Kanban es un método para gestionar el trabajo que surgió en Toyota
Production System (TPS). A finales de los años 40. es una técnica que se utiliza para controlar el avance del trabajo, en el contexto de una línea de producción. El Kanban está dentro de la estrategia Kaizen, es decir, la mejora continua y continuada. La palabra Kanban viene del japonés y traducida literalmente quiere decir tarjeta con signos o señal visual. Su objetivo es gestionar de manera general como se van completando las tareas, que todos tengan algo que hacer y se aprecie claramente la prioridad de las tareas. Además nos brinda información sobre que se va a producir, en que cantidad, mediante que medios y como transportarlo. Kanban se basan en el desarrollo incremental, dividiendo el trabajo en partes. Una de las principales aportaciones es que utiliza técnicas visuales para ver la situación de cada tarea, y que quizás habrás visto representado en pizarras llenas de post-it. El trabajo se divide en partes, normalmente cada una de esas partes se escribe en un post-it y se pega en una pizarra. Los post-it suelen tener información variada, si bien, aparte de la descripción, debieran tener la estimación de la duración de la tarea. La pizarra tiene tantas columnas como estados por los que puede pasar la tarea Quizás una de las principales ideas del Kanban es que el trabajo en curso (Work In Progress o WIP) debería estar limitado, es decir, que el número máximo de tareas que se pueden realizar en cada fase debe ser algo conocido. En Kanban se debe definir cuantas tareas como máximo puede realizarse en cada fase del ciclo de trabajo a ese número de tareas se le llama límite del “work in progress”. A esto se añade otra idea tan razonable, que para empezar con una nueva tarea alguna otra tarea previa debe haber finalizado. La idea es centrarse en cerrar tareas y no en comenzar tareas. Por ello limitar el WIP impide empezar actividades hasta que se han cerrado aquellas en las que se está ya trabajando. El tiempo que se tarda en terminar cada tarea se debe medir, a ese tiempo se le llama “lead time”. El “lead time” cuenta desde que se hace una petición hasta que se hace la entrega de ésta. Aunque la métrica más conocida del Kanban es el “lead time”, normalmente se suele utilizar también otra métrica: el “cycle time”. El “cycle time” mide desde que el trabajo sobre una tarea comienza hasta que termina. Con el “lead time” se mide lo que ven los clientes, lo que esperan por su pedido y con el “cycle time” se mide el rendimiento del proceso. Practicas de Kanban Hay seis prácticas centrales que deben estar presentes para una implementación con éxito del sistema kanban. Visualizar el flujo de trabajo Haciendo uso de tarjetas de tareas y columnas que muestren el proceso completo así como la fase en que se encuentra cada tarea. Determinar el limite del trabajo Establecer el numero máximo de tareas por etapa asegura que una tarea pasara a la siguiente fase solo cuando hay capacidad disponible, lo cual ilumina las áreas problemáticas del flujo para así resolverlas. Gestionar el flujo Gestión del movimiento de elementos de trabajo a través del proceso de producción buscando un flujo rápido e ininterrumpido, creando valor y evitando costes por retraso. Hacer las políticas explícitas El proceso debe estar bien definido, publicado y promovido. Las personas no se asociarían ni participarían en algo que no creen que sea útil. Cuando todos estén familiarizados con el objetivo común, podrán trabajar y tomar decisiones con respecto a cambios que les moverán hacia una dirección positiva. Circuitos de retroalimentación Organizar reuniones regulares maximiza la transferencia de conocimiento. Reuniones de pie de 10 a 15 min. frente al tablero kanban y que cada miembro del equipo comparta con los demás las actividades que ha realizado y cuales realizará. También se recomiendan reuniones de revisión de entrega de servicios, operaciones y riesgos. Mejorar colaborando Generar equipos que tengan un entendimiento compartido de las teorías sobre el trabajo, el flujo de trabajo, el proceso y el riesgo, así tendrán más probabilidades de crear una comprensión compartida de un problema y sugerir acciones de mejora que pueden acordarse por consenso.