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CH 02 02
CH 02 02
3. SALTO NETO
3.1. DEFINICIONES
En las figuras se reproducen dos esquemas típicos E y F que incluyen todos los conceptos, por
lo que cualquiera de los restantes puede deducirse de ellos por transformación o supresión de
elementos.
Es la diferencia de cotas entre el nivel máximo del embalse y el nivel normal del río en la
descarga de la central.
Es la diferencia de cotas entre el nivel actual del embalse y la de salida del agua de la central
(prescindiendo del canal de desagüe).
En esquemas con canal es la diferencia entre la cota del agua en la cámara de carga (punto de
partida de la tubería forzada) y la del agua a la salida de la central (sin canal de desagüe).
Hn = Salto neto para un cierto nivel del embalse y caudal dado Q (m).
Es el realmente productivo, e igual al útil Hu menos las pérdidas de carga en las conducciones
forzadas para el caudal Q.
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CENTRALES HIDROELÉCTRICAS
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CENTRALES HIDROELÉCTRICAS
v2 Q2
I = 2 4 / 3 = 2 4 / 3 2 (m/ml) (3.1.)
n R n R S
1
I = KQ 2 ; K = (3.1'.)
n R 4 / 3S 2
2
S = área mojada
R = radio hidráulico = Sección / perímetro mojado
En tuberías: R = diámetro/4
v = velocidad del agua para el caudal Q = Q/S
n = coeficiente de rugosidad
Ambos coeficientes son conservadores e incluyen una cierta previsión por envejecimiento; y
pueden considerares también incluidas las pérdidas de carga localizadas (codos) que no sean
muy bruscas (al menos en el ámbito de este trabajo).
Definido el salto útil, basta restarle la suma de las pérdidas para obtener el neto. Estas se
calcularan Para cada tramo de características uniformes (Q, S, R, n) y se sumarán:
Hn = Hu - ∆H = Hu - Σ Ki Li Qi2 (3.2.)
Por lo tanto, para todos los esquemas puede considerares que las pérdidas fijas están incluidas
en el salto útil y las restantes son las debidas a las conducciones en presión, que son
proporcionales a Q2.
1
Ver: Luis Torrent, fórmulas hidráulicas de conducciones. R.O.P. Agosto, 1983.
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La experiencia de numerosos casos reales confirma que estos valores empíricos difieren poco
de los óptimos para una amplia gama de caudales nominales. Corresponden a las secciones
consideradas en la Parte II.
4. UNIDADES
POTENCIA USO
2
Se subrayan las unidades más usadas. Entre paréntesis, las que no se usan.
3
Cuando no se conozca, puede suponerse cos ϕ = 0,8.
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ENERGÍA USO
1 kJ = 0,000277... kWh
1 kWh = 3.600 kJ
1 cal = 4,18 J
1J = 0,239 = 0,24 cal
1 kcal = 103 cal = 4,18 kJ = 1,161 Wh
5. POTENCIA
La potencia nominal de la central es la máxima que puede dar el conjunto de los alternadores
y es
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P = 8 H Qo (5.4.)
Nota
La potencia nominal de la central puede ser inferior (aunque con poca diferencia) a la suma de
las potencias nominales de los grupos, porque cada uno de éstos, actuando solo puede dar
menor pérdida de carga que el conjunto si hay algún tramo de conducción común.
6. ENERGÍA PRODUCIBLE
Una central funciona con caudales y saltos netos variables. La potencia en cada instante viene
dada por la fórmula (5.1.). En un período ∆t segundos con Q, Hn constantes, la energía
producida será:
9,8
E ( ∆t) = Hn Q ρT ρA ∆t =
3600
= 0,0027 Hn Q ρT ρA ∆t (kWh)
ρA = 0,97 ρT = 0,89
E = 0,0023 Σ Q Hn ∆t (6.2.)
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CENTRALES HIDROELÉCTRICAS
La aplicación de esta fórmula exige calcular la Σ para distintos subperiodos a ∆t en los que
sean constantes Q y Hu. Esto exige un conocimiento de la ley de desembalse, lo que, en un
estudio previo o anteproyecto puede no ser viable. Con suficiente aproximación puede
adoptarse una separación de variables (Q Hu) en la siguiente forma:
Esto último lleva a conocer, o al menos establecer una ley de distribución de caudales, que
será de la forma de la figura. Esta se puede sustituir por otra escalonada
(como la de puntos) para facilitar el cálculo con caudales constantes. (No es necesario apurar
el escalonado por un prurito de exactitud que tendría poca influencia).
En los aprovechamientos en conducciones los principios son idénticos, sólo que más sencillos
de aplicación, puesto que la variación de salto útil suele ser pequeña y en algunos casos hasta
se puede prescindir de ella. (Por ejemplo, en el esquema J, cuando el caudal varía, cambia el
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nivel en los canales, tanta agua arriba como agua abajo, manteniendo el desnivel útil si ambos
son de igual sección).
7. GARANTÍA DE SERVICIO
La demanda eléctrica se caracteriza por una rigidez casi absoluta, no admitiendo ni dilación ni
disminución de la potencia exigida. Sólo en circunstancias extraordinarias y justificadas -
aunque no siempre justificables- cabe adoptar limitaciones o restricciones. Pero dentro de
éstas, la demanda ha de ser inmediatamente atendida.
Por ello, si una determinada central no puede cumplir totalmente su servicio en determinados
períodos, ha de haber otras que la complementen, cubriendo ese déficit.
Para que la demanda no quede desatendida, hay que disponer en otra central de una potencia
complementaria PTC para que sumada a la mínima asegurada en la central hidráulica PHP dé la
potencia Po sin defecto en cualquier momento del período. Normalmente, esa potencia
complementaria PTC se obtiene en una central térmica, ya que ésta puede funcionar con
independencia de los caudales fluviales.
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Las térmicas funcionan con potencias conjuntas entre PT - Po y PT - PHP; para conseguir esa
variación, hay grupos o centrales totalmente apagadas en el período a Po y otros que reducen
su carga parcialmente en ese período. El resultado es la garantía prácticamente total – salvo
accidentes muy raros - del servicio.
Pero, para ello, ha sido preciso duplicar la potencia complementaria PTC (= c b), que ha de
estar instalada tanto en forma hidráulica (para poder dar Po cuando haya agua) como térmica
(para poder dar, quemando combustible, la potencia que le falta a las centrales hidráulicas en
el período a c). Esto representa un mayor coste que si sólo se hubiera instalado la potencia
térmica PTC, por lo que cabría pensar si esa será mejor solución, puesto que de todas formas
ha de instalarse PTC, ya que la potencia hidroeléctrica Po - PHP = PTC’ no está garantizada.
Sin embargo, aunque esa solución sería factible, y ahorraría el coste del sobreequipamiento Po
- PHP en la central hidroeléctrica (conducciones menores, grupos más económicos, etc.) las
centrales térmicas tendrían que consumir el combustible correspondiente al trapecio (Po a b
d). La cuestión es, pues, determinar la potencia óptima Po que hace que el coste del
sobreequipamiento Po - PHP compense el ahorro de combustibles obtenido en el período
representado por (Po a b d). Este problema queda planteado aquí conceptual y funcionalmente,
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pero su resolución completa cae fuera del ámbito de este trabajo. No obstante, en las Partes III
y IV se aborda de una forma sencilla, aunque suficiente4.
En realidad, las centrales térmicas han de tener, en conjunto, una potencia superior a la PT -
PHP, pues han de cubrir, además, la seguridad de servicio ante la avería de un grupo, revisión
periódica de las centrales, etc. Esa potencia de reserva ha de ser un 10% de la total del
mercado y no inferior a la del grupo más potente.
Si las figuras adjuntas se refieren a un período de varios años (real o simulado), la potencia
PHP asegurada como mínima en el período sería, hablando estrictamente la potencia
permanente, y la energía EHP (equivalente al rectángulo O d b e) la energía permanente.
Sin embargo, dado el carácter aleatorio de los caudales (y potencias) se define como potencia
permanente la que tiene un alto grado de garantía, por ejemplo el 90 a 95%. Ello supone que
un período de años puede haber un 10 ó 5% de días en los que no se pueda dar la potencia Po.
Pero a los fines prácticos, esta garantía es suficiente, pues aunque la garantía de PHP no es
absoluta (no puede serlo estadísticamente) ello no supone la necesidad de disponer de una
potencia térmica adicional Para cubrir esos pequeños déficits (contrariamente a lo que ocurre
con los normales del período a b c) ya que la potencia de reserva - que de todas formas hay
que tener disponible- sobra para ello.
De manera correlativa, la energía obtenida con esa Potencia de alta garantía se llama energía
permanente.
La potencia y energía permanentes tienen un, alto valor funcional y económico, pues
significan la parte de potencia y energía de la central hidráulica totalmente autónomas y que
sustituyen por completo a una central térmica de igual potencia, que además funcionase
continuamente, lo que se traduce en un ahorro de la inversión consiguiente y una notable
reducción del consumo de combustible.
En el período de años considerado podemos obtener, bien por los años reales o por un ajuste a
una distribución estadística (Goodrich, Pearson, etc.) una serie de curvas como las anteriores
que dan la ley de caudales clasificados en años de distinta garantía. Para cada una de esas
curvas, si se deriva un caudal máximo Qo puede obtenerse la energía producible con esa
garantía. La energía producible esperada Ee será:
Ee =Σ Ep ∆p
4
Para metodología más completa ver: E. Vallarino: Obras Hidráulicas (I) y Aprovechamientos Hidroeléctricos
(Cap. 4). Publicaciones de la Escuela T. S. de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de Madrid.
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Siendo Ep la energía producible con la probabilidad p (en tanto por uno) y ∆p el intervalo de
probabilidad (puede tomarse de la diferencia de las dos probabilidades adyacentes: 0,25 para
0,5; 0,20 para 0,75;0,125 para 0,90; etc.).
Cuando los datos no permitan esta metodología se tomará como producción esperada la media
del período, prescindiendo del año más húmedo si la aportación de este fuera superior a 1.7 de
la media y del más seco, si fuera inferior al 35% de la media.
Ee = Ece + EHP
Según lo dicho en 7.2., sólo la parte de potencia que tiene una alta garantía equivale a la
sustitución completa de una potencia térmica igual, tanto del combustible como de la propia
instalación.
En una central sometida al régimen de riegos es frecuente que en algunos períodos éstos no
necesiten caudal, por lo que, de no haber servidumbres o excedentes disponibles, no se
turbinará en ese período, y su potencia permanente será nula.
Pero como una central de ese tipo tiene su máxima potencia y producción en verano, que es
cuando el resto de las centrales hidráulicas disponen de menores caudales, puede darse una
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CENTRALES HIDROELÉCTRICAS
compensación entre unas y otras, de forma que, a pesar de que su potencia permanente
individual sea nula, en el conjunto quede garantizada una potencia mayor.
Pero para que esta compensación se traduzca en una potencia con el carácter de permanente
necesita una alta garantía, y ésta no siempre se da, porque aunque genéricamente el régimen
de riegos proporciona los máximos caudales en verano, puede haber diferencia de un año a
otro no sólo en el volumen, sino en su reparto a lo largo del estiaje (sobre todo en su extremo
final hasta Octubre o Noviembre) por lo que el aumento de potencia conjunta garantizada
puede ser pequeño o nulo.
Por ésto, tanto en este Estudio Funcional como en el Estudio Económico (III) mantiene para
cada central individual la definición de potencia permanente dada en 7.2., pues la eventual
compensación si se da, será un caso particular que habrá que estudiar en otra fase más
avanzada (distinta de la de inventario y fijación de características).
En el presente Estudio, que se ciñe a este último ámbito - aunque también puede ser útil en
fases posteriores - basta dejar mencionada esa posibilidad para una central situada en un
conjunto hidráulico - centrales de una cuenca- o eléctrico - centrales interconectadas -
precisando un análisis específico para comprobar si ocurre la citada compensación. En caso
positivo, habría que estudiar - a los efectos económicos - cómo se atribuye y reparte la
plusvalía obtenida entre las distintas centrales, puesto que todas ellas contribuyen a crearla.
Señalemos, por último, que esa compensación puede darse también con las centrales situadas
en cuencas con régimen nidal, que suelen tener sus máximos caudales en primavera y verano.
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CENTRALES HIDROELÉCTRICAS
8. CONCENTRACIÓN DE POTENCIA
El análisis del capítulo anterior tiene por base los caudales medios diarios, supuestos actuando
continua y uniformemente durante el día. Pero en una central de pié de presa, el embalse
permite dar una modulación horaria y semanal que module esa masa turbinable diaria según
una ley de caudales variables a lo largo de él para acomodarse mejor a la demanda.
8.1. DEFINICIONES
Recordemos que la curva de carga de un día normal tiene una forma como la de la figura, en
la que podemos distinguir las siguientes zonas horizontales (con definición genérica, no
rigurosa).
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CENTRALES HIDROELÉCTRICAS
- Horas de VALLE. Las de menor actividad nocturna: unas 6 horas, más o menos
prolongadas (según los casos); normalmente, de 1 a 7. Son las que definen la
potencia de BASE.
- Horas LLANAS. Las que corresponden a la energía de ese nombre, y son las del
resto del día fuera del VALLE.
El esquema adjunto geometriza la forma de la curva para utilizarla en los cálculos que siguen.
En el conjunto de España, actualmente (1983) la relación de la potencia máxima (en punta) a
la mínima (valle) es del orden de 2. El exceso de punta sobre el llano suele ser del orden de 10
al 20% de la potencia máxima total.
Los fines de semana se reducen notablemente las potencias: la base se conserva con alguna
reducción, pero la punta de la mañana casi desaparece, y se mengua la de la tarde; la potencia
de llano baja también. Estos efectos son más acusados el domingo que el sábado.
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CENTRALES HIDROELÉCTRICAS
La base del diagrama se da por las centrales nucleares y térmicas, que conviene funcionen lo
más uniformemente posible en torno a la potencia de óptimo rendimiento, y por las
hidráulicas fluyentes, que son las que derivan, sin regulación propia ni modulación, el caudal
del río.
Cuando los caudales de los ríos bajan, el defecto de potencia de las centrales fluyentes ha de
ser compensado con potencia térmica (ver 7.1.). Eso no se opone a lo dicho sobre la
conveniencia de que las centrales térmicas funcionen con potencia lo más constante posible:
lo que ocurre es que, conforme se van necesitando, van entrando en servicio,
escalonadamente, los grupos térmicos, pero cada uno de ellos a lo largo de un día trabajan con
potencia - sensiblemente uniforme. Al volver a subir los caudales (al fin del estiaje), se van
poniendo fuera de servicio grupos térmicos. Y es obvio que en la transición puede haber
algunos grupos que, accidentalmente, trabajen con potencia parcial no óptima.
Toda central hidráulica que pueda hacerlo debe tender a trabajar en la zona de puntas - llano.
Y las que tienen embalse - como las que aquí nos ocupan- son aptas para ello, en principio,
pues pueden turbinar el caudal diario disponible con una modulación que se aproxime a los
dos trapecios de puntas o, al menos, al llano. Un funcionamiento deseable es alguno de los
dibujados como tipo, en orden decreciente de eficacia; y, por supuesto, hay toda serie de
esquemas intermedios.
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CENTRALES HIDROELÉCTRICAS
Fig. 8.3.
Toda central con embalse puede dar, en principio, uno de esos diagramas, potencialmente.
Pero el que esa potencialidad se convierta en efectiva depende de las siguientes limitaciones.
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CENTRALES HIDROELÉCTRICAS
- De Servicio
- De Servidumbres
- Excedentes (del Servicio, Servidumbres u otros)
Caudales de Servicio
Fig. 8.4
Nótese que el volumen del contraembalse puede llegar a ser importante en el caso de riegos,
pues precisaría una capacidad de retención igual a la diferencia de aportaciones entre las
turbinadas y las requeridas por el Servicio durante todo el tiempo de máximo desequilibrio
entre ambos,(en uno u otro sentido), que puede ser largo. Por ello, este contraembalse sólo
puede ser construido en algunos casos concretos y en éstos, generalmente limitado a absorber
variaciones diarias; en los restantes, la central ha de estar sometida al régimen de caudales
requeridos por el Servicio o Servidumbres, que se supone son prioritarios.
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CENTRALES HIDROELÉCTRICAS
Otra cosa distinta son los Excedentes. Estos están libres de toda obligación o prioridad, por lo
que pueden ser tratados en la forma que convenga. Pero presentan el inconveniente de que, en
general, se presentan aleatoriamente o en períodos distanciados o concentrados de tal forma
que resulta imposible su utilización.
Los excedentes debidos a las crecidas son prácticamente inutilizables, por la brevedad de su
duración, la magnitud de los caudales y la rareza y aleatoriedad de su presentación.
Los únicos excedentes que pueden influir en la potencia de las máquinas son los de carácter
periódico o relativamente permanentes.
Por ejemplo: si hay excedentes nocturnos de riego pueden turbinarse en valle (energía de poco
valor) o, gracias al embalse (esquemas A, B, C inferior, E, H inferior, I inferior) darlos en las
horas punta o llano. En centrales que desaguan a un canal de servicio (C, D y H superiores) o
que derivan agua de él (D, E) o se turbinan los excedentes en valle o habría que construir un
depósito más o menos próximo de suficiente capacidad para retenerlos de noche y turbinarlos
en llano o punta, sin alterar el funcionamiento del canal.
Los excedentes de fin de semana tendrían el mismo trato, con mayor exigencia de capacidad
de retención.
Los excedentes más o menos permanentes son los de más interés, pues permiten concentrarlos
en puntas o llano en las centrales que derivan directamente del embalse y desaguan al río, o
gracias a un depósito horario (si fuera factible) en los que toman o desaguan a un canal de
servicio (según hemos explicado para los nocturnos).
En los casos de desagüe al río hay que tener en cuenta las servidumbres existentes agua abajo
y no sólo en el sentido de dar los caudales que precisan, sino analizando si vienen o no
perjudicadas por la concentración de caudales. Caso de perjuicio, hay que construir un
contraembalse para volver a uniformar los caudales (como en la Figura 8.4) o renunciar a su
concentración en puntas o llano.
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CENTRALES HIDROELÉCTRICAS
Con lo dicho en capítulos anteriores puede procederse a establecer las características de los
posibles aprovechamientos. Sin embargo, parece oportuno hacer una síntesis para dar
coherencia sistemática al conjunto, matizar algunos puntos y facilitar el proceso.
El objetivo final propuesto tiene dos fases diferenciadas, aunque unidas en ese objetivo:
El inventario requiere unos datos y una metodología más simples que la segunda. Por ello, en
esta Parte I - que se limita a lo funcional y termina en el Inventario de Recursos - nos
ceñiremos a éste. En la Parte III nos ocuparemos de los aspectos económicos; entre ambas, en
la II se dan criterios y fórmulas para obtener con facilidad el presupuesto aproximado de un
aprovechamiento conocido unos datos estrictos, dentro de la aproximación requerida por la
calificación descrita en la Parte III.
A continuación se describen los datos estrictamente necesarios para cumplir el objetivo del
Inventario, que es definir las características fundamentales de cada aprovechamiento.
Esquema tipo
Hay que analizar a qué tipo responde el posible aprovechamiento entre los definidos en los
capítulos 2 y 3. Puede ocurrir que haya duda entre dos o más de ellos (por ser todos ellos
posibles, en principio), en cuyo caso se señalará así. Aunque raro, si el esquema no se
acomodase a ninguno de los descritos, se especificará si es una mezcla de varios y, en
cualquier caso, se dibujará.
En algunos casos, el esquema tipo quedará bien definido. En otros, planteará unas opciones.
Lo interesante es que el primero o estas últimas queden bien definidas.
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CENTRALES HIDROELÉCTRICAS
Altimetría
- Cota mínima del embalse para cada uso (si variase con éstos).
- Cota del centro de gravedad (c.d.g.) del embalse útil (normalmente se dispondrá
de este dato, pero no es imprescindible).
Planimetría
Pero todo complemento informativo será útil. De no disponer de un plano con líneas de nivel,
convendría, al menos, una planta esquemática clara, con algunas distancias horizontales
aproximadas y afectando a un cierto entorno de las obras, para complementar el perfil y
ampliar la visión del problema.
Caudales y aportaciones
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CENTRALES HIDROELÉCTRICAS
Embalse
Estrictamente, con las cotas y caudales citados pueden evaluarse las características
fundamentales. Pero toda información suplementaria sobre capacidad útil y régimen de
oscilación del embalse puede tener interés.
Geotecnia y Geología
Otros datos
En cualquier caso, una reseña breve, explicativa de las particularidades del caso, será útil para
completar la información gráfica y los datos.
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CENTRALES HIDROELÉCTRICAS
En gran parte de los casos la solución será única (en cuanto al esquema básico). En otros,
habrá alternativas central de Servidumbres y Servicio separadas, incorporación o no de un
tramo agua abajo, etc. Es preciso considerar todas las posibles, eliminando sólo las
abiertamente poco funcionales o claramente injustificadas económicamente (a simple vista o
con un ligero tanteo).
Es obvio que para cada solución puede haber una gama de potencias, que dan lugar a
subalternativas, que se analizarán también, eligiendo la más adecuada.
Son las que figuran en el cuadro adjunto5 que constituye una propuesta de ficha descriptiva.
Es de desear que se disponga de todos los datos allí consignados, pero en la falta de alguno, es
preferible su omisión parcial - o su inclusión expresando su carácter aproximado orientativo -
que la anulación total de la ficha.
En estos casos, ésta quedará abierta a ulteriores precisiones, pero sirve como memorándum de
un posible aprovechamiento.
9.4. INVENTARIO
Este resulta de la colección de fichas y datos de los aprovechamientos. Pero de esa colección,
se deben obtener unos resultados conjuntos que se describen a continuación.
Del Inventario se obtendrán unos datos extractados que se ven en el cuadro adjunto y que son,
para cada central:
- Salto bruto
- Potencia máxima
5
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CENTRALES HIDROELÉCTRICAS
- Producción esperada
Es de esperar que falten datos para algunas centrales, en particular en las más pequeñas o con
embalses menores. Para no detener por ello la estimación del potencial, se procederá así:
De esta forma obtendremos un potencial con un contraste suficiente, otro con cierta
aproximación, y un tercero no conocido, pero que será un porcentaje pequeño de la potencia o
producción totales (aunque quizá el del número de estas centrales sea elevado) y que, además
de corresponder a centrales de pequeña potencia, serán también las más dudosas de ejecución
y economía, por lo que la imprecisión no tendrá mayor importancia.
A los afectos de prever la posible variación de resultados, se harán otras dos estimas, máxima
y mínima, limitadas a potencias y producciones esperadas tomando en cada centra las dos
soluciones extremas.
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CENTRALES HIDROELÉCTRICAS
Río:
Cuenca:
Propietario:
Municipio:
Provincia:
Salto bruto: m
Potencia nominal: kW
OTROS DATOS:
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