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Libro I:

EL ALTO CONOCIMIENTO ESPIRITUAL


(5ª edición - 1999)

por Lawrence & Michael Sartorius


(a excepción de notas acreditadas)
http://www.islandnet.com/~arton/newearth.html

Traducción: Martha Sánchez Llambi


ballenas2012@prodigy.net.mx
*

Capítulo 1: CREACION
Capítulo 2: EVOLUCION
Capítulo 3: VIBRACION Y DENSIDAD
Capítulo 4: NUESTRO YO SUPERIOR Y GUIAS
Capítulo 5: UN PLANETA PARA APRENDER
Capítulo 6: KARMA Y REENCARNACION
Capítulo 7: MUERTE Y RETROSPECCIÓN
Capítulo 8: NACIMIENTO Y CRECIMIENTO
Capítulo 9: REGRESANDO A LA UNIDAD

CAPITULO 1: CREACION

La creación, en el sentido de nuestra actual fase de evolución, es


decir,nuestra 'parte' del proceso Creativo, puede ser vista en tres
etapas, que pueden llamarse mental, física y espiritual. La primera etapa es el
Pensamiento o Plan. La segunda involucra la manifestación de la materia
sólida. Y en la tercera, se agrega la fuerza de la Vida para que, 'basada' y
radicando en la materia creada, 'chispas' individuales de Fuerza-de-Vida,
puedan evolucionar, interactuar y contribuir al proceso creativo.
El origen de toda creación es la energía pura de pensamiento. Nada puede
existir, o ser creado o manifestado sin antes tener su origen primario en
forma de pensamiento. Esto lo podemos ver en nuestra vida cotidiana y en
nuestras actividades, desde planes sociales y horarios de trabajo hasta el
diseño de un producto o la construcción de un edificio. Nada puede
manifestarse físicamente sin haber sido antes conceptualizado en forma de
pensamiento. Primero planificamos, luego creamos. El pensamiento es una
fuerza, un poder que precede toda acción, toda creación en cualquier nivel.
Y el Origen de todo Pensamiento dentro de nuestro Cosmos actual es el Ser
que llamamos Dios, nuestro Creador Primario.
Nuestro Creador Primario es la fuente de la 'Fuerza de Pensamiento'
original. Él se manifestó en algún punto que desconocemos dentro del enorme
'Vacío' de nuestro Cosmos, aunque Él mismo era posiblemente parte de un
Cosmos o Entidad Cósmica todavía un mayor. Él inició Su primera fase de la
creación proyectando Su 'fuerza de pensamiento' dentro del Gran Vacío Oscuro
que le rodeaba, creando con ello una matriz alrededor Suyo de 'Mundos de
Materia' en expansión. Estos fueron creados inicialmente fuera de la energía
de la Luz, habiendo descendido ella misma de la frecuencia de la Fuerza de
Pensamiento Creador original. Esta fuerza-de-Luz pudo entonces disminuir su
frecuencia todavía más para la creación de materia y de mundos más sólidos.
Finalmente, Él proyectó - dentro de estos mundos de materia recientemente
creados - unidades de Sus propias células de Conciencia, que crecerían y
evolucionarían a su vez fuera de Él, agregando un elemento espiritual a los
mundos de Materia Creada. A través de sus múltiples interacciones y
experiencias de vida en estos mundos de materia, estas unidades crecerían en
conocimiento y estado de conciencia, y esas conciencias evolucionadas
podrían entonces ser agregadas a Su Propia Conciencia en continua evolución,
permitiendo expandirse dentro de una Entidad todavía mayor.
"El Creador, en un determinado punto de Su evolución, dijo: "Quiero explorar
todo; quiero aprender; quiero conocer; quiero comprender todo." Y
virtualmente Él lo comprende todo, pero también Él quiere expandirse. El
Creador se está expandiendo - existe siempre un proceso de alumbramiento,
de descubrimiento, en espiral, que se está desplegando en el nivel más alto.
Y Él estableció un sistema, y ese sistema lanza lo que ya ha sido integrado
a otro nivel, para que Él pueda explorar ese nuevo nivel y aprender de él".
( Maestro Vywamus - Canalizado por Janet McClure en "Prelude To Ascension",
publicado en 1996 por Light Technology Publishing, P.O.Box 1526, Sedona, Az
86339.]
Antes de comenzar esta nueva fase de la Creación - a Su derredor - de Mundos
de Materia, el Creador estableció una 'Barrera de Limitación' circundante
conocida dentro del esoterismo como el 'Anillo-No-Pasa'. Sin esta Barrera de
Limitación, Su Fuerza de Pensamiento, proyectada dentro del Vacío que le
rodeaba, habría sido totalmente disipada, su energía estaría perdida en la
vastedad del espacio y, por ende, ninguna Creación efectiva hubiera sido
posible.
La continua proyección hacia afuera de la energía de Pensamiento del Creador
contra el Anillo-No-Pasa establece un ciclo constante de flujo de energía de
Pensamiento hacia afuera y de vuelta. Esto se manifiesta como un ciclo
rápido alternado de fuerza, una ola de frecuencia vibratoria
positiva-negativa. Esta es la "fuerza motriz" de todo lo que conocemos como
Creación; toda vida y 'materia' dentro de nuestro Cosmos vibra en una
frecuencia particular, o responde a un rango específico de vibración.
La fuerza de pensamiento del Creador que sale y regresa es el origen de dos
polaridades en oposición que existen en toda la Creación: la positiva y la
negativa. Estas dos polaridades son un componente fundamental básico de toda
la Creación y todo se manifiesta dentro de esta dualidad de energía: una
fuerza positiva en oposición a una fuerza negativa. La fuerza negativa por
sí misma actúa como un 'bloque de empuje' contra la cuál la fuerza positiva
puede entonces manifestarse como 'materia'.
La segunda etapa de la Creación, la manifestación de lo que llamamos
'materia', surge de la interacción entre las olas de Pensamiento vibrante
que sale y regresa, y que se ralentiza cuando sale y entra dentro de la
frecuencia vibratoria de la Luz.
En el punto en que estos ciclos de fuerza positiva y negativa se encuentran
al salir y regresar, lo hacen interactuando en el punto de intersección y
entonces causan un 'cierre' de fuerza, una 'ola constante' de dos fuerzas de
luz en direcciones opuestas que neutralizan el paso de cada una a través del
espacio. Este 'cierre' de fuerza permite, entonces, a través de una
combinación de atracción y repulsión, el acrecentamiento de material
estacionario de 'materia' conocido por nosotros como átomos. Estos átomos
atraen otros átomos al establecer órbitas de 'cierre' de atracción-repulsión
magnético. Otros incrementos mayores de átomos son entonces atraídos para
construir más 'materia' y así el proceso continúa. Es este proceso básico de
'crecimiento sobre crecimiento' el responsable de la existencia y el
crecimiento continuo de todos los mundos materiales más sólidos a nuestro
alrededor.
A medida que la vibración de Pensamiento saliente-entrante, con su
resultante creación de materia, se convierte en una acumulación de compleja
materialidad, siempre en aumento, que expande la Creación más y más allá de
su Centro de Origen, así su rango vibratorio es progresivamente retardado.
Estas reducciones progresivas en el rango vibratorio en turno causan que el
Pensamiento-Puro se manifieste en una mayor densidad y solidez de forma
material, dependiendo de su 'rango' o distancia del Centro de Pensamiento.
Por lo tanto, mirando o visualizando el Centro de Pensamiento con sus
Vibraciones de Pensamiento creadoras de vida y energía, que salen y
regresan, podemos visualizar aún más estos rangos de Vibración que se
debilitan, que pierden fuerza a medida que se alejan más y más del Centro.
Podemos, convenientemente, 'dibujar' tres círculos de radio en ampliación,
como las ondas en una charca, representando los tres niveles mayores de
vibración/densidad. o Planos de la Creación, que con el tiempo se han
desarrollado entre el Centro de Pensamiento y el Anillo-No-Pasa exterior.
Estos tres círculos, niveles o planos de existencia pueden ser identificados
como: El Plano de Luz Espiritual cercano al Centro, luego el Plano Etérico,
y el mas lejano del Centro como el Plano Físico denso.
El primer 'rango' de expansión de la Fuerza de Pensamiento del Creador que
sale para aumentar la complejidad de la Creación, ha disminuido la
frecuencia vibratoria de la energía-de-pensamiento a solo Luz Pura. Este
nivel espiritual todavía elevado se expresa como una luminosidad
blanca-dorada que se irradia desde el Centro del Pensamiento, el 'Sol
Central' del Cosmos que conocemos. Por lo tanto, el Pensamiento Puro es
ahora transmutado a una vibración de Luz y se manifiesta como una Fuerza de
Luz electromagnética positiva-negativa. Esta vibrante Fuerza de Luz
electromagnética expresa el mismo patrón que existe en toda la Creación
inferior: electrones y protones oscilando alrededor de un núcleo para crear
un átomo, y los átomos agrupándose para formar moléculas más grandes.
El siguiente gran paso hacia abajo desde los altos planos espirituales de
Luz Pura hacia los mundos de incrementada complejidad es el 'Plano Etérico'.
La energía-pensamiento de Luz Pura de baja vibración es ahora disminuida al
nivel de vibración 'etérica', la 'materia' aglutinada que a nuestros densos
sentidos físicos parecería como una forma de materia tenue y distante, capaz
de interpenetrar nuestra propia materia física. La materia etérica es
también conocida por nuestros científicos de lo oculto en la Tierra como el
Éter, un fluido electromagnético o continuum que interpenetra todos los
cuerpos celestes y el espacio exterior, así como toda materia física.
Finalmente viene el plano de densidad más baja de todas, con la solidez más
grande material creada: el denso Plano Físico con el que estamos bien
familiarizados aquí en la Tierra. Este plano exhibe todos los patrones
fundamentales de materia creada en su nivel más básico, demostrando los
verdaderos "bloques de construcción" de la Creación. De esta manera, provee
un ambiente para aquellos que deseen explorar las profundidades del proceso
creativo, para examinar el intricado patrón de materia en mayor y más
completo detalle.
Por lo tanto, de los ciclos de Pensamiento Puro que entran y salen, y la
interacción entre ellos, tenemos la Creación de la Materia, variando en
densidad a medida que se aleja del Centro.. Tres niveles mayores de
densidad han sido identificados; éstos, a su vez, brindan "niveles"
diferentes de materia, cada uno adecuado a un nivel o a una fase de
evolución diferente.
Este patrón básico de un Centro de Luz-Pura con radiación hacia el exterior
es repetido muchas veces. El Gran Sol Central irradia una intensa fuerza de
Luz a través del Cosmos. Alrededor de este Gran Sol Central orbitan una
docena de Universos totales conocidos, cada uno con su propio Sol Central
alrededor del cual completan su órbita un sistema de galaxias aún más
lejano. Y alrededor de cada Sol Central Galáctico de una Galaxia existen
millones de sistemas solares en órbita, de nuevo, cada uno con su propio Sol
Central alrededor del cual también efectúan sus órbitas sus planetas
deshabitados. El mismo orden de diferentes planos de densidad también rodea
e interpenetra cada punto focal de energía de pensamiento, es decir, cada
planeta, sol o cualquier otra esfera celeste.
La tercera etapa del proceso creativo básico involucra el "aliento de vida"
espiritual, la manifestación de formas de vida espiritualizadas que pueden,
ellas mismas, crecer, crear, interactuar, experimentar y contribuir a la
Fuerza y Flujo Universal Creativo.
El gran 'Plan Divino' del Creador ha sido el introducir en su matriz de
Mundos de Materia creados, elementos 'Espirituales' de Su propio Ser, partes
de Su propio Espíritu-Conciencia proyectados fuera de sí mismo. Por lo
tanto, Él ha dado a luz partes de Sus propias células como 'Chispas de
Espíritu' en evolución y las ha enviado al exterior en un largo 'arco' de
evolución, hacia abajo, a través de mundos de 'materia' creada, para
aprender desde su complejidad, y para que se conviertan en Seres totalmente
desarrollados, pero conscientemente separados. Al observar sus variadas
interacciones - uno con el otro y con todo lo que les rodea en los mundos de
materialidad, y a partir de sus experiencias subsecuentes y lecciones
aprendidas, Él tiene la capacidad de expandir Su propio conocimiento y
crecimiento hacia nuevas posibilidades "fuera" de Sí mismo.
Lanzadas hacia esas matrices de materia aún en desarrollo, las primeras
'Chispas de Espíritu' creadas a partir del Plano de Luz más alto, como los
Seres de Luz o 'Elohims' originales, empezaron - gracias al impulso y
conducción del Creador - a co-crear los primeros mundos materiales de baja
evolución de formas líquidas y sólidas.
Estos seres de Luz Originales fueron alentados, después de haber co-creado
mundos materiales, a dar a luz a otras extensiones de espíritu/luz de ellos
mismos. Así fue creada una creciente jerarquía de almas que se iban a
embarcar en el gran ciclo de Evolución, lejos de la unidad del Creador, a
través de mundos de materia y, eventualmente, regresar a la unidad del
Creador como individuos totalmente conscientes y alertas. Estos
espíritus/almas en evolución iban a crear, durante su largo descenso, más y
más mundos materiales complejos y densos para habitarlos y experimentar la
riqueza de la vida, y también dar a luz a todavía más extensiones-de-alma de
ellos mismos como niños de su propio espíritu. Y así fue que con el tiempo
esos vastos universos se fueron desarrollando, cada uno conteniendo millones
de Galaxias, y dentro de cada Galaxia, grandes números de Sistemas Solares
provistos de sus propios complementarios y circundantes Planetas habitados y
almas individualizadas.
Desde el principio, el Creador también dio a luz una jerarquía especial de
Ángeles y Arcángeles como un equipo de 'Servidores de la Creación' que se
iría desarrollando por separado. Estos habrían de actuar como Mensajeros
Celestiales para asegurar el mantenimiento vital de nutrición y crecimiento
de todas las formas de materia creada en los diversos Universos. Al servir
como dedicados y constantes Servidores de la Creación, no se les ha dado la
misma latitud de 'libre albedrío' para apartarse y explorar fuera del Gran
Plan Evolutivo del Creador, como nos es permitido a nosotros - almas en
evolución - por medio del aprendizaje a partir de la dualidad del 'bien' y
el 'mal'.
En la Tierra tenemos muchas órdenes inferiores de este Reino Angélico que
trabajan para nuestro beneficio de manera invisible; aquí son conocidos como
la Evolución Dévica. Por ejemplo, uno de los grupos principales dentro del
mundo de la naturaleza es el Reino Elemental, cuya tarea principal es la de
asistir al crecimiento y mantenimiento de los Reinos Mineral y Vegetal.
Estos son los Espíritus de la Naturaleza, los Elementales y las Hadas,
visibles únicamente a aquellos humanos con vista 'psíquica'.
Después de un largo período de evolución la primera ola de Elohims -
almas/espíritu -, en su descenso desde el camino de exploración y evolución
de los altos Planos Espirituales de Luz originales, crearon el nivel
inferior del Plano Etérico. Aquí, a través de eones de tiempo también
crearon los reinos Etéricos mineral, animal, vegetal y humano sobre planetas
etéricos, en donde la vida era todavía relativamente espiritual, pacífica y
fácil de vivir. Sin embargo, estas almas/espíritu mayores sintieron otro
impulso que fue el de sondear más allá hacia una mayor complejidad material
dentro de sus exploraciones de vida camino abajo en el arco de la evolución.
Por lo tanto, a través de un largo período de tiempo, crearon todavía una
mayor y mas densa forma de materia de un rango vibratorio mas bajo que
incluyera otros mundos habitados. De esta manera el Plano Físico denso fue
desarrollado, éste que habitamos actualmente llamado Tierra así como otros
planetas físicos.
Cuando estos Co-Creadores colonizadores comenzaron a crear un planeta físico
como la Tierra, tuvieron que partir desde los patrones fundamentales de la
creación que involucraban una mayor complejidad atómica. Tuvieron que
hacerlo desde lo más básico de la Creación al crear 'glóbulos' de materia
primitiva en evolución, tales como las amebas y una vida vegetal muy simple.
Al paso de millones de años ellos gradualmente pudieron construir una vida
mineral y vegetal más desarrollada que iba creciendo en complejidad, en
detalle y en refinamiento. Los resultados pueden ser vistos ahora en la
sorprendente variedad, valor y belleza de la vida mineral, vegetal y animal
que nos rodea aquí en la Tierra. Aunque podamos imaginar irreflexivamente
que eso 'simplemente sucedió', cada árbol, flor, mariposa, animal y ser
humano terrestre ha sido amorosamente 'diseñado' y los Creadores Elohims
originales que surgieron de niveles espirituales más altos les dieron un
método para propagarse y crecer.
Dentro de estos nuevos mundos de materia inferior, capaces de sostener más y
más formas complejas de vida, los Espíritus Mayores dieron a luz otras
oleadas de jóvenes extensiones-de-alma de ellos mismos, destinadas
eventualmente a continuar el proceso de su creación sobre estos nuevos
niveles inferiores. Las Almas Mayores entonces tendrían la capacidad de
aprender aun más de las experiencias de su progenie en espíritu. A través de
este largo proceso de vivir y crear en densos mundos físicos, todas las
almas, jóvenes y viejas, desarrollaban una cada vez mayor conciencia de ser
un yo-individual separado de la propia conciencia del Creador. Mediante este
aprendizaje de nuevas y contrarias alternativas, la difícil selección y las
dolorosas lecciones de planos inferiores, todos iban a evolucionar
eventualmente en Seres conscientes y sabios, merecedores de convertirse en
co-creadores junto al Creador.
Y así, mientras las últimas oleadas de almas seguían descendiendo a estos
bajos mundos de materia, experimentando y siendo afectadas por la densidad
vibracional aumentada y la complejidad que les rodeaba, iban desarrollando
un fuerte y creciente sentido de individualidad separada del Creador, un
fuerte sentido del yo separado e independiente de la propia Conciencia del
Creador.
Esta especie de identidad individual, del yo individualizado, con el tiempo
se convirtió en un gran conflicto entre el Yo y la Unidad del Creador, entre
la Materia y el Espíritu. Este conflicto es actualmente la etapa dominante
de la evolución que se experimenta aquí y ahora en la Tierra.
Este conflicto ha surgido como resultado de, o la expresión del don del
Creador llamado libre albedrío o libertad de selección, por el que Él ha
permitido a las almas exploradoras salientes tomar su propio camino de
evolución, para experimentar, para explorar sus propias direcciones
evolutivas y, consecuentemente, cometer sus propios errores para llegar al
'fin del camino' evolutivo. La intención siempre fue que ellos encontraran
su propia dirección evolutiva influenciados en lo posible por la propia y
pre-determinada Voluntad y Conciencia del Creador.
Sólo a través de este proceso seremos verdaderamente capaces de adquirir una
profunda sabiduría; debemos tomar nuestras propias decisiones y aprender de
nuestros propios errores y los consiguientes efectos, buenos o malos. Al
mismo tiempo, la propia conciencia del Creador y su conocimiento están
siendo ampliamente expandidos a medida que nuestras múltiples experiencias
van hacia Él. Estos actos de co-creación ayudan a expandir y desarrollar aun
más el Cosmos del Creador para lograr una mayor Entidad combinada, dentro
del profundo Vacío que nos rodea.
Sin embargo, este 'don' del libre albedrío puede ser visto en ocasiones aquí
en la Tierra como una maldición, cuando vemos el daño que hemos hecho al
usarlo. Pero también debemos ver el lado positivo de su potencialidad a
medida que reconocemos y desarrollamos la creatividad individual del hombre
ligado a la Tierra en el campo de la arquitectura, el arte, la música,
literatura e ideas. E incluso el 'mal' que hacemos; las guerras, conflictos
y la destrucción del medio ambiente, nos enseñará valiosas lecciones que
tendrán como resultado una sabiduría más profunda. En última instancia,
debemos ver el libre albedrío y nuestras posibilidades creadoras como son
vistas ya en niveles más altos: un regalo Cósmico que nos ha sido dado como
un experimento de la Creación Divina.
A medida que aprendemos a discriminar entre el Camino del Interés Personal y
el Camino de la Ley Universal, de la misma manera crecemos en la sabiduría
que da la experiencia. Con esa sabiduría seremos al final 'calificados' para
co-crear a niveles más altos, con el poder, el privilegio y la
responsabilidad de un juicio independiente. Aunque este estado de sabiduría
puede estar todavía muy lejos, podemos, sin embargo, mantenerlo frente a
nosotros como una inspiración y un objetivo luminoso.
"Esta Tierra es un lugar muy especial. Habéis recibido los dones supremos
del Dios-Mente: la divinidad, la creatividad, y el libre albedrío. Sois, en
esencia, Dioses en proceso y esta Tierra es una escuela para Dioses. Sois
altamente privilegiados al encarnar en Ella, al ser parte de la escuela de
la Tierra y al avanzar vuestras conciencias espirituales a través del
ejercicio de esos talentos Cósmicos. Existen muchos Seres en otros planetas
a quienes no se les permite alcanzar la conciencia de esta manera. Ahora
podéis ver po qué la Tierra es vista con envidia por otros planetas en el
Sistema Solar, porque no todos ellos poseen ese poder De hecho, tenéis el
poder y el destino para dejar atrás cualquier otro plano de conciencia
dentro del Cuerpo Solar si tan solo pudierais someter vuestro ser y
dirigirlo con sabiduría y amor."
[El Maestro ZEN TAO, canalizado a través del Centro Ramala, Glastonbury.]

EL ALTO CONOCIMIENTO ESPIRITUAL<o:p></o:p>

(5ª edición – 1999)<o:p></o:p>

por Lawrence & Michael Sartorius<o:p></o:p>

(a excepción de notas acreditadas)<o:p></o:p>

http://www.islandnet.com/~arton/newearth.html<o:p></o:p>

Traducción: Martha Sánchez Llambi


<ballenas2012@prodigy.net.mx><o:p></o:p>

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Capítulo 1: CREACION<o:p></o:p>

Capítulo 2: EVOLUCION<o:p></o:p>

La Creación en sí es una expansión del pensamiento y auto-conocimiento de


nuestro Creador. La evolución de las entidades álmicas es otro aspecto de esta
expansión. A través del proceso de Evolución, las almas individuales, cada una una
‘chispa’ de la Conciencia del Creador, se embarcan en un viaje de exploración y
crecimiento para finalmente regresar a la unidad con el Creador, dotados con la
totalidad de sabiduría y experiencia.<o:p></o:p>
En su descenso evolutivo hacia los mundos de materialidad, el Alma desarrolla
cada vez más su conocimiento del yo como entidad individual. El ego-yo se torna
más asertivo gradualmente, ganando fuerza y ampliando su campo de exploración.
A medida que desciende hacia los mundos de densidad y de materia, el auto-
conocimiento se convierte en ego-centrismo, dando lugar al deseo de ganancias
personales y a un sentimiento de superioridad, en ocasiones adquirido
agresivamente, a veces hasta con violencia. Cuando todas las posibilidades de su
ego-desarrollo han sido completamente exploradas puede empezar entonces su
viaje de regreso hacia planos más altos de unidad, aprendiendo las artes de
cooperación más gentiles, compartiendo con otros. La culminación eventual va a
ser su reunificación con la Unidad del Creador en forma de un alma evolucionada,
totalmente consciente y llena de compasión.<o:p></o:p>

Y es de esta manera que iniciamos el gran Ciclo de Evolución. Conforme el alma o


espíritu va descendiendo hacia mundos cada vez más densos y materiales, va
desarrollando su correspondiente sentido de individualidad.<o:p></o:p>

“Durante el descenso del Espíritu, en ocasiones llamado el arco descendente, no


existe únicamente una tendencia hacia una mayor materialidad, el Espíritu va
envolviéndose en materia para poder aprender a recibir impresiones a través de ella,
pero también hay una tendencia hacia la diferenciación, la corriente de Vida Divina
va dividiéndose y sub-dividiéndose en un cada vez mayor número de pequeños
arroyos y unidades de conciencia.<o:p></o:p>

[‘The Solar System’ por Arthur E. Powell – Theosophical Publishing House


London Ltd]<o:p></o:p>

Por el hecho de descender progresivamente hacia una materia más y más densa, el
alma experimenta una creciente separación y pérdida de contacto con las Esferas
Superiores. Al mismo tiempo, el alma va desarrollando y experimentando un
sentido de separación de las otras almas, y el aumento correspondiente en la
conciencia del yo que, a su vez conduce al egocentrismo. Esta incrementada
sensación del yo es reforzada por la necesidad de satisfacer los requerimientos de
un cuerpo físico en un mundo de materia densa, en donde al alimento y la
protección de los elementos son esenciales para la supervivencia. De esta manera la
combinación de alma + cuerpo se ve forzada a enfocarse en la propia
supervivencia, la cual puede volverse fácilmente competitiva y explotadora en sus
relaciones con demás, que a su vez persiguen objetivos similares.<o:p></o:p>

Esta potente combinación de los efectos de la materia física, el egocentrismo y las


exigencias corporales, primero crea y luego intensifica a un grado extremo el
conflicto entre el Ego y la Unidad: entre el Yo y el Flujo de la Creación. Este
conflicto inherente suministra, a su vez, muchas y complejas oportunidades para
ejercitar el don del libre albedrío (o voluntad propia) de nuestro Creador, lo que
permite al alma en evolución explorar senderos y direcciones evolutivas
alternativas hacia la Sabiduría Superior y, por lo tanto, experimentar y aprender a
partir de sus efectos. <o:p></o:p>

Ciertamente estamos forzados a confrontar y aprender de los resultados de todas


nuestras acciones; esta ‘Ley’ es expresada en la Sabiduría Oculta y en las filosofías
Orientales como la ‘Ley del Karma’: es decir, que debemos experimentar,
comprender plenamente y asimilar los efectos de todas nuestras acciones, tanto
‘buenas’ como ‘malas’, antes de que podamos continuar hacia nuestra siguiente
lección o experiencia. Cada pensamiento, cada acción, tiene su efecto, del cual
debemos, en última instancia, experimentar y aprender. De igual manera, todo lo
que nos sucede tiene una causa y esa causa puede entenderse como originada en
nuestras acciones pasadas o en nuestro pensamiento. Causa y efecto. Todo lo que
ahora existe es el resultado de acciones pasadas, buenas o malas; y el futuro será el
resultado de las acciones presentes.<o:p></o:p>

Al experimentar los efectos de estas acciones, el alma en evolución aprende a


discriminar entre ‘bueno’ y ‘malo’ de esas acciones, que aspiran a o se oponen al
sendero de la Sabiduría Superior, esas acciones que promueven el yo y el ego
versus aquellas acciones que reflejan el mayor bien universal colectivo; esas
acciones que son positivas y creativas versus aquellas acciones que son negativas o
destructivas.<o:p></o:p>

Así, el alma gana una mayor sabiduría, que no podría obtenerse de otra manera si
se siguiera el ‘sendero recto y estrecho’. Es solamente a través del conocimiento de
lo ‘malo’, tanto de sus causas como de sus efectos, que el alma en evolución puede
comprender lo ‘bueno’ en su total y genuino entendimiento, resultante de una
experiencia física y emocional. Porque aprender a evitar el ‘mal’ no llega sin sufrir
sus resultados; ciertamente experimentar los efectos desagradables de acciones
inapropiadas es la llave esencial para el aprendizaje y, por ende, un importante
elemento de la evolución.<o:p></o:p>

La concentración por parte del ego en la auto-motivación y el auto-interés, que


representa el factor dominante de la parte descendente del arco evolutivo, lleva
inevitablemente a un conflicto mutuo competitivo, a medida que cada ego-
individual trata de aprovecharse de ello y ‘obtener lo mejor’ de los otros. Esto
explica porqué las relaciones políticas y sociales en la Tierra han tendido a
dominar el pensamiento humano y la actividad de grupo. También explica porqué
hemos fallado tan rotundamente hasta ahora para vivir en paz el uno con el otro.
La simple regla de un comportamiento político correcto, o sea: que no hagamos
nada que sea dañino para los otros, es aceptada en casi todos los mundos más
desarrollados que el nuestro.<o:p></o:p>

Esta fijación en desarrollar nuestra individualidad a expensas de los otros ha


provocado la mayor parte de los problemas experimentados por la Humanidad en
la historia de la Tierra. Y también ha causado el que muchas almas ‘caigan’ aún
más. A través de actos negativos y pensamientos manifestados en varias formas de
opresión, asesinato, tortura y perversión, estas almas acaban por encontrarse
enredadas en los Mundos Astrales, obscuros y densos, en lo que llamamos el ‘Bajo
Mundo’ o ‘Infierno’ cuando salen del plano de la Tierra.<o:p></o:p>

Además, algunas almas particularmente ‘rebeldes’ por su fiera voluntad, o


aquellas que no han desarrollado una capacidad emocional, han creado dentro de
nuestra Galaxia grupos de mundos planetarios totalmente separados del Plan
Evolutivo del Creador. Estos son ciertamente Mundos Oscuros y desde ellos han
buscado, por medio de conquistas y guerras galácticas, ganar poder y avanzar a
través de la Galaxia, utilizando la esclavitud y la perversión de aquellos más
débiles que ellos. <o:p></o:p>

Estas almas ‘oscuras’ y ‘negativas’, conocidas de forma colectiva en el mundo de lo


oculto como las ‘Fuerzas de la Oscuridad’, han tenido en el pasado distante un
éxito parcial al dominar varias veces al Planeta Tierra. Elementos de estas
‘Fuerzas de la Oscuridad’ han permanecido subsecuentemente en el trasfondo de
nuestro mundo, buscando constantemente convertirse en el poder detrás de varios
regímenes opresivos y de líderes voluntariosos; promoviendo guerras, conflictos y
opresión. Afortunadamente, cualquiera que fuera su influencia, en estos
momentos está siendo limpiada de la Tierra por la Jerarquía Espiritual, a tiempo
para la pronta Ascensión de nuestro Planeta al nuevo Milenio. De hecho, a las
Fuerzas de la Oscuridad se les están reduciendo sus poderes en toda nuestra
Galaxia en preparación para el inminente Ciclo de la gran Ascensión Galáctica,
que coincide con la nuestra.<o:p></o:p>

Dentro de nuestra Galaxia, generalmente estas Fuerzas Oscuras han sido


contenidas físicamente por las más fuertes y numerosas ‘Fuerzas Intergalácticas de
Luz’. Sin embargo, esto no ha sido fácil, ya que en el pasado han tenido lugar en
nuestra Galaxia algunas poderosas batallas interestelares entre las Fuerzas de la
Luz y las Fuerzas de la Oscuridad. Pero, al final, las Fuerzas de la Luz deben
triunfar y siempre lo han hecho, pues el sendero positivo ascendente del amor y la
conciencia de los demás debe ser el destino final de toda la Creación
evolutiva.<o:p></o:p>

Aun estas almas rebeldes, habiendo ‘caído’ en mundos de oscuridad, también están
aprendiendo de su propia experiencia del mal. Eventualmente ellas van a cansarse
del constante conflicto competitivo; al final se sienten impulsadas a empezar a
buscar la salvación, hacia arriba, hacia los Reinos de la Luz. Cuando
genuinamente empiecen a buscar la Luz, siempre serán diligentemente asistidos
por sus Guías Espirituales en su ascenso hacia planos superiores.<o:p></o:p>

Y así, estas almas ‘errantes’ eventualmente redescubrirán por sí mismas,


arduamente, la verdadera dirección de la evolución. Regresarán al Camino de la
Sabiduría, no solo mucho más sabios, sino ciertamente como almas más fuertes
que muchos de nosotros, con una capacidad de comprensión mucho más profunda
de lo que es ‘correcto’ y lo que es ‘equivocado’. Así, aun las expresiones más
extremas del ‘mal’ pueden contribuir al conocimiento, al aprendizaje y a la
experiencia que componen la esencia misma de la evolución.<o:p></o:p>

A medida que experimentamos las guerras y los conflictos en sus numerosas


manifestaciones, entre naciones y grupos étnicos o religiosos a lo largo del mundo,
en política y en comercio a nivel nacional o local, en nuestras propias familias o en
nosotros mismos, llegamos finalmente al verdadero entendimiento de la naturaleza
y la comprensión de la inutilidad de una agresión motivada por el yo, de acciones
basadas puramente en el auto-interés individual ejercitado a expensas de
otros.<o:p></o:p>
En el desarrollo de esta consciencia, ya sea individual o colectivamente, nosotros,
los que estamos en la Tierra, estamos llegando por fin al final del largo y
descendiente Arco de Evolución, la fase de individualidad competitiva.<o:p></o:p>

Este es el punto crítico del no retorno, el punto del equilibrio: el movimiento


descendente hacia un estado de separación, lejos del Creador, que da un giro,
convirtiéndose en el sendero ascendente hacia la Unidad junto con las demás
formas de vida. A partir de este punto empezamos a ver las ventajas de la
colaboración y la cooperación, del respeto y la asistencia mutuas.<o:p></o:p>

El punto en donde se realiza el giro es, sorprendentemente, el punto de mayor


conflicto dentro de cada alma y también en forma colectiva dentro de las
sociedades y naciones. En este tiempo crítico sobre la Tierra – y es por ello que
muchos de nosotros hemos escogido estar aquí en este preciso momento –
aumentan las decisiones inherentes a nuestro mundo de dualidad: el Yo versus la
Unidad, y el Espíritu versus la Materia. Aquí también las Fuerzas de la Oscuridad,
viendo la forma en la que nos movemos, están tratando desesperadamente de
mantener una ‘última trinchera’ de control sobre la Tierra, redoblando sus
esfuerzos para distraernos de nuestro camino de regreso a la Unidad.<o:p></o:p>

“Esta es la gran batalla del Universo, el tremendo conflicto entre el Espíritu y la


Materia. En esta parte del Campo de Batalla se encuentra el punto de equilibrio. El
Espíritu, habiendo teniendo innumerables relaciones con la Materia, al principio
parece dominado; luego aparece el punto de equilibrio, cuando ninguno tiene la
ventaja sobre el otro. Luego, lentamente, el Espíritu empieza a triunfar sobre la
Materia para que, al final de esta etapa, el Espíritu sea el señor de la Materia, y esté
listo para el ascenso.”<o:p></o:p>

[‘The Solar System’ - Arthur E. Powell – Theosophical Publishing House London


Ltd.]<o:p></o:p>

Tenemos ahora que realizar un cambio de conciencia alejado de la percepción del


yo como una unidad individual auto-contenida responsable sólo de ella misma.
Necesitamos desarrollar una percepción del yo como un componente de un grupo
más amplio: armonizandonos dentro de la familia y la comunidad, colaborando en
lugar de competir en el servicio productivo de nuestro ‘trabajo’, respetando toda
vida humana y, finalmente, respetando a toda la Creación. Debemos aprender a
transmutar nuestro interés personal por el cuidado y preocupación por los otros,
trabajando juntos, cooperando con nuestro prójimo así como con los reinos
animal, vegetal y mineral, sin buscar tomar ventaja sobre el otro para nuestro
propio beneficio.<o:p></o:p>

Este ‘regreso a la unidad’ no implica que el individuo se convierta en ‘una pieza


más de la rueda’, sino más bien en un compoente sabio, experimentado,
compasivo, pensante y dispuesto a cooperar dentro de un grupo más amplio que,
en última instancia, es universal. Aunque nos estamos agrupando, no separando,
unificando no dividiendo, en categorías, cada Alma permanece por siempre a
través de la Creación Unificada como una ‘conciencia individual’, cada una
enriquecida por su propia y personal acumulación de experiencia y
sabiduría.<o:p></o:p>
En el ascenso, de regreso a través del Arco de Evolución, cuando el alma regresa a
su Origen, porta ya una conciencia totalmente desarrollada y un conocimiento de
la vida que incorpora una miríada de aspectos. Sobretodo, hemos aprendido lo que
es ‘correcto’ y lo que es ‘equivocado’ lo cual nos permite tomar decisiones seguras,
acordes con la verdadera dirección evolutiva. Aunque estamos regresando a la
Unidad, cada uno de nosotros forma parte ahora de esa Unidad como conciencia
plenamente individual.<o:p></o:p>

“Durante el arco en ascenso, cuando la diferenciación se ha realizado finalmente por


medio de la división de la Vida Divina como entidades humanas separadas, la
tendencia es hacia la unidad, así como hacia una mayor espiritualidad. En esta
etapa, el espíritu, habiendo aprendido perfectamente cómo recibir las impresiones a
través de la materia, y cómo expresarse a través suyo, y habiendo despertado sus
poderes inactivos, aprende a usar estos poderes correctamente al servicio del
Logos.”<o:p></o:p>

[‘The Solar System’ - Arthur E. Powell – Thesophical Publ. House, London


Ltd.]<o:p></o:p>

La Fuerza de Pensamiento de nuestro Creador, que continuamente avanza como


un ‘Río de Pensamiento’ en la creación y el sostenimiento del Universo, también
tiene cualidades inherentes magnéticas de fuerza de Luz, las mismas que
conocemos como Amor. El Amor es una energía de fuerza de atracción cohesiva y
magnética, siendo la fuerza-de-Luz coherente detrás de toda materia que se
manifiesta, así como la fuerza magnética que proyecta toda la Creación de vuelta
al centro de Su Unidad. Cuando esta Fuerza de Amor es transmutada hacia abajo
a través de la experiencia de vida de los individuos, encuentra expresión en niveles
inferiores como sentimientos de emoción. La emoción puede manifestarse tanto
como fuerza positiva o bien tomando forma de oposición como fuerza negativa:
amor y odio, atracción y repulsión.<o:p></o:p>

Es esta experiencia emocional positiva-negativa la que provoca los ímpetus más


poderosos para nuestra evolución y aprendizaje. A través de nuestros sentimientos
y emociones, experimentamos el dolor por los errores y el gozo de ayudar a otros y
de contribuir al flujo. Del mismo modo, es a través de nuestras emociones que nos
enorgullecemos de nuestros logros personales, pero al mismo tiempo
experimentamos una perenne nostalgia por la unidad, ya sea unidad con el ser
amado, con una comunidad en virtud de actividades compartidas o la Unidad final
con el Origen de la Creación.<o:p></o:p>

Es a través de las emociones que siempre vivimos el impulso de movernos hacia


adelante, y como resultado de esto también experimentamos y aprendemos de las
alegrías y las tristezas de nuestras acciones. Es a través de las emociones que
sentimos simpatía hacia los demás, como recompensa por nuestras propias
experiencias de dolor y aflicción. Nos volvemos más sensibles y conscientes dentro
de nosotros mismos; también experimentamos la bondad, al igual que la
irreflexión, de los demás. Es por medio de las emociones, así como de la mente, que
sentimos enojo al percibir la injusticia, o sentimos la aprobación por una conducta
correcta y aprendemos así a comportarnos mejor con los demás.<o:p></o:p>
Mientras que el desarrollo de la individualidad es una parte necesaria del proceso
evolutivo conforme lo experimentamos, también podemos recordarnos de vez en
cuando que todos somos parte y uno con toda la Creación. Esta gran verdad es
algo que fácilmente podemos olvidar, por lo enredados que estamos en un mundo
de individualidad y condición separatista. Pero el recuerdo de nuestra verdadera e
implícita unidad con toda la Creación puede darnos consuelo en tiempos de estrés,
al suministrar un sentido de contexto y de realidad así como de seguridad y
dirección.<o:p></o:p>

Todos estamos conectados, tanto por un origen compartido como por el continuo
Río de Pensamiento Creativo del Creador. Estamos unidos no solo humanos con
humanos, también estamos unidos con cada partícula, roca, planta, animal e
insecto. Y, finalmente, estamos unidos a nuestro Creador, porque somos una parte
de Su sustancia-de-Vida, y a través nuestro Él se mantiene siempre en contacto con
cada una de nuestras experiencias. Nosotros mismos somos una extensión de
nuestro Creador, experimentando y aprendiendo junto con Él en nuestra larga
jornada de evolución.<o:p></o:p>

“Sabed que vosotros no estáis y nunca habéis estado separados de vuestra Fuente.
Verdaderamente nunca habéis estado separados uno del otro. Nunca habéis estado
separados de todos los hermanos y hermanas que tenéis en infinidad de planetas en
vuestras galaxias. Nunca habéis estado separados de ninguna criatura en vuestro
planeta. Ni separados de vuestro Sol y vuestra Luna; o separados de cualquier hoja,
brizna de pasto o flor que brota en vuestro jardín. Habéis olvidado, eso es todo, y en
vuestro dolor y en vuestro juicio de quienes sois, os habéis cerrado. Habéis olvidado
que sois Dios/Diosa oliendo la rosa de la vibración y el entusiasmo de esta dimensión
de realidad.”<o:p></o:p>

CAPITULO 3: VIBRACION Y DENSIDAD <o:p></o:p>

La ilusión de la separación, que aparece como parte integral de la actual


experiencia humana, surge de nuestra preocupación terrena por el yo, y de la
densidad del medio ambiente en el que vivimos sobre la Tierra. Ambos factores
tienden a separarnos unos de otros y aislarnos de los mundos de Creación
superiores. Una apertura de la conciencia hacia los mundos desconocidos que nos
rodean constituye un elemento importante en nuestro desarrollo espiritual; esto
requiere que obtengamos de la ciencia Oculta una información más detallada sobre
la naturaleza de las vibraciones y las densidades, para poder comprender los
diferentes niveles o planos de la existencia.<o:p></o:p>

La Ciencia Oculta explica que la materia está hecha de varias agrupaciones y


combinaciones de átomos con sus respectivos electrones y protones, los cuales
oscilan uno alrededor del otro en un movimiento vibratorio positivo-negativo, al
tiempo que mantienen una distancia magnética fija uno del otro.<o:p></o:p>

Todos los átomos, y la ‘materia’ que forman mediante sus agrupaciones coherentes,
vibran en diferentes rangos de frecuencia dependiendo de su propia complejidad y
densidad; una frecuencia baja permite un conglomerado denso de átomos, una
frecuencia más alta crea una materia menos densa, más espaciada hacia el exterior
y más refinada. Esto, a su vez, refleja su distancia del Centro de Pensamiento
Creativo; la materia refinada de vibración de frecuencia más alta está más cerca
del nivel espiritual superior del Origen, mientras que la materia más densa de baja
frecuencia existe en las ‘orillas exteriores’ del rango evolutivo más lejano al
Origen. Dentro de este espectro continuo es conveniente identificar tres grandes
divisiones de frecuencia vibratoria.<o:p></o:p>

En la extremidad exterior del rango más alejado del Centro-de-Pensamiento se


encuentra el denso Reino Físico, que es nuestro nivel actual sobre la Tierra.
Moviéndose hacia el Centro encontramos el siguiente gran nivel de vibración,
menos denso y más tenue en lo tocante al espacio que toman sus átomos; este es el
Reino Etérico (también conocido como nivel Mental), en el que la mayoría de
nuestros planetas vecinos dentro de nuestro sistema solar reside actualmente.
Próximo a la Mente Central-de-Dios de Pensamiento Puro encontramos los Reinos
Espirituales Superiores de Luz, que son el hogar de almas más espiritualmente
desarrolladas así como de los Maestros Ascendidos superiores y los Seres
Angélicos.<o:p></o:p>

Dentro de estos tres amplios niveles densos de lo Físico, Etérico y Espiritual, la


ciencia de lo oculto identifica siete subdivisiones o niveles intermedios. También se
explica que mientras nuestra experiencia conciente en la Tierra se manifiesta en el
nivel más denso, todas las diferentes densidades coexisten y encuentran expresión
en nuestros cuerpos y en el mundo que nos rodea.<o:p></o:p>

“El que practica el ocultismo encuentra que la materia física existe en siete sub-
grados u órdenes de densidad: Sólido, Líquido, Gaseoso, Etérico, Super Etérico, Sub
Atómico, y Atómico. Partículas de todos estos grados entran en la composición del
cuerpo, el vehículo físico. Sin embargo, el cuerpo físico tiene dos divisiones bien
marcadas: el Cuerpo Denso, compuesto de sólidos, líquidos y gases, y el Cuerpo
Etérico o Doble Etérico - como frecuentemente se le llama - que consiste de cuatro
grados más finos de materia física. Cada partícula sólida, líquida y gaseosa del
cuerpo físico está rodeada de una cubierta etérica: de ahí que el Doble Etérico, como
su nombre implica, sea un duplicado perfecto de forma densa. En tamaño proyecta
aproximadamente un cuarto de pulgada por encima de la piel.”<o:p></o:p>

[‘The Etheric Double’, por A. E. Powell, Theosophical Publishing House,


Londres]<o:p></o:p>

Entre las densidades de vibración física y etérica existe un importante nivel


intermedio: el Reino Astral, compuesto de materia etérica de baja vibración. Este
es el asiento de nuestras emociones, sentidos y memoria, y el nivel en el cual
nuestra mente subconsciente trabaja, grabando todos nuestros pensamientos y
experiencias en el éter en donde quedan almacenados en un banco celestial de
memoria (Los Archivos Akásicos) para que más tarde los podamos recuperar y
revisar. El subconsciente a nivel Astral también actúa como una voz interna,
conciencia o agente de intuición en calidad de guía de nuestra conciencia en la
Tierra. El plano Astral es usualmente el primer nivel al cuál llegamos después de la
transición que llamamos ‘muerte’.<o:p></o:p>
Ya que la mayoría de las enfermedades se originan en el desorden mental o
emocional, se manifiestan primero a nivel etérico antes de transmitirse al cuerpo
físico. Muchas terapias de sanación de la Nueva Era y prácticas tales como la
‘Radiónica’ y la sanación espiritual son aplicadas en el nivel Etérico y pueden, por
lo tanto, ser conducidas a distancia sin que ocurra un contacto físico entre el
sanador y el paciente. La sanación es efectuada por transmisión a través de
materia etérica más fina que interpenetra lo físico y la cual no está sujeta a las
mismas limitaciones físicas de tiempo y espacio.<o:p></o:p>

Lo que se conoce en el pensamiento de la Nueva Era como el ‘Conocimiento


Superior’ existe como libre conocimiento disponible en los niveles superiores
Etérico y Espiritual, pero la mayoría de nosotros no tenemos acceso a él desde el
plano físico debido al “Velo de Olvido” que lo bloquea y que ha sido colocado entre
nosotros y los mundos superiores para nuestra protección. Sin embargo, este
conocimiento superior es en su mayor parte comunicado aquí en la Tierra por
aquellos profesores y Maestros que son capaces de transmitir sus pensamientos
directamente a una mente terrestre entrenada, conocida como ‘canal’. Este proceso
es posible en la Tierra a través de ‘canalizadores’ los cuales han recibido
entrenamiento durante largos períodos en sus vidas pasadas para abrir sus centros
espirituales superiores. Sin embargo, es importante para el canalizador terrestre
tener la capacidad de dejar a un lado sus emociones y preconcepciones terrenas,
que, de otra manera, podrían colorear y distorsionar la comunicación. Los
canalizadores usualmente pueden recibir la canalización al entrar en un estado de
trance o, en casos de mayor evolución, directamente entrando a la mente
consciente en forma de palabras, pensamientos o escritura
automática. <o:p></o:p>

Aquí abajo, en el planeta Tierra, vivimos dentro de un nivel físico denso con un
rango de vibración relativamente bajo, con un rango de percepción restringido a la
percepción limitada, lo que se extiende desde las bajas frecuencias de sonido (16 a
20.000 ciclos por segundo), hasta el espectro superior visible de frecuencia de luz.
El espectro de frecuencia de luz va desde el color rojo más bajo, moviéndose a
través del naranja, amarillo, verde, azul y violeta hasta el punto en donde nuestra
visión se detiene en el nivel ultravioleta. A medida que nuestra visión cesa por
encima de este rango, somos incapaces de ver ‘materia’ de alta vibración, ya que es
totalmente invisible para nosotros, aun cuando de hecho nos rodea e interpenetra
nuestra materia física. Para poder ver mundos vibracionales y materia superior
debemos tener la capacidad de elevar nuestros propios niveles vibratorios hasta ese
mismo nivel. Igualmente, con nuestra visión física, somos incapaces de ver la vida
en otros planetas no físicos, como tampoco podemos ver las naves espaciales que
visitan nuestros cielos, a excepción de aquellos casos en donde ellos mismos escogen
bajar sus niveles vibratorios hasta nuestro propio nivel físico denso de
percepción. <o:p></o:p>

“El Mundo del Espíritu tiene tantos planos diferentes de existencia como la cebolla
tiene capas, cada uno formando una piel exterior que protege la anterior y
suministrando un medio para contactar las experiencias que ese nivel en particular
tiene que ofrecer. Estos planos son coexistentes con nuestro mundo físico, invisible
para nuestro lento sentido de la vista, y al mismo tiempo tan real como las ondas
invisibles que transportan nuestros programas de radio. <o:p></o:p>
A medida que un Espíritu desciende, plano tras plano, y penetra en las profundidades
de la experiencia, debe tomar un cuerpo con los órganos de los sentidos apropiados,
para su manifestación en esa esfera en particular, de modo que esos sentidos puedan
responder a la vibración de las cosas que existen dentro de esa esfera en
particular. <o:p></o:p>

Sin esa vestimenta no le sería posible al individuo expresarse o recibir impresiones en


el medio ambiente local, y las experiencias en ese plano en particular serían
infructuosas.” <o:p></o:p>

[‘Full Cycle’ por Ripley Webb – Marcus Books, Queensville, Notario,


Canadá] <o:p></o:p>

De esta manera, invisibles para nosotros en este nuestro nivel físico sobre la Tierra,
existen mundos enteros de rangos de vibración superior, habitados por Seres que
no podemos ver, ni oír, ni tocar. Y como sus altos rangos de vibración hacen que sus
cuerpos sean menos densos que los nuestros, ellos pueden fácilmente inter-
penetrarnos aquí en la Tierra sin que siquiera nos demos cuenta de su presencia.
Esta frecuente idea, que nos deja perplejos, puede ser rápidamente comprendida si
tomamos en cuenta que toda materia ‘sólida’ está compuesta por átomos que
contienen ‘espacios’ entre ellos. <o:p></o:p>

Se sabe, por supuesto, que aún en la sustancia más densa dos átomos nunca se tocan;
el espacio entre dos átomos vecinos es increíblemente mayor que los mismos átomos.
Hace tiempo, la ciencia física ortodoxa ha postulado un Éter que interpenetra toda
sustancia conocida, tanto las más sólidas como las más gaseosas; y así como este Éter
se mueve con perfecta libertad entre las partículas de materias mas densas, de la
misma manera la materia Etérica la interpenetra a su vez, y se mueve con perfecta
libertad entre sus partículas. Así, un Ser en el mundo Etérico podría ocupar el mismo
espacio que un Ser que viva en el mundo físico; pero cada uno no tendría conciencia
del otro, y de ninguna manera impediría el libre movimiento del otro.” <o:p></o:p>

[‘The Etheric Double’ por A. E. Powell, The Theosophical Publishing House,


Londres] <o:p></o:p>

Aunque la mayoría de nosotros no puede ver las manifestaciones de rangos de


vibración más altos, éstos son experimentados en ocasiones por aquellos que han
desarrollado, después de muchas vidas, una sensibilidad psíquica. Aquellos con
percepción extra sensorial superior a veces pueden ver apariciones nebulosas como
los ‘fantasmas’, los cuales exhiben la habilidad de pasar a través del observador o
de otros objetos sólidos. Incluso algunos de nosotros que no poseemos una
percepción extra sensorial altamente desarrollada podemos a veces darnos cuenta
de una persona o un lugar que tiene buenas o malas ‘vibraciones’. Todos podemos
sentir subconscientemente, en nuestros niveles intuitivos más altos, aquellas
vibraciones que se manifiestan alrededor nuestro. <o:p></o:p>

Las grandes diferencias en niveles de densidad y vibracionales también explican


por qué no somos capaces de ver ninguna forma de vida sensorial cuando
enviamos sondas espaciales terrestres hacia planetas vecinos. Todos los planetas
habitados en nuestro Sistema Solar incluyendo su vegetación y formas de vida, ya
no existen en este denso nivel físico vibratorio. Actualmente existen en la 4ª y 5ª
dimensión/densidad en el plano Etérico, un plano de vida y materia que nos rodea,
que existe a un nivel vibratorio más alto y más tenue y que no es visible para
nosotros, aunque es perfectamente sólido para ellos mismos. Cuando enviamos
nuestras sondas espaciales exploratorias a los planetas vecinos, nuestra nave
espacial, sin saberlo, pasa a través de estos planos vibracionales superiores y
continúa descendiendo hacia la costra física del planeta habitado previamente, que
desde hace mucho ha sido abandonado y que ahora está totalmente desprovisto de
vida. Por ello, asumimos que no existen otros mundos habitados. <o:p></o:p>

Sin embargo, hemos tenido muchas comunicaciones y visitas de nuestros


Hermanos Espaciales interplanetarios con el paso de los años a partir del final de
la Segunda Guerra Mundial, y estos han sido publicados en numerosos libros
editados por algunas editoriales esotéricas poco conocidas. Un famoso
“contactado” es Tuella, cuyas comunicaciones con nuestros Hermanos del Espacio
han sido publicadas e incluyen mensajes de un vasto grupo de naves espaciales
interplanetarias estacionadas dentro de nuestro sistema solar, conocidas como el
‘Comando Ashtar’. <o:p></o:p>

Entre las muchas comunicaciones que Tuella ha tenido con el Comando Ashtar, en
un momento determinado ella intenta aclarar – en su libro titulado ‘Ashtar : Un
Tributo’ – la naturaleza de los diferentes niveles vibratorios, al preguntar al
Comandante espacial Ashtar sobre el nivel vibratorio superior ‘Etérico’ en el que
viven todos nuestros vecinos, los Hermanos del Espacio: <o:p></o:p>

Tuella: “Cuando dices que eres Etérico, debo asumir que has evolucionado más allá
de la etapa de un cuerpo físico?”

Ashtar: “Correcto. No poseo una envoltura física tan densa como la vuestra. Soy
definitivamente etérico, como lo son todas las personas que habitan otros planetas en
este sistema solar. Sin embargo, esto no significa que son invisibles uno con respecto
del otro, como lo somos para vosotros en circunstancias normales. Podemos vernos y
vivimos de manera similar a vosotros, pero no tenemos esta densa envoltura física
que vosotros tenéis. Las ventajas, beneficios y comodidades que ofrece esta forma de
vida son enormes, y las irritaciones de la envoltura carnal son sumamente
incómodas. A menos que escojamos convertir la frecuencia vibracional de nuestros
cuerpos en una que sea visible a vuestra óptica, permanecemos invisibles para
vuestra gente. Sin embargo, la gente altamente evolucionada, con un buen ojo
psíquico, como decís, puede en algunas ocasiones vernos en forma vaporosa, aunque
seamos invisibles para otros terrestres en el mismo lugar. Cuando vuestros
clarividentes viajan en sus cuerpos espirituales hacia nuestras civilizaciones en otros
planetas, pueden ver y son capaces de interpretar nuestras vidas porque no están
utilizando sus ojos físicos sino su vista astral o psíquica para la cual somos visibles,
tanto como si fuéramos seres físicos.” <o:p></o:p>

Tuella: “Tengo curiosidad acerca de la naturaleza de la materia etérica. Por ejemplo,


existe un caso del que tenemos archivos en donde uno de nuestros jets voló
directamente a través de una nave espacial, sin tocar nada sólido. ¿Acaso tus naves
están hechas de una sustancia vaporosa o se trata de una forma diferente a la
materia terrestre? <o:p></o:p>
Ashtar: “Tenemos todos los elementos que conocéis en la Tierra y muchos más. La
forma etérica de los metales difiere en su estructura atómica y molecular de aquellos
fabricados en la Tierra. Por ejemplo, en el hierro Etérico, la distancia entre el núcleo
y los electrones en órbita es mucho mayor que la del hierro físico, como lo conocéis
en la Tierra. Esto permite a los átomos del acero de la Tierra pasar directamente a
través de los átomos del acero Etérico de tal manera que nada puede sucederle a una
u otra forma de acero. La forma etérica del acero goza de una rango vibratorio más
alto que el acero terrestre y, por lo tanto, no es aparente a la visión terrena o, si lo
preferís, a la mirada física.<o:p></o:p>

“En virtud de nuestro conocimiento de la Ley Universal, nuestro ser intrínseco


consiste de un nivel vibracional superior al vuestro. Mirad, cada partícula del
Universo está formada por moléculas cuyo centro contiene un átomo alrededor del
cuál giran electrones y protones. Cada molécula de una estructura molecular
diferente vibra a diferente frecuencia. El interior de una molécula es idéntico al
formato del Universo. Los planetas giran alrededor de soles centrales; los sistemas
solares alrededor de galaxias; las galaxias alrededor de un sol central universal.
Cada molécula vibra en la frecuencia que cree apropiada para nuestra
existencia.<o:p></o:p>

“A medida que uno se vuelve más espiritual en su naturaleza, pensando únicamente


en el bienestar de los demás y no en el poder ni en la avaricia, de igual manera
vibrarán las moléculas superiores de ese ser que es uno. Conforme adquirimos
conocimiento en nuestra dimensión, a estas moléculas les es posible vibrar tan
rápidamente que la frecuencia se convierte en pura luz. Es por ello que nos
nombramos las Fuerzas de la Luz. Dependemos de la luz del Origen – El Creador,
Dios -, para poder existir.”<o:p></o:p>

[‘Ashtar: A Tribute’ - compilado por Tuella – Guardian Action Publications, l985-


<o:p></o:p>

Re-editado en l995 por Inner Light Publications, New Brunswick, NJ,


EUA]<o:p></o:p>

De esta manera, el estudiante del pensamiento de la Nueva Era, aunque quizá


incapaz de ver o de sentir la presencia de los Seres que existen en otros niveles
vibratorios, ahora puede, por lo menos, comprender su existencia. A medida que
progresa nuestra evolución, conforme nos movemos hacia niveles superiores del
ser, un rango mayor de percepción se abrirá para nosotros. Pero aún en estos
momentos, ciertamente en estos momentos en particular, conforme luchamos a
través de reinos más densos en nuestro viaje evolutivo, una creciente consciencia
acerca de los reinos superiores puede abrir nuestra intuición a las muchas fuentes
de guía y sabiduría que están disponibles para nosotros.

CAPITULO 4: NUESTRO YO SUPERIOR Y GUIAS

Como ya se explicó, empezamos nuestra larga jornada evolutiva como ‘chispas de


Espíritu’ en evolución, creadas a partir de y formando parte del propio Ser de
nuestro Creador, partículas de Su propio Espíritu y Fuerza de Pensamiento. Cada
una de las chispas de Espíritu creada de la Mente de Dios se convierte también con
el tiempo en "Padre/Madre" de un alma como extensión de ella misma y, por
tanto, se convierte en aquel que origina una "familia" más de unidades de alma
que están íntimamente relacionadas. Esta relación familiar con el "Yo Superior"
original permite una interconexión e intercomunicación intuitiva más cercana
entre los planos superiores e inferiores de existencia. También hay un continuo
compartir de experiencias, no solamente desde los planos inferiores hacia los
superiores, sino también desde el nivel superior hacia el más bajo. La advertencia
que se transmite del nivel más alto intuitivo hasta el nivel físico inferior ayuda a
evitar que las almas individuales se enreden en determinada área de evolución y
puedan perder el sentido general de dirección. El "Yo Superior" continuamente
trata de mantenerlas en el camino evolutivo correcto.

Así, se establece un grupo elevado de ‘Altas Super-Almas’, también conocidas


como ‘Yo Superior’ o ‘Presencia Yo Soy’. A cada uno de estos Yo Superior se le
permite, entonces crear o dar a luz otro grupo de 12 ‘Extensiones de Alma
Primarias’ para, de ese modo, ampliar la experiencia de vida hacia mundos
próximos al Plano de Luz Espiritual. Luego, a estas 12 Extensiones de Alma
Primarias se les autoriza a crear otro grupo más de 12 almas o ‘extensiones de
alma inferiores’ para que puedan vivir sus experiencias en mundos aún más
densos. Así, finalmente puede surgir un gran ‘Grupo de Almas de la misma
Familia’ de hasta 144 ‘Compañeros de Alma’ íntimamente relacionados, todos ellos
ligados al mismo "Yo Superior".

Este Grupo de Almas de 144 no se encarna en el mismo tiempo, o en el mismo nivel


de vibración o dimensión particular, sino que puede manifestarse en toda la
Galaxia, en muchas otras dimensiones o planetas. Sin embargo, todos los miembros
del grupo, bajo su ‘Yo Superior’ común, permanecerán unidos en sus largos viajes
evolutivos como un grupo de ‘Compañeros Alma", a veces encarnando en un
mundo en particular como pareja o como amigos, o formando parte de una extensa
familia.

No obstante, la superalma Yo Superior debe respetar siempre las Leyes del Karma
fundamentales que exigen que todos experimentemos en su totalidad la relación
causa-efecto de cada una de nuestras acciones y su resultado. Así, el Yo Superior
respetará siempre la auto-determinación o libre albedrío de cada extensión de
alma inferior individual y separada. El Yo Superior únicamente ayudará cuando se
le pida asistencia directamente, y nunca intervendrá kármicamente para aliviar
aquellas difíciles lecciones que cada alma debe aprender por sí misma.

A medida que las extensiones de alma descienden hacia mundos inferiores de


materialidad, desarrollan aún más su separación en dos grandes polaridades, la
positiva y la negativa; cada una de ellas expresando cada vez más fuertemente la
polaridad masculina (fuerza positiva, activa, extrovertida) y la femenina (fuerza
negativa, que nutre, introvertida). Esto forma parte del Plan del Creador, que
proporciona así al alma un mayor equilibrio entre estas dos grandes polaridades de
la Creación, y le otorga una gran fuerza para regresar a la Unidad en la Mente de
Dios.

De este modo se crean dos ‘Almas Gemelas’ o ‘Llamas Gemelas’ como parte de un
solo espíritu a un nivel más alto, permaneciendo como dos partes de una misma
extensión-de-alma, unidas eternamente. Después de descender y ascender juntas a
través del Ciclo Evolutivo, se les destina finalmente a reunirse al final de su larga
jornada, como un Ser completo y andrógino (es decir, masculino/femenino unido),
siendo por siempre dos almas-en-una, conservando incluso un elemento de sus dos
polaridades así como sus individualidades.

Cada Alma Gemela individual, dotada durante su descenso hacia la materia de una
polaridad predominantemente masculina o femenina, actúa de esta manera como
una fuerza que equilibra a la otra; una mostrando la fuerza inherente masculina y
su característica mundana, activa, extrovertida y positiva; y la otra con una
característica más femenina, receptiva, introvertida espiritualmente y de
naturaleza educadora o nutritiva. Esta división inherente en dos polaridades
opuestas que se atraen magnéticamente no solo ofrece el ímpetu necesario para la
próxima re-unificación de sus dos almas, sino que promueve el deseo en todas las
almas individuales de buscar la unidad con las demás almas, y de esta manera su
eventual retorno a la Unidad colectiva de la Mente de Dios.

A medida que progresan en su evolución, las Almas Gemelas aprenden


gradualmente a desarrollar un mayor equilibrio entre sus dos polaridades o
géneros. A veces un Alma Gemela cambiará de género en una encarnación en
particular con objeto de conocer las cualidades inherentes de la otra polaridad o
género. Esto explica las diferentes dificultades en la identidad sexual que muchas
personas experimentan aquí en la Tierra después de que escogieron en los planos
espirituales encarnar en un cuerpo terrestre bajo un género opuesto y
‘desacostumbrado’. Por ejemplo, un alma de características predominantemente
femeninas al encarnar en un cuerpo masculino estará, por naturaleza, más atraída
al sexo opuesto, es decir, a otro género masculino. De la misma manera, un alma
predominantemente masculina que encarna como una femenina, seguramente
buscará la intimidad de la polaridad de atracción opuesta, otra femenina. Los
cambios de sexo que muchas personas han estado impulsadas a hacer mediante
una cirugía, muestran un ejemplo extremo de esta inhabitual posición en el género
opuesto.

Por esta razón, las Almas Gemelas aprenden a equilibrar la cualidad de sus
polaridades: la positiva (masculina), extrovertida/fuerte, con la negativa
(femenina), receptiva/nutritiva. Así, finalmente estarán en condiciones de quedar
totalmente reunidos como partes equilibradas de un alma andrógina
(masculina/femenina), aunque cada una como parte de un ser superior unido,
conservando una cierta individualidad y un elemento de su polaridad original.

Cuando un Alma Gemela encarna en un planeta de un nivel físico más bajo, como
puede ser la Tierra, la otra generalmente permanece en un plano más elevado para
poder suministrarle una conexión espiritual más próxima con el mundo superior.
Existen ocasiones, sin embargo, en que las Almas Gemelas se ponen de acuerdo
para encontrarse y compartir una encarnación a nivel físico, como cuando deben
cumplir una misión conjunta en la Tierra. En tales ocasiones, a menos que hayan
escogido nacer como familiares cercanos o gemelos en la misma familia, el tiempo y
el lugar de su primer encuentro en el denso nivel físico siempre está previsto y pre-
concertado a Nivel Espiritual. De tal manera que cuando se encuentran sobre la
Tierra a veces experimentan una sensación de ‘amor a primera vista’ instantáneo y
profundo, en el que intuitivamente recuerdan su antigua conexión amorosa al igual
que reconocen su encuentro pre-concertado a nivel espiritual. Tal ‘encuentro’
siempre provoca una nota de nostalgia en todos nosotros, y se muestra en muchas
de las grandes historias de amor románticas de la Tierra.

Aún cuando no estemos destinados a encontrar nuestra Alma Gemela o Llama


Gemela aquí en la Tierra, es posible que en lugar de eso experimentemos una
íntima asociación con uno de nuestros propios Compañeros de Alma Familiar -
Espiritual, un miembro de nuestro amplio Grupo de Almas. También podemos
haber estado íntimamente asociados con ese Compañero de Alma en particular en
una vida pasada, ya sea como miembro de la misma familia o como un amigo
íntimo durante una experiencia previa en la Tierra.

Durante el largo ciclo evolutivo, cuando las almas descienden a mundos inferiores
de ‘materia’ y luego se vuelven a elevar, el Yo Superior permanece en el nivel
espiritual más alto, acumulando y grabando constantemente todas las experiencias
evolutivas vividas por aquellas extensiones-de-alma en evolución en los planos
inferiores. Este conocimiento acumulado se hace accesible para ellos -vía el Yo
Superior- como la voz interna de la conciencia, siempre presente para ayudarlos a
tomar el camino correcto para su desarrollo futuro.

Por lo tanto, con la intención y el entrenamiento apropiados, podemos tener acceso


a todo este conocimiento espiritual acumulado vía nuestro Yo Superior,
simplemente dirigiendo nuestros pensamientos hacia nuestro interior durante una
silenciosa contemplación y buscando la conexión con nuestra ‘Presencia Yo Soy’.

Este almacén de conocimiento y habilidades evolutivas acumuladas por el Yo


Superior también provee a cada una de las almas inferiores encarnadas de un
trasfondo de rasgos, talentos y habilidades adquiridas durante las vidas pasadas.
Esta continuidad de desarrollo y logro explica porqué algunas personas nacidas
sobre la Tierra muestran talentos naturales inusualmente excepcionales en el
campo de la sanación o la ciencia, o quizá se muestre como un genio científico o un
niño-prodigio musical.

Si intentamos visualizar la naturaleza y apariencia de un ‘Yo Superior’, tenemos


una muy buena descripción del primer encuentro entre Shirley MacLaine y su
propio Ser Superior. El encuentro fue conducido a través de una exploración
psíquica con su amigo Chris Griscom. Shirley escribe en su libro titulado ‘Dancing
in the Light’ [Bantam l985]:

"Respiré profundamente hacia mi propio centro como si estuviera logrando mi


equilibrio psíquico. Luego una imagen surgió en mi mente, al principio difusa,
pero luego muy clara. Fue absolutamente impactante. Vi la forma de un Ser
Humano muy alto, extremadamente confiado, casi andrógino. Un suave manto
color crema, plegado, flotaba sobre su figura de casi dos metros de alto, con largos
brazos reposando calmadamente a los lados. Dedos aun más largos al final de sus
brazos. La energía de esta forma me parecía más masculina que femenina. La piel
del Ser era rojiza y su cabello, a la altura de los hombros, era castaño. La cara
mostraba altos pómulos y una nariz recta como cincelada. Los ojos eran de un azul
intenso y la expresión era de bondad suprema, aunque de gran fortaleza. El ser
levantó sus brazos como dándome la bienvenida. Sentí que algo muy oriental
emanaba de este gesto, más oriental que occidental. Y tuve la intuición de que era
extremadamente protector, lleno de paciencia, pero capaz también de mostrar un
gran enojo. Era simple, pero tan poderoso que parecía ‘saber’ todo lo que era
necesario saber. Me quedé sin habla ante lo que estaba viendo y lo que sentía
acerca de este ser.

"¿Quién eres?" – le pregunté, temiendo escuchar lo que me diría, temiendo vivir


esta experiencia dimensional. ¡El Ser me sonrió y me abrazó!

"Soy tu Yo Superior Ilimitado", dijo.

"¡Oh Dios mio!", me escuché decir estúpidamente. "¿Realmente estás ahí?"

Sonrió de nuevo.

"Si," dijo, "He estado siempre aquí. He estado aquí contigo desde el inicio del
tiempo. Nunca me alejo de ti. Yo soy tú. Soy tu alma ilimitada. Soy el tú ilimitado
que te guía y te enseña a través de cada encarnación".

"Escucha", le dije, "¿por qué tienes una forma y por qué te ves de esta manera?

Volvió a sonreír.

"Porque", dijo, "debes verme en la forma de una dimensión del plano de la Tierra.
La forma del alma es la forma del cuerpo humano, en todo caso. La única
diferencia es que el alma es una forma sin masa. Pero si tú pudieras ver la forma-
de-Luz de un alma, verías una cabeza, dos brazos, un cuerpo y dos piernas. El
alma es luz de alta frecuencia sin masa. Esa es la única diferencia."

"Bien pero, ¿por qué me pareces tan masculino?, le pregunté.

"Solamente parezco más masculino que femenino porque soy poderoso. La energía
del alma es poderosa, pero también es andrógina. Es decir, existe un equilibrio
perfecto entre la energía positiva, que es masculina, y la energía negativa que es
femenina, o yin (femenino) y yang (masculino). La energía positiva masculina es
impulsiva y activa. La energía femenina negativa es receptora y aceptadora.
Ambas son igualmente necesarias para lograr la vida, una no puede obrar sin la
otra."

La imagen del Yo Superior permaneció calmada y centrada. Tenía la impresión


que no se manifestaría a menos que estuviera motivada a hacerlo. Miré por la
ventana, hacia un árbol afuera. Se mecía con la brisa.

"Escucha", dije, "si te pidiera que me ayudaras a detener el movimiento de un


árbol, lo podríamos hacer?

"Pruébame", dijo el Yo Superior.

"Bien", dije. "Ese árbol afuera. Vamos a impedir que se balancee."


"Muy bien", dijo el Yo Superior. "Siente mi poder convertirse en tú poder. Asume
que juntos podemos lograr cualquier cosa."

Me conecté con la energía de mi imagen del Yo Superior y me fundí en ella.

"Ahora", dijo, "pídele permiso al árbol para controlar su movimiento."

"¿Pedirle permiso al árbol? Le pregunté, dándome cuenta de pronto de las


refinadas sutilezas de una interacción kármica.

"Por supuesto", dijo el Yo Superior. "Todo tipo de vida debe trabajar en armonía,
equilibrio y respeto por otra vida. No puede existir abuso de poder sin que haya
una desastrosa consecuencia. Vas a escuchar al árbol responderte. Conocerás cómo
se siente acerca de esto."

"¿Los árboles sienten?", pregunté.

"Desde luego," dijo el Yo Superior. "Toda vida vibra con sentimiento. Y el estado
natural del sentimiento es amor. El estado de amor se logra simplemente siendo. La
naturaleza es una manifestación del estado de simplemente "ser". Así es. Y lo que
es, en el sentido más puro, es el perfecto equilibrio."

Shirley, una vez que exitosamente detuvo el movimiento del árbol con la ayuda del
Yo Superior, continúa:

Miré hacia arriba al Yo Superior en mi mente. Los brazos bajaron suavemente.


"¿Te das cuenta?", dijo. "Tú hiciste eso. Tú puedes usar tu energía para cualquier
cosa. Pero debes reconocerme para poder hacerlo."

"Entonces, ¿cuál es la diferencia entre tú y Dios?", pregunté.

"Ninguna", dijo. "Yo soy Dios, porque toda energía está conectada a la misma
fuente. Somos cada uno aspectos de esa Fuente. Todos somos parte de Dios. Somos
reflejos individualizados del Origen de Dios. Dios es nosotros y nosotros somos
Dios."

"Y tú eres yo".

"Correcto".

"Luego, ¿todos tienen su propio Yo Superior Ilimitado?"

"Exactamente," dijo el Yo Superior. "Y cada Yo Superior está en contacto con cada
uno de los Yo Superior. Todas las almas ilimitadas resuenan en armonía una con la
otra. La razón por la cuál no reconocéis esa verdad en el plano de la Tierra es
porque no estáis en contacto con la energía del alma individual de vuestros Yo
Superiores. Pero habréis de llegar allí porque no existe otro lugar en donde lograr
la paz. La paz en el exterior proviene de la paz en el interior. La paz interna surge
de la comprensión de que todos somos Dios."
["Dancing in the Light", por Shirley MacLaine – Bantam Books, Inc. l985]

Cada uno de nosotros tiene varios Guías y Ángeles Guardianes que trabajan desde
los Mundos Espirituales para guiarnos y cuidarnos durante nuestras
encarnaciones aquí en la Tierra. Cuando nacemos, nuestros Ángeles Guardianes
mantienen un cuidado especial sobre nosotros cuando encarnamos por primera vez
en un cuerpo físico, especialmente hasta los siete años. Los niños pequeños, cuya
vista etérica generalmente funciona todavía, ciertamente son capaces de ver a los
Ángeles Guardianes cuando están por encima de ellos, protegiéndolos y
guiándolos.

Además de nuestros Ángeles Guardianes, existen otros Seres en el Plano Espiritual


con los que usualmente hemos tenido una conexión en el pasado, que también
actúan como nuestros Guías, guiándonos y protegiéndonos conforme vamos
recorriendo nuestro sendero en la vida.

Este tipo de Guía es generalmente un "hermano mayor", un alma de una


evolución considerable, una que probablemente ha vivido muchas vidas anteriores
aquí en la Tierra y que puede, por tanto, comprender muy bien la naturaleza y las
dificultades de la vida a nivel físico. Nuestro Guía – él o ella - puede estar
adquiriendo experiencias evolutivas de aprendizaje adicional muy útiles al
observar nuestra vida y aprender de nuestras lecciones.

Sin embargo, al tiempo que nuestros Ángeles Guardianes y nuestros Guías están
listos para aconsejarnos y asistirnos en todo momento, existen dos limitaciones
para esta ayuda. Primeramente; ellos normalmente no van a interferir a menos
que solicitemos directamente su ayuda; ellos deberán siempre respetar nuestro
libre albedrío y por lo tanto no despojarnos de las importantes lecciones que
debemos aprender por nosotros mismos. Y segundo: no debemos asumir que
"cualquier cosa que pidamos nos será otorgada", porque debemos recordar que los
Seres Superiores tienen una mayor y mejor visión, y no nos van a ayudar a hacer
algo que no sea para nuestro "bien supremo". Sería fácil para nosotros sentir,
cuando nuestras más fervientes oraciones no parecen ser respondidas, que nuestros
Guías Celestiales nos han "fallado". Pero debiéramos entender que los lazos entre
nosotros y nuestros Guías fueron formados y existen en un nivel superior del Alma.
En este nivel ellos saben – y también nosotros reconocemos cuando visitamos los
planos superiores durante el sueño - lo que es mejor para nuestro "bien supremo".

Aparte de la ayuda y consejo personales que podamos recibir como individuos, la


sabiduría y la guía también se hacen evidentes a nivel terrestre en su sentido más
amplio a través de otros Seres Superiores conocidos como "Maestros".

"Un Maestro puede dar su consejo sin ser visto, quizá guiando la voz o la mano de
un profeta; o un Maestro puede encarnar sobre la Tierra, ofreciendo con su vida
un ejemplo para la humanidad. Un Maestro encarnado sobre la Tierra puede
incluso quedar "ensombrecido" por un Maestro todavía más grande, quien, con el
consentimiento del "menor" actúa y habla a través de éste. El Maestro Jesús-
Sananda fue ‘ensombrecido’ de esta manera durante los últimos años de su
ministerio por El Cristo, la encarnación más alta del Creador. Por lo tanto,
"Jesucristo" no debe ser pensado o hacerse referencia a él como una sola
"persona", sino como el Maestro Jesús-Sananda, que por un tiempo fue
‘ensombrecido’ por El Cristo.

Los Maestros como parte de la Jerarquía Espiritual de la Tierra, son Seres


altamente evolucionados, con un grado de sabiduría y conciencia completamente
desarrollado. Ellos realizan el Servicio Universal. Generalmente no están ligados a
ningún alma individual sobre la Tierra como son vuestros Ángeles Guardianes y
vuestros Guías. Sirven a una causa mucho mayor, y cuando vienen a esta Tierra,
ellos vienen no tanto para el individuo sino para la Humanidad como un todo. A
veces hablan a través de canales entrenados e inspirados para dar mensajes a la
Humanidad. Cuando encarnan sobre la Tierra vienen para poder servir a la
Humanidad y para traer sabiduría y conocimiento para la Tierra como un todo.
No están preocupados por el individuo tanto como por el Gran Plan. Es por medio
de los Maestros que el Conocimiento para esta Tierra es revelado y entregado a la
Humanidad, y el Plan Divino para esta Tierra es revelado y ejecutado".

[The Master RAMALA – canalizado por el Centro Ramala, Glastonbury.]

En verdad hay una gran cantidad de ayuda y apoyo para aquellos que la buscan en
la paz de su mente y en la humildad del espíritu. El conocimiento espiritual enseña
que a través del proceso de iluminación del cuerpo, del desprendimiento del
egocentrismo, y del desarrollo consciente de la Unidad Universal, podemos
abrirnos a mundos que están más allá de nuestra limitada percepción de la
"realidad" y aprender a recibir el "Conocimiento Superior", la sabiduría de
nuestros Guías y de los Grandes Maestros. Y puede decirse sin miedo a la
exageración que ‘necesitamos todo tipo de consejo y asistencia que podamos
obtener’ pues las encarnaciones que experimentamos aquí en la Tierra a nivel
físico son las que nos ponen a prueba y las más difíciles de todo nuestro viaje
evolutivo.

CAPITULO 5: UN PLANETA PARA APRENDER

Muchas personas que viven en la Tierra, creen equivocadamente que este planeta
es un lugar de perfección. Se quejan cuando las cosas son difíciles o no salen bien, a
veces enojándose y maldiciendo a la Creación, incluso amenazando con el suicidio.
Pero la Tierra no es un lugar de perfección; es un planeta para realizar un
aprendizaje acelerado y profundo. Es mas, sus lecciones, y las condiciones bajo las
cuales las personas deben afrontarlas, se encuentran dentro de las de mayor nivel
de exigencia en el esquema evolutivo. Aceptar este hecho, junto con la comprensión
de su propósito divino, puede hacer que la vida sea mucho más fácil, y ayudar en la
consecución del mayor beneficio evolutivo que se obtiene a partir de las lecciones
terrestres.

La evolución, en la primera mitad de su ciclo, es un movimiento que se aleja de la


Unidad del Creador. Cuanto más nos alejamos de la Unidad, del Centro Creador,
más denso es el nivel en el cual debemos de vivir y actuar. Esto tiene el efecto
múltiple de debilitar nuestra conexión con la Sabiduría Superior, y, al mismo
tiempo, aumentar la sensación del yo y su concentración sobre la riqueza, el poder
e influencias mundanas. En una atmósfera más densa, las acciones se hacen más
lentas y más pesadas, y el cuerpo crea su propia demanda de una vida fácil, o, en
un estado de mayor frustración, la demanda de gratificación corporal por medio
de distintos tipos de excesos originados en el mundo de las sensaciones. Es bien
sabido en los niveles superiores, que el Planeta Tierra representa uno de los puntos
más distantes del Centro Espiritual, con lecciones a veces extremadamente difíciles
y con uno de los niveles de mayor dificultad en relación con las densidades.

La extrema densidad de rodea esta fase de nuestra evolución sobre el Planeta


Tierra también ha creado en el tiempo un ‘Velo del Olvido’ que nos rodea y nos
separa de los mundos espirituales más altos, restringiendo nuestro actual campo de
visión y de conciencia, como una niebla muy densa. Somos incapaces de contactar
o percibir la vida de niveles espirituales más altos y, con el tiempo, incluso,
perdemos la habilidad de comunicarnos telepáticamente con otras formas de vida
– animales y pájaros - que comparten nuestro planeta a nivel físico. Este ‘Velo’
entre nosotros y los mundos espirituales también nos oculta el conocimiento de
nuestras encarnaciones anteriores y de nuestro futuro potencial, nuestras vidas
antes del nacimiento y nuestro futuro más allá de la muerte. No solo no podemos
recordar las vidas pasadas o revisar nuestro sendero futuro, sino que no podemos
hacer contacto con aquellos que han ‘pasado al otro lado’ recientemente, o con
cualquiera de los billones de Seres espirituales que viven en niveles más altos de
vibración.

El ‘Velo’ fue establecido hace mucho tiempo alrededor de nuestro mundo


particular como una protección vital para aprender las difíciles y dolorosas
lecciones de este denso plano físico. De hecho, nosotros mismos pedimos nuestra
propia "paz mental" cuando estábamos en niveles más altos, por medio de nuestra
conciencia colectiva humana, como nos explica Tendor, un Espíritu Guía de las
altas esferas de la Tierra:

Si los espíritus encarnados sobre la Tierra pudieran llevar con ellos un mínimo
recuerdo de los gozos y de las bellezas de la Esfera Espiritual, sería imposible para
ellos seguir conservando un cuerpo físico. Para beber profundamente de la copa de
la experiencia es necesario contactar la vida en su forma de manifestación más
baja. Para poder hacer esto debéis disminuir vuestras vibraciones a un rango muy
bajo y adecuaros a las engorrosas leyes que gobiernan esta forma de materia. Para
alguien que recordara lo que la vida es realmente, el dolor de regresar sería tan
intolerable que ningún espíritu podría conservar un cuerpo terrenal. Es una
disposición misericordiosa de Dios que tales memorias estén veladas
temporalmente.

[Full Cycle por Ripley Webb – Marcus Books, Queensville, Ontario, Canadá]

El ‘Velo’ y la sensación de separación, aun cuando es esencial para la "experiencia


sobre la Tierra" es, de hecho, una ilusión nacida en la Tierra, no una realidad
espiritual. Estaremos por siempre enlazados espiritualmente con el Creador, con
nuestro pasado y con nuestro futuro y con aquellos de ‘arriba’ que están siempre
listos para ayudarnos y guiarnos. Es importante recordar, especialmente durante
nuestros períodos más difíciles de encarnación sobre la Tierra, que nunca hemos
estado ni podremos estar separados de nuestro Creador, o del resto de la Creación,
por ‘arriba’ o por ‘debajo’ de nosotros.
Sin embargo, este "olvido" de la realidad es una parte necesaria en nuestra
evolución y en nuestra experiencia de aprendizaje. Nuestro mundo de
individualidad, separación y esfuerzos puede bien ser una "ilusión" como nos dice
el budismo y muchas otras filosofías ocultas; pero es una ilusión que nos debe
parecer real si tenemos que aprender de ella.

Conforme vemos cómo se desarrolla una película en la televisión podemos


permanecer distantes de lo que ocurre recordándonos a nosotros mismos que "es
solo una historia", pero manteniendo esta distancia no recibimos ningún beneficio
de ella. Es posible aprender cuando leemos historias o cuando observamos las
vidas de otros, pero solamente podemos hacerlo si estamos totalmente involucrados
emocionalmente en la historia, con sus personajes y su problemática, con sus
esperanzas y sus errores. De la misma manera, en la "vida real" es el acto colectivo
de cambiar la ilusión por realidad la que hace posible el aprendizaje a nivel físico y
emocional.

Esta aparente "contradicción" entre ilusión y realidad se compara paralelamente


con otra contradicción que a veces se discute aquí en la Tierra: la naturaleza del
Bien y del Mal.

Considerando que todo es aprendizaje, todo sería evolución, el mal por tanto no
existe, pues es precisamente por la experiencia que nos bridan las diferentes
alternativas, que aprendemos a escoger la Sabiduría Superior por propia voluntad,
comprensión y motivación. En este sentido no pueden existir el bien o el mal,
únicamente existe evolución y aprendizaje, y la experiencia y la sabiduría que
emanan de ello.

Pero para nosotros, aquí en la Tierra, el "Mal" es el camino del yo, del ego, de la
separación del resto de la Creación - una separación que nos lleva a la explotación
y los conflictos en nuestras relaciones con los otros, al abuso en el planeta y del
reino animal, los cuales consideramos que existen únicamente para nuestra propia
explotación y gratificación.

Por el contrario, el camino del "Bien" se encuentra al situar el yo ni por encima ni


por debajo de los demás sino entre ellos, respetándolos como queremos que ellos
nos respeten. Y esto se aplica igualmente a toda forma de vida. La vida de un
gusano puede ser de poca importancia para ti, al igual que tu vida puede ser
incomprensible para el gusano; pero la vida del gusano es importante para el
gusano lo mismo que la tuya es para ti. Desde esta base de igualdad podemos
desarrollar entonces el concepto de respeto hacia los otros y del servicio por los
demás, graduándonos finalmente en la total irradiación del amor incondicional,
que es la ‘marca’ de los Seres Superiores.

El "Bien" y el "Mal" son muy reales para nosotros aquí en la Tierra y debe
permanecer así. Por tanto, necesitamos realizar un difícil "acto de equilibrio".

Por un lado, debemos esforzarnos por comprender y permanecer constantemente


alertas de los objetivos finales hacia los cuales debemos dirigir nuestra intención,
es decir, las Leyes Universales de la Conducta Correcta y la Sabiduría Superior.
Mientras hacemos esto, intentamos evitar y rechazamos lo opuesto al egocentrismo
y la agresión motivada por el ego.

Por otra parte, a medida que inevitablemente "caemos" en pensamientos y


acciones equivocadas podemos por lo menos aprender de ellas si somos totalmente
conscientes de sus efectos sobre nosotros mismos y sobre otras formas de vida que
están a nuestro alrededor, y si finalmente rechazamos estas acciones con total
entendimiento. De esta forma, nos enriquecemos por medio de la experiencia del
"mal" y sus efectos.

Durante todo el viaje evolutivo nos enfrentamos a las elecciones. Ciertamente, sin
el libre albedrío/libre elección, los conceptos mismos de evolución no podrían
hacerse reales. No podemos convertirnos en individuos que siguen el sendero de la
Sabiduría Superior a través de una elección personal consciente hasta no haber
experimentado las alternativas y sus efectos. El libre albedrío permite al individuo
escoger entre el camino de la Sabiduría Superior y el camino del Yo, y habiendo
hecho esto experimentar en su totalidad las consecuencias de cada decisión.

Muchos de los grandes Maestros, Profesores y tradiciones ocultas confirman que


en este Planeta Tierra el libre albedrío es puesto a prueba bajo las condiciones más
difíciles:

Cuando miras a la Tierra y en particular a las acciones de la Humanidad que vive


en su superficie estás siendo testigo únicamente del desorden. ¿Por qué es así?
Porque a la Humanidad se le ha dado el regalo divino del libre albedrío y de esta
manera puede crear la naturaleza de su propio mundo. Obviamente, esto debe
integrarse dentro del ciclo evolutivo y del destino del Dios o el Señor de este
Sistema Solar; pero, dentro de estas restricciones, la Humanidad puede escoger la
naturaleza de su propio camino evolutivo.

[RAMALA – canalizado por el Centro Ramala, Glastonbury – The C.W. Daniel


Co. Ltd., Saffron Walden, Essex]

A través de la elección libre creamos el bien y el mal y, habiendo hecho esto,


también debemos experimentar los resultados de nuestra creación. Este es un
proceso continuo y existe en todo el espectro de la vida. Tomamos decisiones y
creamos resultados en cada momento y en cada vida, como individuos y como
comunidades colectivas, naciones, razas y grupos religiosos. No podemos escapar
ni de la elección ni de los resultados de ésta. Podemos únicamente observar,
experimentar, asimilar y aprender de nuestras decisiones y de los efectos que éstas
tengan en nosotros o en otros seres vivos y sobre nuestro hogar planetario, y luego,
habiendo aprendido y adquirido sabiduría, corregir nuestra conducta en
consecuencia.

Conforme experimentamos las pruebas y las tribulaciones de la Tierra, con


frecuencia nos preguntamos porqué estamos sufriendo tales desgracias. En
realidad somos nosotros quienes hemos escogido nuestra encarnación sobre la
Tierra y sus circunstancias específicas. Todas las difíciles confrontaciones en
nuestras vidas han sido pre-planeadas por nosotros con la ayuda de nuestros Guías
en los Planos Superiores, con nuestra total aprobación, para poder confrontar,
vencer y aprender de ellas aquí en la Tierra. Todas las experiencias inesperadas,
difíciles y dolorosas con las que nos topamos en nuestras vidas terrenales no
provienen de ninguna forma de "retribución celestial" sino que son pre-acordadas
por nuestros yoes espirituales como lecciones vitales, con la finalidad de superarlas
y aprender de ellas mientras existe la oportunidad en el plano físico. Aquí en la
Tierra es mucho más fácil hacer rápidos progresos en el aprendizaje evolutivo que
sobre las ‘sencillas’ Esferas Superiores. Rechazar, oponernos o fallar en abrazar
totalmente estas lecciones que hemos venido a aprender únicamente retardará el
proceso y causará un dolor innecesario. Al reconocer y contemplar nuestros
errores y asimilar las lecciones que deben aprenderse de ellos podemos entonces
fluir con el proceso de aprendizaje y sacar el mayor beneficio de lo que es visto
universalmente en otros niveles como un singular ambiente de aprendizaje.

La Tierra es un planeta de aprendizaje, no un planeta de perfección. Pero sus


imperfecciones son creación nuestra y por lo tanto, está en nuestro poder
corregirlas individual y colectivamente.

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CAPITULO 6: KARMA Y REENCARNACION

La evolución supone aprender por medio de las elecciones, y para este fin nuestro
Creador nos ha otorgado el libre albedrío. Aquí en la Tierra, el libre albedrío es
utilizado, y sus consecuencias aprendidas, en la forma más extrema y bajo las
condiciones más difíciles.

En niveles más altos del ser es posible ver en un solo momento los resultados
probables de varios caminos alternativos. Se trata simplemente de tomar la
decisión correcta. Pero esta fase evolutiva terrestre está nublada por el "Velo del
Olvido", por ello no nos es posible mirar hacia el futuro. Nosotros, aquí en la
Tierra, debemos aprender mediante el arduo proceso de la experiencia física;
debemos tomar decisiones, sopesar las ventajas percibidas tanto para nosotros
como para los demás, y luego experimentar las consecuencias de nuestras
decisiones.

Como punto central del concepto de libre albedrío se encuentra la Ley del Karma,
o la Ley de Causa y Efecto.

La Ley del Karma es también conocida como la Ley del Equilibrio. Durante el
proceso de vivir, evolucionar, experimentar y aprender, nuestras acciones afectan a
los demás, ya sea en forma dañina o benéfica, y por tanto se incurre en numerosas
y a veces complejas deudas en nuestra propia Hoja de Balance evolutiva. La Ley
del Karma requiere que los efectos de nuestras acciones sobre los otros, incluyendo
todas las formas de vida, los reinos animal, vegetal y mineral, deban estar siempre
equilibrados. Cuando dañamos a los demás, incurrimos en un deuda con nosotros
mismos al igual que con estos. Cuando otros nos dañan, ellos incurren en una
deuda con ellos mismos al igual que con nosotros. Deudas por el bien o el mal,
hechas por nosotros o por otros, deben quedar equilibradas por ambas partes. De
igual manera, cuando te haces daño, quizá por el uso indebido de tu cuerpo físico,
creas un desequilibrio, una deuda contigo mismo que debe ser reparada por tu
comprensión y rechazo a tales acciones. Todo, al final, debe estar en equilibrio.

Por medio de esta Ley de Equilibrio, o de Causa y Efecto, experimentamos y


aprendemos de los resultados de nuestras acciones elegidas y de las de otros.

De acciones equivocadas tomadas en circunstancias específicas, le siguen efectos


equivocados; debemos entonces revisar y recrear esas circunstancias una y otra vez
hasta que, habiendo aprendido de todos los efectos desagradables por haber
tomado el sendero equivocado, escojamos el sendero correcto. Esta es la Ley del
Karma. Se presentarán pruebas instigadas por nuestro Yo Superior Espiritual y
serán repetidas hasta que sean "aprobadas" por nuestro propio reconocimiento,
aceptación y asimilación de la lección que debe ser aprendida. Los retos serán
planeados por nosotros y repetidos hasta que sean conquistados. Este proceso
puede ocurrir como una lección corta que dure un momento o un día; o puede
tomar toda una vida, o varias vidas, incluso varias encarnaciones. Pero nosotros, y
solamente nosotros, requerimos que nuestras lecciones sean, en última instancia,
aprendidas completamente.

De igual manera, nuestras ‘buenas’ acciones, acciones que muestran respeto por
otras formas de vida, esos ‘actos de bondad al azar’ que benefician a otros, ponen
en acción una reacción en cadena positiva.

La Ley del Karma trabaja ‘automáticamente’. De forma magnética atraemos


hacia nosotros las ‘malas’ experiencias cuando tenemos necesidad de aprender de
ellas. De igual forma, cuando no necesitamos aprender una lección en particular,
no seremos tocados por ningún peligro ni ningún mal. Resonamos magnéticamente
hacia las experiencias buenas y malas, acercándolas a nosotros cuando tenemos
necesitad de aprender de ellas.

"¡No veáis el karma solamente como una columna del Debe o Haber en el Libro
Divino de Contabilidad en el que se ha registrado lo que debéis a otro por el mal
que le habéis hecho! No funciona de esa manera. Se trata más bien de un proceso
de enseñanza en el que aprendéis a través de lo que habéis hecho. Sois vosotros los
que habéis creado esas ondas en la charca de la vida y ellas os afectarán a su vez.
El propósito del karma no es el de castigo. Más bien es un proceso de equilibrio y
educación."

[The Master ZEN TAO, canalizado por el Centro Ramala, Glastonbury]

También debemos entender que lo que damos en forma de energía, creatividad o


esfuerzo (poder) al Universo, eventualmente regresará a nosotros. Igualmente,
aquello que tomamos del Universo en forma de energía y creatividad de los demás,
es una deuda, que al final deberá quedar en equilibrio por nuestras subsecuentes
ofrendas.

"El Universo funciona según un plan, y ese plan ha dividido el poder, o la


creatividad, de manera proporcionada. Si vosotros demandáis del Universo más de
lo que os toca, os presentará el plato con vuestra porción y hasta ahí, porque ya no
hay más para vosotros. Si tratáis de tomar de otras personas, podría funcionar por
un tiempo porque algunas personas no saben cómo sostener su poder y lo regalan.
Pero el Universo es un gran ecualizador, y si vosotros regaláis vuestro poder, el
Universo lo va a redistribuir, no necesariamente entre las personas a nivel físico,
puede utilizarlo para crear nuevos universos, o darle otro tipo de uso."

[The Master VYWAMUS, un aspecto más elevado de Sanat Kumara. Canalizado


por Janet McClure en "El Preludio a la Ascensión", publicado en l996 por Light
Technology Publishing, P.O. Box 1526, Sedona, Az 86339]

En los niveles superiores, el proceso de evolución tiene lugar como una continuidad
ininterrumpida del estado consciente y despierto. Sin embargo, a nivel de la
Tierra, las dificultades de la vida terrenal y el envejecimiento físico de los cuerpos
densos pone limites a la duración del tiempo sobre este planeta en el que podemos
tolerar la vida. Esto, a su vez, demanda que "muramos", que revisemos nuestra
vida desde un nivel superior y, luego, después del tremendamente necesitado
período de descanso espiritual, regresemos para vivir otro ciclo de nacimiento y
vida sobre la Tierra. Este ciclo de nacimiento y re-nacimiento es conocido como
reencarnación.

La reencarnación es un ciclo de nacimiento, muerte y renacimiento en el cual


pasamos de los reinos espirituales a través del "Velo" a una encarnación dentro del
denso nivel físico de la Tierra, desprovistos del contacto directo con los Reinos
Superiores. Hacemos esto con el objeto de aprender ‘en aislamiento’ el tipo de
lecciones que solamente pueden ser aprendidas en tales mundos. Cada lección debe
ser completamente aprendida, y la Ley del Karma requiere que repitamos este
proceso de reencarnación hasta que hayamos dominado las lecciones particulares
involucradas en este nivel.

"La Tierra es una escuela, y vosotros aprendéis hasta de los errores. Si os


enfrentáis a un examen y suspendéiss, os esforzáis en hacerlo de nuevo. Así que si
tenéis lecciones que aprender en una vida y fracasáis en aprender, entonces en otra
vida os presentaréis ante esas mismas lecciones; porque no podéis progresar – y
toda vida es una progresión hacia arriba, una espiral en ascenso – hasta que hayáis
aprendido esas lecciones.

"Tenéis una prueba que pasar, una que os habéis prometido cumplir. El pasarla
depende de vuestro esfuerzo. Si no pasáis la prueba en una experiencia tendréis
otras oportunidades para hacerlo. Siempre encontraréis nuevas oportunidades que
se abren ante vuestros ojos. Con el tiempo realizaréis lo que os habéis prometido,
sin embargo, habrá muchas distracciones que os podrán alejar de vuestra objetivo.
El poder del Espíritu puede triunfar y triunfará al final. Es como un poderoso
imán que os acerca a Él. Es el esfuerzo el que cuenta; la responsabilidad es vuestra,
nadie puede realizar la misión por vosotros. La báscula de la Justicia Divina está
perfectamente equilibrada, no debe existir ninguna deuda si vais a progresar."

[Tbe Spirit Guide TENDOR, en "Full Cycle" por Ripley Webb – Marcus Books,
Queensville, Ontario, Canada]

Cada nueva encarnación es planeada con anticipación con la ayuda de nuestros


Guías y Maestros Espirituales. Se hace una revisión de fallos y debilidades pasadas
en consulta íntima con ellos, y se hacen planes para la aparición de oportunidades
óptimas para la próxima vida con el fin de experimentar y vencer esas debilidades.
Estos acontecimientos pueden ocurrir durante esa vida de manera bastante
arbitraria e inesperada, y algunas pueden incluso ser traumáticas, provocando que
la personalidad abiertamente culpe al azar su ‘mala suerte’. Sin embargo, todos
esos acontecimientos han sido planificados previamente por la misma alma en
niveles superiores para ser manifestados en algún momento durante la vida
terrenal de esa alma. No son, como podría parecernos en el momento en que
ocurren los hechos, el resultado del capricho arbitrario de un Azar despreocupado
o de nuestro Creador.

Cuando el alma encarna sobre la Tierra también hace un ‘contrato’ con ella misma
y con sus Guías Espirituales y con la Jerarquía Espiritual para comprometerse con
una vida sobre la Tierra que tenga cierta duración, con el objeto de aprender
lecciones específicas.

Si el alma encarnada subsecuentemente encuentra que las lecciones son muy


difíciles y decide terminar con su vida prematuramente, tal es el caso de un
suicidio, las lecciones no serán evitadas, solamente postpuestas. El alma necesitará
entrar en el largo proceso de muerte y renacimiento y así vivir aquellos años
remanentes y aprender aquellas lecciones que fueron evitadas previamente. Este es
el porqué la mayoría de nosotros, a nivel de conciencia de la Tierra, tenemos el
instinto bien arraigado de que el suicidio es algo totalmente erróneo. De hecho no
es solo una traición hacia nuestro plan Superior de evolución, también es un mal
uso de las facilidades y oportunidades que nos fueron dadas por nuestro Creador y
su Jerarquía Angélica y Espiritual.

A su vez, una comprensión más amplia de los múltiples conceptos del ‘libre
albedrío’, karma y reencarnación hará más fácil para nosotros vislumbrar el
‘drama de la vida’ y la naturaleza fundamental del sufrimiento:

"El drama de la vida tiene un propósito: enseñarle a nuestra conciencia a


evolucionar. Todo lo que sucede en el plano de la Tierra no sucede por casualidad,
sino porque lo hemos atraído hacia nosotros a través de nuestro comportamiento
en esta o en vidas pasadas, y hemos aceptado conscientemente el reto que esto
representa. Queda ampliamente comprendido que el concepto de ‘libre albedrío’
nos permite escoger cómo vamos a reaccionar ante determinadas circunstancias;
sin embargo, es importante darnos cuenta que también ejercitamos el ‘libre
albedrío’ en nuestra selección de retos que hemos aceptado tomar en cada
encarnación. A través del ’libre albedrío’ escogemos nuestros retos y nuestras
lecciones; a través del ‘libre albedrío’ escogemos cómo vamos a reaccionar frente a
ellos.

"Es difícil para aquellos que no aceptan el concepto de reencarnación, de vida-


tras- vida-tras-vida, ver el sufrimiento como un proceso evolutivo. Pero cuando la
reencarnación es aceptada como parte integral de nuestro punto de vista sobre la
evolución, es fácil comprender que hacemos patente, con cada nuevo cuerpo físico,
todo lo que hemos creado en otras vidas terrenales, y en otros niveles de existencia
más allá del plano físico de la Tierra. Traemos con nosotros no sólo nuestra
sabiduría espiritual, también los pecados del pasado, las lecciones que no hemos
aprendido, el karma que nos debemos a nosotros y a los demás. A medida que
avanzamos en la vida que ahora vivimos, automáticamente atraeremos hacia
nosotros las lecciones que hemos escogido aprender, el karma que hemos escogido
transmutar.

"Por tanto, no existe la tragedia por azar. Todo lo que sucede en el plano de la
Tierra tiene una razón, un propósito. Vivimos en un mundo en el cual muchas
personas aparentemente experimentan grandes tragedias. La tragedia le llega a las
personas ya sea porque la escogieron para su propio destino o porque les brindará
una lección en la vida que todavía no han aprendido. La tragedia es trabajar la
causa y el efecto; a medida que experimentamos sus efectos, aprendemos a cambiar
la causa. La experiencia de una tragedia también enseña la simpatía y la
compasión, la habilidad para aceptar y perdonar las pequeñas imperfecciones de
los demás, para que ellos, a su vez, hagan lo mismo con nosotros.

"Si hay un punto en el que quiero hacer énfasis ahora es éste: ese sufrimiento ha
sido escogido por ti. No te lo da tu Creador como un castigo. Tú lo escoges,
voluntariamente, como una lección para aprender, como una lección que tu alma
necesita en este preciso momento de su evolución."

[The Master ZEN TAO canalizado por el Centro Ramala, Glastonbury.]

CAPITULO 7: MUERTE Y RETROSPECCION

La muerte es parte integral de la evolución en nuestra fase actual sobre la Tierra.


Es importante para nosotros desarrollar una comprensión de su función y
significado para que, llegado el momento, el proceso pueda tener lugar de manera
suave y gozosa.

Muchos descripciones de ‘haber muerto’ han sido relatadas por personas que aún
viven, aquellas a quienes se les extendió un certificado de muerte clínica y luego
volvieron a la vida. Estos sucesos son conocidos como ‘experiencias cercanas a la
muerte’ y muchos han sido documentados en años recientes. Las experiencias
narradas muestran una sorprendente consistencia en ciertos aspectos
fundamentales: sentir que se pasa por un túnel muy brillante, la presencia de una
gran luz al final, y emerger a la ‘Luz’ con intensos sentimientos de ser recibido con
gran calidez espiritual y amor. Muchos también reportan haber experimentado
una ‘memoria panorámica’, es decir, una extraordinaria claridad de pensamiento
y ver cómo su vida entera pasa delante de sus ojos. Un gran número de estos casos
individuales de ‘experiencias cercanas a la muerte’ fueron narrados en el libro de
Raymond Moody titulado "Vida Después de la Vida" y claramente prueba que la
‘muerte’ no es la ‘negrura eterna’ que muchas personas aseguran será su suerte al
final de la vida.

En verdad hay numerosas enseñanzas en las que se describe el proceso espiritual


sobre esta Tierra de la ‘muerte’ y los diversos senderos que pueden tomarse
después, desde los antiguos manuscritos tibetanos hasta los numerosos relatos
expresados a través de transmisiones canalizadas que han sido publicados en libros
por aquellos que ‘pasaron al otro lado’.
Aquellos que se encuentran mentalmente preparados para el "más allá’, y por lo
tanto, ‘mueren en paz’, probablemente dejaran su cuerpo físico con total
consciencia, y serán capaces de observar la partida de la propia alma conforme
ésta se levanta suavemente sobre la ya descartada ‘envoltura’ física. Es usual que
un Guía Espiritual esté a su lado para darle la bienvenida al alma que llega,
guiándole a él o a ella hacia las Esferas Superiores. Alternativamente, el alma que
se va puede también viajar sola rápidamente a través de un túnel brillante hacia
una ‘luz intensa’, y emerger en un mundo lleno de colores brillantes y escenas de
gran belleza.

La hora y el lugar de la muerte siempre es conocido de antemano por la Jerarquía


Espiritual, así como por el Yo Sagrado del alma encarnada. Esto es parte del
acuerdo hecho entre nuestro yo espiritual y nuestros guías y la Jerarquía
Espiritual antes de la encarnación. Los familiares y los antiguos amigos que ya han
pasado al mundo Espiritual son alertados sobre esta imperiosa ‘transición’ y
estarán cerca para dar la bienvenida al que llega a ese nuevo plano.

En el momento crítico de la muerte generalmente somos asistidos por un Ser


Angelical, conocido como el ‘Ángel de la Misericordia’, a quien se le ha
encomendado la importante responsabilidad de cortar la cuerda de plata de la
vida, una cuerda etérica de luz que conecta nuestro cuerpo físico con nuestros
cuerpos espirituales superiores.

El libro de Ripley Webb titulado ‘Full Cycle’, que fue canalizado, nos da una
buena descripción de un Ángel de la Misericordia en el momento en que atiende a
una mujer mayor llamada Martha en su lecho de muerte. Esto ha sido descrito tal
como lo atestiguaron Michael, quien ‘pasó’ recientemente, y su Guía Espiritual
Rafael, después de que ambos descendieran de los Reinos Espirituales Superiores
para observar lo siguiente:

"El centro de la habitación estaba ocupado por una cama sobre la que yacía la
figura de una mujer de aproximadamente setenta años. Alrededor de la cama se
encontraba el médico, la enfermera, un hombre y una mujer, quienes posiblemente
eran familiares de la agonizante mujer. La que ocupaba la cama a veces
murmuraba unas cuantas palabras y la luz en sus ojos mostraba que no había
daño cerebral. Sus inquietos dedos manipulaban nerviosamente el cubrecama.

Como si adivinara los pensamientos de Michael, Rafael dijo: "No está enferma
realmente, tan sólo es la avanzada edad. Su tiempo ha llegado. Mira quien ha
entrado por la puerta". Michael lanzó una mirada a la puerta y vio a un Ser tan
majestuoso y digno que pensó que no podía ser un espíritu corriente. "Es un Ángel
de la Misericordia", explicó Rafael. "Viene personalmente para cortar el cordón
de la vida, ese que mantiene a un espíritu unido a su cuerpo terrenal. Es una tarea
que Dios solamente encomienda a seres muy avanzados como él. El conoce la
voluntad de Dios y cómo y cuando debe ejecutarse dicha función". Luego agregó:
"Mira, la anciana ha sentido su llegada."

Como si en verdad estuviera consciente de la entrada del Ángel, la anciana levantó


ligeramente su cabeza y miró fijamente a la puerta. Luego su cara se arrugó y las
lágrimas rodaron por sus mejillas."No quiero morir, doctor, no quiero morir. No
me deje morir." La quejumbrosa voz desfalleció en un deje de autocompasión. El
doctor tomó su mano entre las suyas y murmuró las palabras que los demás
esperaban escuchar de él en este tipo de casos. Él sabía que nada podía hacerse y
que el final se acercaba.

Reconfortada por su gesto, la anciana miró de nuevo hacia la puerta. Michael,


siguiendo su mirada, vió cómo cambiaban los rasgos del ángel y cómo se
transfiguraba, al tiempo que un brillo de amor era proyectado como un haz de luz
hacia la cama. Los labios de la anciana se movieron conforme trataba de decir a los
demás lo que veía, pero la fuerza de la vida estaba dejando ya su frágil cuerpo. El
Ángel extendió su mano hacia ella. Como obedeciendo un llamado, la mujer, en
una repentina demostración de fuerzas, se irguió hasta quedar sentada sobre la
cama, y sus ojos estaban llenos de luz. Se escuchaba música en la distancia
proveniente de una fuente espiritual, originándose desde Reinos Superiores.

"Mira detrás del Ángel", dijo Raphael. Ahí, detrás de la radiante figura se
encontraba un pequeño grupo de espíritus, todos con sonrisas de bienvenida. Eran
amigos o familiares de la mujer que estaba en proceso de transición, que habían
venido para saludarla y para ayudarla en su llegada al nuevo mundo.

Algo atrajo la atención de Michael hacia la cama. Un pequeño rastro de vapor


inició el ascenso desde la cabeza de la moribunda y quedó suspendido como una
pequeña nube. Luego el cuerpo cayó hacia atrás repentinamente y las manos
quedaron sobre el cubrecama, sin vida. Casi de inmediato, una forma, la réplica
del cadáver, se elevó a una posición horizontal extendida sobre el cuerpo físico,
boca abajo. Esta forma fantasmal gradualmente asumió una condición más densa
a medida que las fuerzas etéricas se fueron liberando del cuerpo físico y se
integraban en el cuerpo espiritual.

Cuando el proceso terminó, el cuerpo etérico asumió una postura erecta al pie de
la cama. Aquí el Ángel avanzó y colocó sus manos sobre los ojos de la forma
etérica, luego dio un paso a un lado. El cordón de vida todavía conectaba los
cuerpos físico y etérico, pero se había atenuado y apenas era visible. Martha era
libre y en su nueva libertad avanzaba para encontrarse con aquellos que habían
venido por ella. De sus labios salían exclamaciones de complacida sorpresa.
Empezó a responder a los saludos de estos amigos, viendo que casi había olvidado
la existencia de algunos. El pequeño grupo comenzó a retirarse.

"El Ángel no ha cortado la cuerda de la vida todavía", dijo Miguel.

"No", repitió Raphael. "No lo hará todavía, sería un shock para el espíritu.
Esperará junto a los restos unos momentos antes de realizar la última tarea".

El Ángel ahora se volvió hacia el grupo que se marchaba y extendió sus brazos
hacia ellos, obviamente concentrando sus pensamientos en dirección a ellos.
Instantáneamente, la habitación terrenal desapareció y después de un breve
período de oscuridad, todos se encontraron en los terrenos del hospital en el nivel
Etérico/Astral. Allí, delante de ellos estaban la anciana y sus amigos que ahora se
acercaban a la entrada del edificio principal. La anciana bostezó. Estar con amigos
la había cansado en el pasado y ahora sentía que esta extraña experiencia también
la cansaba. Estaba cansada. Raphael se adelantó y habló con los visitantes. Ellos
parecían respetar su autoridad y se excusaron. Una enfermera salió del edificio y
Raphael le puso al cargo del nuevo ser".

[‘Full Cycle’ por Ripley Webb – Marcus Books, Queensville, Ontario, Canadá]

El nivel vibratorio al cual llegamos después de la ‘muerte’ depende del progreso


espiritual y del logro alcanzado sobre la Tierra. La mayoría de los encarnados en
la Tierra que poseen un desarrollo espiritual moderado van al plano
Astral/Emocional, el nivel vibracional que le sigue al físico. Aunque esto en gran
proporción reproduce las condiciones tal y como aparecían sobre la Tierra, hay
algunas diferencias que reflejan el rango de vibración más alto. Los colores de la
naturaleza son más brillantes, el aroma de las flores más intenso, mientras que los
sentidos del alma, ahora en su manifestación superior, son más agudos y están más
alertas a la belleza que los rodea. El cuerpo se siente más ligero puesto que ya no
hay la atracción gravitacional de la tierra, y con un poco de experiencia uno pronto
estará listo para transportarse por los aires o eventualmente modelar la materia en
cualquier forma deseada simplemente con el poder del pensamiento.

El alma que acaba de llegar puede quedar sorprendida al ser conducida a su


personal ‘hogar de ensueño’. Al estar imaginando constantemente un ideal cuando
estamos en la Tierra, inconscientemente estamos creando una ‘contraparte’ de
material de pensamiento en los niveles Mentales o Astrales Superiores, en donde se
registra como una forma de pensamiento concreta. Utilizando esta forma-de-
pensamiento como guía, los asistentes espirituales en el plano superior pueden dar
forma a la materia menos densa y más maleable en ese plano por medio del poder
mental, reconstruyendo este hogar ideal a tiempo para darle la bienvenida a esa
nueva alma que está por llegar.

Una de las muchas experiencias después de la muerte relatada a través de


subsecuentes transmisiones canalizadas es la que dio Monseñor Robert Hugh
Benson poco después de su muerte en l914 a su amigo sobre la tierra, Anthony
Borgia. Monseñor Benson cuenta que después de su ‘muerte’ y mientras que
todavía estaba dentro de su cuerpo terrenal, un sacerdote, antiguo colega, se le
unió y lo saludó calurosamente:

"Me pidió que lo tomara de su brazo firmemente y que no tuviera miedo. Me dijo
que podía, si así lo deseaba, cerrar mis ojos. De inmediato experimenté una
sensación de estar flotando exactamente igual que cuando uno sueña, aunque esto
era muy real y no involucraba dudas sobre mi seguridad personal.

Después de un momento nuestro progreso pareció detenerse momentáneamente y


podía sentir que había algo muy sólido bajo mis pies. Se me ordenó abrir mis ojos.
Así lo hice. Lo que vi fue mi antigua casa, en la que había vivido sobre el plano
terrenal; mi vieja casa – pero con una diferencia – estaba mejorada con aquellos
arreglos que no había podido hacerle cuando estaba en la Tierra. La casa estaba
rejuvenecida, así me lo pareció a primera vista, en vez de restaurada, pero eran los
jardines que la rodeaban lo que atrajo mi atención sobremanera.
Parecían más amplios y estaban en un estado de perfecto orden y arreglo. Quiero
decir, no en la forma de orden normal que uno está acostumbrado a ver en los
jardines públicos sobre la Tierra, sino que estaban extraordinariamente bien
cuidados. No había maleza ni montones de follaje enredado, tan solo la más
gloriosa profusión de bellas flores tan bien arregladas que mostraban la perfección
absoluta.

De ellas, cuando tuve la oportunidad de examinarlas de cerca, debo decir que


nunca vi algo igual sobre la Tierra, muchas estaban totalmente abiertas. Se
encontraban, desde luego, las ya conocidas, pero la mayoría parecían ser algo
totalmente nuevo a mi escaso conocimiento sobre las flores. No eran solo las flores
en sí mismas y su increíble variedad de soberbio colorido lo que llamó mi atención ,
sino la vital atmósfera de vida eterna que proyectaban en todas direcciones. A
medida que uno se acercaba a cualquier grupo de flores en particular o incluso a
una sola flor, parecían verter grandes flujos de poder energetizante que elevaban
espiritualmente el alma y le daban fuerza, mientras que los perfumes celestiales
que exhalaban eran tales que nadie en su vestido carnal seguramente haya
experimentado jamás. Todas estas flores estaban vivas, respiraban, y eran, según
mi amigo, incorruptibles."

[‘Life in the World Unseen’, canalizado por Anthony Borgia – Psychic Pess Ltd.,
Londres, y M.A.P. Midway, Utah]

Aquellos que no eran conscientes de ello o no creían en otra vida mientras


permanecían sobre la Tierra pueden necesitar que se les convenza de que, en
efecto, están ‘muertos’; después de todo, no parecen sentirse tan diferentes. Para
que acepten que realmente están ‘muertos’ en términos terrenales puede tomar un
tiempo, a pesar de la pequeña y extraña diferencia en las cualidades de la luz y el
color del ambiente que los rodea. Debido a que estas personas son lentas para
aceptar el cambio, usualmente escogen, a su muerte, moverse en un nivel
vibracional más cercano al de la Tierra. Aquí ellos pueden proseguir la vida en un
medio ambiente tan cerca como sea posible a su ambiente anterior. Eventualmente,
a través de la ayuda de guías de las esferas superiores, habrán de reconocer su
nueva ‘realidad’ y quedar libres para moverse hacia otros planos más elevados.

Aquellos que disminuyeron considerablemente su nivel vibratorio mientras vivían


sobre la Tierra, por medio de un comportamiento dañino o poco cuidadoso con los
demás, o que abusaron de sus propios cuerpos por falta de cuidado físico o uso de
drogas, pueden encontrarse descendiendo a las oscuras regiones astrales más
bajas, el tradicional ‘Infierno’ bíblico. Allí encontrarán un mundo oscuro y
tenebroso de parajes tristes, el resultado de la creación colectiva de otros de una
naturaleza similar. Estos planos oscuros y tristes van desde las tierras frías, grises y
brumosas hasta los más bajos y negros pozos de depravación en donde las acciones
maléficas son revividas una y otra vez. El alma, en niveles superiores, puede
decidir que su personalidad inferior necesita permanecer en estas condiciones por
algún tiempo, hasta que haya asimilado completamente las lecciones pertinentes a
través de una constante repetición de los actos malvados previos y sea finalmente
forzada a ver el camino equivocado que ha tomado. Eventualmente, el alma
errante empezará a ‘ver la Luz’ y a sentir la necesidad de levantarse de nuevo
hacia planos vibracionales superiores. Una vez que el alma ha realizado esta tarea,
los Guías Espirituales estan ahí de inmediato para ayudarle suavemente a alcanzar
los niveles superiores.

El bajo plano Astral también contiene otras áreas menos oscuras aunque de bajo
nivel, en donde la gente de poca evolución o aspiración espiritual vive en sus
propias condiciones recreadas subjetivamente, similares a las áreas urbanas menos
inspiradoras de la Tierra. Muchas de estas almas permanecen inconscientes o sin
deseos de creer que están muertas. Reviven la vida como si estuvieran sobre la
Tierra en condiciones relativamente oscuras, haciendo los mismos movimientos
que antes, comiendo los mismos alimentos que ya no necesitan, yendo al ‘trabajo’
todos los días y usando el ‘dinero’ que tampoco es necesario. Se dan cuenta de que
todo lo que les rodea parece deteriorarse rápidamente y que necesita ser repuesto
constantemente; esta experiencia es necesaria para enseñarles a dejar ir a su apego
por las posesiones materiales y alentarles a buscar un forma de moverse hacia
esferas más espirituales. Eventualmente ellos también buscarán ayuda superior y
serán, subsecuentemente, llevados hacia planos Mentales y Espirituales más altos
que rodean la Tierra.

Cuando el hecho de la muerte ha sido totalmente asimilado, al alma recién llegada


se le otorga acceso a los Archivos Akásicos, una forma de banco de memoria
universal que acumula todos los eventos que han tenido lugar en cualquier parte
del universo así como cada pensamiento y acción de cada individuo. A través de
este medio el alma puede revisar, con imágenes y sonido multi-dimensional, los
episodios significativos de la encarnación de la Tierra que ha sido completada
recientemente. Al revisar los errores, las faltas en su personalidad y la carencia de
bondad hacia los demás que han ocurrido mientras se estuvo sobre la Tierra, se
podrán identificar las diversas lecciones que permanecen sin ser aprendidas.

Este proceso es descrito en el libro canalizado de Ripley Webb titulado ‘Full


Cycle’, a medida que Michael regresa al Mundo Espiritual después de su muerte
sobre la Tierra y empieza, a través de los Archivos Akásicos, a revisar su vida,
recientemente terminada. Ahí es llevado por su Guía Espiritual a un edificio
especial situado en el Plano Espiritual, algo parecido a un cine pequeño, y en
donde la pantalla al fondo ahora se ilumina:

"La escena se movió y se convirtió en una forma de simbolismo bastante imposible


de traducir en palabras. Sin embargo, la mente del Espíritu encontró una manera
de darle significado a los símbolos y Michael pudo comprender el significado
interno de todos los eventos más importantes que construyeron la secuencia de su
existencia. Los sucesos pequeños de menor importancia ahora tomaron mayor
importancia en razón de su efecto sobre él mismo y sobre los demás.

Notó una voz que hacía comentarios a los hechos que se sucedían. Al principio
pensó que eso era parte de la película, como una pista de sonido que le daba en
lenguaje de pensamiento la simbología de los eventos. La voz era terriblemente
crítica; Michael se preguntaba quién era esta persona que le juzgaba en términos
tan crudos. Nadie le había advertido de esto. Su corazón se sobresaltó
repentinamente. Tuvo el terrible pensamiento de que esto podía ser alguna
manifestación de la ira de Dios sobre él...
Reunió todo su valor y se enfrentó a película sobre su pasado con un espíritu de
determinación. Para su sorpresa, descubrió que la voz no provenía del exterior
sino que surgía de su propio ser. Como si siguiera su tren de pensamientos la voz
irrumpió: "Es la voz de la Conciencia, tu Conciencia". Esto lo llenó de azoro. No
era Dios quien hablaba, no era algún Ser superior que lo juzgaba desde su
imponente sillón de omnipotencia. Era su propio Yo, su propio Espíritu que
hablaba desde el pináculo más alto de su conciencia, desde la esencia más pura de
su ser. Se encogió en su asiento a medida que el terrible significado de este hecho
irrumpía en su mente. Nunca, en sus más salvajes sueños, se había imaginado a sí
mismo como su juez final. No era la mente de autoexcusa fácil del pensamiento
humano, sino la parte más implacable de su ser, el Centro que-todo-lo-sabe de su
super-conciencia. ¿Cómo podía excusarse ante el terrible cargo de su propio
Espíritu?

En términos más que certeros la voz continuó enfatizando sus debilidades y


marcando los puntos en su carrera en donde su tontería o ignorancia o falta de
esfuerzo habían influenciado a otras vidas para su detrimento. Nuevamente
indicaría dónde su falta de entendimiento de la oportunidad que se presentaba
había resultado en una triste consecuencia para los demás, dónde él podía haberlos
ayudado a evitar el daño si tan solo hubiera estado menos ocupado en sí mismo. La
voz era justa, le felicitaba por todo lo que había logrado. Pero no había duda sobre
el lado en que la Balanza de la Justicia se inclinaría".

[‘Full Cycle’, por Ribpley Webb – Marcus Books, Queensville, Ontario, Canadá]

Habiendo revisado nuestra vida pasada y habiendo visto todas nuestras faltas con
la visión espiritual más clara y objetiva de las dimensiones superiores, podemos
ahora, con la ayuda de nuestros Guías Espirituales, verificar qué lecciones deben
ser re-aprendidas, así como revisar aquellas lecciones que todavía tenemos que
aprender.

Pero a menos que el Karma requiera de un regreso inmediato a la Tierra, como


cuando ocurre después de una vida interrumpida prematuramente por un suicidio,
la mayoría de las almas pasa un tiempo considerable en los niveles Espirituales.
Esto toma generalmente doscientos años o más, y puede a veces llegar a mil años o
más del tiempo terrenal.

Durante este período de restauración espiritual podemos explorar los vastos


Mundos Espirituales o asistir a los numerosos Salones de Aprendizaje para
adquirir un nuevo conocimiento y nuevas habilidades. También existe una amplia
oportunidad, para aquellos de nosotros que estemos listos, de servir a los demás
ayudando a los recién llegados desde el plano de la Tierra para que puedan
ajustarse a su nueva dimensión, o dando fuerza espiritual a aquellos de la Tierra
que se encuentran solos o en desgracia.

Después de este período de reajuste espiritual, de aprendizaje y de servicio en los


planos superiores, el alma, reconociendo que todavía tiene lecciones que deben
superarse o ser aprendidas, siente la necesidad de reencarnar una vez más en el
denso plano físico de la Tierra. Allí, por medio de difíciles y exigentes lecciones de
vida física terrestre se puede lograr un progreso evolutivo más rápidamente que en
el Plano Espiritual. Se inicia entonces el proceso de planificación detallado junto
con el Guía que se tendrá en la nueva encarnación que se aproxima.

CAPITULO 8: NACIMIENTO Y CRECIMIENTO

Antes de cada encarnación debemos realizar cuidadosos preparativos junto con


nuestros Guías Espirituales. En primer lugar se escoge un lugar adecuado sobre la
Tierra en términos de país y comunidad, los cuales brindarán el apoyo económico
y social adecuado para las lecciones que deberán ser aprendidas.

En segundo lugar, los padres se escogen con igual cuidado para que puedan
brindar el medio adecuado para el aprendizaje y el crecimiento del alma; pueden
ser ‘viejos amigos’ con quienes uno ha tenido una conexión cercana en vidas
pasadas, quizá ser miembros del mismo Grupo de Almas.

En tercer lugar, se planifican los sucesos esenciales y los ‘lugares de encuentro’


para que ocurran en diversos momentos de nuestra próxima vida, sucesos que
brindarán las oportunidades de aprendizaje necesarias para las lecciones
específicas que deben ser aprendidas. Y, finalmente, se escoge astrológicamente el
momento exacto del nacimiento para proveer las influencias planetarias correctas
para esa próxima vida.

"No solamente escoges el cuerpo en el que vas a reencarnar, los padres que te van a
concebir, las influencias planetarias bajo las cuales vas a nacer, el país en el que
vivirás, tu modo de vida y la persona con quién te casarás, también escoges el
momento de tu muerte y la manera en que vas a morir."

["The Master RAMALA, canalizado por el Ramala Centre, Glastonbury]

Los principios básicos de preparación para la encarnación, esto es, cuando


revisamos y escogemos nuestras vidas por anticipado, basados en las lecciones que
deberán ser aprendidas y las pruebas por las que habremos de pasar, son
confirmados por muchos profesores y maestros de forma consistente. Este proceso
es descrito de nuevo por Ripley Webb en el libro ‘Full Cycle’, a medida que
Michael, asistido por su Guía Espiritual, Tendor, se prepara para su siguiente
encarnación sobre la Tierra.:

"Tendor presentó a Michael al Consejero Espiritual que había llegado para darles
la bienvenida. El Consejero miró a Michael fijamente y luego sacó unos extraños
mapas que parecían contener el progreso de Michael, algo similar a un horóscopo.
Eso no tenía ningún sentido para Michael, sin embargo, de ahí, el Consejero pudo
darle un reporte claro y lúcido de sus habilidades y debilidades, sus conquistas y
derrotas, todo lo que representaba su progreso hasta ese momento.

"De la misma fuente, el Consejero interpretó el tipo de problema con el que


seguramente Michael iba a toparse según su destino, y explicó el curso de una
encarnación que probablemente le brindaría las lecciones que más necesitaba.

"Tu destino está inscrito en nuestros archivos y mediante el proceso de selección


extraeremos una encarnación que, según el destino, sigue la línea que promete
darte lo que requieres. Cuando veas ese archivo en unos momentos podrás juzgar
si crees que estás listo para enfrentarte a las dificultades que éste ofrece; si no lo
estás, entonces encontraremos algo más fácil".

"Poco después, en el lado opuesto de la habitación, una pantalla quedó iluminada


por unos rayos. Michael, cautivado, observaba un número de hilos de diferentes
colores que se movían sin cesar a lo largo de la pantalla en lo que parecía ser un
telar o una máquina tejedora. Del otro lado del telar aparecía una pieza de
material ya terminado, tejido en elaborado patrón a partir de esos hilos
multicolores.

El Consejero Espiritual hacía comentarios de manera continua a medida que las


imágenes se sucedían. Mostró a Michael el hilo que representaba la encarnación
que le había sugerido previamente."Esto muestra lo que tendrías que realizar
durante tu encarnación. Aunque lo que realmente alcances puede ser algo
totalmente diferente. No puedes escapar a tu destino, pero eres el dueño de la
manera en la que vas a manejar ese destino y el tiempo que te tomará lograrlo."

["Full Cycle" por Ripley Webb – Marcous Books, Queensville, Ontario, Canadá]

A partir de la revisión de los errores y logros pasados, y la planificación de la


siguiente encarnación, se inicia la preparación del complejo proceso del nacimiento
físico, a medida que el alma empieza a tener un contacto espiritual con el aura de
la Tierra y, en particular, con sus nuevos padres.

"El alma que ha decidido encarnar ya le ha preguntado y ha obtenido respuesta de


las almas de sus padres escogidos. Antes del tiempo de la concepción, porque el
nuevo ser sabe cuándo va a ser concebido, se acerca con su cuerpo astral al aura de
la Tierra, y en particular, a las auras de sus padres. Espera en esa forma Astral el
momento de su concepción. Observa a sus futuros padres conforme viven sus vidas
en el Plano Físico.

En el momento de la concepción, las tres almas se unen en el Plano Astral. Es como


una reunión, un momento de celebración. Pero hay muy pocas personas sobre la
Tierra que estén conscientes de esto.

Una pequeñísima fracción del alma que va a nacer más tarde reside dentro de la
semilla de aquella unión. Durante los siguientes meses, a medida que el cuerpo del
feto crece dentro del vientre de su madre, de la misma manera una pequeña
fracción del alma empieza a aumentar hasta que, en el momento del nacimiento,
una séptima parte del alma está ya en el cuerpo del bebé."

[The Master RAMALA, canalizado por el Ramala Centre, Glastonbury]

El alma empieza ahora su propia y cuidadosa preparación para el proceso físico


del nacimiento, como nos cuenta la historia de Michael, canalizada por Ripley
Webb: Michael ahora está a punto de nacer dentro del nivel físico de la Tierra, y su
propio guía espiritual, Tendor, lo ha llevado a la contrapartida espiritual de la
clínica de maternidad de la Tierra...
"Michael fue autorizado a deambular a voluntad a través de las salas y los terrenos
de la clínica, y se sorprendió al ver lo complicado que era este acercamiento al
nacimiento físico. Se debía asistir a conferencias en donde se le daba mucha
información. Aprendió que una culminación exitosa dependía de varios factores. El
más importante era el hecho que esto es un asunto de cooperación entre la madre y
el hijo. Es esencial para la embarazada mantener el mejor estado de salud posible
y cuidar de su cuerpo durante este tiempo. También descubrió, para su sorpresa,
que él mismo podía ejercer un efecto considerable sobre el cuerpo del embrión que
estaba siendo construido para su uso. Se le pidió concentrarse en determinados
momentos sobre este aspecto únicamente, para dirigir su pensamiento hacia la
perfección de lo físico y la asimilación correcta de la sustancia atómica dentro de
esta pequeña forma.

Se le mostraron ejemplos de las dificultades que podrían tener lugar si una


embarazada descuidaba su estado, o si se resistia a la idea de su maternidad, ya
fuera por miedo o por falta de deseo. Peor aún era la situación en donde había que
enfrentarse a una enfermedad grave o un cuerpo cuya envoltura etérica quedaba
distorsionado por los narcóticos u otros abusos. En estos casos el espíritu que se
está encarnando tiene una experiencia muy azarosa, en la que usualmente está
postrado durante todo el período de gestación. En ocasiones el intento debe
abandonarse porque la futura madre hace mal uso de su cuerpo. El desafortunado
espíritu lucha hasta el final para encarnar con el objeto de establecer aunque solo
sea una breve relación con su vida física; en caso de fracasar es forzado a desistir
en su unión con ese cuerpo embrionario y volver a su vida como Espíritu una vez
más. Todo el proceso de selección y preparación debe ser repetido. Generalmente,
cuando las dificultades son muy acusadas, el espíritu ha aceptado deliberadamente
los riesgos, sabiendo que si los vence puede progresar aún más rápidamente.

A medida que el tiempo pasaba, Michael empezó a sentir la atracción magnética de


la Tierra. Comenzó a manifestarse como una atracción hacia abajo, en los pies,
muy parecida a la atracción de la gravedad, excepto que él estaba más consciente
de ello. Era apenas perceptible al principio, pero conforme pasó el tiempo aumentó
hasta un grado incómodo. Se dio cuenta que el uso de una clínica como esta era
casi imperativo si se tenía que evitar una desgracia. Se sintió aliviado al escuchar
de boca de su Doctor Espiritual que en su caso se anticipaba un nacimiento
perfectamente normal, ya que su madre era una mujer inclinada a lo espiritual y la
idea de su llegada era una fuente de alegría para ambos padres. Michael pensó
compasivamente en los espíritus desafortunados a su alrededor, muchos de los
cuáles ya estaban conscientes de que iban a ser visitantes no bienvenidos en el
círculo familiar que los esperaba, que tenían una ínfima oportunidad de
experimentar el amor que tanto deseaban sentir".

[‘Full Cycle’ por Ripley Webb – Marcus Books, Queensville, Ontario, Canadá]

"En el momento del nacimiento, conforme el bebé abandona el aura de la madre y


se le corta el cordón umbilical, desde el éter le llega a ese infante la Chispa Divina
del Alma que da energía al bebé y le inicia en su camino. El alma ha empezado a
cumplir con su destino y las lecciones que deben ser aprendidas entran en acción
en ese momento."
[The Master RAMALA, canalizado por el Ramala Centre, Glastonbury]

Cada alma encarnada seguirá ahora su sendero individual a través de la vida,


basándose en el guión previamente aceptado y predestinado, aunque los detalles y
el resultado final dependerán de las reacciones de esa alma y de su respuesta a los
retos con los que se irá enfrentando

CAPITULO 9: REGRESANDO A LA UNIDAD

El propósito central que unifica todas las experiencias de una vida es la evolución y
su proceso de aprendizaje inherente.

Más concretamente, en este tiempo en particular, la Humanidad en la Tierra ha


alcanzado el punto de regreso ascendente sobre el Gran Arco Evolutivo, el punto
donde podemos empezar a trabajar hacia la unidad con todas las formas de vida y
finalmente con nuestra Fuente Creadora. Este es un giro desde el descenso
involutivo que el alma experimenta cuando se separa del Creador, desde su
individualidad, desde su auto-centrismo y su motivación desde el ego, en un
regreso hacia la cooperación y la unidad con los demás seres.

La posición evolutiva colectiva de la humanidad en este tiempo sobre la Tierra es


manifestarse como una vuelta, lenta pero muy significativa, hacia el equilibrio a
medida que la balanza comienza a inclinarse, casi imperceptiblemente, hacia el
lado del Espíritu en oposición a la Materia, hacia la Unidad en oposición al Yo.

De esta manera, el esfuerzo individual que todos debemos hacer para manifestar la
compasión y la consciencia de las necesidades de los demás, equilibrado por la
autodisciplina y la eficiencia -requisitos fundamentales del proceso evolutivo-,
adquiere un significado particular en estos momentos.

El causar daño o herir a los demás, explotar a los demás para sacar provecho de
sus debilidades, han sido elementos importantes en la pasada historia de la
humanidad, según viajábamos hacia un cada vez mayor egocentrismo. Ahora, a
medida que empezamos a cambiar de dirección, nuestra nueva orientación se
vuelve hacia la cooperación, el respeto mutuo y, finalmente, al ‘amor incondicional’
que es el que se expresa universalmente en los niveles superiores.

En particular, debemos buscar el desarrollo de una nueva conciencia y respeto por


otras formas de vida con las que compartimos este planeta, particularmente con el
Reino Animal que tanto ha sufrido por nuestras manos en el pasado, sin olvidar
nuestro gran Ser Planetario Tierra, cuyo cuerpo ha sido destrozado y contaminado
indiscriminadamente a través de las eras de la humanidad.

El camino de regreso a la Unidad requiere estar cada vez más a tono con las Leyes
Naturales del Universo, en especial en este momento de cambio evolutivo, mientras
los hábitos de nuestro pasado egocéntrico todavía están tan activos. Un cambio de
dirección siempre resulta difícil, particularmente cuando somos tironeados por los
restos residuales de nuestro pasado egocentrista, el cual no es apropiado para
nuestro nuevo movimiento ascendente hacia niveles vibracionales más altos.
"Cada uno de vosotros, según el punto de consciencia y evolución de vuestra alma,
deberá estar a tono con la grandes Leyes Naturales del Cosmos y deberá llevar la
vida de acuerdo con esas leyes, sin importar las tentaciones físicas o materiales que
se os presenten. Seréis puestos a prueba en el ejercicio de esas leyes.

Hoy día son principalmente los Reinos Animal, Vegetal y Mineral los que están
siendo esclavizados y explotados. La humanidad siente que tiene el derecho de
comprar y vender las diversas manifestaciones de estos Reinos. ¿Cómo vais a
responder a esta prueba? No importa lo que hagan el resto de las personas que
haya a vuestro alrededor. Vosotros debéis tomar vuestra propia decisión basandoos
en vuestra comprensión de las Leyes Naturales. Todo lo que hagáis en relación con
estos tres Reinos de Materia deberá estar a tono con la Ley más alta, la Ley del
Cosmos, la Ley de la Armonía y el Equilibrio, la Ley del Orden Natural."

[The Master RAMALA, canalizado por el Ramala Centre, Glastonbury.]

Durante siglos el hombre ha concentrado su atención en las relaciones con el


prójimo. Al principio, los Fuertes, aquellos que poseían mayor poder e influencia,
sostenían el dominio; luego, aquellos que se veían a sí mismos como los Débiles sin
privilegios, empezaron a luchar por sus derechos por medio de la fuerza númerica
superior, a veces sometiendo a sus antiguos amos. En ambos casos, la pelea estaba,
y todavía está, motivada meramente por el propio interés en ambos casos. Ahora
que las dos partes están llegando a una posición de casi-igualdad en fuerza, toda
una nueva base moral para la interacción social, basada en la igualdad y el respeto,
debe ser establecida para el futuro. Lo más difícil sin embargo, y que requiere un
punto de vista moral aún más elevado, es el otorgamiento de derechos y justicia
por parte de los que están en posiciones superiores hacia aquellos que no están en
posición de luchar o incluso de pedir. Ni los animales ni las plantas, ni el ‘medio
ambiente’ o el nonato, pueden luchar ni exigir; si van a recibir justicia ésta debe
serles dada voluntariamente. Este es nuestro reto presente, una de las mayores
pruebas para el futuro como colectividad.

A medida que nos hacemos más conscientes de la necesidad de mostrar un mayor


respeto por nuestro medio ambiente y el Reino Animal, muchas personas están
tomando la decisión de convertirse en vegetarianos rechazando la carne como
alimento, rechazando la carne de las aves, los peces y los animales y volviendo al
concepto vegetariano de no matar la vida con conciencia.

Aquellos que deseen avanzar más aún pueden convertirse en ‘Frutívoros’ y vivir a
base de una dieta de frutas, nueces y granos, ‘frutos de la Tierra’ que nos son
‘dados’ libremente con el fin de procrearse con más eficiencia. Una lechuga, una
col o una zanahoria, que están en proceso de crecimiento y de experimentar la vida
sin importar cuan limitada nos parezca, tiene que ser matada y sus experiencias de
vida encarnada acortadas ¡antes de que la puedas comer!. Las semillas y los granos
representan una vida en potencia pero hasta que hayan germinado no se han
embarcado en el recorrido del espíritu evolutivo experimentando la vida física. La
fruta, por el contrario, es ofrecida al hombre en forma gratuita, a los animales y a
las aves para que puedan distribuir sus semillas a los cuatro vientos.
Si podemos aprender a practicar el mayor respeto por el Reino Animal estaremos
retornando, ahora con una mayor conciencia, a la condición que existía hace
mucho tiempo en la Tierra:

"El hombre, que vivía en la perfección, no poseía ni controlaba a los animales, a las
aves en el aire o a los peces del mar. Los reconocía como chispas de la creación que
no estaban tan evolucionados como él, y por lo tanto era consciente de su
responsabilidad hacia ellos. Se daba cuenta de que de ninguna manera debía ser un
ejemplo para el Reino Animal que pudiera degradarlo o descarriarle. De ninguna
forma debía dañar a los animales puesto que uno no daña a un alma menos
evolucionada: uno la ayuda llevándola a su punto de conciencia. El hombre no
necesitaba matar ninguna especie del Reino Animal para proveerse de alimento,
porque era frutívoro y vivía enteramente de los frutos de la Tierra".

[The Master RAMALA, canalizado por el Ramala Centre, Glastonbury.]

El respeto por otras formas de vida está en total sintonía con la adquisición de
nuestra propia conciencia y la conciencia grupal. Hacer ejercicio, llevar una dieta
saludable a base de frutas, sin grasa ni productos de animales, bajo una rutina de
vida disciplinada y viviendo una ‘vida limpia’, todo ello se combina para elevar la
frecuencia vibratoria y en general el nivel del ser. Somos muy dependientes de
nuestro cuerpo físico, que es nuestro vehículo para manifestarnos en este denso
plano sobre la Tierra. Un cuerpo desprovisto de salud y mal usado puede
rápidamente convertirse en una carga y ser un verdadero detrimento para el
progreso evolutivo; desde hace tiempo se ha reconocido que el espíritu puro reside
más confortablemente en un cuerpo puro y saludable.

A través del proceso de comer más ligero y de una vida saludable, de calmada
reflexión, de estar a tono y escuchando a nuestro Yo Superior, podemos
profundizar en la comprensión de nosotros mismos, de nuestro universo y de
nuestro plan evolutivo. También podemos desarrollar una mayor conciencia y
respeto hacia otras formas de vida y hacia nuestro planeta; podemos establecer, y
posteriormente reforzar, el contacto vital entre el Yo de la Tierra y el Yo Superior;
podemos empezar a alinearnos con ‘el flujo’, sirviendo a los demás al igual que al
Yo, y llevando nuestras vidas de acuerdo con la Sabiduría Superior y la Leyes
Naturales del Universo.

De esta manera todos los individuos y la Humanidad en general podemos asumir el


reto desde nuestro actual punto evolutivo conforme hacemos el giro desde el Yo
hacia la Unidad. Las enseñanzas y la guía están ahí en abundancia; depende de
nosotros buscarlas y ponerlas en práctica.

Muchos grandes Maestros han encarnado en el plano físico de la Tierra y por sus
vidas y su trabajo han demostrado su comprensión de las grandes Leyes Naturales
del Universo. Esto se refleja en enseñanzas tales como: "Haz por los otros lo que
quieres que otros hagan por ti"; "Como el hombre piensa en su corazón, así es"; y
"Aquello que das libremente al Creador de toda Vida siempre te será devuelto
multiplicado por diez".
Si estás en sintonía con las Leyes Naturales, entonces vivirás en paz. El estado de
paz no es la ausencia de guerra sino, más bien, el estado de alineación con las Leyes
Naturales. Si asumes estas Leyes en cualquier nivel – individual, nacional o
globalmente – estarás en paz, porque estarás viviendo según las Leyes del Espíritu
Infinito."

[The Master ZEN TAO, canalizado por el Ramala Centre, Glastonbury.]

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Libro I: EL ALTO CONOCIMIENTO ESPIRITUAL

Copyright l999 por

Lawrence y Michael Sartorius

Exceptuando las citas acreditadas

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Este documento es parte de la trilogía titulada colectivamente

LA NUEVA TIERRA

El Ascenso del Planeta Tierra

Sus tres volúmenes son como sigue:

Libro I: EL ALTO CONOCIMIENTO

Libro II: LA TIERRA VUELTA A NACER

Libro III: VIDA EN LA NUEVA ERA

Se puede tener acceso a estos tres volúmenes en:

LA NUEVA TIERRA

Traducción al castellano del libro I:

Martha Sánchez Llambí

ballenas2012@prodigy.net.mx

Traducción al castellana de los libros II y III:


Marisol Mora

marisolmb@arrakis.es

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