El día de hoy por indicaciones de la Suprema Junta Antisemítica de la Real y

Pontificia Academia de las Artes Libres y Soberanas de la República del Valle del

Mezquital se ordena someter y encarcelar a todo aquel ciudadano tabasqueño o chichimeca

que transite por esta Soberana República y sobre todo si aquél pretende hacer uso y desuso

del idioma nacional, dado que, de hacerlo, estaría incurriendo en un delito internacional

para el área de centro Norteamérica; lo cual, según los tratados de Torreón, se castiga con la

pena de muerte.

―Puedes creer lo que sale hoy en la gaceta de las artes libres, Gonzálus―

―No, sinceramente es increíble lo que están haciendo estas personas, no tienen

respeto por la dignidad de los pueblos, por la cultura mexicana que ha existido y siempre

existirá, le pese a quién le pese, ¡pero ese maldito de Urriegabeta! ―

―Será posible que la comunidad xolintenca lo apoye, ¿crees tú que se presten a este

juego?―

―No sería nada raro, son capaces de eso y más, recuerda lo que les pasó a esos

pobres hidrocálidos, por estar luchando por patria recibieron una masacre, todo esto es

inaudito, cuando México era un solo país nunca se vio algo así, sé que eres joven y tal vez

no lo recuerdes pero aquí se les respetaba a los pueblos indígenas, a las mujeres, a los

pobres, a los indocumentados, nunca se cometieron esta clase de atropellos, es de verdad un

escándalo, Nueva Texas debería intervenir, mandar un chingo de militares chingones y

poner orden en este jodido país, ve, estamos tan chingados que ni siquiera los narquitos,

que en otro tiempo nos cuidaron y protegieron, quieren saber algo de esta jodida nación,

estaríamos mejor sí Chavarriaga hubiese ganado las elecciones, pero el maldito de

Urriegabeta compró a todo el tribunal electoral, esto nunca se había visto antes; recuerdo

que mi abuelo me contaba cuando se definían las elecciones por menos de cien mil votos y

todo el mundo respetaba el resultado, el tribunal electoral era sólo un adorno para la

moderna y potente democracia que se había consolidado en nuestro país, el caso más

famoso fue el de un señor llamado Andrés Pejelagarto, tabasqueño por cierto; él tuvo la

entereza de reconocer su derrota por cuatro veces consecutivas, incluso cuando perdía por

muy poco; te repito esto es inaudito, por cosas como estas los narcos están ahora en el

caribe, antes no era así, ellos vivían entre nosotros, ayudaban a nuestras comunidades,

brindaban auxilio a los más necesitados, en fin, estaríamos mucho mejor con ellos ―

―Pero Gonzálus, Nueva Texas es el demonio en la tierra, no deberías decir eso,

ellos con tal de evitarse un gasto mayor son capaces de aventarnos una pinche bomba de

esa madre, ¿cómo se llama?―

― ¿Cuál?―

―La madre esa que le echaron a Philadelphia cuando el presidente gringo intentó

huir ahí.―

―La bomba de aikationes―

―Y ya vez cómo quedaron, todos jodidos, siquiera esa madre te matara, pero no, te

deja pendejo nada más, andas como idiota todo el día con el único propósito de comer, y si

te alimentan bien, entonces no tienes otra cosa en que pensar, dicen que los incitan a coger

para tener nuevas generaciones de idiotitas que ni siquiera sepan de donde venían sus

antepasados; de cualquier forma los que ya son mayores y lo pueden recordar, son tan

estúpidos que obedecen sin chistar toda clase de órdenes, alguna vez escuche que un
maldito texans le ordenó a un muchacho caminar en contra de un poste una y otra vez hasta

que, con la frente ensangrentada, derribó el obstáculo, ¡después de cientos de veces de

chocar con él!, le dejo comer un poco y después le ordeno que volviera a reparar el poste,

no contento con eso repitió las mismas ordenes una y otra vez hasta que del poste no quedo

nada, no contento con eso le ordenó que fuera al bosque consiguiera más madera para

fabricar uno nuevo y así ocurrió durante años, hasta que el día de su muerte el texans estaba

tan idiota como el otro de tanto repetir las mismas órdenes, ambos murieron a un costado

de un hoyo, donde se cree que alguna vez hubo un poste de luz.―

―pero Marrinilla, ¿cómo vas a creer esas historias pendejas?, Nueva Texas es lo

que el mundo necesitaba, esos “idiotas” como tú les llamas son las personas más felices del

mundo, no tienen por qué preocuparse ahora, son inocentemente felices. Además debes

reconocer que sí alguien no les ponía un hasta aquí a los gringos podían haber acabado con

la humanidad entera, Nueva Texas salvó al mundo; y ahora es necesario que tome el control

de estas tres seminaciones en las que ha quedado dividido México, o qué ¿prefieres a los

travestidos esos de la academia?―

―La verdad si, está bien que a veces son capaces de cualquier tipo de estupidez sin

embargo hay que reconocer que son mejores que los texans, la academia es necesaria para

nuestra estabilidad, fuera de esta mamada de los idiomas oficiales no causan ningún daño,

promueven la lectura y las artes, llevan obras de teatro a los niños pobres para que por lo

menos puedan morir culturizados, llevan poesía a todos aquellos condenados a morir por

violar los tratados de Torreón, llevan el cine al aire libre fuera de los hospitales, creo que

eso es muy bueno, ya sabes que te atiendan en un hospital es imposible, pero por lo menos
ves una peli antes de pelarte; y todo alcanza para mucho más, con tantos muertos hay cada

vez más oportunidades para los vivos.―

―Está bien Marrinilla, lo que tú digas, entonces deja de quejarte por las ordenes de

la academia, ya que según tú es justo lo que necesitamos, es más, deberías ir y entregarte

para que te apliquen la pena de muerte…

Antes de que Gonzálus terminara de hablar la puerta de la habitación crujió bajo el

peso muerto de un agente de la paz y solidaridad nacional, segundos después la puerta se

abrió violentamente y varios agentes ingresaron, Gonzálus inmediatamente huyó hacia la

ventana pero ahí también había agentes, la señora Yalondu, su vecina de abajo, los había

delatado; los reporteros estaban afuera, ya que la academia, convenientemente, llamó a la

prensa para poder darle difusión a su nueva política antisemítica; Marrinilla no opuso

resistencia, sus ojos tristes miraban a ningún lado mientras que los agentes molían a golpes

a Gonzalus, sus últimas palabras antes de caer inconsciente : ¡Tierra y libertad! ¡Que viva

Nueva Texas!