comportamientos amorosos coincidente con los valores de la nobleza. Se manifiesta en la lírica de los trovadores provenzales desde finales del siglo XI al siglo XIII. Luego se difunde por el resto de Europa. Su vigencia traspasa la época medieval y abre camino a la idealización neoplatónica renacentista. Elementos comunes a la tradición del amor cortés Exaltación del sentimiento amoroso como signo de calidad espiritual superior. Idealización de la mujer amada como compendio de excelencias físicas y morales. El amante se reconoce inferior a la dama y dispuesto a venerarla y servirla. Se experimenta el amor como destino inescapable, fuente de la mayor felicidad y el mayor tormento. Elementos comunes a la tradición del amor cortés El deseo amoroso se ve generalmente frustrado; vive y pervive del obstáculo a su realización completa. El amor “verdadero” es valorado por encima de los vínculos sociales y religiosos (como el matrimonio). Se utilizan imágenes y expresiones propias de la esfera religiosa. El trato amoroso exige virtudes propias de la “cortesía”: fidelidad, mesura, ánimo valeroso, discreción, modales exquisitos.