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El Sábado y el Sello de

Dios
El Sábado y el Sello de Dios

Éxodo 20: 8-11


8 Acuérdate del sábado para santificarlo. 9 Seis días trabajarás, y harás
toda tu obra; 10 mas el séptimo día es reposo para Jehová tu Dios; no
hagas en él obra alguna, tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu
criada, ni tu bestia, ni tu extranjero que está dentro de tus puertas. 11
Porque en seis días hizo Jehová los cielos y la tierra, el mar, y todas las
cosas que en ellos hay, y reposó en el séptimo día; por tanto, Jehová
bendijo el sábado y lo santificó.
El Sábado y el Sello de Dios
Si una persona que no hubiese conocido antes los diez mandamientos se encontrase
repentinamente cara a cara con ellos, se sorprendería inmediatamente de su carácter razonable y
buen sentido. A l leer el mandamiento: “ No hurtarás,” convendría en que era un buen
mandamiento. Lo mismo pensaría de los demás mandamientos: “ No matarás,” y “ No
cometerás adulterio.” Observaría indudablemente que la mayoría de las naciones tiene leyes
similares y las ha encontrado necesarias y buenas. No podría hallar defecto en la ley de Dios.
Sin embargo, una cosa podría dejarlo perplejo. ¿Por qué debe considerarse santo el séptimo día?
Podría ver la razón de los otros mandamientos, pero el mandamiento del sábado le parecería
arbitrario. Desde el punto de vista de la salud, cada quinto o sexto día, o cada octavo o décimo
día, serviría igualmente bien. Y como quiera que sea, ¿por qué elegir el séptimo día de la
semana más bien que solamente una séptima parte del tiempo ? Los otros mandamientos son
razonables, pensaría él, pero el mandamiento del sábado es de índole diferente. No se basa en la
naturaleza o las relaciones humanas; sino que es un decreto arbitrario, sin razón suficiente para
ser obedecido o impuesto (Andreasen, 1942).
El Sábado y el Sello de Dios
El autor tuvo una vez con cierta persona una conversación en la cual se presentaron los
argumentos mencionados. “El mandamiento del sábado es diferente de los otros. Se
distingue por el hecho de no basarse en la naturaleza del hombre como los otros
mandamientos. Si un grupo de hombres que nunca hubiese oído hablar de los diez
mandamientos hubiera de vivir en comunidad, no tardaría en desarrollar una serie de
leyes para su propio gobierno. Las naciones paganas y las tribus salvajes tienen reglas
contra el robo, el asesinato y el adulterio. Creo que estos pueblos primitivos elaborarían
después de un tiempo un código de leyes en conformidad con el Decálogo; pero no
puedo ver cómo habrían de desarrollar jamás una ley del sábado. No hay nada en la
naturaleza que los habría de guiar en una empresa tal. Esto prueba, creo yo, mi
argumento de que la ley del sábado no se funda en la ley natural, no se funda en la
naturaleza del hombre como los otros mandamientos, y los hombres sostienen con ese
mandamiento una relación diferente de la que tienen los demás. Considero que los otros
mandamientos están en vigor, pero no el mandamiento del sábado” (Andreasen, 1942).
El Sábado y el Sello de Dios
A esto, respondimos más o menos como sigue: “Sin admitir la verdad de todos
sus argumentos, admitamos que el mandamiento del sábado está sobre una base Los otros 9 mandamientos regulan las
diferente del resto de los mandamientos, y que el hombre sin ayuda de la acciones. Nuestros pensamientos. Sin
revelación no podría nunca llegar a creer en el reposo del séptimo día. “ Que el embargo; el sábado está sobre una base
mandamiento del sábado ocupe un lugar único en la ley de Dios es, creemos, diferente; dado que es el único
reconocido por la mayor parte de los que han estudiado la cuestión. Es el único
mandamiento que trata del tiempo. Tiene la distinción de declarar ciertas
mandamiento que trata acerca del tiempo.
cosas correctas si se hacen en un tiempo definido, y malas las mismas cosas si Sabemos que la última disputa, la última
se hacen en otro tiempo. Crean el bien y el mal por definición sin razón gran prueba y el último gran mensaje es el
discernible basada en la naturaleza. En esto difiere de los otros mandamientos. sábado. El sábado está basado en el
tiempo; por lo tanto el último mensaje
“De todos los mandamientos, Dios eligió el cuarto como el mandamiento de (2031) también está basado en el tiempo.
prueba. Cuando quiso probar al pueblo ‘si anda en mi ley, o no’, le dijo que Es decir, hay una relación directa entre el
juntase cada día bastante maná para sus necesidades, el doble en el sexto día, y
2031 y el sábado.
nada en el séptimo. Esta era la prueba. Cuando desobedecieron, no era
simplemente el sábado lo que violaron; era toda la ley. ‘ ¿Hasta cuándo no
querréis guardar mis mandamientos y mis leyes?’ dijo Dios. Y no, ‘ ¿por qué no
guardasteis el sábado?’ La cuestión era más amplia. Abarcaba toda la ley. La
observancia del sábado era la prueba. Si lo guardaban, eran obedientes. Si lo
violaban, violaban toda la ley (Andreasen, 1942).
El Sábado y el Sello de Dios
Romanos 2: 14,15 La Ley escrita en los corazones son los 9
mandamientos. Es decir, el sábado es un
Porque cuando los gentiles que no tienen
14  mandamiento diferente. Cualquier
ley, hacen por naturaleza lo que es de la persona sabe que matar es malo, cometer
ley, estos, aunque no tengan ley, son ley adulterio es malo, mentir es malo, etc.
para sí mismos, 15 mostrando la obra de la Sin embargo; no cualquier persona sabe
ley escrita en sus corazones, dando que el sábado es el día del Señor. Es por
testimonio su conciencia, y acusándoles o eso que el número 9 implica juicio.
defendiéndoles sus razonamientos.
El Sábado y el Sello de Dios
“¿Por qué exactamente eligió Dios el mandamiento del sábado como prueba más bien
que cualquiera de los otros mandamientos? Admitiendo el hecho de que el sábado
descansa únicamente sobre un ‘ así dice Jehová,’ se le da una eminencia y un
significado especiales. Los otros mandamientos están fundados no solamente en un
decreto de Dios, sino también en la naturaleza del hombre; son una parte de la ley
elemental o natural. Un mandamiento es elegido de entre los demás, a fin de destacarlo
como prueba, como señal, para que si una persona lo acata, esté en armonía con toda la
ley (Andreasen, 1942).

“Es como si Dios razonase así de los otros nueve mandamientos: Les he dado mi ley.
La he escrito en sus corazones; está grabada en toda fibra de su ser. Conocen
instintivamente lo que es bueno y lo que es malo. Su propia conciencia les atestigua la
veracidad de mi ley. Sin embargo, falta una cosa. La ley es tan clara, y es tan evidente
para todos que estos mandamientos básicos son necesarios para la existencia, la paz y
la vida, que los hombres podrían no aceptarlos como de origen divino (Andreasen,
1942).
El Sábado y el Sello de Dios
Algunos contenderán que los nueve mandamientos son tan vitales y evidentes que sin
ayuda de ninguna dirección divina, el pueblo, de por sí, habría de poder hacer una ley
comparable a la mía. Se jactarán de que, con el transcurso de los siglos, los hombres
han llegado por la experiencia a la conclusión de que no es bueno robar ni mentir ni
matar, y han desarrollado leyes apropiadas acerca de estos asuntos, y que estas leyes
no son de origen divino, sino el resultado del experimento humano y que están
definidamente entretejidas con la vida de la especie humana. Mostrarán con aplomo las
tribus y razas que durante siglos han estado separadas de la civilización, y que sin
embargo tienen reglas que cubren muchos puntos de la ley. Sostendrán que esta es una
prueba de que el hombre, sin ayuda de poder alguno, puede duplicar mi ley.
Asegurarán que la ley no es de origen divino, que los hombres están simplemente
siguiendo una ley que su propia experiencia les enseña que es buena para beneficio de
la humanidad (Andreasen, 1942).
El Sábado y el Sello de Dios
“Dios continúa: Haré una provisión en mi ley que no esté basada en la
ley elemental o natural; que no tenga correspondencia en la naturaleza.
Será una orden definida, y de ella no podrán hallar razón alguna fuera de
mi orden. El hombre puede hallar una razón que justifique los demás
mandamientos. Apelan a su buen sentido. Pero este mandamiento no
tendrá otra razón que mi palabra. Si lo obedecen, me obedecen a mí. Si
lo rechazan, me rechazan a mí. Haré de este mandamiento una prueba,
una señal. Haré de él una prueba de si quieren guardar mi ley o no. Haré
de él una señal de que yo soy Dios (Andreasen, 1942).
El Sábado y el Sello de Dios

Romanos 7:14 Toda la Ley es espiritual; sin


embargo, hay mandamientos que
Porque sabemos que la ley es
14 
también son naturales o inherentes
espiritual; mas yo soy carnal, (no matarás, etc.) al hombre.
vendido al pecado. Ahora, el sábado es el único
mandamiento 100% espiritual de
la Ley. El sábado es el espíritu de
Y el sábado es la señal de obediencia. la Ley, es el aliento vital de la
El que obedece de corazón al cuarto Ley, el sábado vivifica la Ley.
mandamiento, obedecerá toda la ley. Jesús es la encarnación del sábado
Queda santificado por la obediencia porque dijo venid a mí y yo os
(Testimonios para la Iglesia, tomo 6). haré descansar.
El Sábado y el Sello de Dios
Apocalipsis 14: 9-12
El mensaje del tercer ángel induce a sus
Y el tercer ángel los siguió, diciendo a gran voz: Si adherentes a observar el séptimo día,
alguno adora a la bestia y a su imagen, y recibe la marca porque sólo de esta manera llegan ellos a
en su frente o en su mano, 10 él también beberá del vino distinguirse, por cuanto la observancia del
de la ira de Dios, que ha sido vaciado puro en el cáliz de primer día no distinguiría una persona de
su ira; y será atormentado con fuego y azufre delante de las masas que ya estaban observando ese
los santos ángeles y del Cordero; 11 y el humo de su día cuando el mensaje fue introducido.
tormento sube por los siglos de los siglos. Y no tienen Dios nos indica que su sábado es su señal,
reposo de día ni de noche los que adoran a la bestia y a o sello con referencia a su pueblo. De
su imagen, ni nadie que reciba la marca de su nombre. manera que Dios tiene un sello, que es su
12 Aquí está la paciencia de los santos, los que guardan sábado (Smith, 1949).
los mandamientos de Dios y la fe de Jesús.
El Sábado y el Sello de Dios

Éxodo 31: 16,17

Guardarán, pues, el día sábado los hijos de Israel,


16 

celebrándolo por sus generaciones por pacto


perpetuo. 17 Señal es para siempre entre mí y los
hijos de Israel; porque en seis días hizo Jehová los
cielos y la tierra, y en el séptimo día cesó y reposó.
El Sábado y el Sello de Dios

Si se niega el 7mo milenio, también se


Se refirió a los días bienaventurados del niega el sábado; se niega el matrimonio con
Edén, cuando Dios declaró que todo "era Cristo en el 7mo milenio (hace referencia al
bueno en gran manera". Entonces tuvieron 7mo mandamiento). Si se niega el cuarto
su origen dos instituciones gemelas, para la milenio en la pascua; también se niega el
gloria de Dios y en beneficio de la 4to mandamiento (sábado) y el 7mo
humanidad: el matrimonio y el sábado (El mandamiento. Entonces si se niega lo uno
Discurso Maestro de Jesucristo). también se niega los otros. Si se niega el
2031 se niega todo.
¡MARANATHA 2031!

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