Habia una vez en un pequeo pueblo un anciano que era zapatero y lo que mas deseab

a era regalar zapatos a los nios descalsos que vivian en la calle, rogaba cada am
anecer que se le cumpliera el deseo que siempre quiso que era regalar zapatos a
los nios descalsos, el por dentro lloraba, el tambien agradesia a dios cada dia d
e vida la que le daba pocos minutos despues aparecio un nio asi de repente con un
os zapatos rotos de color rojo y le dijo que aquel nio que se pusiera en la noche
de navidad tendria al siguenta dia unos zapatos nuevos.
El hizo lo mas que pudo busco y busco a nios de la calle hizo que se pusiran los
rapatos rotos al siguente dia tubiron zapatos nuevos y ellos relusientes de feli
cidad fueron a la casa del zaptero para agradeserle y lo encotraron consumido en
el sueo mas grande, pero con una sonrisa en sus labios y entre sus manos el par d
e zapatos rotos.
Al final muere.