4 de octubre
Querido diario:
Estoy muy contenta de que seas mi
nuevo compañero, y todo por ser hoy
mi undécimo cumpleaños. Eres un
buen regalo pero ha habido otro
mejor. La gente importante se ha
dado cuenta que tiene que dejar que
las niñas formen parte de los equipos
de fútbol. Al fin he conseguido jugar
en un equipo serio.
Mi papá me ha dicho que mañana me
lleva a apuntarme después del cole.
Estoy muy impaciente.
Que sepas que también me han
regalado una falda muy larga y un
libro de historias de terror.
Un beso
Carlota
6 de octubre
Querido diario:
Esta tarde he tenido mi primer
entrenamiento. No soy de los mejores
pero tampoco de los peores. Las
tardes de verano con Quique me han
servido para mejorar mucho mi
técnica. De todos modos ha sido
horrible cómo se han reído de mí mis
compañeros. También el entrenador.
Ha dicho que si llega a saber que
había una niña no se habría apuntado.
Me pregunto si hubieran sido tan
delicados si yo jugara mejor que ellos.
Quizá hubieran sido incluso peores.
Te dejo porque voy a preparar un
plato especial para la cena con papá
que es muy complicado.
Un beso
5 de octubre
Querido diario:
Vas a alucinar con lo que tengo que
contarte. Papá y yo hemos ido a
apuntarme al equipo de fútbol. Un
señor muy grande no dejó de mirarme
todo el rato. Como mi hermano Toni
iba con nosotros, nos preguntó por
qué no jugaba él y no yo. El señor no
se creía que yo quisiera jugar en el
equipo del pueblo. Toni se meó de risa
al ver su cara.
Mi papá dijo lo importante que era
para mí jugar y me apuntó; pero todos
sabíamos que el señor lo hizo porque
no le quedaba otra y que hacía todo lo
posible para complicar las cosas.
¿Por qué la gente está tan loca?
Un beso
Carlota
9 de octubre
Querido diario:
Perdona por no haberte escrito en
este tiempo. No he estado de humor.
El segundo día de entreno los niños
fueron igual de tontos conmigo. Uno
no dejó de darme patadas todo el
tiempo. El entrenador me dijo que si
no podía ponerme mejor la
equipación.
Al día siguiente no había
entrenamiento, y ¿sabes que me
alegré? El de hoy no ha sido mucho
mejor con ellos; pero he jugado muy
bien y he mejorado en mis pases.
Hasta he metido un gol, aunque de
rebote. Lo que pasa es que nadie me
centra, ¡menudo juego de equipo!
Ahora voy a ponerme a cocinar con
papá, que me gusta mucho.
Te pregunto a ti, ¿qué hago con el
equipo?
Un beso