El Espíritu Santo fue enviado

para que demos el fruto del

Espíritu
 Gálatas 5:16
Digo, pue: Andad en el Espíritu, y no satisfagáis
los deseos de la carne.

Gálatas 5:22, 23
Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz,
paciencia, benignidad, bondad, fe.
Mansedumbre, templanza; contra tales cosas no
hay ley.
Otra de las partes bellas de la misión
del Espíritu Santo para el creyente es
el fruto del Espíritu Santo en su vida.
 Dones Espirituales y Frutos del Espíritu

Dones Frutos
• Regalados por el Espíritu • Se consigue por la santidad
Santo disposicional del creyente
• Todos los cristianos son
• Repartidos como Él quiere llamados a producirlos

• Son diversos en genero y • Son para vivirlos

numero y dados para personalmente
edificar al cuerpo de Cristo
 Dones Frutos
• El cristiano tiene que • Se demuestra y es evidente
descubrirlos
• Si una persona carece del
• Pueden practicarse aun en fruto del Espíritu, aunque
medio de una vida carnal diga que es espiritual, con
sus hechos, lo niega
El fruto del Espíritu consta de 9 partes
que se pueden subdividir a su vez en 3
grupos:
1. Relación hacia Dios
1. Relación hacia Dios
• Amor: Es el fundamento de todo. Incluso es Dios mismo. La biblia
menciona 4 clases de amor:
1. Filial : Compañerismo, amistad, cariño.
2. Eros: Deseo y atracción.
3. Estorgue: Afecto natural entre padres e hijos.
4. Ágape: Incondicional, puro, santo, perfecto.

• Gozo: Estado de satisfacción, de paz, de regocijo, bajo cualquier

circunstancia.

• Paz: Bienestar total e integral con Dios, familia, salud, amistades y trabajo.
2. Relación con nuestro prójimo
2. Relación con nuestro prójimo

• Paciencia: Tolerancia que soporta sin rencor la mala conducta

de otros hacia nosotros.

• Benignidad: Nos hace útiles y serviciales practicando la

bondad hacia las personas necesitadas, principalmente los
marginados, los pobres, los niños, los indefensos.

• Bondad: Su significado apunta hacia la idea de ser noble de

carácter, misericordioso, como resultado del amor a Dios
3. Relación con nosotros mismos
3. Relación con nosotros mismos

• Fe: Fidelidad, digno de confianza, digno de fiar. Cumplimos con

lo que prometemos, somos de una sola pieza. Opuesto a lo que
significa ser de doble animo.

• Mansedumbre: El significado de mansedumbre esta distante de ser

débil, frágil, tímido. Por el contrario, la mansedumbre es un
fruto de valentía por excelencia. Quien posee este fruto, pese a
las presiones externas o internas, éstas no lo hacen perder el
control de si mismo, ni de sus palabras, ni de sus acciones.
Incluso, se tiene que estar dispuesto a ceder los propios
derechos por amor a Dios y compasión a los demás.
• Dominio Propio: Es la capacidad dada de sujetar a nuestro
espíritu, sujetar a nuestra mente y someter a nuestro
cuerpo para que no caiga en los pecados, ni en las cosas
legitimas como el beber, el comer, el sexo, etc. Así como
también la capacidad de ser disciplinado y hacer lo que
debemos hacer, no lo que queremos hacer.
El dominio propio es el equilibrio perfecto en toda nuestra
vida espiritual, emocional, física, familiar y de trabajo.
No basta con que hablemos
en lenguas, cantemos en la
iglesia, asistamos a la
congregación, digamos que
somos cristianos, leamos la
Biblia. Eso no nos hace
necesariamente espirituales.
El fruto del Espíritu en nuestra
vida es la única clave para
comprobar si somos o no
espirituales.
Recordemos:
• Los dones son impartidos por el Espíritu Santo, el fruto
depende de nuestra obediencia.
• Los dones son regalados, el fruto del Espíritu es conseguido
al vivir por el Espíritu.
• La muestra de la santidad no son los dones, sino el fruto del
Espíritu.
• Todos los cristianos somos llamados a dar el fruto del
Espíritu.
• La combinación del fruto del Espíritu con el servicio de los
dones nos edifica a nosotros y a la iglesia local.