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Museo de Prehistoria e Historia

de la Villa de Santoña.
Fuerte de San Martín.
nota previa:
Este proyecto nace con la intención de aportar. Deseo plantear una serie de ideas y
exponerlas con la mayor claridad posible. Es mi intención congregar el interés de todos,
ciudadanos y grupos políticos. Para que se haga realidad no es necesario un presupuesto
desorbitado, más bien al contrario, es necesario despertar la colaboración de todos,
Universidad y Gobierno de Cantabria, Ayuntamiento de Santoña, asociaciones locales y
ciudadanos en cuyas manos pueda encontrarse (por las razones que sea) un pedazo de la
historia de todos. Ésta es una aportación que busca rescatar la historia real de mi pueblo.
Yo sólo no puedo rescatarla más que en mi imaginación, leyendo libros de historia y tesis de
especialistas en arqueología y paleontología. Por eso he decidido plasmarlo en estos folios y
dárselo a mi pueblo.

Ruego un pequeño esfuerzo para imaginar el Fuerte de San Martín como escenario de un
relato de cien mil años.

Quisiera hacer explícito que mi intención es que este proyecto pueda ser tenido en cuenta
por todos, no es ""mi proyecto ni quiero que lo sea. Personalmente sería una gran noticia
que los representantes políticos de mi pueblo lo hiciesen suyo, que exista la sensibilidad
para reconocer el valor del proyecto y buena vista para comprender su viabilidad. Ojalá lo
expuesto a continuación logre despertar tu interés, considero que sería un impulso enorme
-cultural, económico, turístico- para mi pueblo.

Propuesta para la creación, y ubicación en el Fuerte de San Martín,


del Museo de Prehistoria e Historia de la Villa de Santoña.

1. Planteamiento general: objetivos.


2. Descripción secciones espacio museístico.
2.a. Prehistoria.
2.b. Asentamiento romano.
2.c. Relevancia histórica Iglesia Sta. María de Puerto.
2.d. Edad Moderna. Historia militar siglos XVII-XIX.
2.e. Espacio etnográfico mar-pesca.
2.f. Espacio Felipe González-Ahedo (o espacio "Santoñeses").
3. Propuestas complementarias: contenidos multimedia y rescate de artillería.
4. Proyección de futuro-explotación.
1. Planteamiento general: objetivos.

Este proyecto pretende dotar a la villa de Santoña de las bases para un aprovechamiento del
Fuerte de San Martín.

De un lado, se propone rescatar a la propia fortificación, conservarla como espacio público


ajeno a intervenciones de cuestionable conveniencia (hotel, restaurante, acople de un mirador,
cesión de locales a agrupaciones). Resulta evidente que los proyectos que afectan a San
Martín pasan por alto su historia y el costo de la larga rehabilitación. Lo que es peor, se
plantea un uso que agrede la estructura del edificio, que no aporta nada culturalmente y que
deja pasar una oportunidad de oro de revalorizar y proyectar a la fortaleza y al propio
municipio. Es de esperar que estas afirmaciones no serán del gusto de todos los lectores, pero
te pido unos minutos de tu tiempo y que valores con calma y objetividad estas propuestas.

Es un espacio público y condensa la historia de la villa. Su emplazamiento es privilegiado,


dominando la bahía y el casco urbano. Su recuperación ha llevado lustros de inversiones.
Considero imprescindible que el legado se proteja y conserve para un uso cultural de carácter
público. Ése sería el segundo punto de esta "operación de rescate". Como ciudadano aprecio
que existe un gigantesco desconocimiento de nuestra historia. Sin ánimo de simplificar, y
deseando que se me entienda, los santoñeses nos hemos quedado con cuatro ideas mal
aprendidas y peor enseñadas. Juan de la Cosa, los fuertes napoleónicos (aunque sólo El Mazo
pueda recibir tal definición), una historia confusa e indemostrable sobre una ballena y poco
más. Este proyecto no aspira a que cada santoñés sea un doctor en historia, ni un erudito que
pueda citar de memoria los acontecimientos históricos de los últimos milenios. Este proyecto
aspira a que se comprenda nuestra historia. Contarla y rescatarla. Este rescate sería incluso
físico. Debe salir a la luz una increíble cantidad de bienes. Contamos con tesoros de
incalculable valor que resumen por sí solos la friolera de cien mil años. ¿Por qué no los
reunimos y mostramos?

Aprecio también que toda obra promovida por los gestores de los dineros públicos manifiesta
cierta tendencia a la megalomanía. Detecto, dicho sea humildemente y sin ningún ánimo de
molestar a nadie, una notable carencia de ideas. Es como si en ausencia de éstas
necesitásemos acudir a las arcas públicas y ejecutar proyectos poco meditados, sin embargo
aparentes y efectivos de cara a la opinión pública. Por citar dos ejemplos, restauración de la
Batería Alta de San Martín y del Fuerte del Mazo. La segunda fase de la restauración de la
batería va a consumir unos 400.000 euros. No es éste el espacio para hablar sobre qué es lo
que se ha hecho en la fortificación y cuál ha sido el criterio, sin embargo es muy necesario
asumir que el inmueble se ha perdido, su naturaleza militar extirpada bajo cemento, la ley de
patrimonio no ha sido respetada. En El Mazo se prevee consumir un montante de unos
650.000 mil euros, un inmueble literalmente expoliado por otra intervención pública en la
década de los noventa tras la cual el inmueble quedó en los huesos. Por favor, cambiemos de
dirección. Hago esta descripción del panorama al que se enfrenta el increíble patrimonio
histórico del Monte Buciero para asentar la idea que mueve este proyecto: imaginación en
lugar de presupuestos, cultura real, sorprender al santoñés y al visitante foráneo con un
relato que aún no se ha contado, que debe ser contado.
Para empezar ese relato no es necesario un presupuesto cuantioso. Sólo hace falta
divulgación, interés, voluntad e imaginación. También diálogo con la administración
autonómica, consenso, buena disposición de todos. Tenemos este increíble inmueble
enseñoriado sobre la bahía y el paseo marítimo, tenemos la historia y los vestigios que ésta
nos ha ido donando. Con un esfuerzo podríamos contar con un museo permanente capaz de
descubrir un montón de historias y romper tópicos, un espacio que ilusione a los santoñeses y
despierte un conocimiento más profundo. Que atraiga, en última instancia, las atenciones de
multitud de visitantes y sea referente cántabro y nacional.
Vivimos en un lugar increíble. Este entorno es único y lo mismo se aplica a nuestra historia.
Si lo recalco no es para hablar de ninguna obviedad. Lo que intento transmitir es que la
persona que ahonda en la historia de Santoña (y más allá, cuando ni siquiera podemos hablar
de un asentamiento de humanos) se encuentra con constantes y apasionantes sorpresas.

Hasta ahora, ésta es mi percepción, la verdadera historia de este lugar se queda en sesudas
tesis de universidad, en libros que no alcanzan al común de los mortales. Este proyecto
pretende ser un puente. Crear un espacio museístico estable que rescate los conocimientos
que sobre nuestro entorno han ido recopilando arqueólogos, paleontólogos e historiadores en
las últimas décadas. Y los vestigios de los que hablaba antes... un vasto legado de
herramientas prehistóricas, monedas romanas, artillería, medallas religiosas a las que se
encomendó un soldado hace doscientos años, fusilería y un largo listado de bienes que no
pueden seguir metidos en cajones, públicos o privados.

2. Descripción secciones espacio museístico.


2.a. Prehistoria.

Contenidos sección Prehistoria.

-Maqueta Monte Buciero y entorno en la que se represente el avance de la línea costera


desde el Pleistoceno final (16.000 años) a nuestro tiempo. De un vistazo, el visitante
comprenderá cómo el monte estuvo hace unos miles de años a unos cinco kms de la actual
línea del mar. Las ocupaciones humanas de La Fragua, La Higuera y el Abrigo del Perro se
corresponden con un largo periodo (12.000-6.000 antes del presente) que la maqueta ayudaría
a entender. Se permitirá así visualizar que estos hombres conocieron un Monte Buciero bien
diferente, sin abruptos acantilados, con cómodas laderas que se posaban en un valle donde
abundaban corzos y ciervos. La maqueta también permitiría describir cómo el Asón vertía en
la actual Playa de Berria y continuaba camino hasta encontrarse con el límite marino.
Una maqueta rigurosa desde el punto de vista científico, pero plenamente divulgativa y
asequible para el gran público. También ha de ser impactante y de buen tamaño. Quedarán
reproducidos en la maqueta los abrigos-cuevas más conocidos y las rutas de estos hombres en
busca de caza (corzo, rebeco, cabra montesa, ciervo, cerdo salvaje), pesca y marisqueo (lapas
y posteriormente caracolillo) a lo largo de todo el entorno de la cuenca del Asón y áreas
actualmente ocupadas por el medio marino.

-La sección se completará con paneles y fotografías que resuman cuál fue la vida de los
homínidos, homo sapiens y neardenthalensis, que poblaron el entorno del Monte Buciero.
Podríamos decir, para entendernos, que son los "primeros santoñeses" de los que tenemos
constancia.

Poseemos materiales de incalculable valor que podrían producir un fuerte impacto en el


visitante local y foráneo. A saber:
-Bifaz, o hacha de piedra, neardenthal (50.000-100.000 años) encontrado en el yacimiento
de La Lechera, junto a la Casa de la Leña. Actualmente se encuentra en un cajón del Museo
de Prehistoria de Cantabria. Según creo nunca ha sido expuesto. Como el resto de útiles
prehistóricos que vamos a describir, su conocimiento no ha trascendido más allá de las tesis y
los trabajos de los especialistas, unas escasas charlas y conferencias y poco más. Creo
necesario que se ponga en manos del ciudadano de a pie todo este apasionante legado. Nada
mejor para sentirse profundamente santoñés que tener noción de nuestra historia, nada mejor
que mostrarlo con orgullo para que cualquier visitante se sorprenda y apasione con este lugar
en el que tenemos la suerte de haber nacido.

Homo neardenthalensis percutiendo sobre un futuro bifaz similar al encontrado junto a la


Casa de la Leña.
Recreación aspecto de un homo neardenthalensis.

Este bifaz permite hacerse una idea del aspecto del hacha de piedra encontrado en el Monte
Buciero. A la derecha, representación de cráneo neardenthal.

-Buriles de silex (probablemente 12.000-6.000 años). Un mínimo de treinta puntas


trabajadas a conciencia sobre piedra de silex pueden ser expuestas sin necesidad de ningún
trámite administrativo o acuerdo con gobierno autonómico. Es muy posible, como sucede con
el resto de contenidos, tanto prehistóricos como de edad moderna, que se produzcan
donaciones privadas de muestras de patrimonio que se han ido obteniendo del monte al
margen de los estudios arqueológicos (más puntas de silex o balas de cañón del siglo XIX,
por poner dos ejemplos).

Puntas de silex similares a las halladas en el Monte Buciero, especialmente en el yacimiento


del Abrigo del Perro.
Puntas de silex.

-Panel explicativo Abrigo del Perro.

En esta representación observamos los trazos que contiene el Abrigo del Perro. Un panel
debiera recoger fotografías de los mismos, junto con una ajustada explicación del modo de
vida de los hombres que habitaron el abrigo. Se acompañaría de la interpretación que hace la
ciencia de este tipo de grabados rupestres.

-Panel Cueva de la Fragua. Es la cueva más profundamente estudiada por especialistas de


diversas ramas científicas. Se deben condensar gráficamente y de manera amena todos los
hallazgos producidos en esta pequeña, pero fundamental cueva para entender la vida del
hombre paleolítico en la franja cantábrica. La cueva es un muy interesante yacimiento que
nos habla profusamente de modos de alimentación, marisqueo, caza de cabras, jabalís,
ciervos, corzos, etc. Es útil para imaginar qué animales poblaban el Monte Buciero y cómo
estos hombres les daban caza o realizaban largas caminatas por el valle (hoy en día inundado
por la subida del nivel marino) con la finalidad de marisquear y pescar. Las mismas lapas que
conocemos (sólo que con mayor tamaño) eran extraídas con destreza de las rocas costeras y
consumidas en La Fragua hace por ejemplo 10.000 años. Desde la entrada de la cueva se
divisaba un valle rico en recursos y un promontorio que 12.000 años después terminaría
perfilándose y recibiendo el nombre de Peña del Fraile. Esta historia puede ser contada de un
modo sencillo, ameno y revelador.

Restos de sus scrofa, cerdo salvaje, periodo magdaleniense, Cueva de La Fragua, Monte
Buciero.

Azagayas, arma arrojadiza primitiva.


Los estudios sobre La Fragua han sacado a la luz cuatro azagayas incompletas, tres de ellas
decoradas. También unos sesenta buriles. Hasta ahora me ha sido imposible conocer la
ubicación de estos materiales, si bien pudieran hacerse las oportunas consultas al arqueólogo
responsable de los hallazgos (profesor Manuel González Morales), así como conseguir la
plena colaboración del Museo de Prehistoria y del Gobierno de Cantabria.
Representación de buriles magdalenienses similares a los hallados en La Fragua.

Una de las azagayas o varillas de La Fragua, elaborada sobre asta de ciervo, presenta el
grabado de un caballo. La datación por parte de los científicos no es concluyente, pero en
cualquier caso estamos hablando de unos 12.000 años (el original o una reproducción
supondrían un aporte muy valioso).

En resumen, la sección Prehistoria quedaría compuesta por:


-Maqueta Monte Buciero y entorno, representando el avance de la línea costera en los
últimos 16.000 años, rutas de marisqueo, pesca y caza, abrigos y cuevas más importantes (La
Fragua, Abrigo del Perro, Abrigo del Perro II o Covacho de San Carlos, La Higuera, Cueva
del Merino, Cueva de la casa de la Pasiega).
-Panel Abrigo del Perro.
-Panel Cueva de La Fragua.
-Paneles explicativos sobre la vida de los primeros hombres modernos que han poblado el
entorno de la actual Santoña. Los primeros pescadores, cazadores y recolectores de marisco.

Útiles a exhibir:
-Hacha pulimentada o bifaz neardenthal (en un cajón del Museo Prehistoria Cantabria).
-Colección de unas 30 puntas y buriles de silex (localizado y disponible).
-Buriles y azagayas decoradas con incisiones sobre hueso de ciervo. Estos útiles
corresponden a La Fragua (es necesario confirmar su disponibilidad, al menos debe obtenerse
fotografía o, en su caso, reproducción física).
-Restantes muestras de talla lítica halladas en el monte. Piedra pulimentada hallada en
Cueva del Merino (es necesario confirmar su disponibilidad). Arpones aplanados
encontrados en el Abrigo del Perro (son los primeros útiles dedicados a la pesca de los que se
tiene constancia en nuestro entorno, es decir, los orígenes remotos de la tradición pesquera de
la villa y su primer testimonio).

Con el fin de acrecentar la importancia de la sección Prehistoria en cuanto a exhibición de


herramientas, estoy convencido de que la creación del museo actuaría como llamamiento a
todo aquel ciudadano que posea bienes patrimoniales de este tipo. Es sabido que estos
yacimientos han padecido y padecen el ataque de furtivos. Personalmente quiero pensar que
algunos de estos ciudadanos actúan, en el fondo, con la buena fe de rescatar un pedazo de
historia. Ceder estos materiales a un museo público santoñés sería una excelente elección,
una vez que el daño a los yacimientos ya está hecho. En conclusión, es previsible que la
posibilidad de exhibición permanente destape más muestras prehistóricas.

Hendedor.
Para terminar este resumen de contenidos en la sección Prehistoria, es necesario citar el
hallazgo de un hendedor, en la zona de rellenos del actual polideportivo (hallado en los años
ochenta por Dionisio García Cortázar). Nos retrotrae de nuevo a 50.000-100.000 años. Cito
esta herramienta lítica, aunque desconozco su paradero y el Museo de Prehistoria de
Cantabria parece no tener constancia. De nuevo estamos hablando de una muestra
neardenthal, anterior a la llegada al entorno del Monte Buciero de los primeros humanos
modernos.

La sección Prehistoria rescataría una parte del pasado profundamente desconocida para la
mayoría de santoñeses. Igualmente resultaría de gran interés para cualquier visitante.
Rescatar esta historia ofrecerá una perspectiva más amplia de lo que tenemos y somos. En
pleno siglo XXI es un anacronismo y una pena que estos materiales estén en manos privadas
(deseosas en algún caso, eso sí, de ponerlo a disposición de un espacio museístico público) o
en cajones de museos regionales. Este relato debe transmitirse de hoy en adelante y el Fuerte
San Martín sería el lugar idóneo desde el que hacerlo. No tengo noticia de que exista un
marco comparable al Fuerte San Martín para este representativo e impactante, repaso a la
prehistoria de un lugar. Y la visita no ha hecho más que empezar. Aún nos queda hacer un
recorrido por una historia fascinante de invasiones, fortalezas, hombres de mar, aventureros
capaces de poner pie en la Isla de Pascua, emperadores... La prehistoria ha legado un buen
puñado de materiales, tal como hemos visto. Los últimos dos mil años, en especial los tres
últimos siglos, han puesto en nuestras manos un legado inimaginable de arcabuces, bolas de
mortero, balas de cañón, medallas, monedas, etc. Continuemos la visita al Museo de
Prehistoria e Historia de la Villa de Santoña... (RESTO DEL PROYECTO EN ESTADO
AVANZADO DE REDACCIÓN)

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