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Jacques y el Tesoro

En su informe de 1996 para la UNESCO titulado “La Educación encierra un


Tesoro1”, Jacques Delors afirmaba que los talentos individuales son tesoros
ocultos que deben ser descubiertos por medio de la educación a lo largo de la
vida. Sin embargo después de casi quince años de la publicación de dicho
informe, muchos –quizás pocos- nos preguntamos ¿Qué pasó con el tesoro?
Mi respuesta, aunque parezca demasiado simplista, es que en nuestro
sistema educativo actual “La Educación entierra el Tesoro”. Con esto me
refiero a que en lugar de potenciar los talentos, la educación 2 los inhibe; la
educación promueve la competencia individual (con sus cuadros de honor, y
medallas y bla, bla, bla) pero se olvida del trabajo en equipo, la educación
brinda respuestas (contenidos) pero no permite las preguntas ni los
cuestionamientos. Supongo que se imaginan que hablo de la educación
primaria, pues NO, hablo de todo el sistema educativo nacional. Desde el
jardín de niños3 hasta el doctorado se nos llena el cerebro de información (y de
reglas) que en muchos casos no tienen ninguna aplicabilidad en la “simple vida
diaria” Se nos enseña –como diría Arjona- a no pensar pues ya todo está
escrito. Para lograr avances y descubrimientos se nos enseña a seguir
modelos, formatos, patrones, metodologías, etc. aprobadas por los expertos
pero que cercenan la creatividad y la imaginación. La educación nos limita la
utopía y los sueños y nos atiborra de datos.
La pregunta obligada es ¿De qué manera podemos encontrar y no sepultar el
tesoro? Para responder retomaré la idea de los 4 pilares de la educación a lo
largo de la vida de Delors.

1) Aprender a conocer: aunque se sataniza la disciplinizacion o


especialización del conocimiento, es necesario conocer a fondo su
disciplina para de allí hacer aportes a las demás. Si seguimos queriendo
aprender de todo nos tocará aplicar con nosotros mismos el dicho de
“Aprendiz de todo, maestro de nada”. Entonces aprendamos a conocer
nuestro campo e integrémonos desde allí a la comunidad para que
nuestra “disciplina” sea parte del todo y no –como sucede con
frecuencia- que nuestra disciplina sea el todo.
2) Aprender a hacer: la mejor forma, pero desafortunadamente, no la
única de aprender es haciendo, a hacer el amor como a investigar se
aprende haciendo, a resolver ecuaciones estructurales como a dar una
clase se aprende haciendo. La teoría es importante, pero no lo mas
importante; hagamos mas y hablemos menos. Otro dicho, “Chi sa, fa,
Chi non sa parla”4
3) Aprender a (con)vivir: como la gente y con la gente; aprender a vivir
con menos y compartir mas, aprender que si alguien no piensa como yo
1
Informe a la UNESCO de la Comisión Internacional sobre Educación para el Siglo XXI, (1996) Santillana,
Ediciones UNESCO.
2
Léase como Educación Formal.
3
Yo asistí al Jardín de niños y aunque sólo decía “de niños”, también iban unas niñas preciosas, ahora
mucha gente cree que con decir niños y niñas o con escribir niñ@s se está logrando la equidad de
género, en mi opinión el cambio sólo esta a nivel de palabras pero a nivel de hechos como dice la
canción “no hay otro pueblo más macho ...”
4
El que sabe, hace; el que no sabe, habla.
no es porque es un idiota -quizás el idiota sea yo; aprender a aceptar
nuestras diferencias y preferencias, aprender que para estar seguro no
necesito las cercas más altas sino simplemente estar en paz con mis
vecinos. Aprender que “quien no vive para servir, no sirve para vivir”
4) Aprender a ser: a ser feliz tal como eres, con defectos y virtudes,
aprender a ser humilde aunque seas el jefe, el maestro o el alcalde, a
ser constante en la consecución de tus metas, a ser crítico y analítico de
las posturas ajenas y de la tuya aun mas, a ser un pensador
independiente y no depender de alguien para poder pensar, a ser libre y
respetar las libertades de los demás.

En vista de que el sistema educativo formal sigue dando prioridad a la


transmisión/adquisición de conocimiento –llenar barriles o mentes vacías- en
lugar de desarrollar potenciales. Yo planteo un quinto pilar:

5) Aprender a desaprender: desaprender las gríngolas que nos limitan la


visión, desaprender paradigmas que son más bien paradogmas,
desaprender a agachar la cabeza y asentir en silencio, desaprender la
idea de un mundo dicotómico: superior-inferior, desarrollado-
subdesarrollado, blanco-negro, resistencia-golpista, etc. Alguien dijo que
“Lo más difícil no es aprender algo nuevo; sino desaprender lo viejo”

En conclusión, el tesoro sigue allí, sepultado por ahora, y para encontrarlo hay
que “aprender” y andar por caminos distintos pues como bien lo dijo Einstein;
“No podemos solucionar los problemas actuales - descubrir el tesoro- con la
misma forma de pensar que los creo –Educación formal.”

Mr.E
2 de Septiembre, 2010

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