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Any la pececita alegre

Any era una pececita que vivía en un planeta muy especial llamado
«planeta Arco iris». Siempre estaba muy contenta y alegre.
Cada mañana iba con sus amigos a jugar cerca de un arrecife de coral.
Allí les quedaba tiempo hasta para comer, eso sí, nunca dejaban nada
sucio, tiraban todo lo que les sobraba en bolsas a la basura. Eran muy
limpios, por ésta razón vivían todos muy felices.
Un día, Any vio una misteriosa puerta que decía «prohibido entrar». A
pesar de que sabía que no podía pasar, decidió atravesarla, tenía mucha
curiosidad a ver hacia donde la dirigía. De repente empezó a suceder
algo extraño, sintió como si viajará por el tiempo y aterrizó en un
océano que para ella era muy raro.
Cuando abrió sus ojos, notó que nadaba en un agua diferente, un agua de color azul muy
oscuro, diferente a la que había en su planeta. Además, vio que los peces de este planeta no
tenían aletas como ella, sino algo a lo que ellos llamaban brazos y piernas; además, respiraban
con unos extraños aparatos dentro del agua y salían de ella sin ningún problema.
De repente escuchó a lo lejos unas palabras: ¡niños es hora de comer la merienda! Se dio
cuenta que a esos «peces» no eran peces sino niños y podían salir del agua fácilmente.
Mientras los niños les traían la merienda jugaban a hacer castillos con la arena. Al ver esas
enormes construcciones de arena le gustó mucho este lugar. Le gustó más que su planeta,
bueno, le gustó más hasta que le pasó algo que la puso muy triste…
Los niños terminaron de comer la merienda y tiraron las bolsas al agua. Lógicamente no podía creer lo que
veía, entonces desconcertada nadó muy rápido, para regresar a su planeta, pero, de repente una de las
bolsas que habían lanzado al agua, se le enredó en su aleta y comenzó a perder velocidad al nadar. Asustada
gritó «A,A,A,A,A,A,A,A», pero nadie la escuchaba. ¡si estuviera en mi planeta esto no me hubiera pasado!,
pensó Any; entonces decidió regresar rápidamente al planeta arco iris.
Al llegar nuevamente a las aguas de su planeta decidió escribir un mensaje a esos niños para
que no vuelvan a tirar basura al agua. Anímate a escribir también mensajes con Any para apoyar
a eta hermosa pececita.

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