Sorpresivo Decreto Supremo permite el libre ingreso de
transgénicos al país
ASPEC RECHAZA REGLAMENTO EMITIDO POR EL
MINISTERIO DE AGRICULTURA
El 15 de abril último, la Asociación Peruana de Consumidores y Usuarios
(ASPEC) reveló una incontrastable verdad: Los peruanos estamos comiendo alimentos transgénicos no sólo a granel como la soya, maíz, canola y semilla de algodón sino también envasados en bolsas y cajas que confiadamente llevamos a nuestros hogares. Como prueba de su afirmación, presentó los resultados de análisis realizados por prestigiosos laboratorios certificados que revelaron que muchos alimentos que se encuentran en las estanterías de los supermercados contienen ingredientes transgénicos.
En conferencia de prensa, Crisólogo Cáceres, Presidente de ASPEC,
expresó su preocupación por este hecho y exhortó una vez más a la Presidencia del Consejo de Ministros a publicar el Reglamento del art. 37° del Código del Consumidor el cual se encuentra pendiente desde el 02 de abril último y establece que todo alimento que contenga ingredientes transgénicos debe revelarlo en su etiqueta.
Frente a la revelación y al pedido de ASPEC, ocurrieron dos hechos
sucesivos: En primer lugar, ASPEC fue inmediatamente blanco de todo tipo de encendidos ataques por parte de los eternos “expertos” en bioseguridad que, curiosamente, son a la vez los mismos empresarios que fabrican, comercializan y/o importan transgénicos al país. En segundo lugar –y eso es lo más sorprendente- el Poder Ejecutivo expidió el Decreto Supremo N° 003-2011-MINAG que aprueba el Reglamento interno sectorial de bioseguridad para actividades agropecuarias o forestales. En resumen, dicho Reglamento permite el ingreso al país de organismos vivos modificados (OVM) comúnmente conocidos como transgénicos con fines agropecuarios o forestales.
Para asegurarse de que todo salga según lo planeado, el citado
Reglamento constituye un “Grupo Técnico Sectorial” integrado por un representante del Instituto Nacional de Innovación Agraria – INIA, uno del Ministerio del Ambiente, uno de la Dirección General de Asuntos Ambientales – DGAA del Ministerio de Agricultura, uno del Servicio Nacional de Sanidad Agraria – SENASA, y dos “expertos” en bioseguridad designados por las universidades con especialidades relacionadas al Sector Agricultura quienes, en opinión de ASPEC, serán los mismos empresarios de biotecnología de siempre usando su acostumbrado camuflaje de “científicos” imparciales y que se asegurarán de que el Perú se abra de par en par a la invasión transgénica.
“Resulta inadmisible que, faltando apenas tres meses para que el
presente Gobierno concluya su mandato, haya expedido entre gallos y medianoche una norma tan cuestionable como el aludido Reglamento de bioseguridad. Lo razonable hubiera sido que dicha reglamentación sea promulgada por las nuevas autoridades electas del Poder Ejecutivo luego de un debate público en el que las opiniones de los ciudadanos hubieran sido no sólo recogidas, como una simple formalidad, sino efectivamente tomadas en cuenta. Resulta obvio que ello no ha sucedido y las consecuencias son potencialmente desastrosas para el país”, señaló el titular de ASPEC.
En opinión de Cáceres el reglamento aprobado constituye un evidente
riesgo para la biodiversidad del Perú y termina de allanar el camino a la contaminación genética que ya se venía observando en nuestro medio desde hace un tiempo en que se empezaron a detectar sembríos transgénicos ilegales en algunos valles de la costa. En tal sentido invocó a la ciudadanía a movilizarse en una cruzada cívica contra estas medidas que ponen en riesgo el invaluable patrimonio genético de un país megadiverso como el Perú “que nos pertenece a todos sólo para beneficiar los bolsillos de un puñado de empresarios que, desde hace años, han venido trabajando sigilosamente para salirse con la suya. No estamos dispuestos a quedarnos cruzados de brazos”, sentenció el funcionario.