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COHERENCIA UNIVERSITARIA: ¡NO A KEIKO!

Coherencia Universitaria, como agrupación política de estudiantes de la PUCP, considera


necesario pronunciarse frente a la coyuntura electoral por la que atraviesa nuestro país.

En primer lugar, entre los diversos factores que explican que tengamos a Ollanta Humala
y Keiko Fujimori en segunda vuelta, consideramos importante resaltar el hecho de que
sus candidaturas representan, en gran parte, a un sector del electorado de muy bajos
recursos y calidad de vida, así como un voto crítico que denuncia la actual situación del
país. No es coincidencia que Humala y Fujimori lideraran la intención de voto en los
niveles socioeconómicos D y E dos semanas antes de la primera vuelta. Esto implica que
los procesos que nos ha llevado al panorama actual, no han logrado beneficiar y
satisfacer a gran parte de los peruanos. Por este motivo, el próximo gobierno tendrá como
deber ineludible atender las demandas que hoy se reclaman, así como defender, mejorar
y fortalecer nuestro sistema democrático y económico, de tal forma que sea inclusivo y
beneficioso para todos sus ciudadanos.

En este contexto, Coherencia Universitaria, por su firme compromiso con la


democracia y los Derechos Humanos, se pronuncia en contra de la candidatura de
Keiko Fujimori (Fuerza 2011) por las razones que se exponen a continuación:

a) Keiko Fujimori no ha hecho un deslinde con el Gobierno de su padre ni ha presentado


una verdadera crítica al mismo por los excesos que cometió. Por el contrario, se ha
autoproclamado representante del fujimorismo y del gobierno de Alberto Fujimori;
por tanto, representa un gobierno caracterizado por lo siguiente:

- Violaciones a los Derechos Humanos: Durante el régimen dictatorial de


Alberto Fujimori, la violación de los Derechos Humanos fue sistemática. Las
matanzas de Barrios Altos y La Cantuta, la operación Aries que bombardeó a los
asháninka, la desaparición, tortura y muerte de Ernesto Castillo Páez (estudiante
de la PUCP) - entre muchos otros universitarios -, así como la ejecución del
Programa Nacional de Salud Reproductiva y Planificación Familiar mediante el
cual más de 250 mil mujeres fueron obligadas a esterilizarse violando sus
derechos de decisión informada, son sólo algunos ejemplos que muestran el total
desprecio del fujimorismo por los derechos fundamentales de la persona. Ello ha
sido ratificado por recientes declaraciones de Martha Chávez, vocera de Fuerza
2011.

- Destrucción del Estado Constitucional de Derecho y del equilibrio de los


poderes del Estado: El régimen fujimorista tuvo como objetivo el control total de
los poderes del Estado. Este proceso tuvo como primer hito el golpe del 5 de abril
de 1992, en el cual, unilateralmente, Alberto Fujimori disolvió el Congreso e
intervino el Poder Judicial, el Consejo Nacional de la Magistratura, el Tribunal de
Garantías Constitucionales y el Ministerio Público al declararlos “en reorganización
total”. Para ello - y en lo sucesivo - se aseguró de contar con el respaldo del
Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional.
Posteriormente, se procedió a la subordinación de los demás poderes del Estado
al Poder Ejecutivo. Del lado del Poder Legislativo, se recurrió a prácticas que
permitieran su copamiento, como la compra de congresistas para que favorezcan
al régimen en la toma de decisiones. En el caso del Poder Judicial, se produjo su
manipulación política, principalmente mediante el control del nombramiento de
magistrados. Todas estas acciones tuvieron como objetivo conformar una
estructura del Estado de apariencia democrática que permitiera la impunidad del
régimen.

- Corrupción: El gobierno de Fujimori ha sido el más corrupto que hemos tenido


a lo largo de nuestra historia. Esto es cuantificable en los seis mil millones de
dólares desaparecidos de las arcas del Estado durante su gestión. Fujimoristas
que fueron tanto testigos como ejecutores del saqueo descarado que sufrió el
sector público estarían repitiendo el plato. No tenemos ninguna seguridad sobre la
disminución de la corrupción con Fuerza 2011; por el contrario, tenemos garantías
de su futura ejecución y ampliación.

- Clientelismo: El fujimorismo, en lugar de desarrollar verdaderas políticas de


inclusión social, utilizó los recursos del Estado para generar redes clientelares a
través de programas sociales que ampliaron y profundizaron las brechas sociales
y económicas en nuestro país. El gobierno, en lugar de enfrentar el problema
transversalmente, se dedicó a aparentar una disminución de la pobreza a través
de un asistencialismo acérrimo que generó una sensación de dependencia de la
población pobre y pobre extrema para con el gobierno fujimorista.

- Vulneración de la libertad de expresión: Durante el gobierno fujimorista, se


llevaron a cabo tanto la compra de la línea editorial de medios de comunicación,
así como afectaciones a la propiedad de medios de comunicación que no
coincidían con el gobierno, y persecución de la prensa opositora.

- Inconstitucional afán reeleccionista: Buscando reelegirse por segunda vez, la


mayoría fujimorista en el Congreso emite una ley de interpretación auténtica que
señala que los periodos de gobierno previos a la Constitución de 1993 no cuentan
y, por tanto, Fujimori postularía en el 2000 a su primera reelección. El Tribunal
Constitucional declaró inconstitucional la ley, razón por la cual varios de sus
miembros fueron injustamente separados del cargo. Tras esto, la ley fue declarada
constitucional y se abrió el paso para el siguiente intento reeleccionista del Alberto
Fujimori.

b) La Sra. Fujimori ha desempeñado un pésimo papel como congresista en el periodo


2006-2011, el cual se refleja en sus más de 500 inasistencias y su paupérrima producción
legislativa.

c) Keiko Fujimori ha declarado en reiteradas ocasiones que debe instaurarse la pena de


muerte como sanción para determinados casos de violación sexual. Esto es inviable por
los convenios internacionales firmados y, en realidad, busca ser el pretexto que permita
denunciar el Pacto de San José y alejarnos de la jurisdicción de la Corte Interamericana
de Derechos Humanos.

d) El equipo de trabajo y el entorno de la candidata Fujimori reúne a viejas figuras del


fujimorismo de lamentable recordación: Jaime Yoshiyama, Martha Chávez, Carmen
Lozada, Fernán Altuve, Luz Salgado, Luisa María Cuculiza, Martha Hildebrandt, Martha
Moyano, entre otros. Estos personajes representan el continuismo del proyecto
fujimorista de la década de los noventas, al cual defienden a capa y espada.
Sumado a todo ello, como estudiantes de la PUCP nos preocupa la presencia de Rafael
Rey en la plancha presidencial de Fuerza 2011. Como es de conocimiento público, Rafael
Rey apoya las intenciones de Juan Luis Cipriani en su intento de vulnerar nuestra
autonomía universitaria. Las tendenciosas declaraciones que Rafael Rey ha expresado en
contra de nuestra casa de estudios dan cuenta de ello.

Creemos pertinente señalar estos hechos a fin de que los estudiantes puedan tenerlos en
cuenta para decidir su voto. Del mismo modo, hacemos un llamado a los diversos
colectivos y organizaciones, especialmente a los conformados por estudiantes de la
PUCP, a sentar una postura frente a esta situación, ante la cual no podemos ser
indiferentes.

Al constituir el voto un ejercicio libre, Coherencia Universitaria no toma acuerdos


vinculantes sobre el voto de sus miembros en las elecciones generales. Sin embargo, al
estar todos comprometidos con los mismos principios, especialmente la defensa de la
democracia y los Derechos Humanos, concordamos en que los puntos señalados
precedentemente descalifican definitivamente la candidatura de la Sra. Fujimori.
Consecuentemente, y dada la configuración actual del escenario electoral, cada miembro
de la agrupación está optando, libremente y según su juicio personal, o por votar por
Ollanta Humala (Gana Perú) o por anular su voto. Adicionalmente, seguiremos
atentamente el comportamiento de los actores políticos vinculados al proceso electoral.

Coherencia Universitaria respetará la voluntad popular expresada en el resultado de las


elecciones del 5 de junio. Asimismo, se mantendrá vigilante y se movilizará en rechazo de
cualquier acto que vulnere el Estado Constitucional de Derecho, sin importar quien lo lleve
a cabo.

COHERENCIA UNIVERSITARIA

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