RELATORÍA DEL MAPEO DE EXPERIENCIAS SOBRE COMUNICACIÓN Y

DESARROLLO PARA LA TRANSFORMACIÓN DE PROBLEMÁTICAS

MEDIO AMBIENTALES EN LA REGIÓN ANDINA DE COLOMBIA.

El propósito del presente escrito es desarrollar una relatoría sobre el proceso

de caracterización de los proyectos comunicativos relacionados con procesos
de protección del medio ambiente en la Región Andina de Colombia.

Este mapeo surge de la necesidad de identificar los principales actores,

eventos y características de éstas organizaciones que trabajan el tema de
medio ambiente desde la perspectiva de las comunicaciones.

En la primera parte se realiza una presentación conceptual del mapeo. Luego

se describe el proceso de recolección de la información a través de la
aplicación de una encuesta a organizaciones con las características
mencionadas a través de distintas metodologías (entrevistas cara acara,
telefónicas e internet). Por último se hizo la sistematización y análisis de la
información obtenida.

Cabe anotar que la investigación logró identificar cerca de 250 experiencias

con éstas características en la región y que además se excluyó de la muestra
aquellas consideradas como medios masivos de comunicación con ánimo de
lucro, para dar un mayor énfasis a aquellas iniciativas regionales, locales,
municipales o comunitarias sin ánimo de lucro. A cada proyecto se le envió una
encuesta y sólo 112 de éstos la diligenciaron.

Como primer hallazgo se puede obtener la prioridad de los mecanismos

”tradicionales” de comunicación en estas organizaciones frente al uso de las
Nuevas Tecnologías de la Información y las Comunicaciones, lo cual se
evidencia en que la manera más exitosa para recolectar la información hubiese
sido mediante el acercamiento “cara a cara”, por encima de los contactos
telefónicos y los cuestionarios web que se implementaron como parte del
proyecto.
Esta preferencia por el contacto directo de las organizaciones con la población
también se puede observar en que el mayor auge de las iniciativas está en las
Organizaciones Sociales que trabajan la comunicación de una perspectiva
comunicacional de participación social y comunitaria con un 47.3% de
incidencia, frente a un 36.6% de origen institucional y un 16% de medios de
comunicación.

Así mismo, existe una preferencia por los talleres, espacios participativos y
educativos con un percentil de 100% , frente a los que usan la radio con un
87.5%, los impresos con un 75% , internet y televisión con un 62.5% y 50.5%
respectivamente. Es decir, que se logra evidenciar la prevalencia del contacto
directo entre las organizaciones y la población beneficiaria, por encima de los
espacios mediáticos.

Otro factor importante es la preferencia de la radio y los medios impresos,

sobre la internet y la televisión. Es decir, que se privilegian los medios
relacionados con la oralidad y la lectura, sobre la interactividad y las imágenes
a pesar de la gran penetración de éstos últimos en el país en general, el cual,
según el Ministerio de Comunicaciones, llega a la mitad de la población en el
caso de la red y de un 98% en cuanto a la pantalla chica.

Aquí puede existir una posible contradicción en un mundo que se globaliza

cada vez más y que emplea recursos interactivos y audiovisuales, frente al uso
de narrativas utilizadas en éstos proyectos comunicativos que prefieren
metodologías de contacto directo o de medios como la radio y la prensa escrita.

Lo anterior puede indicar poca apropiación de lenguajes más multimediales por

parte de las organizaciones sociales, micromedios e instituciones en el
tratamiento del tema medio ambiental, posiblemente porque éste se encuentra
más relacionado con contextos rurales.

Ligado a lo anterior podemos observar también la prioridad de la intervención

directa sobre los problemas relacionados con el medio ambiente con cerca de
la mitad de las experiencias, en donde se trabaja en actividades sobre
administración y cuidado de bienes naturales específicos como agua, suelo y
aire (desertificación, cuidado y uso del agua, talas y quemas entre otras).
Seguidas por tareas de concientización o sensibilización y de territorio ligadas
al reconocimiento de condiciones sociopolíticas, económicas y culturales de los
contextos.

Por otro lado es innegable la fortaleza de las organizaciones sociales y su

raigambre dentro de las comunidades que representan como una forma de
permitir que éstas se conviertan en protagonistas en la solución de sus propios
problemas y como éstas actúan de forma directa y solidaria para superarlos,
dejando entrever la importancia de éstas organizaciones como promotoras de
tejido social.

En el gráfico 13 también puede apreciarse la baja participación del estado en la

conformación de redes sociales y comunitarias, lo que refleja el grado de
autonomía, fortaleza y representación de éstas organizaciones.

No obstante, se puede apreciar que en el tema ambiental prima el activismo,

sobre labores de concienciación y sensibilización, o de una reflexión sobre
éstos temas. Reflejo de ello es la identificación de los principales problemas
que son la responsabilidad social o falta de conciencia sobre el tema ambiental
y la sostenibilidad económica.

Es decir que pueden existir gran cantidad de iniciativas y actividades directas

en donde participan directamente personas de las comunidades, pero la menor
incidencia de temas como la sensibilización, reflexión e investigación sobre el
tema a través de estrategias de mayor impacto, ocasiona que la temática
ambientalista quede invisibilizada y por lo tanto relegada de la agenda pública y
de los presupuestos que exige un tema crucial como éste.

Es importante a partir de los hallazgos encontrados buscar nuevas maneras de

articulación de las organizaciones entre sí, con las instituciones y los medios.
Además de replantear los proyectos al interior de éstas con el fin de aprovechar
el potencial de las mismas, así como revisar qué tipo de cualificaciones son
necesarias para dar el salto necesario para una verdadera transformación en
las relaciones del ser humano con el medio ambiente.