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NUEVOS MAESTROS PARA

UN NUEVO PERÚ

Wilfredo Rimari Arias

Nuevos Maestros para un Nuevo Perú – Wilfredo Rimari Arias 1


1. ¿Qué tipo de maestro necesita el Perú de hoy?
Hace años atrás, una frase atribuida a Ricardo Dolorier estaba muy presente en los labios de
cientos y miles de maestros "Ser Maestro en el Perú es una forma muy difícil de vivir. Ser Maestro
en el Perú es una forma muy hermosa de morir... ", frase que inspiraba el buen cumplimiento del
deber pese a la grave situación económica y a la violencia política que amenazaban a nuestro país
y a los educadores. Los años de violencia que motivaron esta frase han pasado, pero nuevas
formas de violencia amenazan al magisterio peruano: la apatía, la indiferencia y la rutina, cuando
no la falta de responsabilidad por el cumplimiento del deber y la poca costumbre de rendir cuentas
de su misión educadora...

Quienes asumimos la delicada misión de educar en el Perú tenemos una gran obligación con
nuestros niños, niñas y jóvenes: ofrecerles oportunidades de aprendizaje debidamente
planificadas, preparadas y bien
dirigidas para desarrollar al máximo
sus competencias, capacidades,
conocimientos, actitudes y valores.
No hacerlo es una manera de matar
nuestra profesión, de morir en vida.
Necesitamos un nuevo educador,
una nueva educadora, renovados
en su misión, en su formación y en
su compromiso de formación a los
niños, niñas y jóvenes que viven en
el mundo de hoy.
Necesitamos maestros auténticos,
es decir, profesionales competentes
y dispuestos a aprender y enseñar IE. Nº 50552 – Huacatingo - Quispicanchi
con humildad y dedicación.
La Confederación Interamericana de Educación Católica1 ha plasmado de modo claro el tipo de
maestro y maestra que nuestro tiempo requiere, es decir, alguien que:
 Es testigo de su fe, esperanza y amor,
 Anuncia los valores del Reino y denuncia toda estructura deshumanizante desde la
esperanza,
 Vive la verdad y la coherencia como aporte y ejemplo a sus discípulos y alumnos.
Permanece conciente de la importancia que tiene la pedagogía del ejemplo,
 Es un apasionado por la búsqueda de la excelencia en todos sus servicios,
 Se entrega de lleno e incondicionalmente a su tarea educativa, sin dejarse
convertir en un mero funcionario asalariado. Por eso realiza su tarea con
entusiasmo, desde una visión esperanzada y humanística del servicio que presta,
 Se mantiene en constante proceso de autoformación y autoevaluación,
 Es un ser profundamente humano y apasionado por la vida, humanizador, con
sensibilidad, delicadeza y cortesía,
 Se siente mediador del proceso de producción de conocimiento y promotor de
valores,
 Está en búsqueda siempre de una educación integral que abarque todas las
dimensiones de la persona,
 Asume y reconoce su sexualidad y la de los demás como un don de Dios y,
asimismo, orienta su formación humana, afectiva y sexual, como parte esencial de
una educación integral,

1
Proyecto Educativo Pastoral. CIEC. Bogotá, febrero de 2005.

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 Comprende y acepta a los niños y jóvenes con sus capacidades y limitaciones
como seres perfectibles. De igual manera, se muestra ante ellos como una
persona en proceso de perfeccionamiento,
 Ofrece razones para vivir y razones para esperar a través de su testimonio y su
palabra,
 Educa desde y para los valores formando criterios y generando convicciones,
 Orienta su trabajo desde una opción por la justicia y la transformación social,
 Asume los cambios educativos en forma responsable, critica y creativa,
 Domina y utiliza pedagógicamente los nuevos códigos y tecnologías.

2. Maestros Renovados construyendo una Nueva Sociedad


¿Es posible renovar al magisterio peruano desde esta visión de lo que debe ser un educador y una
educadora comprometidos con su vocación y con el pueblo al que están llamados a servir? ¿Es
posible el cambio docente a favor de la dignificación de su propia carrera? Creo que sí, creo que
de no hacerlo los educadores perderemos definitivamente nuestra razón de ser como mediadores
del aprendizaje, de la cultura, del cambio, de la innovación, de la búsqueda y de la construcción
esperanzada de nuevos escenarios de vida donde primen la verdad, la justicia, la solidaridad y el
desarrollo sostenible. Si el magisterio peruano no cambia, la sociedad peruana pierde
irremediablemente uno de los factores claves de su desarrollo.

Si bien la renovación del magisterio peruano constituye una tarea importantísima que no se puede
soslayar, también una mirada nueva del futuro se hace imprescindible. Sin una visión de un futuro
donde hay espacio y oportunidades de vida digna y segura para todos los ciudadanos y
ciudadanas del planeta azul, el presente va camino directo al despeñadero.

¿Qué características debe tener ese futuro societal deseable para una vida digna y fraterna? ¿Qué
rasgos identificatorios ha de poseer? Cuando uno lee Cuentos chinos, de Andrés Oppenhaimer,
adquiere una conciencia de los retos actuales al desarrollo de nuestros pueblos, pero también
termina con la impresión de que el subdesarrollo de nuestros pueblos no es responsabilidad del
modelo económico imperante sino de la incapacidad de nuestros gobiernos y sus líderes para
insertar nuestras economías en la economía global y su círculo de crecimiento y desarrollo
sostenido. No deja de ser cierta la carencia de líderes con visión de futuro y con capacidad para
colocar nuestras potencialidades en comunicación con el resto de países del orbe, pero tampoco
se puede desconocer la asimetría actualmente existente en las relaciones entre los distintos
países del mundo y las cargas pesadas, como la deuda externa, que atenazan nuestras
posibilidades de desarrollo y que impiden relacionarnos como países pares para lograr acuerdos
de igual a igual.

De otro lado, cuando uno lee El Mito del Desarrollo, de Oswaldo de Rivero, adquiere una
conciencia mayor de las interrelaciones entre nuestros países, los países desarrollados y los
poderes económicos que en realidad manejan las economías a nivel planetario e influyen
poderosamente sobre los jefes de los países desarrollados. De Rivero también deja abierto al
debate los retos inmediatos y mediatos que debemos abordar los peruanos si queremos hacer de
nuestro país un país viable y sostenible, para lo cual tenemos que enfrentar de cara problemas
como: la alimentación, la energía, el agua y la producción de tecnología.

Ambos libros son de lectura obligada para todo educador peruano que quiere poner su labor diaria
al servicio de un bien mayor, de un ideal social, de una sociedad mejor para todos.

¿Qué tipo de sociedad necesitamos construir? Difícil pregunta. Una respuesta la podemos tomar
de los Superiores Provinciales Latinoamericanos de la Compañía de Jesús 2, quienes se
comprometieron y nos invitan a construir:

2
El neoliberalismo en América Latina. Carta de los Superiores Provinciales Latinoamericanos de la
Compañía de Jesús. 1996. Ver: http://contemplavida.iespana.es/5amigos/superijesu.html

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 Una realidad más cercana al Reino de justicia, solidaridad y fraternidad del Evangelio,
donde la vida con dignidad sea posible para todos los hombres y mujeres.

 Una sociedad donde toda persona pueda acceder a los bienes y servicios que se merece
por haber sido llamada a compartir este camino común hacia Dios. No reclamamos la
sociedad del bienestar, de las satisfacciones materiales ilimitadas; sino una sociedad
justa, donde nadie quede excluido del trabajo y del acceso a bienes fundamentales para la
realización personal, como la educación, la nutrición, la salud, el hogar y la seguridad.

 Una sociedad donde todos podamos vivir en familia y mirar al futuro con ilusión, compartir
la naturaleza y legar sus maravillas a las generaciones que nos sucederán.

 Una sociedad atenta a las tradiciones culturales que dieron identidad a los pueblos
indígenas; a los pobladores que llegaron de otra parte, y a los afroamericanos y mestizos.

 Una sociedad sensible a los débiles, a los marginados, a quienes han sufrido los impactos
de procesos socioeconómicos que no ponen al ser humano en el primer lugar; una
sociedad democrática, construida participativamente, donde la actividad política sea la
opción de los que quieren entregarse al servicio de los intereses generales que importan a
todos.

¿Es posible construir una sociedad así, desde nuestras escuelas, desde nuestras comunidades y
desde nuestros hogares? ¿Es posible saltar del vacío de una sociedad excluyente y desigual hacia
una sociedad inclusiva y solidaria? He visto con horror un reportaje de la lucha fratricida entre
hutus y tutsis (Ruanda), pueblos del Africa centro-oriental, ocurrida en 1994 y que trajo como
consecuencia un millón de tutsis asesinados, a causa de conflictos históricos de exclusión y
dominación que encontraron en el exterminio del otro una forma de solución3. No menos horror
nos causó a los peruanos enterarnos por la Comisión de la Verdad y la Reconciliación que
aproximadamente 70 mil personas fueron eliminadas durante los años 1980-2000, muchas de
ellas ignoradas, desconocidas y negadas por su origen humilde, por su pertenencia al Perú no
oficial.

La exclusión incuba la violencia en el


corazón y la mente del excluido que
puede terminar explotándole en el rostro
a quienes practican la exclusión. Los
orígenes de la violencia y de la
exclusión están en el corazón y en la
mente del ser humano. La
exterminación de la exclusión y la
violencia también tienen que darse en
ese terreno. El medio no puede ser sino
la educación y la sensibilización.
Necesitamos quebrar los círculos de
exclusión, marginación y violencia
reinantes en nuestro país y en el mundo
si queremos construir la sociedad nueva
que proponen los jesuitas.

Con cuánta razón decía Hugo Assman, teólogo y educador latinoamericano que: "Educar es
luchar contra la exclusión. Educar significa salvar vidas. Por eso ser educador/a es hoy la más
importante tarea social emancipatoria... El actuar pedagógico es hoy el terreno más desafiador de
la actuación social y política".4

3
Ruanda, masacre de hutus y tutsis. Ver:
http://www.portalplanetasedna.com.ar/malas17.htm
4
Hugo Assman: http://www.informa-tico.com/php/expat.php?id=03-03-
08052967&ed=186&fecha=03-03-08&foro#ARRIBA

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3. No hay cambio posible sin planes articulados
No hay cambio posible sin planes orientados a generarlos. La escuela tiene entre sus instrumentos
principales de gestión y planificación: El Proyecto Educativo Institucional (PEI) y la Programación
Curricular Anual. Estos instrumentos deben articularse con el Proyecto Educativo Regional (PER)
y el Proyecto Educativo Naciona (PEN).

En los últimos seis años he viajado frecuentemente a diversas ciudades y pueblos del Perú, y he
tenido el privilegio de conocer sus ciudades y los pueblos más remotos de la zona rural y de
frontera. Durante esos viajes he observado no sin preocupación cuán poca articulación existe
entre la escuela y las potencialidades culturales y naturales de su entorno, cuán pocos docentes
se entregan de lleno a su labor educativa, cuán poca gestión pedagógica y supervisión realizan los
directores, cuán cargados de tareas se encuentran los Especialistas en Educación de las UGEL y
DRE que no les queda tiempo para realizar su función principal: acompañar, monitorear, asesorar,
motivar al profesorado; cuán poca voluntad de algunos directores de UGEL y DRE para enfrentar y
resolver los problemas educativos de su jurisdicción y cuánta ausencia de visión prospectiva
exhiben sus cerebros. Con cuánta preocupación también he observado que muchas escuelas se
enfrascan en la construcción de su Proyectos Educativos Institucionales con la más grande
voluntad pero también con la más absoluta falta de acompañamiento y asesoramiento que les
permita vincular sus proyectos a las políticas educativas regionales o los Proyectos Educativos
Regionales (PER) en gestación. Un PEI desarticulado del PER y del PEN es como una tuerca
suelta de un engranaje, una golondrina que no hace verano.

No puedo negar que he observado


que algo está cambiando, que hay
escuelas que están más
conscientes de la importancia de
vincular escuela-vida, escuela-
producción, escuela-cultura,
escuela-desarrollo de habilidades
para la producción y la gestión de
procesos productivos, escuela-
desarrollo local y regional. Sin
embargo, no son tantas aún como
sería deseable. De otro lado,
también soy testigo de que en
varias regiones hay un compromiso
serio por construir sus Proyectos
Educativos Regionales e incluso
sus Proyectos Educativos Locales, a nivel de UGEL. Son signos de esperanza, son señales de
que hay voluntad de articular el trabajo de las escuelas con visiones compartidas de largo plazo.
Son una señal visible de que sumando los esfuerzos de cada escuela se puede tener como
resultado un futuro conquistado solidariamente. Son signos de que hay un semillero riquísimo de
maestros identificados con su profesión y que podrían irrigar con su savia y su entusiasmo a todo
el magisterio peruano.

Estoy convencido de que hay en nuestro querido Perú maestros y maestras de gran calidad
profesional y humana, que han dado y seguirán dando lo mejor de sí para forjar mejores
ciudadanos y ciudadanas. Muchos de ellos están nombrados y otros tantos forman parte de esa
legión de docentes contratados por tiempo indefinido y a quienes se les limita en sus derechos
profesionales y, muchas veces, humanos, situación que me causa profunda congoja e indignación.
Todos ellos son maestros y se merecen el respeto de todos los demás peruanos así como el
apoyo necesario para cumplir eficientemente con la delicada misión que han abrazado: forjar
personas con mentes, espíritus y energías capaces de vencer todas las adversidades que la vida
les presenta y participar responsablemente en hacer del Perú una patria desarrollada, justa,
fraterna y solidaria.

Si tenemos un PEI articulado a un PER y al PEI, entonces también debemos tener una
programación curricular que se articular al PEI. Un insumo importante para la programación
curricular lo constituye el Diseño Curricular Nacional (DCN). El actual DCN, siendo perfectible,
provee suficiente espacio y libertad para la innovación, la contextualización y la diversificación,

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ejercida por un magisterio en proceso de renovación. El DCN permite incorporar nuevos
contenidos, capacidades, valores y temas transversales en nuestra programación y ejecución
curricular a fin de darle a nuestros educandos nuevas y mejores oportunidades de aprendizaje y
desarrollo integral. Creo que podemos diseñar planes curriculares y organizar las sesiones de
aprendizaje de modo que puedan servir para:

 Formar hombres y mujeres


con seguridad y confianza
en sí mismos, que valoran
su lengua, su cultura local,
regional y nacional y que se
sienten dignos de ser
herederos de un pueblo que
supo gestionar su medio
para darle comida, trabajo y
vida a sus habitantes.

 Desarrollar en los
educandos un pensamiento
crítico y una mentalidad de
cambio y desarrollo,
haciéndose ellos mismos
protagonistas de su destino,
siendo conscientes de que
son ellos los responsables
de solucionar gran parte de
sus problemas personales, familiares, sociales y productivos.
Niños Machiguengas - IE Nº 64444 Shimaa – La Convención.
 Enseñar a hacer diagnósticos de sus problemas, poniendo énfasis en aquellos cuyas causas
son endógenas y solucionables, y planteando alternativas de solución viables y efectivas.

 Enseñar a relacionar causas y efectos a fin de ver que muchos de sus problemas tienen
solución y que están en sus propias mentes y comunidades el resolverlos.

 Estimularlos a ampliar sus aspiraciones y su voluntad de superación, a despertar un sentido


de resiliencia y de trabajo solidario para resolver sus problemas.

 Enseñarles a apreciar y usar creativa y sosteniblemente los recursos, tradiciones y cultura


de su medio.

 Demostrarles que con su esfuerzo, tenacidad y disciplina, pueden transformar su realidad y


convertir los problemas en posibilidades.

 Transmitir valores y actitudes de honestidad y honradez, puntualidad y responsabilidad, orden


y disciplina, compromiso y solidaridad ante el desarrollo familiar y comunal, espíritu de
iniciativa, dedicación y perseverancia, hábitos de ahorro e inversión para un futuro mejor.

 Proporcionarles una formación en valores, moral y cívica integral para que sean mejores
ciudadanos.

Todo esto no puede sino empezar con el ejemplo que damos los propios educadores, pues el
poder del ejemplo grita más fuerte que cualquier discurso de la voz más potente y del labio mejor
entrenado.

Es tiempo de reivindicar nuestra profesión cumpliendo a cabalidad la misión que adoptamos de


educar a los niños y jóvenes de nuestro querido Perú.

4. La educación instrumento de desarrollo, de reivindicación y de inclusión.

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La importancia medular que adquiere la educación en un mundo signado por la incesante
revolución científico-tecnológica, la convierte en un instrumento estratégico para el desarrollo
integral de nuestros pueblos y para garantizar la supervivencia de nuestro planeta.

Sin embargo, es preciso reconocer que la educación no es sólo instrumento de desarrollo


económico, sino también de desarrollo social, cultural, ecológico y humano. Hoy más que nunca,
la educación puede y debe ser también –y en sumo grado- un medio de reivindicación de los
sectores excluidos y postergados, y de encuentro sincero, pacífico y solidario entre todos los
peruanos y peruanas de todos los sectores sociales, políticos, económicos y geográficos. Tan
grande hazaña no podrá conseguirse sin contar con educadores reconocidos por la alta misión
que tienen que cumplir, y por los altos ideales que se espera que siembren entre sus pupilos y
testimonien con sus vidas.

La creación de un magisterio renovado, sensible a las demandas históricas, sociales, políticas y


económicas de nuestro tiempo es una tarea que compete a toda la sociedad peruana y no sólo a
los educadores y al Ministerio de Educación.

Proveer al Perú de los maestros y de la educación que necesita, supone un reto de grandes
dimensiones, de largo aliento y que demanda la participación de todos sus ciudadanos. En
principio implica el compromiso responsable del Estado, el magisterio y las organizaciones de la
sociedad civil, para acometer la empresa de la renovación magisterial.

El gobierno no puede seguir ignorando los avances, propuestas y normas gestadas hasta el
momento para mejorar los procesos de formación y capacitación del profesorado. Siendo
perfectibles hay algunos documentos que debe tomar muy en cuenta el gobierno: El libro Nueva
Docencia, investigación y propuesta liderada por José Rivero, a pedido del Ministerio de
Educación, y en el que participaron expertos en educación de distintas canteras del quehacer
educativo nacional; la Ley de Carrera Pública Magisterial, promulgada por el actual gobierno de
Alan García; el Proyecto Educativo Nacional, trabajado por el Consejo Nacional de Educación en
consulta con distintos actores del escenario nacional, y oficializado, también, por el actual
gobierno. ¡No faltan propuestas!

El gobierno también tiene la gran obligación de financiar la educación a fin de que logre los
resultados esperados. Perú sigue siendo uno de los últimos países con inversión en educación en
América Latina. Los compromisos del Acuerdo Nacional para incrementar el presupuesto de
educación hasta llegar a un mínimo de 6% del PBI tiene que cumplirse en el más breve plazo si
existe voluntad de darle a la educación el lugar que le corresponde como instrumento estratégico
de desarrollo nacional.

Tenemos que insistir en que el sistema educativo peruano no tendrá éxito jamás en la forja de
ciudadanos libres, autónomos, creativos, emprendedores, democráticos, solidarios y justos si no
cuenta con educadores bien formados y capacitados, si no se implementa un eficiente sistema de
monitoreo y acompañamiento y si no cuenta con maestros altamente motivados y capacitados
para realizar su labor. Todo eso tiene un costo y debe ser asumido por el gobierno.

Si bien el gobierno tiene una gran responsabilidad frente a la educación, no es menor la


responsabilidad que tenemos los educadores. El magisterio peruano tiene ante sí y ante la
sociedad peruana la grave responsabilidad de renovarse en su visión de futuro, en sus procesos
de capacitación y
autoformación, en sus
métodos de aprendizaje y
enseñanza, en su estilo de
trabajo y en su relación con
sus estudiantes, con sus pares
y con los padres y madres de
familia. Tiene la
responsabilidad de re-crear
sus aulas y sus escuelas
convirtiéndolas en auténticos
centros de investigación, de
experimentación, de
interacción humana, de

Mercado
Nuevos Maestros para un Nuevo Perú – Wilfredo Rimari Ariasde Tamshiyacu - Loreto 7
recuperación de la cultura y la lengua local y regional, de construcción de comunidades de
aprendizaje, de inclusión y de tolerancia. Tiene la responsabilidad de abrir las ventanas de la
escuela a la curiosidad y la vocación de sus educandos hacia las nuevas ocupaciones que
demanda el futuro cercano: la biología, la ingeniería genética, la ingeniería agropecuaria, la
ingeniería forestal, la agro-forestería, la ingeniería informática, la ingeniería de sistemas, la
ingeniería ambiental, la producción de software, la producción artesanal, el arte autóctono, la
producción y comercialización de bienes y servicios con base en nuestra riqueza cultural, la
gestión responsable y de calidad del turismo local y regional, el comercio por Internet, el dominio
de varios idiomas, etc., etc.

La renovación del magisterio peruano sólo será visible en las nuevas estrategias y estilos de
trabajo que implementa en el aula acordes con lo que señalo en el párrafo anterior, y en su
capacidad para hacer posible una escuela renovada en sus fines, en su gestión y en su relación
con su entorno.

5. No podemos sólos, hay que trabajar en Equipo.


Hace unos días atrás, un amigo me envió una carta, de fecha 02 de abril de 2007, escrita por P.
Juan Dumont, religioso y educador que ha inspirado con su vida y con sus palabras el movimiento
conocido como Equipos Docentes (EDOC). En ella, P. Juan escribe:

“¡Estoy feliz! ¡Feliz porque a los 82 años menos 3 meses, he reconquistado la Libertad que Dios
me había regalado..!

¿Travieso? ¡Sí, fui travieso! Desde el 12 de noviembre, no había salido de la gran Lima, donde la
gente trabaja bien, a pesar de las enormes dificultades de la capital… (que las provincias tienen
que entender)… ¡y me fui al Sur!

Primero a Tacna… Allí trabajé con el Equipo… y con una nebulosa de maestros/as amigos/as,
alrededor del Equipo, y con otros/as maestros/as… ¡El Equipo tiene que reunirse más! ¡Tiene que
reflexionar más!... He visto cómo el “castigo” del Ministro de la “Educación” puede aplastar a los
maestros que no participaron en la “evaluación”… “Tú no podrás capacitarte”… “Tú no podrás ser
capacitador/a, a pesar de tu preparación…”

Allí vi la división del magisterio ¡un espejo roto!...

- En las elecciones del Sindicato ganó tal tendencia… y… la tendencia vencida ¡soldó las puertas
de fierro del local sindical!... ¿Habré estado delante de la tumba simbólica del Sindicato? (…)

Moquegua, la bella durmiente, sus frutas, sus panes, su gente acogedora… ¡Gracias a los padres
de María… Su Equipo que se reunirá dos veces al mes, con una agenda de reflexión… y
preparará desde ahora la acogida para el Encuentro Regional… y abrirá su correo electrónico dos
veces a la semana, para compartir los documentos en comunidad… Si no “la bella seguirá
durmiendo”…

Empecé a ver en Moquegua cómo levantar al magisterio al visitar dos jardines infantiles. Allí palpé
el amor de los niños hacia las educadoras (maestras y personal de servicio)… He comprobado el
amor de las educadoras hacia los niños… He visto a unos niños heridos ya… y necesitando más
amor… Todo ello me ha hecho pensar que para salvar al magisterio ¡hay que ponerse abajo, al
nivel de los pequeños, amarlos, servirlos… y dejarnos amar! En Moquegua, en Ilo (el Jardín del
clan de Chabuca), en Arequipa, he experimentado esas fuentes de agua viva que pueden
renovarnos…

Luego fui a Ilo… Siempre organizado… Hablé con los profesores de “Fe y Alegría”, del colegio de
Angélica, del Jardín de Chabuca y compañía, los amigos educadores de adultos del Centro
Loyola, etc., etc… Viví una experiencia única en mi vida: hablé en la UGEL de Ilo (su Director fue
uno de los primeros equipistas) sobre el papel de la UGEL en la Educación y con los
educadores… ¡Alegría! Celebramos la Eucaristía en la iglesia de los franciscanos… ¡Asistieron
bastantes maestros!.... Y fueron bautizados: la nieta de Eufemia, el Carlitos de Julia y Carlos, dos
sobrinos de Julia… ¡Bello!

Nuevos Maestros para un Nuevo Perú – Wilfredo Rimari Arias 8


¡Gracias, equipistas de Ilo, y, gracias amigos/as de la comunidad cristiana más amplia con quienes
queremos caminar… Aprovecho de esa experiencia para decir: Los tiempos actuales de la Iglesia
son duros, a veces nos caen encima sospechas, acusaciones, calumnias… ¡No nos dejemos
aplastar! ¡Somos Iglesia! ¡La Iglesia es nuestra Iglesia!... Buscamos vivir el Evangelio gracias a
ella, a crecer con la Palabra compartida, los sacramentos vividos, y, a partir de nuestra Iglesia,
proponemos la Buena Nueva a nuestros hermanos y hermanas, descubrimos en ellos y ellas
semillas, gérmenes del Reino… Con los amigos que caminan en nuestra misma dirección
sepamos reunirnos, reflexionar, discernir nuestros caminos, celebrar… unidos a la Iglesia más
amplia, que es nuestra, y de la que NUNCA NOS SEPARAREMOS.

¡Por fin Arequipa!... En la parroquia de René, comiendo huevos de gallinas de chacra,


celebrando, confesando y multiplicando los encuentros: con los Equipos; con “Yachay Wasi”; con
tal Pedagógico; con el CEO de Mari Carmen, Estrella, etc.; con 40 profesores de la parroquia de
Tino; con una Misa compartida con los equipistas y amigos; con visitas a amigos (la madre de
Teresa, equipista, tiene ¡101 años!... Le prometí volver para sus 102 años, en enero del 2008); con
unas horas de turismo por el Museo del Convento de Santa Teresa (¡una maravilla!)… No tengo
suerte: no pude ver a la “Momia Juanita” de los glaciares… ¡esta vez la habían llevado al salón de
belleza!... Y he comido,… comido… y comido! Demasiado,... ¡pero delicioso!

Regresé a Lima el 28… Pasé del aeropuerto a un retiro de la plana directiva de la ODEC de
Chosica… ¡Muy interesante!... Fue en Chaclacayo… Después de unas horas de descanso, el 31
pasé a Chorrillos, donde el equipo asesor “predicó” y “celebró” los misterios de la fe a partir de los
símbolos de la Semana Santa: agua, pan, vino, cruz, tinieblas, luz… Asistieron equipistas y
familiares suyos…

¡Y al fin estoy en Caja de Agua! Listo para celebrar la Semana Santa aquí, en “La Providencia”
(asentamiento humano) y en la cárcel…

Me uno a la alegría de los amigos y familia de Alsina, que acaban de celebrar los ¡50 años de su
ejercicio magisterial!... ¡Un abrazo super fuerte, amiga!... También me uno al dolor de Telesvina
que acaba de ver partir a su mamá hacia el Amor total… El dolor tiene que ser grande… pero,
¡tenemos Esperanza!

Precisamente, con Zoila estamos programando una visita al Norte, alrededor de las fechas del
Encuentro Diocesano de Cajamarca. Además, Trujillo, Chiclayo, … ¿más? ¡Díganlo!)…

Y aquí van algunas conclusiones:

1) En este tiempo de aplastamiento del magisterio, de prueba educativa y también de


construcción; los Equipos, estos pobres grupitos tenemos tareas urgentes:

 Colaborar en la dignificación de la educación pública.

 Colaborar en la dignificación del magisterio…

 Colaborar en la toma de conciencia de que el gobierno, responsable de la educación del


pueblo, no puede construir esa educación sin los maestros.

 Colaborar en la toma de conciencia de que el Gobierno no puede matar las


organizaciones magisteriales… Ellas tienen sus límites, tienen errores y fallas que deben
reconocer y corregir, ¡claro está!... Pero hacer de ellas un chivo expiatorio del desastre
educativo ¡es una burla!... más aún: ¡es un absurdo!

Por otro lado:

 Tenemos que afirmar y demostrar que en la Escuela Pública, en el magisterio hay también
creatividad, búsqueda de verdadera capacitación, exigencia, honestidad y espíritu de
servicio… ¡Experiencias valiosas!

 Participemos en la aplicación del PEN (muchos colegas ¡no aún saben lo que es!!!), de la
construcción del PER, del PEI, de la discusión sobre la Ley de la Carrera Pública
Magisterial… Vemos que arriba se decide rápido y mucho… luego todo se entierra… ¡No
hagamos eso!

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2) En la división actual del magisterio, de sus organizaciones, los Equipos debemos ser, con
generosidad, agentes de re-conciliación, de fraternidad. Es una de nuestras tareas más
urgentes … Nos costará cruz, acusaciones, etc., etc… pero seremos discípulos de Cristo,
nuestra Paz, uniendo los dos pueblos.

3) En nuestra Iglesia dividida, donde tantos amigos y nosotros/as mismos/as sufrimos


marginación, sospecha, sepamos dejarnos guiar por el Espíritu… Que nuestros Equipos sean
realmente comunidades cristianas y no mediocres núcleos sin fuego en ellos… Que nuestros
Equipos unidos sean un Movimiento de Iglesia, ¡Iglesia!... Que sepamos encontrarnos con
tantos otros que reconocen en los pobres los rostros de Cristo… Con ellos reflexionar, rezar,
celebrar y avanzar… ¡Que sepamos vivir en Iglesia con nuestros hermanos más o menos
comprensivos (¿lo somos siempre nosotros/as?)…

“Que todos sean uno, como Tú, Padre, estás en mí y yo en ti. Sean también uno en nosotros,
Así el mundo creerá que Tú me has enviado” (Jn. 17, 21; ver 23).

4) Alrededor de los Equipos hay mucha gente de buena voluntad: ex-equipistas, futuros/as
equipistas, nuestras familias, gente que nos mira, nos ama… Forman parte de esa nebulosa a
la que nombraba antes… Sepamos encontrarnos a veces con ellos, reflexionar, rezar,
organizar retiros, ¡inventar!... (lo hemos hecho en Tacna, en Ilo, en Arequipa, en Lima)…
Tenemos que seguir… y seguir con los demás Movimientos, con personas aisladas pero en
búsqueda, etc… para hacer crecer la Iglesia desde abajo, desde la comunión en el amor…
Como jardines infantiles-adultos, a imagen de los modelos de Moquegua, Ilo, Arequipa…

Hermanos, hermanas todos/as, ¡Levantémonos! ¡Seamos la Iglesia de Cristo! Tengamos su


mirada al mirar a los hermanos todos… y descubriremos a Cristo… Y el Resucitado nos resucitará
diciendo: “¡Miriam!”… “¡Juana!”… “¡Elsa!”… “¡Miguel!”… “¡Carlos!”…

¡¡¡¡FELICES PASCUAS para todos y en toda América Latina!!!

Un abrazo fuerte

Juan”

Cuánta emoción, cuánta fe, cuánta esperanza depositada en el magisterio para hacer de la
educación pública, una educación al servicio de los más pobres. Cuánto esfuerzo, cuánta
dedicación y cuánto amor que ponen los equipistas para cumplir su misión educativa con fidelidad
y con la confianza de que es una tarea que trasciende a toda otra labor profesional porque está
inspirada en un mandato que se convierte en un gran servicio: humanizar al ser humano.

Con cuánta familiaridad y con cuánta sencillez y admiración se refiere Padre Juan a los miembros
de EDOC y comparte sus proyectos, avances y logros, y, al mismo tiempo, con cuánto dolor ve las
dificultades que hacen mella del
magisterio peruano y causan su
división.

Necesitamos Equipos Docentes en


cada escuela de nuestro querido Perú,
necesitamos construir organizaciones
magisteriales de base, unidas y
sólidas, con ideales y con esperanza
de que pueden alcanzar sus ideales

Nuevos Maestros para un Nuevo Perú – Wilfredo Rimari Arias 10


luchando juntos, sostenida y solidariamente, con una mística de trabajo y de servicio a prueba de
todo.

Necesitamos Equipos Docentes en cada escuela, dispuestos a dar vida a un magisterio renovado,
comprometido con la causa de hacer de la escuela pública una escuela
Docentes IE LuisdeVallejos
calidad, Santoni
donde los-
niños, niñas y jóvenes aprenden con placer y con efectividad, donde desarrollan sus capacidades
y sus valores, donde sus expectativas, demandas y necesidades son atendidas, donde se les abre
las posibilidades de soñar, inventar, proponer y diseñar proyectos de desarrollo personal, familiar,
local, regional y nacional. Necesitamos Equipos Docentes que hagan de cada escuela no un lugar
de trabajo sino un lugar de encuentro, de comunión, de fraternidad, de seguridad, de confianza, de
creación y de lucha.

Sin Equipos Docentes, sin organizaciones magisteriales de base que construyen solidariamente
una escuela renovada, el magisterio peruano no tiene salvación, tampoco los niños y jóvenes que
asisten a la escuela pública, menos el país.

Se dice con razón que la familia es la célula básica de la sociedad. Pues bien, cada escuela que
cuenta con organizaciones docentes que impulsan la mejora del servicio educativo es una célula
básica del desarrollo nacional. No habrá jamás desarrollo integral de nuestro país sin escuelas y
sin maestros que cumplen con dedicación y entrega la delicada misión de forjar las manos, las
mentes, el corazón y el espíritu emprendedor de sus educandos.

No partimos de cero. Junto con los Equipos Docentes, movidos por su compromiso de fe, hay en
el Perú otros movimientos, equipos y agrupaciones de docentes que vienen impulsando procesos
de cambio orientados a darle calidad, dignidad y humanidad a la escuela pública. Vale mencionar
entre ellos el movimiento Fe y Alegría, el Movimiento Pedagógico Permanente que agrupa a varias
organizaciones docentes, los Círculos de Autocapacitación Docente que acompaña el Instituto de
Pedagogía Popular, y tantos otros que dirigen y acompañan las Iglesias y algunas ONG. A ellos se
suman los grupos de interés formados por docentes y otros profesionales, para reflexionar juntos
sobre la educación, plantear alternativas e intercambiar experiencias pedagógicas exitosas,
usando como medio el Internet. Constituyen comunidades virtuales donde se comparte generosa y
libremente ideas, pensamientos, sentimientos, esperanzas e ideales de una patria mejor
construida desde el aporte específico de los educadores.

Un nuevo magisterio con una poderosa mística de servicio, premunido de una vitalidad y una
esperanza indestructible está floreciendo en todas esas experiencias sencillas pero significativas
de innovación y cambio, ofreciéndole al Perú su entusiasmo y su esperanza para sentar las bases
de una nueva educación. Una educación que se asienta en el servicio a los más pequeños y con
sencillez y humildad pretende servir a su desarrollo y al desarrollo integral de nuestro país.¿Estás
dispuesto a sumarte a esa generosa empresa magisterial? ¡BIENVENIDO!

Nuevos Maestros para un Nuevo Perú – Wilfredo Rimari Arias 11

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