¡Increíble!...

Pensar que alguna vez estuve en el vientre de mi madre…

Una tarde de abril empezaron los famosos dolores, esos que alertaron mi pronto
nacimiento. A pesar que ya eran las seis de la tarde, el calor era inmenso, el cielo
estaba resplandeciente, y fue ese atardecer tan oportuno para tan dichoso
nacimiento de una niña bonita. Yo.
Poco a poco fue pasando el tiempo. Fui creciendo y parecía que junto conmigo
aumentaban los problemas en mi familia.
Pasaron 4 años, nació mi hermana y toda la atención de mamá era para ella.
Empecé a sentir celos muy profundos.
Al poco tiempo, mi padre empezó a salir con una profesora de inglés, ella
enseñaba en el segundo piso del edificio donde vivíamos. Todo esto duró un
promedio de seis meses, todos lo ignoraban menos yo, sólo me quedaba llorar en
silencio.
Un día, mi padre se percató que yo lo estaba observando, su infidelidad se había
descubierto. Fue a partir de ese momento que empezaron los golpesy aveces sin
razón.
Los días transcurrian, y mi mami comenzó a tener continuos dolores de cabeza
cada vez más fuertes, ella sufría demasiado.
Cada día odiaba más a mi padre, sabía todo lo que el hacía y como se
comportaba fuera de casa .Yo siempre le reprochaba que los dolores de cabeza
de mi mami eran culpa de él.
Siguieron los problemas, los golpes, los malos ratos entre mamá y papá… Y
así seguía pasando el tiempo.
Una tarde de verano cuando yo tenía 14 años, estábamos peleando con mi
hermana, como ya era costumbre. Recuerdo que le dije:
-¡Tú no eres mi hermana,eres una negra fea! ¡Qué! ¿No te ves toda ojona?
¡Me das asco!
Y ese día fue el peor de mi vida.
Mi padre una vez más me golpeaba, fue tanto mi coraje que ya no salieron
lágrimas de dolor, sólo carcajadas, esto lo mortificaba, por lo que me pegaba cada
vez más fuerte, “obviamente desnuda” porque él decía que así nunca me
olvidaría .
Entre tanto golpe me dijo:
-¡Tú eres mi peor error!
Entonces empezaron a correr lágrimas sobre mi rostro, salí corriendo de mi casa
y me fui a un lugar muy cerquita - Punta arenas - un lugar lleno de silencio a
orillas del mar. Es muy bonito, privado y desolado.
Cuando estuve en la orilla empecé a gritar con todas mis fuerzas y me hacía
una y mil veces la pregunta del porqué mi papa me habia dicho eso. De tanto
llorar sin darme cuenta me quedé dormida.
Al despertar, observé mi reloj, ya era tarde,casi las once de la noche. Mi mami
me habíaestado llamando muchas veces desesperada porque llevaba seis
horas en la calle y no acostumbraba a salir tanto tiempo fuera de mi casa sin
avisar a nadie, la llamé y le dije que estaba bien. A lo que ella respondió:
-Mi amor vente a la casa aprovecha que tu papá salió a buscarte.
Al llegar me abrazó fuertemente y llorando me dijo:
-Nunca te vallas sin mi, avisame y cuentame todo. Yo siempre estaré para
apoyarte sobre todas las cosas .
Empecé a estudiar en un instituto en Trujillo. Comencéa relacionarme con chicos
que tomaban demasiado alcohol , fumaban y yo hacía erroneamente lo mismo
porque me sentia bien. Creía llenar ese vacío por la falta de cariño de mi padre.
Hasta que un dia decidí dejar el estudio , me regresaron a Talara , no me
importaba lo que mi padre me decía.
Araiz de eso me llevaron a psicologos durante 1 año, pero lo que yo tenía sólo
se podía solucionar con un poquito de cariño paterno.
Mi mami siempre por las noches conversaba con él, aunque siempre discutian
por que mi padre decia que yo era quien me portaba mal .
Un día fue tanto el alcohol y cigarrillos que consumí que me desmallé. Me llevaron
a la clínica.
Cuando mi padre llegó de trabajar, encontró una nota que mi mami había
dejado diciéndole donde estabamos pero poco le importó.
Un rato despues llegó, aunque estoy segura que fue por presión por parte de mi
madre. Cuando se topó con el médico, fue el doctor y no él quien hablara de cómo
estaba, le explicó que atravezaba por una fuerte depresión.
El sólo me llenaba de cosas materiales, nunca escuché un “te quiero”.
Al cumplir 18 años iba a ser mamáy me sentía feliz pero tambien confundida,
pues nadie sabía.
Un lunes por la mañana mi padre decidió que nos iriamos a Piura. Uno de
sus “ viajecitos” para que la gente vea que somos una familia feliz , mientras
quela verdad era otra.
Llegamos a Catacaos, bajamos del carro, ibamos a cruzar la calle y un carro a
demasiada velocidad iba a atropellar a mi padre. Lo empujé con todas mis
fuerzas, caí al suelo y me lastimé la ceja, mis piernas estaban llenas de sangre.
Llególa ambulancia, me dieron sedantes y cuando despertétodos estaban en el
cuarto,menos mi padre, como era de esperar.
Entonces entró mi padre junto al doctor ,quien me dió una pésima noticia y me
preguntó:
-¿Sabias que estabas embarazada?
A lo que afirmé y pregunté:
-¿Que pasó doctor?...¡Dígame! y me respondió:
-Lo siento ahora ya no.
Me sentí muy triste, llorédemasiado pero a la vez feliz porque mi padre estaba
bien, a pesar de todo el odio que le tenía, no dejaba de ser mi padre.
Al parecer a él no le importó lo que yo había hecho. No consideró que yo
arriesgué mi vida, porque sea lo que sea es mi padre. Nunca me dijo
nada,ni un gracias y mucho menos una palabra de aliento. Nada.
En ese momento entró a la habitacion y todos se quedaron mudos observandolo
porque no pensaban que llegaría. Después de unos veinte minutos todos
salieron de la habitacion y me hice la dormida, entonces mi padre empezó a
hablar y me decia :
-Discúlpame, si no te demuestro todo el amor y cariño que tengo por ti, es
porque a mí nunca me enseñaron que era un “te quiero”. Yo sólo lo aparendí.
Pensaba que todo iba bien, pero no, ahora te juro que cambiaré, mejoraré y
trataréde ser mejor cada día y te voy a demostrar todo el cariño que por mucho
tiempo creí dartelo, aunque de la peor forma.
Ahora despues de un tiempoya tengo veintidos años y nos llevamos mejor,
existe una comunicación buena, amigable, cariñosa, respetuosa mutuamente
entre nosotros, conversamos a menudo,obvio que por chat por que estamos
lejos. Yo aquí en Trujilloy él en Talara.
Pero siempre es bueno dialogar para entendernos y llevarnos mejor, con una
buena comunicación todo es mas fácil .
Ahora todos dicen que somos la mejor familia que pudo superar tantos
problemas que aparecieron en nuestras vidas y estamos felices de ello.
Autora:
Fabiola Veintimilla Novoa