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Las Obligaciones
Las Obligaciones
Son los Títulos de crédito que emiten las Sociedades Anónimas (únicamente),
representan la participación individual de sus tenedores de un crédito colectivo
constituido a cargo de la sociedad emisora. Art. 208 LGTOC
a) Capacidad Subjetiva:
Art 208 LGTOC: Las Sociedades anónimas pueden emitir obligaciones que
representen la participación individual de sus tenedores en un crédito
colectivo constituido a cargo dela sociedad emisora. Las obligaciones serán
bienes muebles aun cuando estén garantizadas con hipoteca.
I.- Las acciones de regreso del último tenedor contra los endosantes o
avalistas;
AVAL.- Garantía total o parcial del pago de una letra de cambio y en general de un
título de crédito.
FIANZA.- Habrá fianza cuando una de las partes se hubiere obligado
accesoriamente por un tercero y el acreedor de ese tercero aceptase su obligación
accesoria. De donde resulta que la fianza es un contrato, pues exige un acuerdo
de voluntades entre el fiador y el acreedor, cuyo crédito es garantizado.
Este artículo señala que sólo los almacenes generales de depósito, autorizados
conforme a la Ley General de Instituciones de Crédito, podrán expedir estos
títulos.
Por otra parte, la sección sexta del Código de Comercio nos habla de la prenda:
Establece que en materia de comercio la prenda se constituye: Por el depósito de
los bienes a disposición del acreedor en locales cuyas llaves quedan en poder de
éste, aún cuando tales locales sean de propiedad o se encuentren dentro del
establecimiento del deudor.
Los Capítulos VII y VIII, tratan sobre obligaciones y derechos del deudor y
acreedor prendario respectivamente. En este sentido, las cláusulas que aparecen
al reverso de la boleta de empeño son producto de las leyes que establece el
Código de Comercio y el Código Civil para la entidad donde se realiza la
operación.
CERTIFICADO DE PARTICIPACIÓN
Serán nominativos.
II.-DEFINICIÓN
Amortizables: derecho a una parte alícuota al fruto y dan a sus tenedores el del
reembolso del valor nominal de los certificados.
Por supuesto, los bienes y derechos de que se trata, puesto que han de ser
transferidos al fiduciario, deben tener aptitud de poder se objeto de apropiación, lo
que entendido en su significado conforme a Código Civil para el Distrito y
territorios federales vigente, representa que los bienes y derechos no estén
excluidos del comercio, ni por su naturaleza, ni disposición de la ley, en el
concepto de que están fuera del comercio por su naturaleza aquellos bienes y
derechos que no puedan ser poseídos por algún individuo exclusivamente
III.-REPRESENTANTE COMÚN
Verificar los términos del acto constitutivo del fideicomiso base de la emisión.,
Para requerir al fiduciario para que haga o se abstenga de hacer lo que sea
indicado, según el caso.
Esta disposición hace pensar que únicamente los certificados inmobiliarios podrán
implicar derechos de aprovechamiento directo sobres los bienes materia de la
emisión, asimismo sugiere la idea de que en todos los demás casos no se podrá
pactar un aprovechamiento directo sobre dichos bienes.
Como es sabido, la estructura de la ley del impuesto sobre la renta mexicana del
31 de diciembre de 1964, vigente, comprende dos grandes áreas impositivas que
tratan, la primea del impuesto al ingreso global de las empresas, y la segunda, del
impuesto al ingreso de las personas físicas; esta ley, grava los ingresos en
efectivo, en especie o en crédito, que modifican el patrimonio del contribuyente,
provenientes de productos o rendimientos del capital, del trabajo o de la
combinación de ambos, especificándose en la propia ley cuál es el ingreso
gravables en cada caso.
Es interesante recordar que hace varios años la LISR estipuló que además del
pago correspondiente a la actividad objeto del fideicomiso, el remanente que se le
entregará a los fideicomisarios causaba otra vez el ISR, lo que realmente equivalía
a que se pagaba por los beneficiarios del fideicomiso, dos veces el impuesto; uno
por la actividad objeto del fideicomiso y otro como si hubieran recibido ganancias
distribuibles, equiparándose a los fideicomisarios con accionistas de sociedades
mercantiles.
El criterio anterior fue abandonado por la ley vigente, lo cual puede ser indicativo
de una tendencia de las autoridades hacendarias a no equipar a los
fideicomisarios con accionistas o con simples inversionistas.
En general, creemos que hay que estar al principio de que el ISR a todo aquel que
perciba ingresos procedentes de su capital y/o trabajo, cuando dichos ingresos
modifiquen su patrimonio.
VIII.-FIDEICOMITENTES EN LA EMISIÓN DE CERTIFICADOS Y LA LEY DEL
IMPUESTO SOBRE LA RENTA
Los bienes transmitidos al fiduciario pueden ser no productivos por sí, tales como
dinero, terrenos, máquinas; o bienes autoproductivos tales como los valores de
renta fija o variables, inmuebles de productos, derechos a regalías; finalmente
pueden ser bienes que siendo o no productivos por sí están entrelazados en orden
a producir.
Los bienes fideicometidos en poder del fiduciario, dentro del fin del fideicomiso,
pueden estar sujetos a una actividad empresarial o simplemente estar sujetos a
ser administrados conforme a su inherente autoproductividad, o solo sujetos a ser
conservados en poder del fiduciario.
Si los derechos del tenedor fideicomisario eran el derecho o una parte alícuota del
derecho de propiedad o de la titularidad de bienes afectos el fideicomiso o al
producto neto que resulte de la venta de dichos bienes.
Por otra parte, también puede ocurrir que, dentro de las estipulaciones del
fideicomiso, el fiduciario deba entregar los certificados emitidos, con o sin
expresión de causa a terceros, que en tal carácter recibirán los
Sin embargo, hemos oído en las que, con base a los términos imperativos en que
está redactado el párrafo final del artículo 228-a de la LGTOC, se pretende deducir
que, cuando los bienes o derechos base de la emisión tienen un valor comercial
superior al importe nominal de la emisión, los tenedores solo tienen derecho a que
se les cubra el valor nominal.
Ahora bien, todo lo anterior no obsta para que un fideicomitente pueda estipular en
el fideicomiso relativo que, llegado el momento, los tenedores puedan participar
del valor total del los bienes fideicometidos, superando inclusive su recuperación
de valor nominal. Una estipulación de esta naturaleza no vemos que sea
contradictoria con la ley, ni con la naturaleza de los certificados, ni tampoco de la
estructura económica y financiera de la operación.
Supongamos que por tener derecho a las plusvalías del bien, los certificados se
cotizan a un precio más alto que su valor nominal; estos no perjudica a nadie ni es
ilegal. El fideicomitente podrá negociar a más alto precio los certificados que
reciba a cambio de los bienes y derechos que haya aprobado el fideicomiso.
Claro que ésta ley tenía que cuidar que el valor nominal quedara protegido y ésta
es la única razón de ser del último párrafo del artículo 228-a de la Ley General de
Títulos y Operaciones de Crédito; que dice así:
“En caso de que al hacerse la adjudicación o venta de bienes, derechos o valores
el valor comercial de éstos hubiere disminuido, sin ser inferiores al importe
nominal total de la emisión, la adjudicación o liquidación en efectivo se hará a los
tenedores hasta por un valor igual al nominal de sus certificados”
LICENCIATURA EN DERECHO
SEMESTRE 4
DERECHO MERCANTIL
Lic. José Ariel Ayala Pérez
*TRABAJO FINAL*