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Conceptos

introductorios
Características de los proyectos

Los proyectos se caracterizan porque:


■ Tienen un propósito.
■ Se deben conocer los antecedentes, su historia, que otros
proyectos existen en otros lugares y cómo se llevaron a cabo. ■
Se hace un análisis de la realidad externa, como afecta el
entorno social, cultural, económico y político.
■ Implica recursos, tiempo, costos.
■ Requieren una unidad ejecutora.
■ El personal asignado requiere de habili-dades para
desarrollar tareas especializa-das.
Los criterios, técnicas y metodologías para formular, preparar y
evaluar proyectos de creación de nuevas empresas se formalizaron
por primera vez en 1958, en el libro Manual de proyectos de
desarrollo económico. Si bien en este medio siglo se han
producido enormes cambios en la forma de estudiar los proyectos
de inversión, el procedimiento general sigue centrándose en la
recopilación, creación y sistematización de información que
permita identificar ideas de negocios y medir cuantitativamente
los
costos y beneficios de un eventual emprendimiento comercial.
Los proyectos de inversión tienen varios orígenes:
** Satisfacción de las necesidades individuales y colectivas.

** Aprovechamiento de una oportunidad de negocio. Las oportunidades de negocios se dan cuando


las ideas de negocios están basadas en las necesidades de la comunidad, en ventajas competitivas,
cuando se visualizan los recursos humanos y físicos y cuando se cuenta con el impulso vital del
inversionista que las hagan realidad.

** Crecimiento del mercado en general, que produce una mayor demanda del bien o servicio.

** Cambio en los gustos y preferencias de los consumidores.

** Cambio en los niveles de ingresos de los consumidores o en el precio de los bienes y servicios.

** Innovación tecnológica. Estos proyectos surgen por la necesidad de aumentar la


productividad de las empresas y disminuir los costos directos para ser competitivas
en el mercado tanto en precio como en calidad, por lo tanto, se hace necesario el
reemplazo de maquinarias y equipos obsoletos.
Un problema común en la evaluación de un proyecto es que
las prioridades difieren a veces entre los inversionistas, los
ejecutivos y el evaluador. Es lo que nos distingue como seres
humanos: ser diferentes por nuestro nivel de expectativas,
grados de aversión al riesgo o información que manejamos.
El evaluador de proyectos debe estar preparado para reconocer
que existen diferentes tipos de emprendedores y que su
responsabilidad es la de servirlos, aunque sus prioridades no
coincidan con las de él.
Tipos de proyectos
Según la categoría. De acuerdo a esta clasificación, los
proyectos pueden ser de producción de bienes y de prestación de
servicios. Los proyectos de producción de bienes se orientan a la
transformación de recursos primarios en productos para el
consumo como, por ejemplo, la transformación de la leche en
productos lácteos como el queso, yogurt, etc. Los proyectos de
prestación de servicios satisfacen necesidades humanas utilizando
bienes ya producidos por el hombre como, por ejemplo, el
servicio de transporte, hotelería, recreación, etc.
Según la actividad económica. En este campo los
proyectos se clasifican dependiendo del sector
económico que atienden. Así tenemos proyectos
agropecuarios, industriales, de servicios, pecuarios,
agroindustriales, industriales, turísticos,
comerciales
Según su carácter y entidad que los promueve. Se clasifican en proyectos de
inversión privados (con ánimo de lucro) y proyectos de carácter social. Los
proyectos privados se implementan cuando existe una demanda real en el mercado
y le otorgan a la entidad que los promueve una rentabilidad que satisface sus
expectativas mínimas de rendimiento. Los proyectos sociales o de inversión
pública tienen como finalidad mejorar el bienestar de una comunidad a través de la
prestación de un servicio o del suministro de un bien.
Tipologías de proyectos

Las opciones de inversión se pueden clasificar preliminarmente en


dependientes, independientes y mutuamente excluyentes.
Las inversiones dependientes son aquellas que para ser realizadas
requieren otra inversión. Por ejemplo, el sistema de evaluación de
residuos en una planta termoeléctrica que emplea carbón depende de que
se haga la planta, mientras que esta última necesita de la evacuación de
residuos para funcionar adecuadamente. En este caso, se hablará de
proyectos complementarios y lo más común será evaluarlos en conjunto.
Un caso particular de proyectos dependientes es el
relacionado con proyectos cuyo grado de dependencia se
da más por razones económicas que físicas, es decir,
cuando realizar dos inversiones juntas ocasiona un
efecto sinérgico en la rentabilidad, en el sentido de que
el resultado combinado es mayor que la suma de los
resultados individuales.
Las inversiones independientes son las que se pueden
realizar sin depender ni afectar o ser afectadas por otros
proyectos. Dos proyectos independientes pueden conducir
a la decisión de hacer ambos, ninguno o solo uno de ellos.
Por ejemplo, la decisión de comprar o alquilar oficinas es
independiente de la decisión que se tome respecto del
sistema informático.
Las inversiones mutuamente excluyentes, como su
nombre lo indica, corresponden a proyectos
opcionales, donde aceptar uno impide que se haga el
otro o lo hace innecesario. Por ejemplo, elegir una
tecnología que usa petróleo en vez de carbón hace
innecesario invertir en un sistema para evacuar
cenizas y residuos del carbón.
Algunos casos típicos de proyectos en empresas en marcha –por ejemplo, para el
sector salud– son los siguientes.
* Outsourcing: externalización de los servicios de lavandería para destinar los
espacios
liberados a ampliar las instalaciones médicas o para reducir costos.
y Ampliación: construcción y habilitación de nuevos boxes para aumentar la
capacidad
de atención y reducir las listas de espera de pacientes.
y Abandono: cierre de una parte de la unidad de cirugía reconstructiva si tiene mucha
capacidad ociosa, para transformarla en un centro de imageneología.
y Internalización: creación de un laboratorio de procesamiento de muestras en el
interior
del establecimiento, para evitarle al paciente recurrir a otros centros médicos.
* Reemplazo: modernización de los equipos de escáner.
Por último, cada uno de los casos anteriores puede
clasificarse, también, en función de su fuente de
financiamiento; se distingue entre aquellos financiados
con leasing, los financiados por endeudamiento ya sea
con el sistema financiero o con proveedores, los
financiados con recursos propios y los financiados con
una combinación de fuentes.
Pero también los proyectos se pueden clasificar en función de la finalidad
del estudio, es decir, de acuerdo con lo que se espera medir con su
realización. En este contexto, es posible identificar tres tipos de proyectos
que obligan a conocer tres formas diferentes de construir los flujos de caja
para lograr el resultado deseado:
1. Estudios para medir la rentabilidad de la inversión, independientemente
de dónde provengan los fondos.
2. Estudios para medir la rentabilidad de los recursos propios invertidos en
el proyecto.
3. Estudios para medir la capacidad del propio proyecto con la finalidad de
enfrentar los compromisos de pago asumidos en un eventual endeudamiento
para su realización.
Es frecuente, por ejemplo, confundir la rentabilidad del proyecto con
la rentabilidad del inversionista. Mientras que en el primer caso se
busca medir la rentabilidad de un negocio, independientemente de
quién lo haga, en el segundo interesa, contrariamente, medir la
rentabilidad de los recursos propios de quien realizará la inversión,
en la eventualidad de que se lleve a cabo el proyecto. Considérese el
siguiente ejemplo para observar la diferencia en el resultado entre
ambas opciones.
Ejemplo 1.1
Un proyecto que requiere una inversión de $1.000 reditúa en un año $1.120, en
moneda de igual valor, a quien lo realice. Es decir, le permite aumentar su riqueza en
$120, lo que corresponde a una rentabilidad de 12% anual. Sin embargo, el
inversionista no dispone del total de la inversión y debe necesariamente endeudarse
para poder implementar el proyecto. Si un banco le presta los recursos faltantes,
supongamos $800, a un tasa anual de 8%, a fin de año deberá devolverle el capital
prestado más el interés cobrado. Es decir, deberá devolver $864. Si el proyecto le
generaba una ganancia neta de $120 y por endeudarse debe pagar al banco $64 de
interés, ahora al inversionista le quedan solo $56. Si el proyecto exhibía una
rentabilidad de 12%, solo por el efecto del financiamiento el inversionista obtiene
una rentabilidad de 28%. Esto, por cuanto al recibir una ganancia de $56 sobre los
$200 de su propia inversión (la diferencia entre el préstamo y el total de la
inversión), sus recursos obtienen un retorno de 28%.
Ejemplo 1.2
Si al optimizar la combinación de factores durante la
formulación del proyecto se logra incrementar el flujo de
caja del momento 1 a $1.130, obviamente las rentabilidades
del proyecto y del inversionista aumentan, pero no el costo
del financiamiento externo, por lo que los resultados que se
obtendrían son los siguientes.
Etapas de un proyecto
Vida útil de un proyecto Para todo proyecto hay que definir un
horizonte y debe realizarse con base en criterios tales como:
duración aproximada de las maquinas o equipos, duración de
proyectos similares que pueden tomarse como referencia, ritmo
de explotación cuando se trata de recursos naturales.
El horizonte de un proyecto está compuesto por tres (3) elementos
claramente diferenciados:
■ Fase Preoperativa: incluyen todas las actividades que se hacen hasta
cuando se pone en marcha o entra en operación el proyecto. Estudios,
compra de maquinaria y equipos, adecuaciones locativas, montajes y
ajustes.
■ Fase operativa: como su nombre lo indica hace referencia al periodo en
el cual entra a operar el proyecto y se distingue porque en el se producen
bienes y servicios.
■ Fase de liquidación: es un corte que le hacemos al proyecto para poder
evaluarlo. No significa necesariamente la terminación del proyecto
(Méndez, R. Formulación y evaluación de proyectos, enfoque para
emprendedores).
La idea

La etapa de idea corresponde al proceso sistemático de búsqueda de


nuevas oportunidades de negocios o de posibilidades de
mejoramiento en el funcionamiento de una empresa, proceso que
surge de la identificación de opciones de solución de problemas e
ineficiencias internas que pudieran existir, o de las diferentes
formasde enfrentar las oportunidades de negocios que se pudieran
presentar.
Fuentes de identificación de ideas para un proyecto Una
idea es buena cuando mejora el nivel de respuesta a una
necesidad sentida por la comunidad; cuando se aprovechan
adecuadamente los recursos potenciales de una localidad o
región, siempre y cuando los beneficios que le aporta esa
idea a la sociedad sean superiores a los costos sociales en
que se incurre para su desarrollo.
Algunas fuentes de identificación de ideas:
■ Planes de desarrollo.
■ Estudios de mercados.
■ Diagnósticos sobre los problemas municipales.
■ Iniciativas de la comunidad.
■ Normas que regulan los procesos de descentralización. ■
Ferias regionales, nacionales e internacionales.
■ Franquicias.
■ Cambios de leyes.
■ Estudios de demanda.
■ Programas de fomento empresarial.
Componentes de un estudio de
prefactibilidad o de factibilidad

Los proyectos en el nivel de prefactibilidad o de


factibilidad pueden ser elaborados mediante una
distribución por temas, cada uno de los cuales aporta
información complementaria para tomar una buena
decisión.
El estudio de factibilidad o viabilidad del proyecto está
determinado por los siguientes pasos (Murcia, J.):
■ Detección de necesidades.
■ Definición del problema.
■ Búsqueda de información.
■ Generación de soluciones.
■ Evaluación tecnológica.
■ Evaluación económica.
■ Evaluación financiera.
■ Soluciones viables.
Contenidos del proyecto

Una de las etapas más importantes a la hora de realizar un


proyecto es sin duda la identificación de las ideas; ya que
ella define el diagnostico, permitiendo abordar
directamente la necesidad que se quiere cubrir y también
llegar a solucionar. Dentro del diagnóstico es necesario
tener en cuenta los siguientes datos:
Justificación
La justificación responde básicamente a ¿Por qué se
quiere hacer el proyecto?, esta pregunta debe sustentarse
con argumentos cualitativos y cuantitativos, mientras
más se tenga información sobre la problemática, se
facilitara sustentar la razón de ser del proyecto.
Contenidos básicos de la justificación:

■ La exposición del problema o situación actual.


■ Análisis de las causas y de las consecuencias.
■ Los indicadores cuantitativos y cualitativos, que
expresan la situación de partida.
■ La argumentación de la viabilidad y la coherencia por
las que el proyecto ofrece una alternativa adecuada.
■ Las referencias a otras actuaciones o a otros
proyectos.
Marco de referencia
El marco de referencia se necesita para identificar si el
proyecto pertenece a unidad superior, o de una misma área
específicamente es el lugar estratégico donde se ubica el
proyecto
Destinatarios
¿A quién va dirigido el proyecto? Es la población,
personas naturales o jurídicas, asociaciones,
organizaciones, grupos, comunidad, locales,
infraestructura, normas o procedimientos específicos a la
que se pretende llegar.
Objetivos

El objetivo corresponde al ¿QUÉ? y responde a la pregunta


¿qué queremos lograr directamente? El objetivo del proyecto
es el compromiso por el cual uno debe apuntar, acciones a
desarrollar con el fin de lograr el objetivo planteado, debe
estar dirigido a las mejoras de la población a estudiar.
■ Objetivos generales:

■ Objetivos específicos

■ Objetivos operativos o metas


Ubicación o zona de influencia

A la hora de realizar un proyecto, una vez ejecutada la idea


de negocio se debe concretar el lugar donde se desarrollara
el proyecto, algunos tendrán la ubicación determinada,
otros ninguna cobertura importante, estos hacen referencia a
la ubicación general del proyecto, es el espacio físico donde
se llevara a cabo en sentido global.
Planteamiento del problema

El planteamiento del problema es identificar la necesidad que se


pretende cubrir, en esta etapa se debe analizar hacia donde debe
dirigirse, cuales son las necesidades y quienes son los beneficiados
a través del proyecto a desarrollar, este análisis permitirá
profundizar, postergar o abandonar la idea de negocio.

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