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Campus Cuernavaca

Alumna: Elsa Martha Guzmán Pineda

Materia: LP210 Anatomía y fisiología del sistema nervioso

Profesora: Sandra Guaglione Jiménez

Semana : 3

Tallo encefálico y nervios craneales.

16/Marzo /2020
Nervio abducens

Raíces del nervio


trigémino
Superficie anterior del
bulbo raquídeo

Pirámides
Raíz motora del
nervio facial

Nervio vestubulococlear

Oliva
Nervio hipogloso
Nervio accesorio

Decusación de las
Raíz espinal del nervio pirámides
accesorio

Conducto
epidimario
Funciones del Bulbo raquídeo o médula oblongada
El bulbo raquídeo cumple con funciones vitales para nuestra vida. Se encarga de la transmisión de impulsos de la
médula espinal al cerebro. Si es lesionado provoca la muerte inmediata por paro cardiaco o respiratorio.
 Se encarga de la secreción de los jugos digestivos.
 Controla la tos, vómitos, estornudos, puede ejercer control sobre la micción y la deglución y se encarga de
coordinar los músculos de la deglución para dar lugar al habla.
 Controla los centros respiratorios, puede controlar el sistema cardiovascular por aumento o disminución de
la frecuencia cardíaca, vasodilatación o vasoconstricción arterial.
 Activa la vía piramidal, que son las fibras nerviosas que se dirigen desde la corteza cerebral a las astas
anteriores de la medula espinal.
Controla el despertar, el equilibrio y los movimientos extraoculares. Miller, y Leavell (1990).
Daños en el bulbo raquídeo
Las enfermedades más habituales y graves que dañan contundentemente esta parte del encéfalo que nos ocupa
son las siguientes:
• La atrofia multisistémica. De tipo neurodegenerativo es esta que tiene una causa desconocida y que suele
producirse en adultos. Una atrofia del cerebelo es básicamente la principal consecuencia que tiene aquella.
• La esclerosis lateral amiotrófica. Una de las enfermedades más frecuentes en lo que respecta a la afección del
bulbo raquídeo es esta que se traduce en lo que sería una atrofia y posterior degeneración de lo que son las
fibras cortico-espinales.
• La esclerosis múltiple. Numerosos son, lamentablemente, los casos de personas con esta patología que no
tiene cura y que es habitual que aparezca en mujeres con edades comprendidas entre los 20 y los 40 años. La
principal consecuencia de la misma es la disminución notable de la movilidad, aunque puede degenerar incluso
en invalidez absoluta.
• La enfermedad de Behçet. Úlceras de diversa índole y también lesiones de clase nodular son las principales
manifestaciones de aquella.
• El cáncer del bulbo raquídeo. De esta grave patología habría que subrayar que presenta diversos tratamientos
tales como la cirugía o la quimioterapia. Problemas de visión o audición, vómitos, debilidad o incluso
aletargamiento son algunos de los síntomas que presenta.
Cabe destacar que los daños en el bulbo raquídeo son fatales, causando la muerte inmediata por paro
respiratorio o paro cardíaco. Porto y Merino (2014)
Protuberancia o puente de Varolio

Olfatorio (I)
Óptico (II)

Oculomotor (III)

Trigémino (V)
Troclear (IV)

Abducens (VI)
Facial (VII)
Vestibulococlear (VIII)
Glosofaríngeo (IX)
Hipogloso (XII)
Vago (X)

Accesorio (XI)
Protuberancia o puente de Varolio
Está situado delante del cerebelo, entre el mesencefálo y la médula oblongada. Está formado por el
entrecruzamiento de la fibras nerviosas blancas , longitudinales y transversales, entre las cuáles se hallan
pequeñas masas de sustancia gris. Las fibras transversales provienen de los pedúnculos medios del cerebelo y
sirven para unir sus dos hemisferios. Las fibras longitudinales unen a la médula oblongada con el cerebro. En el
puente también residen los núcleos de todas o de una parte de las fibras de los nervios craneales V, VI, VII, y VIII.
Función:
La protuberancia es un puente de unión entre los dos hemisferios del cerebelo y entre la médula oblongada y el
cerebro medio. El quinto par (nervio trigémino) emerge por la cara lateral de la protuberancia, cerca del borde
superior. Los pares sexto (nervio abducens), séptimo (nervio facial) y octavo (nervio vestibulococlear) emergen del
surco superior que separa, por delante, el puente de la médula oblongada (Existe un centro neurotóxico en el
puente que participa en el control de la respiración) Miller y Leavell (1990).
Daños en la protuberancia o puente de Varolio.
Síndrome de Millard-Gübler
El síndrome es descrito como una hemiplejía alterna protuberancial. Esta lesión a nivel del pie del puente afecta la
vía piramidal antes de cruzarse y los núcleos del VII par y a veces el núcleo del VI par (nervio abducente) que se
encuentra rodeado por las fibras del VII par (nervio facial) en su origen. Está caracterizado por: una hemiplejía que
afecta solamente el brazo y la pierna del lado opuesto a la lesión. Parálisis facial de tipo periférico del lado de la
lesión. Corresponde a una lesión en la parte anterior de la protuberancia, que interesa el haz piramidal antes de la
decusación, pero habiéndosele desprendido ya el fascículo geniculado que incluye las fibras relativas al núcleo del
VII par. Tejada y Yamal (2018).
Síndrome de Foville inferior
También conocido como "Foville protuberancial". Está caracterizado por la posible presencia del Síndrome de
Millard-Gübler según se ha descrito, parálisis de la mirada conjugada (el enfermo mira hacia el lado opuesto de la
lesión). En este caso, la lesión, además de afectar las fibras piramidales y las del nervio facial, interesa el fascículo
longitudinal medio (ya cruzado), por lo que la desviación de la mirada se hace en sentido opuesto a la de las
lesiones pedunculares. Berkow y Fletcher (1990).
Cerebro
Mesencéfalo

Diencéfalo
Tronco encefálico

Mesencéfalo
Puente de Varolio

Bulbo raquídeo Cerebelo

Médula espinal
Mesencéfalo (cerebro medio)
El mesencéfalo es una de las partes del tronco del encéfalo, está atravesado por un estrecho canal
llamado acueducto de Silvio, por el que fluye el líquido cefalorraquídeo, las dos estructuras
fundamentales que forman el mesencéfalo son el téctum y el tegmentum.
Conecta al cerebro anterior con el cerebro posterior:
a. Porción ventral . Lo constituyen los pedúnculos cerebrales, que están formados por un conjunto de
fibras que se extienden por el borde del puente (de Varolio) hasta el tracto óptico, donde
desaparecen al introducirse en el cerebro anterior.
b. Porción dorsal: Formada por los colículos superiores e inferiores (tubérculos cuadrigéminos
superiores e inferiores).Miller y Leavel (1990)
Funciones del mesencéfalo:
Las principales funciones del mesencéfalo son regular el movimiento y la estabilidad del cuerpo gracias a
un conducto interno por el que pasa el líquido cefalorraquídeo, así como el proceso visual y auditivo.
también incluyen:
Control de las respuestas visuales
Movimiento ocular
Dilatación de las pupilas
Regular el movimiento muscular
Audición.
Patologías del mesencéfalo
La neurodegeneración de las células nerviosas de la sustancia negra provocan una caída de la
producción de dopamina, y la pérdida significativa en los niveles de dopamina (60-80%) dan lugar a la
enfermedad de Parkinson, un trastorno del sistema nervioso que produce la pérdida del control y
coordinación motora. Los síntomas incluyen temblores, lentitud de movimientos, rigidez muscular y
problemas de equilibrio. Existen otras patologías como : Síndrome de Weber, Síndrome de Benedikt,
Síndrome mesenfefálico dorsal, Síndrome del Top de la basilar. Collado (2018).
Vermis
Cerebelo Pedúnculos
cerebelosos
Nódulo

Floculo

Amígdala
cerebelosa

Túber

Úvula Lobulillo
Vista anterioinferior semilunar inferior
Pirámide

Fisura
primaria

Vermis

Vista superior
El cerebelo.
El cerebelo (del latín cerebellum o “pequeño cerebro”) forma parte del SNC de todos los vertebrados y está constuido
por una gran cantidad de neuronas (cerca de 100 mil millones en el humano), que supera el total de la corteza
cerebral. Se encuentra alojado en la fosa posterior del cráneo, situado en la línea media de la región dorsal del tallo
cerebral y por encima del techo del cuarto ventrículo. Consta de una región central llamada vermis (significa gusano
en latín y es la forma que asemeja), dos hemisferios cerebelosos, uno a cada lado del vermis, y dos pequeños flóculos
colocados de forma bilateral. Dos profundas fisuras transversales dividen al cerebelo en tres regiones principales. La
fisura primaria separa a la región anterior (lóbulos I al V) de la región posterior (lóbulos VI al IX). La fisura
posterolateral separa la región posterior del lóbulo floculonodular; este último constituido por los flóculos y el lóbulo
X6.Collado (2018)

Funciones:
El cerebelo recibe información de los sistemas sensoriales, la médula espinal y otras partes del cerebro y luego regula
los movimientos motores. El cerebelo coordina los movimientos voluntarios como la postura, el equilibrio, la
coordinación y el habla, lo que resulta en una actividad muscular suave y equilibrada. También es importante para
realizar comportamientos motores. García (2009).

Daños en el cerebelo:
El cerebelo es el área del cerebro que controla la coordinación y el equilibrio. Los problemas con el cerebelo incluyen:
 Cáncer
 Enfermedades genéticas
 Ataxias: Falta de control muscular en los brazos y piernas que resultan en trastornos del movimiento
 Degeneración: Problemas causados por células del cerebro que disminuyen en tamaño o se consumen.
El tratamiento de los problemas en el cerebelo depende de la causa. En algunos casos no existe una cura, pero el
tratamiento puede ayudar con los síntomas.
Pares craneales Oftálmico Maxilar

VI Abducens Mandibular
III Oculomotor
II Óptico IV Troclear V Trigémino

I Olfatorio

Fibras aferentes
(sensoriales)
Fibras eferentes
(motoras)
VII Facial

XII Hipogloso Vestibular


Coclear
XI Accesorio

X Vago VIII Vesibulococlear

IX Glosofaríngeo
Pares craneales
Los nervios craneales forman doce pares, nacen del encéfalo y para distribuirse salen por los agujeros de la base
del cráneo. Se clasifican en nervios motores, sensoriales y mixtos.
El origen de los nervios craneales se compara con el de los espinales. Las fibras motoras de los nervios espinales
tienen su origen en los cuerpos celulares de las astas anteriores de la médula espinal, y las fibras sensitivas en los
cuerpos celulares de los ganglios de las raíces posteriores.
Los nervios craneales nacen del encéfalo, su origen real está en el núcleo de sustancia gris central llamado núcleo
de origen (para los nervios motores) al que van a parar las fibras constitutivas del nervio. Cuando se trata de un
nervio sensitivo se llama núcleo de terminación. Las células nerviosas forman ganglios que se sitúan en el trayecto
de cada nervio. En algunos órganos de los sentidos, como la nariz y el ojo, también se localizan verdaderas células
nerviosas. Las prolongaciones centrales de los nervios sensoriales se dirigen al cerebro y terminan por medio de
arborizaciones alrededor de las células nerviosas que forman sus núcleos de terminación. Los núcleos de origen de
los nervios motores y los núcleos de terminación de los nervios sensitivos están conectados con la corteza
cerebral.
Función:
se podría decir, de forma general, que los pares craneales o nervios craneales constituyen la parte del Sistema
Nervioso Periférico que relaciona el encéfalo con las estructuras craneales y cervicales, en sentido aferente,
sensitivo y sensorial y también, eferente, motora y vegetativa. Y el resto de estímulos nerviosos aferentes y
eferentes del Sistema Nervioso Central (SNC) con el resto del cuerpo se lleva a cabo a través de los nervios
raquídeos y cada uno tiene un a función específica.
 Función sensitiva: formada por los nervios craneales I, II y VIII.
 Asociados con la movilidad ocular y los párpados: pares craneales III, IV y VI.
 Relación con la activación de los músculos de partes de cuello y lengua: nervios craneales XI y XII.
 Considerados con función mixta: pares craneales V, VII, IX y X.
 Como fibras de función parasimpática: III, VII, IX y X.
Daños en los pares craneales
La afectación central puede deberse a múltiples causas y habitualmente asocia lesión de otros NC y de vías
largas. En las lesiones periféricas predominan como agentes causales la compresión extrínseca, traumatismos o
microisquemia y asocian afectación de otros NC en puntos donde comparten un trayecto común. La lesión de
los NC oculomotores produce oftalmoparesia, diplopía, ptosis y alteraciones pupilares. Hay alteración sensitiva
facial y orofaríngea y paresia masticatoria en la lesión del V NC. El VII NC al afectarse produce parálisis de la
musculatura mímica facial, en ocasiones asociada a xeroftalmia, hiperacusia o disgeusia. Hipoacusia, tinnitus y
vértigo son consecuencia de la lesión de VIII NC. La afectación de IX NC causa disfagia, y la de X NC asocia
además disfonía y alteraciones vegetativas cardiorrespiratorias. La parálisis de trapecio y
esternocleidomastoideo se deben a lesión de XI NC y la de la musculatura lingual a la de XII NC. Maj (2015)
Conclusión:
Los pares craneales son muy importantes porque son los nervios que ayudaran a cumplir las funciones como
sensitivas y motoras de la parte del cuello y cabeza de nuestro cuerpo es decir serán indispensables al momento
de sentir o reacciona ante un estimulo y a su vez los que tengan sus fibras motoras serán las que den
movimiento la falla de uno de estos puede ocasionar enfermedades y lesiones.
De Guzmán Pineda Elsa Martha.
Referencias:

 Berkow, R. y Fletcher, A. (1990). El manual Merk. (8a ed.). CDMX, México: Ediciones Doyma.
 Collado, S. (2018). "El mesencéfalo o cerebro medio, estructura y función" [Mensaje en un blog].
Recuperado el 15 de marzo de 2020 de https://www.psicoactiva.com/blog/mesencefalo-cerebro-medio-
estructura-funcion/
 Calleja, T. (10 de abril de 2017). "Pares craneales: qué son y qué funciones cumplen en el cerebro"
[Mensaje en un blog]. Recuperado el 16 de marzo de 2020 de https://blog.cognifit.com/es/pares-
craneales-12-nervios-craneales/
 García, R. (2009). El cerebelo y sus funciones. Instituto de neurología, Universidad Veracruzana, 19, (1). 25-
30. Recuperado el 15 de marzo de 2020 de
https://www.uv.mx/rm/num_anteriores/revmedica_vol9_num1/articulos/el_cerebelo.pdf. doi: en
revisión.
 Maj, P. (19 de septiembre de 2015). Origen de los pares craneales. CDMX, México Blogger.com.
Recuperado el 16 de marzo de 2020http://paolaaldazitsr.blogspot.com/
 Miller, M. y Leavell, L. (1990). El encéfalo y nervios craneales. En M. Miller y L. Leavell (Ed), Manual de
anatomía y fisiología. (pp. 261-290). CDMX, México: La prensa mexicana, s.a..
 Porto, J. y Merino, M. (2014). Definición de bulbo raquídeo. CDMX, México Definición. de. Recuperado el
14 de marzo de 2020 de https://definicion.de/bulbo-raquideo/
 Tejada, K. y Yamal, S. (2018). Síndrome de Millard-Gubler secundario a angioma cavernoso: reporte de un
caso. Asociación Colombiana de Neurología. Acta Neurológica Colombiana, 34, (1). 64-69. Recuperado el
15 de marzo de 2020 de http://www.scielo.org.co/pdf/anco/v34n1/0120-8748-anco-34-01-00064.pdf. doi:
10.22379/24224022181.

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