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LUMBALGIA
LUMBALGIA
lumbalgia
“Me duele la parte de abajo de la
espalda, debo tener lumbago. Me
duele la nalga, me han dicho que
es una ciática”
• Dependiendo de lo que “se lleva” en cada
época, el dolor lumbar se ha atribuido a
– Los discos intervertebrales
– La musculatura espinal
– Las articulaciones facetarias
– Los ligamentos periespinales
– La articulación sacroilíaca
– Somatizaciones
• En general, salvo en contadas excepciones,
pocas veces sabemos con certeza a qué
atribuir un episodio de dolor lumbar
• El Task Force on Pain in the Workplace, distingue
entre lumbalgias específicas (causas reconocidas de
dolor lumbar con EF positiva y exploraciones
complementarias congruentes con la clínica) e
inespecíficas, (exploración física negativa y pruebas
complementarias negativas o incongruentes con la
clínica)
• Fenollosa y cols., proponen incluir dentro de un tercer
grupo a aquellos síndromes con una exploración física
positiva pero con exámenes complementarios
negativos o incongruentes con la clínica, que se
podrían descartar con las pruebas adecuadas. Estos
son: síndrome facetario, disfunción sacroilíaca,
síndromes miofasciales, y síndrome iliolumbar
• Es importante descartar estos
síndromes antes de clasificar al
paciente en el grupo de lumbalgia
inespecífica, ya que mientras los
primeros se pueden beneficiar de
algunas intervenciones terapéuticas,
el T F P W aconseja para la segunda
un abordaje biopsicosocial y poco
medicalizado
• Prevalencia: En países industrializados, se
calcula que hasta el 50% de los adultos van a
padecer un episodio de dolor lumbar al año.
Entre el 15-20% van buscar tratamiento
médico.
• Es la primera causa de incapacidades en el
mundo occidental, entre sujetos de menos de
45 años
• El 70% van a mejorar en 2 semanas
• El 90% van a mejorar en un plazo de 6
semanas
• El 3% no van a mejorar en un plazo de 6-12
semanas, y el 50% de los costes generados
por las lumbalgias se deben a este subgrupo
ENFERMEDADES
MECANICODEGENERATIVAS CAUSANTES DE
DOLOR LUMBAR
• Contractura lumbar
• Anomalías congénitas
• Espondilolisis / espondilolistesis
• Espondiloartrosis:
– Estenosis de canal
– Síndrome facetario
• Síndromes discogénicos
– Síndrome de rotura del anillo fibroso o protrusión
– Hernia del núcleo pulposo
• Hiperostosis anquilosante vertebral
• Síndrome de dolor miofascial
– Síndrome piramidal
– Síndrome del psoas ilíaco
• Disfunción sacroilíaca
• Síndrome iliolumbar
• Al menos el 30% de la población sana
asintomática tiene protrusiones discales de
tamaño significativo (Stadnik et al., 1998).
(Gallagher, 2002)
Causas MECÁNICAS de Dolor
Lumbar
• Articulaciones Facetarias
• Discos
• Musculatura Paraespinal
• Inestabilidad
• Ligamentos
• Articulación Sacroiliaca
• Espondilolisis / Espondilolistesis
• Estenosis de Canal
Articulaciones Facetarias
• La degeneración de las articulaciones
interapofisarias como causa del dolor lumbar se
postuló por primera vez en 1933
• Es una teoría que sigue siendo controvertida
• Se ha sugerido que justificaría hasta el 15-20%
de los casos de dolor lumbar
• Se han identificado fibras nerviosas nociceptivas
en la cápsula articular, membrana sinovial y
tejidos pericapsulares de las articulaciones
facetarias
(Hanley et al,1999)
¿Un disco herniado?
• Las dos causas más comunes de dolor de
origen discal son las roturas del anillo
fibroso y las herniaciones de contenido
discal
• Los discos herniados provocan compresión
de estructuras con sensibilidad dolorosa,
tales como el 1/3 externo del anillo
fibroso, el LLP, la dura anterior, la raíz
nerviosa y el nervio sinuvertebral
(Hides, 1998)
Espondilolisis / Espondilolistesis
• La espondilolisis se refiere a un defecto/fractura
en la pars interarticularis del arco posterior
• La espondilolistesis se refiere al desplazamiento
anterior de una vértebra sobre otra (con o sin
fractura acompañante)
• Se desconoce qué tejido en concreto origina el
dolor
• Hay muchas estructuras que se ven sometidas a
un stress aumentado, incluyendo discos,
articulaciones facetarias, y ligamentos
• La propia fractura o el defecto pueden ser los que
originen el dolor
(Swenson, 1998)
La Articulación Sacroilíaca
• Su papel como causa de dolor lumbar es
controvertido
• Continúa existiendo debate sobre la
amplitud de movimiento, los ejes de dicho
movimiento y su vulnerabilidad frente a la
disfunción
• Algunos autores (escuelas) creen y
justifican que la inestabilidad de la
estructura pelviana puede provocar dolor
lumbar
• La inestabilidad se refiere a la pérdida de la
integridad funcional de un sistema que
proporciona estabilidad
• En la cintura pelviana, hay dos sistemas que
contribuyen a la estabilidad, el
osteoligamentoarticular y el miofascial
• A estos dos sistemas se los ha denominado
como sistemas de “cierre de forma” y de “cierre
de fuerza”
• En conjunto, proporcionan un mecanismo
autoestable
(Vleeming, 1990;1995)
• Goldwaith y Osgood fueron los primeros en
proponer que una lesión de la SI pudiera ser
una causa de dolor lumbar, en 1905
• Se han hecho diferentes estudios para intentar
establecer su prevalencia en pacientes con
lumbalgia:
– Schwarzer (1995) consideró que el dolor de origen SI
es al menos del 13% y quizá hasta del 30% en
pacientes con dolor lumbar y de nalga
– In 1987, Bernard y Kirkaldy-Willis publicaron una
prevalencia del 22.5% en un grupo de 1293 pacientes
con lumbalgia
• La estabilidad de la articulación SI viene dada por
la presencia de irregularidades y de potentes
ligamentos. Las estructuras ligamentosas ofrecen
resistencia ante las cargas de cizallamiento.
• Los ligamentos profundo anterior, posterior e
interóseo resisten las cargas sobre el sacro en
relación con el ilíaco. Los ligamentos más
superficiales (como el sacrotuberositario)
controlan gestos dinámicos (como la elevación del
MI en extensión durante el movimiento)
• El ligamento SI dorsal largo puede distenderse en
periodos de reducción de la lordosis lumbar, como
durante el embarazo
• Hay muchos músculos que tienen relación con los
ligamentos y la SI: piriformis, biceps femoral, gluteos
mayor y menor, erectores espinales, dorsal ancho,
fascia toracolumbar, e ilíaco. Cualquiera de ellos
puede verse afectado si hay un cuadro de irritación SI.
• Al tratarse de una articulación diartrodial normal, la SI
tiene una inervación muy rica, a través de
terminaciones nerviosas libres y de los ramos
primarios posteriores de L2 – S3. La amplia inervación
puede explicar porqué el dolor que se origine el la SI
puede manifestarse de maneras tan diferentes, con
patrones de dolor referido diferentes en cada caso
• Aunque parece que el papel principal del al
articulación SI es el de proporcionar estabilidad,
su pequeña movilidad le permite disipar y
transferir cargas y esfuerzos importantes
• Como la amplitud de movimiento es muy pequeña,
valorarla por medio de la EF es muy difícil
• Si la pelvis se mueve de manera asimétrica, se
puede producir la disfunción de la SI. Algunos
procesos que causan una diferencia de longitud en
los MMII pueden ser las dismetrías reales, una
debilidad asimétrica en un MI, tensión asimétrica
en estructuras miofasciales (como el psoas ilíaco),
las escoliosis, o la artrosis de cadera
Diagnóstico de la disfunción SI
• El elemento clave en el diagnóstico de la disfunción SI
es el dolor. Se ha descrito como dolor en uno o ambos
glúteos o cercano a la EIPS, o bien irradiando hacia la
cara posterior del muslo o incluso la pantorrilla
• Se ha relacionado con procesos como el síndrome
piramidal, síndrome de cintilla iliotibial, el dolor de cara
anterior de rodilla, los síndromes compartimentales
crónicos de peroneos o las fascitis plantares, por la
afectación en cadena de estructuras ligadas a los
elementos que estabilizan a la articulación SI
• Los pacientes con frecuencia describen que el dolor
empeora al sentarse periodos prolongados o al realizar
movimientos de giro o rotación del cuerpo
piriformis
Nervio ciático
• La inspección revela frecuentemente una
asimetría en la altura de la pelvis, lo que
puede indicar una restricción en la
movilidad de una SI
• El examen de la flexión del tronco con el
paciente de pie busca comparar la simetría
del movimiento entre las dos EIPS y la
espinosa de S2 (test de Gillet). Sin
embargo, no está clara la reproductibilidad
interobservador de este test
Freburger y Riddle (2001)
• La palpación suele ser el indicador más
fiable de la afectación de la SI. El paciente
muchas veces señala a punta de dedo el
hoyuelo de la SI, e incluso se puede
reproducir el dolor por la palpación directa
(signo de la presión de Fortin)
• Lógicamente, la exploración neurológica
debe ser normal, aunque en ocasiones
puede aparecer una debilidad asimétrica
por inhibición muscular por dolor o por el
desequilibrio muscular que se haya
desarrollado a lo largo de los episodios
repetidos de dolor e inactividad
• La distracción de los ligamentos anteriores de la SI
se realiza aplicando presión sobre las EIAS. La
prueba de compresión se realiza aplicando presión
sobre la cresta ilíaca superior con el paciente en
decúbito lateral. En el test de Gaenslen se busca
realizar una torsión de la articulación (flexión de una
cadera sobre el abdomen, permitiendo que el otro
muslo caiga por el borde de la mesa y aplicando
presión sobre él hacia abajo para lograr una
extensión de la cadera y forzar el movimiento de la
SI). Para el test de FABER (Flexión, ABducción y
Rotación Externa) o de Patrick, se rota
externamente la cadera mientras el paciente está en
DS, aplicando presión hacia abajo sobre la rodilla. En
todas las pruebas, la aparición de dolor en el área
típica (o reproduciendo los síntomas del paciente)
resulta positiva para sospechas el origen del dolor
sobre la SI
• Desgraciadamente, estas pruebas no son
siempre positivas o ni siquiera testan lo
que pensamos que hacen: un estudio de 12
tests utilizados para diagnosticar dolor SI
por medio de una infiltración guiada por
intensificador de imágenes en la SI no
logró encontrar ni una sola prueba con alta
sensibilidad o especificidad para el
diagnóstico del dolor SI
(Dreyfuss, 1996)
• Lógicamente, en un paciente joven con dolor SI,
se debe excluir una sacroileitis de origen
inflamatorio (Espondilitis anquilosante, artritis
psoriásica, etc), por medio de las pruebas de
laboratorio (VSG, PCR, AANA, HLA-B27, FR, etc) o
valoración reumatológica
• El uso de pruebas de imagen para diagnosticar las
disfunciones SI está controvertido, por la falta de evidencia
de que los estudios normales o “anormales” puedan servir
para diferenciar entre pacientes sintomáticos y
asintomáticos, debido a la gran variabilidad anatómica de la
articulación entre pacientes
• La gammagrafía puede servir para descartar fracturas de
stress o lesiones metastásicas, además de procesos
inflamatorios, pero tiene una sensibilidad muy baja para
detectar causas de dolor mecánico de la SI. Sin embargo, su
especificidad comparada con la inyección anestésica de
articulaciones dolorosas es muy alta, pero no parece útil en
el esquema diagnóstico habitual de una sospecha de
disfunción SI