REALISMO

Fue un movimiento artístico cuyo propósito fundamental consistió en la representación

objetiva de la realidad, basándose en la observación de los aspectos cotidianos de la
vida. Esa exigencia de contemporaneidad, ajena a evocaciones o fantasías de corte
romántico, posibilitaron a los artistas realistas un amplio campo de representación, tanto
en la temática como en su intencionalidad. Su apogeo puede situarse a partir de 1840
aunque se prolonga hasta el primer cuarto del siglo XX, conviviendo con el naturalismo.

La aparición y desarrollo del Realismo fue fruto de la agitada situación política que
protagonizó Francia a raíz del derrocamiento de su último rey, Luis Felipe, y de la
proclamación de la Segunda República en 1848. En esta época surgen los movimientos
obreros y proletarios que, avalados por las teorías de Marx y Engels, se inspiran en
nuevos sentimientos sociales y en nuevas ideas políticas, cuya influencia también se
dejaría sentir en el mundo artístico. El Realismo comenzaría, efectivamente, como un
movimiento del proletariado artístico. La representación del pueblo sin idealismos, es
decir, tal como era objetivamente, encerraba un cierto mensaje sociopolítico.
Rodolfo Usigli lo describe así:

Agente subordinado de la realidad aparente, que todo teatro

persigue para satisfacer el anhelo de reflejar una realidad propia
de cada lugar.
El realismo es peligroso porque tan pronto los grandes poetas
desaparecen, él remplaza hábilmente la magia, que ha sido
siempre el fondo del teatro.
Francia:
Surge la “pieza bien hecha” que es atribuida a Eugene Scribe, y cuyas
características son:

• Tiene una exposición donde se presenta la situación y se introduce a los

personajes
• Consta de un ‘razonador’ (raissoneur) que es la voz del autor
reflexionando sobre el tema en escena
• La acción se desarrolla progresivamente y el dramaturgo capta la
atención mediante cambios inesperados, ascenso continuo de la acción
hasta un punto culminante en cada escena.
• El protagonista experimenta golpes de buena y mala fortuna creando un
ritmo emocional
• Consta de una scene a faire (obligatoria) que por lo regular depende de la
revelación de secretos conocidos solamente por los espectadores y
algunos personajes
• La trama se anuda por malentendidos
• La resolución o desenlace es clara y lógica. No quedan dudas sobre la
resolución del problema
En Francia los principales exponentes del teatro son:
Emilie Augier y Alejandro Dumas (hijo)