0 calificaciones0% encontró este documento útil (0 votos)
27 vistas5 páginas
El documento describe el propósito del Ministerio de la Mujer de apoyar y capacitar a las mujeres adventistas para que sirvan como discípulas de Jesús en sus hogares, iglesias y comunidades. Busca inspirar a las mujeres a alcanzar su máximo potencial en Cristo y usar sus dones para difundir el Evangelio. Recomienda consagrar cada mañana a Dios poniendo todos los planes del día en sus manos.
El documento describe el propósito del Ministerio de la Mujer de apoyar y capacitar a las mujeres adventistas para que sirvan como discípulas de Jesús en sus hogares, iglesias y comunidades. Busca inspirar a las mujeres a alcanzar su máximo potencial en Cristo y usar sus dones para difundir el Evangelio. Recomienda consagrar cada mañana a Dios poniendo todos los planes del día en sus manos.
El documento describe el propósito del Ministerio de la Mujer de apoyar y capacitar a las mujeres adventistas para que sirvan como discípulas de Jesús en sus hogares, iglesias y comunidades. Busca inspirar a las mujeres a alcanzar su máximo potencial en Cristo y usar sus dones para difundir el Evangelio. Recomienda consagrar cada mañana a Dios poniendo todos los planes del día en sus manos.
llamada a conocer a Jesús como su Salvador y a usar sus dones para servir como discípulas en el hogar, en la iglesia y en la comunidad”. El departamento del Ministerio de la Mujer existe para apoyar, animar, desafiar y capacitar a las mujeres adventistas del Séptimo Día en su caminata diaria como discípulas de Jesucristo y como miembros de su iglesia Inspirar a las mujeres a alcanzar pleno potencial en Cristo, capacitá ndolas para profundizar su vida espiritual; a colocar su fe en acción al emplear sus dones en el servicio cristiano, convirtiéndose en un importante instrumento en la predicación del Evangelio. • “Conságrate a Dios todas las mañanas; haz de esto tu primer trabajo. Sea tu oración: “Tómame, oh Señor! como enteramente tuyo. Pongo todos mis planes a tus pies. Úsame hoy en tu servicio. Mora conmigo, y sea toda mi obra hecha en ti”. Este es un asunto diario. Cada mañana, conságrate a Dios por ese día. Somete todos tus planes a Él, para ponerlos en práctica o abandonarlos, según te lo indicare su providencia. Podrás así poner cada día tu vida en las manos de Dios, y ella será cada vez más semejante a la de Cristo”. CC pág. 70