“Poniendo nuestro enfoque en la Ministración” Una nueva normalidad
Los invito a volver cada vez
más el corazón, la mente y el alma hacia nuestro Por el presidente Russell M. Nelson Presidente de La Iglesia de Padre Celestial y Su Hijo, Jesucristo de los Santos de los Últimos Días Jesucristo. Solo una palabra que describa sus sentimientos de la Conferencia General 1. Esperanza Solo una 2. Misericordia palabra que 3. Paz 4. Fe describa sus 5. Paciencia sentimientos 6. Consuelo de la 7. Reflexión Conferencia 8. Recogimiento General 9. Revelación 10. Humildad Durante las reuniones, me los he imaginado a ustedes escuchando la conferencia y le he pedido al Señor que me ayude a comprender lo que están sintiendo, lo que les preocupa o lo que están tratando de resolver. Me he preguntado qué podría decir al concluir esta conferencia que les hiciera salir con el optimismo sobre el futuro que sé que el Señor desea que sientan. Vivimos en una época gloriosa, prevista por los profetas durante siglos. Esta es la dispensación en la que no se retendrá ninguna bendición espiritual a los justos. A pesar de la conmoción del mundo, el Señor quiere que miremos hacia el futuro con “gozosa anticipación”. No perdamos el tiempo en los recuerdos del ayer. El recogimiento de Israel sigue adelante. El Señor Jesucristo dirige los asuntos de Su Iglesia y esta logrará sus objetivos divinos. El desafío para ustedes y para mí es asegurarnos de que cada uno de nosotros alcance su potencial divino. Hoy en día, a menudo escuchamos sobre “una nueva normalidad”. Si realmente desean adoptar una nueva normalidad, los invito a volver cada vez más el corazón, la mente y el alma hacia nuestro Padre Celestial y Su Hijo, Jesucristo. Permitan que esa sea su nueva normalidad. Acojan su nueva normalidad arrepintiéndose todos los días. Procuren ser cada vez más puros en pensamiento, palabra y hechos; ministren a los demás; mantengan una perspectiva eterna; magnifiquen sus llamamientos. Y sean cuales fueren sus desafíos, mis queridos hermanos y hermanas, vivan cada día de tal manera que ustedes estén más preparados para comparecer ante su Hacedor. Es por eso que tenemos templos. Las ordenanzas y los convenios del Señor nos preparan para la vida eterna, la más grande de todas las bendiciones de Dios. Hoy me complace anunciar los planes de construcción de seis templos nuevos […] A medida que construimos y mantenemos esos templos, oramos para que cada uno de ustedes se edifique y se mantenga a sí mismo para ser digno de entrar en el santo templo. Los bendigo para que sean llenos de la paz del Señor Jesucristo, la cual sobrepasa todo entendimiento terrenal. Los bendigo con un mayor deseo y capacidad de obedecer las leyes de Dios. Les prometo que si lo hacen, se derramarán bendiciones sobre ustedes, entre ellas más valor, mayor revelación personal, una armonía más dulce en sus hogares, y gozo incluso en medio de la incertidumbre. 1. 2. 3. Temas 4. 5. para 6. ministrar 7. 8. 9. 10. Ruego que avancemos juntos para cumplir con nuestro mandato divino de prepararnos a nosotros mismos y al mundo para la segunda venida del Señor. Rama Del Viso Cuórum de Élderes