de bene-
evitar los escándalos públicos. Por otra En este documento quiero exponer ficios “blancos” y “negros”. Los benefi-
parte, aunque su éxito hay que anali- una descripción empírica que me per- cios blancos, por lo general, se obtienen
zarlo en cada caso en particular, se debe mita dar cuenta de las amplias posibi- de los comerciantes formales e infor-
tomar en cuenta que esta instancia está lidades que tienen los subordinados males. La comida, el agua, los refres-
conformada por policías y aunque tie- para negociar la permisividad o tole- cos, los cigarros, las tortas, los helados,
ne la gran ventaja de conocer cuáles rancia de sus mandos inmediatos a los etcétera, es posible consumirlos sin pa-
son las formas y estrategias de corrup- beneficios extraposicionales que de su gar por ellos.
ción de la corporación y de sus ele- cargo pueden llegar a obtener, así como Estos beneficios –al igual que los
mentos, también hay que tomar en las debilidades estructurales que la ins- negros– pueden ser ocasionales o, bien,
cuenta que su acción puede llegar a titución policial preventiva presenta pueden encontrarse regularizados a
ser parcial o, bien, tolerante para con para ejercer un control formal sobre sus través de una “cuota” diaria a los poli-
los elementos denunciados. miembros. cías que patrullan el área donde se
Por esta razón, para Torrente (1998) encuentran los negocios. A los prime-
el control más común y efectivo so- CLASIFICACIÓN BÁSICA ros todos, en cierta medida, tienen ac-
bre el policía es aquel que de manera DE LA CORRUPCIÓN ceso. Se trata en muchos casos de
informal ejerce la autoridad inmediata EN LA ORGANIZACIÓN POLICIAL beneficios entregados con una inten-
superior, porque la misma actividad ción genuina de propina o recompensa
policial privilegia que el mando tenga Para comprender el papel del mando a su labor. A los segundos no todos tie-
plena disposición y vigilancia sobre las en el ejercicio de la corrupción poli- nen acceso, ya que en cierta medida
acciones del subordinado. Sin embar- cial hay que empezar por dar cuenta se requiere un conocimiento y trato
go, esta relación de control se encuen- de que no todos los policías tienen ac- más cercano entre policías y comercian-
tra en constante riesgo de verse ceso a las ganancias por corrupción de tes. Aquí generalmente el beneficio es
fracturada, sobre todo por los cambios la misma manera, pues ellas dependen otorgado por aquella población que
constantes de autoridades policiacas a de las oportunidades que otorgan las requiere seguridad en sus negocios e
partir de la salida y el ingreso de nue- características demográficas, sociales, intenta mantener una relación compro-
vas autoridades municipales. Con cada económicas, culturales y, por supues- metedora con el policía; es en este sen-
cambio existe la fuerte posibilidad de to, delictivas que pueden encontrase tido que se establece la corrupción. El
que el mando operativo en turno sea en una determinada área geográfica negociante espera que ante un posible
destituido y de que el nuevo mando donde se otorga la atención policial. asalto u otra situación de riesgo los
encuentre dificultades para ejercer su En toda ciudad hay zonas relativamente policías actúen con rapidez, decisión
autoridad con aquellos subordinados tranquilas –sobre todo áreas residen- y parcialidad.
con quien el anterior mando había ge- ciales económicamente pudientes–, Aunque toda normatividad institu-
nerado relaciones convenientes para donde la actuación policial es mínima cional prohíbe la aceptación de dinero
ambas partes. Esta posibilidad propi- y otras muy conflictivas con un alto o de bienes por parte de los ciudada-
cia el que un nuevo mando entrante índice de todo tipo de delitos donde, nos, la obtención del dinero blanco no

48 2007 ■ NÚMERO 6 ■ AÑO 6 ACTA REPUBLICANA POLÍTICA Y SOCIEDAD


constituye un acto corrupto para la eficacia en la vigilancia y, por supues- dividuos que hacen de la violación a
mayoría de los policías con la justifi- to, la posición de autoridad que tenga reglamentos o leyes algo cotidiano se
cación de que la población está reco- en la zona con respecto a otros poli- encuentren organizados a tal punto
nociendo una buena labor del elemento cías que laboran en la misma, pues es que, o bien la acción policial en su
y lo “recompensa” por ello. Aunque sea de suponerse que los comerciantes bus- contra, no tenga efectos mayores por
común encontrar comerciantes para quen entregar el beneficio a un poli- encontrarse arropados por un cuerpo
quienes la entrega del beneficio repre- cía con autoridad con la consideración de abogados, litigantes y burocratas co-
senta un pago, por lo común los poli- de que su posición les puede redituar rruptos en el sistema de administra-
cías y, en muchas ocasiones las mismos un mejor trato. ción de justicia, o bien cuenten con la
gobernantes, tienen cuidado en dife- Los beneficios negros, a diferencia protección de mandos policiales supe-
renciar el pago de la recompensa, pues de los blancos, sí son considerados por riores a quienes pagan regularmente
el primero conllevaría una responsabi- la mayoría de policías como actos que por dicha protección. Y en este caso,
lidad normativa al implicar una extor- atentan plenamente contra el servicio ya no estamos ante la obtención de be-
sión o soborno velado; en cambio, el público al cual están obligados. Pero neficios negros ocasionales, sino regu-
segundo comúnmente es interpretada aquí también hay diferencias. Por un lares, y éstos exigen otro tratamiento.
como parte de la relación cordial que lado, tenemos la corrupción ocasional, Los beneficios negros que se obtie-
nace del ciudadano a partir de un re- aquella que se genera a partir del cál- nen de los pagos regulares para no ejer-
conocimiento a la labor del policía. culo de posibilidades de obtener un cer acción alguna contra individuos que
Por otra parte, hay que considerar dinero extra en un momento determi- violan cotidianamente leyes o regla-
que esta relación puede mantenerse nado, sobre todo a través de la intimi- mentos presentan también algunas di-
porque no produce conflictos entre las dación a borrachos, vagos, drogadictos, ferencias. La primera es la que tiene
partes y porque la adhesión a esta prác- parejas de novios que buscan parajes que ver con aquellos individuos que
tica está socialmente generalizada. Las solitarios y en general toda persona que sólo violan disposiciones reglamenta-
gratificaciones o “propinas” se otorgan tenga una actitud “sospechosa” o ima- rias, sobre todo aquellos que venden
a individuos de diversas profesiones gen de pandillero, con la acusación de productos o servicios sin el correspon-
que ofrecen sus servicios: mecánicos, estar violando algún reglamento mu- diente permiso municipal o al margen
repartidores de productos, abogados, nicipal. En estos casos se privilegia el del comercio legal y formal, incluyendo
meseros, oficinistas, entre otros. La soborno porque al ser el ciudadano el a prostitutas(os), vendedores de curas
diferencia estriba en que la gratifica- que solicita la dispensa al reglamento milagrosas, timadores en juegos de
ción a un servidor público es ilegal y a partir de un pago que él mismo esta- azar, y un largo etcétera. Por otro lado,
ataca directamente a las concepciones blece, se minimiza el riesgo de una tenemos los beneficios negros que se
sobre las actitudes de imparcialidad y denuncia a la par que la carga negati- obtienen de la relación corrupta con
de servicio comunitario que deben va moral del hecho corrupto puede, no personas cuya actividad regular está
guardar los servidores públicos. sin la ayuda de un mecanismo mental plenamente tipificada en códigos pe-
Aunque en primera instancia se de cinismo exacerbado, trasladarse al nales, como pueden ser vendedores de
puede considerar que todos los poli- sobornante. En cambio, la extorsión drogas, ladrones, asaltantes, secuestra-
cías tienen acceso a los beneficios blan- al ser exigido y establecido el monto dores, etcétera. Y aquí se hacen nece-
cos regulares, lo cierto es que no todos del pago por el policía puede dejar más sarias otras distinciones entre la
los tiene en la misma medida. Su acce- molestos a los afectados a tal grado que obtención de beneficios negros prove-
so depende en primera instancia de la no se llegue a estar seguro de que los nientes de la delincuencia común o de
zona de vigilancia. El policía que tiene extorsionados levanten una denuncia aquellos que genera la delincuencia or-
la encomienda de vigilar un solo edifi- formal. Por esta razón, la extorsión es ganizada. Ambas relaciones por supues-
cio público o de gobierno comúnmen- practicada sobre todo con aquellos to conllevan para el policía un riesgo
te se encuentra más limitado para individuos que evidentemente violan permanente de perder el empleo, pero
recibir el beneficio que aquel otro que reglamentos o leyes de manera coti- la sanción penal puede ser mayor y
realiza su servicio en una amplia zona diana, ya que el peligro de una queja efectiva en el caso de ser hallado cul-
comercial, aunque aquí también hay formal ante la institución en parte se pable de corromperse con delincuentes
que tomar en cuenta el horario de ser- diluye ante la evidencia y aceptación organizados, por esto es de esperarse
vicio, los recursos materiales que se de culpabilidad y la necesidad que que el beneficio recibido sea mayor
tengan: ya sea el tipo de vehículo para muchas veces ellos tienen de continuar en este último caso. Por otro lado, es
transportarse, radio, armas, así como con la actividad. Sin embargo, en es- de esperarse que el trato con la delin-
buena presencia y trato con la gente; tos casos es muy común que tales in- cuencia común implique un riesgo y

ACTA REPUBLICANA POLÍTICA Y SOCIEDAD AÑO 6 ■ NÚMERO 6 ■ 2007 49


compromiso menor que con la delin- cido con el mando superior en turno, dad pública, como es la época navide-
cuencia organizada, sobre todo porque el cual no puede asegurar el puesto y el ña. En estos casos, la mayoría de poli-
aquellos carecen de la fuerza que dan grado otorgado porque su misma posi- cías cumplen un horario más extenso
las redes sociales y de los recursos su- ción se encuentra expuesta al vaivén al común. En cuanto al interés de te-
ficientes para poder negociar posicio- de los cambios de autoridades que ge- ner un horario u otro también varía de
nes y tratos diferenciados. nera el vaivén político electoral. un individuo a otro. Por ejemplo, para
El poder que puede llegar a tener las personas que realizan otra activi-
la delincuencia organizada para exigir LA NEGOCIACIÓN DEL MANDO PARA dad ajena al trabajo policial o tienen
no tanto que no se actúe contra ellos, LA OBTENCIÓN DE BENEFICIOS un oficio que complementa sus ingre-
sino que se actúe a favor de ellos, es el sos económicos, el horario más atrac-
motivo principal que provoca un fuer- Aunque es muy cierto que los benefi- tivo es el de ocho horas; lo mismo se
te rechazo ante esta práctica por la cios por concepto de corrupción pue- puede decir para las mujeres policías
mayoría de los policías en servicio, den llegar a ser muy preciados por que tienen la necesidad de atender sus
pues, sin duda, un policía que trabaja muchos elementos policiales por la hogares; sin embargo, no lo es para
para una delincuencia –sobre todo para posibilidad que representan para mul- aquella persona que obtiene ganancias
la organizada–, que no escatima recur- tiplicar el sueldo que se percibe, es a través de la corrupción, puesto que
sos ni métodos para llevar adelante su importante tomar en cuenta que no su trabajo es su negocio y entre más
actividad, pone en riesgo físico y la- todos los beneficios que pueden obte- tiempo pase en él, más ganancias se
boral a aquellos policías que no for- ner los policías se encuentran limita- lleva; tampoco lo es para aquellas per-
man parte de la red delictiva. dos al ejercicio de la corrupción. El sonas que desean hacer una carrera en
Sin duda para obtener beneficios de horario de trabajo, como el puesto y la corporación o se encuentran invo-
la delincuencia organizada se requie- grado jerárquico, pueden ser valorados lucradas en redes sociales hegemónicas
ren recursos y protección de autorida- tanto por motivos personales legítimos internas que necesitan alimentar con
des superiores tanto internas como y en concordancia con el sistema nor- una presencia constante. En todos los
externas a la corporación que por su mativo institucional, como por la po- casos hay que tomar en cuenta los pro-
posición puedan manejar y conjurar los sibilidad que tienen de ser convertidos yectos de vida que tiene cada indivi-
riesgos inherentes a la relación, pero en recursos que permitan ganancias duo y la importancia que puede dar a
también se requieren códigos estrictos extraposicionales al cargo. cada ámbito donde se desarrolla. Aho-
de silencio y lealtad, tanto para evitar En general la organización policial ra bien, un policía con mando, oficial
repartir las ganancias como para elu- preventiva debe manejar diferentes o comandante, tendrá una carga labo-
dir las posibles acciones legales a las horarios para cubrir la amplia gama de ral y de horario más extenso que un
que pueden ser acreedores si se descu- funciones y servicios que requiere toda policía de tropa. Ellos son los que tie-
bre su participación en estos delitos. ciudad. Dependiendo del área de tra- nen la zona a su cargo y quienes deben
Por otra parte, no hay que descartar bajo, número de personal y función a rendir cuenta de ella a los directivos;
que a la delincuencia organizada le realizar, hay policías que trabajan sólo por lo tanto, en todo momento deben
puede resultar más efectivo y barato ocho horas diarias, sobre todo aquellos estar disponibles para atender cual-
la protección de elementos policiales que cuidan edificios gubernamentales quier situación o contingencia. Su ho-
o burócratas del sistema de justicia a o realizan tareas técnicas-administra- rario por lo general es de 24 horas de
otros niveles, así como la utilización tivas. Sin embargo, es más común en- trabajo por 24 de descanso, pero es
de recursos, estrategias y métodos contrar el horario de 12 horas de trabajo común que se encuentren trabajando
delictivos que no dependan de policías por 24 de descanso; aunque también mucho más allá del tiempo que corres-
en activo que están sujetos a la obser- puede tener cabida el horario de 24 ponde a su servicio; también que se
vación pública constante. horas de trabajo por 36 de descanso. les llame a sus hogares para acudir a un
Por lo demás, toda obtención de En muchos casos, el horario de trabajo servicio, tener una junta con directi-
beneficios por corrupción –negros o se encuentra determinado por las nece- vos, atender un problema administra-
blancos; ocasionales o regulares– de- sidades del servicio, sobre todo cuando tivo o técnico o estar presentes ante
penden, como ya lo señalé, del puesto no se cuenta con el personal suficien- alguna dificultad extrema.
y grado que tenga el elemento policial te para cubrir la vigilancia de eventos Por otra parte, hay ciertos puestos
en un momento determinado y, como públicos, manifestaciones ciudadanas, y lugares de trabajo que implican más
argumentaré más adelante, tanto el eventos deportivos, elecciones locales, riegos que otros. Aún cuando las colo-
puesto como el grado depende en mu- así como ciertos periodos del año en nias donde existen una gran cantidad
cho de la relación que se haya estable- los que se requiere extremar la seguri- de pandillas o tráfico de drogas y don-

50 2007 ■ NÚMERO 6 ■ AÑO 6 ACTA REPUBLICANA POLÍTICA Y SOCIEDAD


de sectores de la población enfrentan zona, el horario y el puesto, una posi- pérdida de estatus y posición social, pero
abierta y directamente a los policías ción poco destacada puede permitir esto ya es parte de la interacción, no
son el lugar menos deseado para mu- ganancias económicas por concepto de del deseo.
chos elementos, es frecuente encon- corrupción iguales o mayores a las que No es raro encontrar entre sectores
trar policías que les atraiga trabajar en por sueldo recibe un comandante, sin de la sociedad una imagen de la insti-
estas zonas por la constante actividad los constantes conflictos en los que se tución policial que, apoyada a su vez
que permite mantener alejada la ruti- ven envueltos cotidianamente los man- en representaciones en torno a las je-
na y donde el protagonismo por ser dos, sin la necesidad de trabajar hora- rarquías de autoridad al estilo militar
frecuente genera la oportunidad de rios extenuantes y sin enfrentar los tradicional, la concibe como un lugar
hacer un gran número de servicios que riesgos de perder el puesto a cada mo- donde los mecanismos de control y dis-
obliguen a los jefes a fijarse en el des- mento. Por otro lado, muchos subordi- ciplina están bien definidos y donde
empeño de la persona y así obtener nados han interiorizado imágenes en se establece el ejercicio de una autori-
alguna posición de mando en la zona torno a las personas que ocupan alguna dad que no permite interlocutores. Con
o conseguir recompensas de los oficia- jerarquía, y conciben que ellos mismo este supuesto, se hace posible conce-
les, como el otorgamiento de días fran- carecen de habilidades, conocimientos bir que las relaciones entre mandos y
cos en premio a la cantidad y calidad y capacidades para ejercer el mando. subordinados se basan en una domi-
de servicios. Por su parte, para el poli- Sin embargo, para otros policías, el nación férrea de la primeros hacia los
cía corrupto los lugares con una gran mando es muy deseado, no sólo por- segundos y, por lo tanto, que el mar-
actividad son muy preciados, pues las que tienen percepciones y valores en gen de acción para desobedecer una
ocasiones en las que puede obtener torno a la autoridad que se adjudican orden es muy limitado.3
este tipo de ganancias es mayor que a sí mismos, sino también porque asu- Sin embargo, quiero destacar que
en las zonas consideradas tranquilas. men que el mando les permite acumu- los subordinados tienen un margen
Por el contrario, los servicios esta- lar poder. La jerarquía para ellos es amplio de acción para negociar la obe-
blecidos, ya sea en módulos policiales conveniente por el hecho de que con- diencia, sobre todo a partir de los co-
o en instituciones administrativas, el sideran que es fácil convertirla en un nocimientos e interpretación que hacen
patrullaje en zonas residenciales de amplio rango de acciones y relaciones de la actividad policial y del entorno
solvencia económica, la vigilancia en que sabrán aprovechar. El estatus y la en que la institución se desenvuelve.
parques y jardines (sobre todo en aque- posición social pueden incrementarse El que un elemento sea ubicado en
llos ubicados en colonias de clase media y con ello ciertos beneficios simbó- una determinada zona y puesto –lo
o media alta), la vigilancia en plazas licos, económicos, políticos y sociales. cual implica el tener un horario deter-
concurridas y los trabajos administra- Por supuesto, la adquisición de mando minado, ciertos recursos materiales y
tivos y técnicos, son trabajos relativa- puede no acarrear sino dificultades, ciertos ingresos fijos– tiene mucho que
mente tranquilos en comparación con

el patrullaje en zonas de riesgo o el 3 Aunque todo elemento policial operativo se encuentra ubicado en algún lugar de
trabajo en grupos de apoyo, y por es- la jerarquía de autoridad, no todos tienen mando. El mando formal sólo lo poseen
tas características son también valo- los oficiales, los comandantes y los directivos. El resto de los elementos operati-
rados por aquellos policías que intentan vos, que forman el grupo del cuerpo policial, no tienen ningún mando sobre
evitar el riesgo propio de la actividad. elemento alguno. Por lo común se denominan policías de tropa. La estructura de
No todos los policías desean tener mando es piramidal, esto es que el número de directivos es más reducido que el
mando. Para muchos esto implica ma- número de comandantes, los cuales forman un número más pequeño que los
yores responsabilidades, conflictos y oficiales. Estos últimos, también conocidos como encargados de turno o de sec-
carga de trabajo que no compensa el ción, son los que tienen el mando directo sobre los policías de tropa. Dependien-
mayor sueldo que se puede llegar a do de la magnitud de la ciudad y zonas geográficas en que se pueda dividir
recibir; además, para algunos policías operativamente, una organización policiaca puede llegar a tener un oficial por al
corruptos puede implicar también la menos 10 policías de tropa, aunque en organizaciones muy numerosas no llega a
reducción de sus ganancias económi- ser raro que un oficial tenga mando sobre 30 o más policías de tropa. Cada oficial
cas, pues estarían más vigilados tanto puede llegar a tener varios ayudantes, dependiendo de la cantidad de policías de
por autoridades de jerarquía más alta tropa que tenga a su cargo. El oficial a cargo de un grupo de policías de tropa
como por la tropa, quienes pueden es- mantiene contacto estrecho con un solo comandante, quien a su vez rinde cuen-
tar al pendiente de sus acciones ya sea tas a un solo director, por lo común al director operativo, no al director general de
para denunciarlas o para manejarlas la corporación. Esta estructura jerárquica establece una línea de subordinación
como extorsión. Dependiendo de la con una única persona.

ACTA REPUBLICANA POLÍTICA Y SOCIEDAD AÑO 6 ■ NÚMERO 6 ■ 2007 51


ver con las imágenes identitarias, que tificación institucional para que un de funciones, puestos y recursos de
pueden ser adjudicadas o ser impues- elemento sea ubicado en un puesto y acuerdo con las características físicas
tas, en torno al control del físico y de en una función determinada. Aquellos y emocionales, así como a la experien-
las emociones del elemento, así como considerados por el mando como capa- cia en la labor policiaca, de sus subor-
a las aptitudes y cualidades para el des- ces de enfrentar una situación de ries- dinados. Por ejemplo, el que un mando
empeño de la función laboral asignada. go, es posible que se les ubique en el ordene a un subordinado de edad avan-
El control del físico y de las emocio- patrullaje en zonas conflictivas. De la zada –que cuenta con varios años la-
nes encuentra su sustento en la natu- misma manera, las experiencias exito- borando en servicios establecidos–
raleza laboral que implica la posibilidad sas en situaciones de riesgo, generan patrullar en una zona conflictiva está
de reaccionar adecuadamente en una representaciones en torno a qué per- fuera de las lógicas laborales de ubica-
situación de riesgo. Por adecuado se sonas son las más idóneas para ejercer ción en zonas y puestos de trabajo a
entiende toda acción que garantiza la mando y cuáles otras para rendir obe- individuos que cuentan con la expe-
supervivencia para la persona y para los diencia. Si no hay un conocimiento de riencia y las características físicas idó-
compañeros, lo cual implica la capaci- que el mando que dirige una opera- neas para desempeñar tal tarea. Esta
dad de elegir la mejor opción que per- ción policial ha salido airoso, en otras orden tanto pone en riesgo al indivi-
mita salir airoso de una situación situaciones parecidas, difícilmente los duo que la obedece, como al resto de
crítica y, en muchas ocasiones, la dis- subordinados le otorgarán la confian- los compañeros con los que deberá
posición para hacer uso de la fuerza. za necesaria para rendirle obediencia. patrullar. Por ello, es de esperarse que
Sin embargo, evaluar una situación Por supuesto, toda persona que aspira el mando ubique a los policías con
crítica de manera correcta no es fácil, a ingresar a una corporación policial menos capacidad física en la vigilan-
sobre todo si se toman en cuenta la sabe de antemano que se encontrará cia de edificios públicos o en módulos
variedad de situaciones y contextos ubicado en una jerarquía tipo militar y establecidos y que, por el contrario, a
cotidianos. Si la interpretación de una que estará supeditado a las órdenes de los más aptos físicamente los asigne a
situación es errónea, puede ocasionar un determinado mando. Pero un cono- zonas de riesgo o los envíe a realizar
desde la movilización innecesaria de un cimiento de la jerarquía no implica una actividades que requieren una condi-
gran número de elementos –con lo cual legitimación de la autoridad. En todo ción física óptima (vigilancia a pie o
se descuida la vigilancia de ciertas zo- caso, hay que tomar en cuenta que en bicicleta, por ejemplo), de la mis-
nas que pueden requerir una presen- nadie cuestiona el hecho de obedecer ma manera se espera que no se otor-
cia constante–, hasta la pérdida de las órdenes de un mando, si, por el con- gue algún tipo de beneficios a aquellas
vidas, si se da el caso donde no se inter- trario, la forma de mandar dentro de personas que no han demostrado su
preta como tal una situación de riesgo. marcos de conocimiento compartidos capacidad laboral o que sea tolerante
Además, se puede perder la confianza que toma en cuenta la competencia y protector con aquellos otros que han
ante el llamado de auxilio de un com- laboral y, sobre todo, los efectos de la mostrado un buen desempeño en su
pañero que ha interpretado con an- obediencia a las órdenes. trabajo. De esta manera, un mando que
terioridad de manera inexacta una Es conveniente aquí destacar que el mantiene conocimientos compartidos
situación. mando, a su vez, necesita que los su- con los subordinados en torno a los pro-
En la institución se considera que bordinados tengan la certeza de que él blemas inherentes al ejercicio laboral
la evaluación correcta de una situa- conoce la mejor manera de afrontar tiene mayor posibilidad de ejercer la
ción de riesgo sólo la puede realizar toda situación –que implique o no ries- autoridad que en él delega formalmente
una persona que ya las ha experimen- gos– para que no haya cuestionamien- la institución.
tado en diversas ocasiones. Por ello, to sobre si una de sus órdenes es o no Las dinámicas y exigencias del tra-
es común el reconocimiento a aque- adecuada, lo cual podría generar la in- bajo policial generan concepciones en
llas personas que han enfrentado con- acción de algunos elementos y mayores torno a derechos corporativos informa-
tinuamente situaciones peligrosas. riesgos para el grupo en su conjunto. les que por supuesto involucran ideas
Puesto que los conocimientos y las Sin embargo, no basta que el man- de justicia, a tal punto que para un
experiencias laborales que implican el do tenga un récord en el enfrentamien- policía que siempre ha destacado por
control del cuerpo y de las emociones to de situaciones de riesgo, también hacer un trabajo eficiente en las calles
y una disposición para hacer uso de la se espera que haga uso de una discre- de las colonias más peligrosas, sea in-
fuerza física configuran percepciones cionalidad adecuada, de tal manera que justo que el mando lo asigne en un
generalizadas del trabajo policiaco e sus órdenes no generen problemas la- servicio establecido, como sería la guar-
imágenes en torno a quién está capa- borales. Por discrecionalidad adecuada dia en un módulo policial. Igual de
citado para ser policía existe una jus- se entiende la elección y asignación injusto es que una persona que no

52 2007 ■ NÚMERO 6 ■ AÑO 6 ACTA REPUBLICANA POLÍTICA Y SOCIEDAD


cuenta con antigüedad en la corpora- se vea en la necesidad de negociar con habilitación y deshabilitación de man-
ción y no conoce el trabajo policial, ellos ciertos beneficios para su perso- dos medios y superiores policiales. En
goce de privilegios y beneficios que a na, lo cual lleva tiempo y gasto de ener- este sentido, ningún mando tiene la
otros les ha costado mucho tiempo al- gía. En todo caso, siempre se instala la seguridad de seguir ejerciendo una
canzar o, peor aún, que se le habilite incertidumbre de que con el cambio autoridad como tal sobre un grupo de
con mando cuando para muchos alcan- pueda llegar realmente mejorar una personas determinadas, con lo cual los
zar esta posición ha implicado una posición con anterioridad ganada. beneficios adquiridos por los policías
constante demostración y negociación De la misma manera, el que un en todas las jerarquías tienen el cons-
de cualidades y aptitudes. mando con el que se ha llegado a esta- tante riesgo de verse afectados y las
Una vez alcanzada cierta posición blecer una relación conveniente para posibilidades de conflicto y de descon-
laboral –en zona, horario, jerarquía de los intereses propios, sea adscrito a trol instalarse durante un periodo
mando, recursos económicos y mate- otra zona, degradado o destituido es mientras los nuevos mandos negocian
riales– se considera un derecho del ele- causa de angustia entre los subordina- la obediencia a partir del mantenimien-
mento el que la institución y los dos, quienes mostrarán en todo mo- to o adjudicación de puestos.
mandos se los reconozca y se los pro- mento su rechazo para aquel que lo En este sentido, la posición del
teja. La protesta del policía por ser sustituya sin conocer y respetar los in- mando mantiene debilidades estructu-
movido de un puesto para ser adscrito tereses creados. Por ello, no es raro es- rales por su estrecha relación con la
a otra zona no sólo incluye la viola- cuchar entre elementos de la tropa que política y su poca autonomía del po-
ción de lo que él considera un derecho los verdaderos mandos son pocos, no der político. Esto hace que el control
ganado con anterioridad, sino también sólo porque los nombramientos oficia- de los policías sea una tarea sumamen-
la afectación de diversos intereses crea- les con grado no los otorga con facilidad te delicada y que en última instancia
dos. Por ejemplo, un policía adscrito a el Ayuntamiento, sino, y principalmen- su estabilidad dependa de las destre-
una zona comercial, es muy seguro que te, porque ellos saben cómo tratar a la zas y habilidades que el mando en tur-
con el tiempo logre establecer una ru- tropa. En todo caso, de lo que se trata no tenga para negociar la autoridad con
tina que le otorgue cierta estabilidad es de establecer un marco de entendi- los subordinados.
y seguridad a sus acciones cotidianas; miento entre mandos y subordinados Hay que aclarar que los policías no
la zona en que labora puede, por ejem- y ciertas normas y principios en la re- están buscando constantemente nue-
plo, encontrarse cerca de su hogar o lación que otorguen una confianza y vos beneficios con cada nuevo mando
del lugar donde desarrolla una activi- estabilidad laboral. que llega a la corporación –aunque mu-
dad laboral, educativa o recreativa aje- Ahora bien, en otro trabajo (López, chos pueden intentar una nueva ne-
na a la corporación, puede también 2000) he destacado cómo las posicio- gociación, sobre todo dependiendo de
haber establecido relaciones con los nes jerárquicas de autoridad en la or- que tanto estén cambiando sus intere-
comerciantes y habitantes de la zona ganización policial preventiva en ses. La mayoría de los policías tratan
que le reditúen beneficios blancos o México dependen de los vaivenes polí- de defender posiciones y beneficios
negros, estatus o posición social reco- ticos locales, de tal manera que el in- adquiridos con anterioridad. Un nue-
nocida, puede también haber creado dividuo con mando por lo común tiene vo mando que llega puede, con algu-
relaciones de amistad con los compa- dificultades para mantenerse en el nos pocos movimientos de algunos
ñeros con los que labora, etcétera. El puesto, sobre todo porque el mecanis- policías a diferentes puestos o zonas
cambio de zona o lugar de trabajo, de mo para el ascenso y promoción como laborales, desencadenar toda una ca-
puesto o jerarquía, además de afectar mando tiene su base en el ejercicio dis- dena de cambios –y con ellos afectar
su estabilidad laboral, le puede redi- crecional del director de la corporación. posiciones e intereses creados–, pues
tuar pérdidas económicas y sociales. A su vez, el director policial puede ser las vacantes que dejan los moviliza-
La adscripción laboral a otro lugar no destituido en cualquier momento por dos deberán ser ocupadas por indi-
le garantiza el obtener los beneficios el presidente municipal en turno. Por lo viduos que se encontraban en otros
que había adquirido y, en todo caso, le común, un nuevo presidente municipal lugares, con otros horarios y, previsible-
obliga a volver a comenzar a armar sus impone a su propio director policial, mente, con redes y compromisos esta-
redes y relaciones para ganar la posi- sobre todo si proviene de un partido blecidos.
ción en que se encontraba. Tampoco se político diferente al que con anteriori- En este contexto, la imposicion de
puede descartar que a la zona laboral dad ejerció el mandato constitucional. un mando que no respete los intereses
donde llegue se encuentren otros poli- Al menos cada trienio es posible ob- creados y los derechos corporativos
cías que controlan los beneficios que servar en las organización policial de ganados puede ocasionar una incon-
puede otorgar dicha zona con lo cual un municipio muchos cambios en la formidad colectiva y la imposibilidad

ACTA REPUBLICANA POLÍTICA Y SOCIEDAD AÑO 6 ■ NÚMERO 6 ■ 2007 53


de ejercer la autoridad. No hay que de los subordinados, la generación de glamento Interior no siguen aquellos
perder de vista que la obligación de todo relaciones de confianza, y la rendición otros generados en la interacción en-
mando es impedir que su zona de ads- de la obediencia a partir del reconoci- tre mandos y subordinados. Por supues-
cripción no presente un crecimiento miento de su personal a cargo de que to, el Reglamento no contempla una
delictivo y quejas ciudadanas, función él conoce el trabajo y sabe cómo mane- normatividad sobre la adquisición de
que sólo puede alcanzar a través de la jarlo. Todos estos elementos dificultan determinados derechos por antigüedad,
obediencia a sus disposiciones por par- el control de su personal y sí, por el capacidades, cualidades o característi-
te de los subordinados. contrario, favorece el que en puestos cas físicas de los elementos, mucho
De la misma manera, la defensa del de mando se llegue a tener a personal menos negociaciones personales con
mando que realizan los subordinados se incompetente y corrupto. el mando en turno. En el discurso ofi-
encuentra inscrita en una estrategia Es muy cierto que toda corporación cial los policías son servidores públi-
política para desalentar conflictos y fa- policial cuenta con un marco normati- cos que como tales están siempre
vorecer un marco de entendimiento y vo institucional que intenta regular la dispuestos a realizar las mejores accio-
negociación de los propios proyectos e conducta de los policías. Este marco nes que beneficien la seguridad públi-
intereses que se desean llevar adelante. normativo se encuentra guiado jurídi- ca de la comunidad.
En la corporación policial preven- camente por la Ley para los Servidores Con esto no quiero afirmar que no
tiva hay un conocimiento muy amplio Públicos de cada uno de los estados y tengan sentido ni utilidad las regula-
en todas las jerarquías de la fuerza que por cada una de las Leyes Orgánicas ciones oficiales ni que las presiones
pueden tener como colectivo los su- Municipales. institucionales no afecten el compor-
bordinados para mantener a un mando Los reglamentos interiores son de tamiento de los policías, lo que quiero
o facilitar su movimiento, fuerza esta observación general para todos los ele- destacar es que existen códigos, valo-
que obtienen precisamente del cono- mentos policiales y aunque en princi- res y principios que no se encuentran
cimiento sobre la débil posición polí- pio cualquier persona –incluso el formalizados explícitamente en el re-
tica del mando; de tal manera que como ciudadano común– puede denunciar a glamento policial, pero que tienen lu-
estrategia para mantener su posición, quien lo infrinja, de manera formal la gar en la interacción cotidiana entre
los mandos están obligados a estable- institución establece mecanismos de los actores que en ella laboran. No se
cer relaciones con los subordinados que supervisión y vigilancia de su acata- puede dejar de reconocer que existe
apoyen los diversos intereses que ellos miento, pero tal vigilancia no deja de un compromiso a las normas oficiales,
persiguen desde su posición jerárqui- estar guiada por las percepciones so- así como a ciertos tipos de discurso; sin
ca y desde las imágenes identitarias ciales que sobre el policía y la activi- embargo, hay percepciones y represen-
adjudicadas o adoptadas, con el fin de dad laboral que desarrollan tienen los taciones de lo que debe ser el actuar
enrolar al mayor número de sujetos que diversos agentes que participan en el policial que no necesariamente descan-
en un momento dado puedan ser mo- campo de la seguridad pública. De igual san o encuentran su legitimidad en la
vilizados a su favor, esto sin descuidar manera, no podemos obviar que varios normatividad oficial.
una imagen de lealtad para con sus principios formalizados en el reglamen- Si se está dispuesto a admitir que
superiores y mantener canales de in- to pueden no ser compartidos por los el orden cognitivo –el ordenamiento de
formación y relaciones sociales con las integrantes del cuerpo policial ni por símbolos y significados– se construye
redes que se localizan en las jerarquías amplios sectores de la sociedad y que, en la interacción y las normas se en-
superiores. Este conocimiento y mani- por el contrario, sí lo sean comporta- cuentran implícitas en este orden, es
pulación del contexto reproduce una mientos explícitamente prohibidos (por difícil concebir, entonces, que las nor-
interacción entre mandos y subordina- ejemplo, el ejercicio de la violencia mas y principios oficiales no pasen por
dos basada más en la cooperación que como un castigo que hay que ejercer a un proceso de negociación y resignifi-
en la coacción, más en el respeto y los delincuentes, la instalación de re- cación. Como señalan Long y Villarreal
cuidado a los intereses mutuos que en tenes y la aplicación de la tortura para (1993), el conocimiento no es meramen-
la supervisión de los mismos. obtener una confesión, por mencionar te una transferencia de significados,
algunos), con lo cual es posible pasar sino que es un producto de la interac-
CONCLUSIONES por alto la falta de coherencia entre ción entre actores específicos.
principio y realidad que establece el Hay que destacar que detrás de los
Como he señalado páginas más arriba, reglamento. derechos adjudicados se encuentran
el constante cambio de mandos dificul- Por su parte, muchos de las princi- los intereses particulares. Ciertamen-
ta a la autoridad jerárquica el compro- pios normativos oficiales que maneja te, no se puede dejar de pensar en que
miso con la actividad, el conocimiento la corporación policial a través del Re- muchos policías se inconforman ante

54 2007 ■ NÚMERO 6 ■ AÑO 6 ACTA REPUBLICANA POLÍTICA Y SOCIEDAD


la llegada de nuevos mandos porque expuestos por la misma responsabili- confianza en la cooperación y distri-
con los anteriores habían establecido dad de su cargo, a perder en una bata- bución de puestos, recursos y obten-
una relación basada en la obtención de lla generalizada, además, se encuentran ción de beneficios en condiciones de
beneficios a través de la corrupción que también más limitados para realizar igualdad de oportunidades. Sin duda,
no se encuentra sustentada en ningún acciones definitivas, como por ejemplo como hemos visto, los beneficios que
principio formal, pero de cualquier la destitución de elementos, puesto que puede obtener un policía en su labor
manera es de preveerse que usarán el el poder que tienen para expulsar a los cotidiana son amplios y variados, pero
discurso que apela a los derechos y subordinados queda supeditado a nor- la posibilidad de obtenerlos y el ries-
principios ganados en la interacción con mas laborales establecidas oficialmen- go de perderlos una vez obtenidos pa-
imágenes de competencia laboral y ad- te en reglamentos institucionales; san por canales que no necesariamente
judicación de una identidad policial. además de que la expulsión no convie- tienen que ver con equidad e igual-
Aunque los policías inconformes no ne a una institución que generalmente dad institucional, sino por la relación
pueden aducir una violación a lo que se encuentra limitada en la captación política que pueda llegar a establecer
consideran sus derechos ganados en la de nuevos miembros. con su mando inmediato superior y con
interacción porque éstos no se encuen- La necesidad de mantener el orden las redes políticas que éste logre esta-
tran formalizados en el Reglamento a través del respeto a los intereses ad- blecer al interior y exterior de la cor-
Interior, y porque en mucho se basan quiridos legítimos o no es una reali- poración.
en el manejo extraposicional de su car- dad en las que se ve inmersa una Por último, vale la pena señalar que
go como servidores públicos, empero, institución que no ha podido consoli- para varios autores4 la dependencia al
como estrategia, pueden formular acu- dar mecanismos de ascenso, promoción poder político de un cuerpo policial
saciones denigratorias contra los man- y permanencia basados en el reconoci- genera una inestabilidad constante en
dos que violentan sus intereses, en el miento institucional a las capacidades el ejercicio de la autoridad y una ma-
sentido de que no cumple con el perfil profesionales y éticas de sus miembros, yor corrupción de sus miembros por la
identitario adecuado para realizar las en vez de la utilización de criterios po- poca centralización del control interno.
funciones o, práctica más usual, que líticos. El reto es encontrar el equilibrio entre
viola los principios y obligaciones ge- Para Garzón (1995), la corrupción un modelo centralizado a partir de las
nerales del servicio público, ya porque no sólo tiene que ver con la posibili- propias prácticas policiales y un modelo
es corrupto, ya porque violenta dere- dad de obtener ganancias extraposi- abierto a la sociedad que favorezca la
chos humanos o ya porque se encuen- cionales, sino también con la falta de participación y el contacto ciudadano.
tra involucrado en actos delictivos. Así,
mientras los nuevos mandos hacen uso
del discurso que llama a la obediencia
y entrega a la comunidad como una BIBLIOGRAFÍA
característica y función del servidor
público, los subordinados también pue- ARTEAGA BOTELLO, Nelson y LÓPEZ Rivera LÓPEZ ALVARADO, Mauricio (2000) Policía y
den emplear el mismo discurso para Adrián (1998) Policía y corrupción. poder en Guadalajara. Un estudio de las
ejercer poder sobre los mandos que México: Plaza Valdés Editores. relaciones de poder entre mandos y su-
desean expulsar. Sin embargo, para la GARZÓN VALDÉS, Ernesto (1995) “Acerca del bordinados que laboran en la policía
mayoría de los policías, la mejor estra- concepto de corrupción”, en Revista Cla- tapatía, tesis de maestría. Guadalajara
tegia es negarse a trabajar y realizar ves de Razón Práctica, núm. 56. Madrid. Centro de Investigaciones y Estudios
una serie de acciones que desde el ano- LONG, Norman y Magdalena Villarreal (1993) Superiores en Antropología Social, Uni-
nimato conlleven el crecimiento delic- “Las interfases del desarrollo: de la dad Occidente.
tivo de la zona o el aumento en las transferencia de conocimiento a la trans- LOUBER DEL BAYLE, Jean-Louis (1992) La
quejas ciudadanas. De esta manera, el formación de significados”, mimeo de policía. Aproximación sociopolítica,
contexto actual es aprovechado como 27 páginas con la leyenda: publicado traducción de Gonzalo Jar Coucelo. Ma-
un recurso que puede ser empleado en Schuurman, F. J. (1993) Beyond the drid: Acento Editorial, 1998. Título ori-
para generar poder sobre otros. Por Impasse: New Directions in Development ginal: La Police: Approche socio-
supuesto, el mismo contexto está a dis- Theory. Londres: Zed Press. politique: Montchrestein.
posición de los mandos y también es
utilizado para ejercer acciones en con-
tra de los in-subordinados. Sin embar-

go, considero que se encuentran más 4 Torrente (1998) y Louber del Bayle (1992), entre otros.

ACTA REPUBLICANA POLÍTICA Y SOCIEDAD AÑO 6 ■ NÚMERO 6 ■ 2007 55


RICO, José María (1998) “La policía en Amé- TORRENTE ROBLES, Diego (1997) La sociedad ZEPEDA LECUONA, Guillermo (2004) Crimen
rica Latina: del modelo militarizado al policial. Poder, trabajo y cultura en una sin castigo: Procuración de Justicia Pe-
comunitario”, en Pena y Estado, Revis- organización local de policía. Madrid: nal y ministerio público en México. Méxi-
ta Latinoamericana de Política Criminal, Centro de Investigaciones Sociológicas, co: FCE y Centro de Investigación para
núm. 3. Buenos Aires. Instituto de Es- Universidad de Barcelona. el Desarrollo (CIDAC).
tudios Comparados en Ciencias Penales ZAMARRIPA, Roberto (1993) Sonora 91. His-
y Sociales. toria de políticos y policías. México: La
Jornada Ediciones.

56 2007 ■ NÚMERO 6 ■ AÑO 6 ACTA REPUBLICANA POLÍTICA Y SOCIEDAD

También podría gustarte