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"E pur si muove"... y sin embargo se mueve.

Esta frase se le atribuye a Galileo, quien la habría


dicho luego de que el Santo Oficio lo obligara a
retractarse de sus ideas sobre el movimiento de la
Tierra.
En los años 30 el geofísico japonés Wadati documentó el
incremento en la profundidad de los sismos en función de la
distancia tierra dentro hacia el continente.
Al mismo tiempo el sismólogo Hugo Benioff documentaba la
misma variación y resaltaba el hecho de que las zonas de alta
sismicidad no estaban distribuidas de manera uniforme sobre el
globo terráqueo, sino que éstas se alojaban en fajas más o menos
continuas asociadas a algunas márgenes continentales.
Estas fajas de actividad sísmica y volcánica definen los límites
entre placas.
Después de la Segunda Guerra Mundial, y en gran medida por razones militares,
se desarrolló la nueva ciencia de la oceanografía, durante los años 50.
Los oceanógrafos documentaron la presencia de una enorme cadena montañosa
submarina en el medio del Atlántico Norte que se levantaba más de 2,000 m
sobre los abismos de aproximadamente 4,000 m de profundidad a cada lado.
A principios de los años 60 el geofísico H.H. Hess sugirió un mecanismo que
podría explicar la deriva continental, basándose en las variaciones topográficas
de los océanos.
Conforme se apartaban dos enormes masas de manto surgía de las profundidades
terrestres material fundido que formaba una cadena volcánica y que rellenaba el
vacío formado por la separación de los fondos oceánicos. Si esto fuera cierto,
razonó Hess, para evitar un crecimiento indefinido de la Tierra era necesario que
en alguna parte de ella fuera consumido material cortical. Propuso entonces que
los sitios donde esto ocurría eran las profundas fosas oceánicas que bordeaban
algunos continentes y arcos de islas.

HABÍA NACIDO LA TECTÓNICA DE PLACAS


En 1963, los geofísicos ingleses Frederick Vine y Drummond Matthews, de la
Universidad de Cambridge, publicaron un artículo en la revista Nature donde
presentaron datos a favor de la brillante pero especulativa idea de Hess. En este
artículo, Vine y Matthews reportaron mediciones de anomalías magnéticas en
los fondos marinos al sur de Islandia, obtenidas mediante un magnetómetro muy
sensible remolcado por un buque.

Vine y Matthews concluyeron que las rocas


volcánicas de los fondos marinos estaban
registrando la polaridad del magnetismo
terrestre en el momento de su
cristalización; se invertía esta polaridad
cada 500,000 años. De esta manera
propusieron que la anchura de las franjas
magnéticas debería ser igual a la velocidad
de separación de las placas, multiplicada
por la duración del intervalo de tiempo
entre inversiones de polaridad.
Las Placas Litosféricas son los fragmentos que conforman la
Litósfera como un piezas de un rompecabezas
La Tectónica de Placas es un modelo que, en función del tipo de
borde que se forma entre cada placa y la adyacente, explica el
movimiento de las placas litosféricas, la interacción entre éstas y
los eventos geológicos que provocan.
La interacción de estos
bordes pueden ser
básicamente de tres
tipos, según el tipo de
movimiento que tiene
lugar en ellas:
Divergente
Convergente
Transformante.
Borde Convergente O Zona
De Subducción
Corteza oceánica bajo Corteza Continental
En el primer tipo de convergencia, la corteza oceánica,
por ser más densa que la continental se hunde por debajo
de esta última, proceso conocido como "subducción", y se
funde al llegar a la Astenósfera. Mientras que en la
Corteza Continental se plegan y levantan sedimentos,
antes marinos, junto con parte de la corteza misma,
produciéndose un proceso orogénico y dando lugar a una
cordillera. Esta cordillera se caracteriza por exhibir una
serie de volcanes
Un ejemplo de esto es la cordillera Andina, levantada por
la convergencia entre la placa de Nazca y la de
Suramérica.
Cuando una placa oceánica está entre dos continentes puede ir
subduciendo debajo de los dos en el choque entre dos corteza
continentales, no ocurre el proceso de subducción.
En este caso, las
cortezas continentales
se funden y elevan
formando una
cordillera montañosa
(orógeno de colisión),
donde no se presenta
el Arco Volcánico,
como sucede en la
cordillera del
Himalaya.
Corteza Oceánica bajo Corteza Oceánica
En la convergencia entre dos corteza oceánicas, una se
desliza debajo de la otra y generalmente se produce una
fosa oceánica (igual que en el caso anterior).
En esta caso, la fricción de
la subducción también
provoca la aparición de
magma, que al ascender
hasta la superficie forma
consecutivamente una serie
de islas volcánicas,
conocidas como "Arco de
Islas".
El Arco de Islas Japonés,
es un ejemplo de este
proceso.
Borde Divergente O Dorsal
Oceánica
Se presenta a lo largo de una dorsal mesoceánica,
donde una placa se fractura, dando origen a dos
placas nuevas que empiezan a separarse
"empujándose" o alejándose una de la otra. Un
ejemplo es la dorsal del Océano Atlántico
Cuando tiene lugar dentro de una placa continental
da lugar a la formación de nuevos océanos. Un
ejemplo de esta falla es la que se encuentra entre la
placa Arábiga y la placa Africana
Falla Transformante
Estas fallas se producen cuando dos placas se desplazan
una contra la otra en el plano horizontal, bien sea en el
mismo sentido o en contrasentido una de la otra; en
palabras de Uyeda (1980) "se presenta (...) donde el
movimiento relativo de las placas es paralelo al borde".
La Falla de San Andrés es un ejemplo de este tipo de
falla.
El motor de las placas son las corrientes de convección del
manto.
¿Y en el futuro?.....

Habrá que ir pensando


en abrigarse mejor

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