El problema es que no representa las necesidades de
todo el sector, si no el de unos pocos, de ahí que se busque, erradamente, otro sujeto que sí apoye a ese sector poblaclional, y deje de apoyar al otro. La solución parte de la semántica, aclarando lo que ese Sujeto Soberano representa.
La representación se entiende bajo dos significados:
El hablar a favor de y la representación propiamente dicha. Hablar a favor de, significa a la acción, no solo discursiva, o práctica teórica, si no también el ayudar mediante la acción práctica a distintos sectores
La representación propiamente dicha es la figura de
un representante o dirigente que en su unidad engloba la colectividad de un sector
Así, el sujeto soberano es el que habla en
favor de un sector y representa en su unidad las necesidades de un sector Pero como este sujeto soberano representa solo un sector y con ello, a su vez, se encuentra por encima de los representados, se da la figura del otro mediante el sujeto colonial
Donde mediante una explicación histórica se dirimirá
el cómo se puede dar un sujeto soberano que represente, en ambos significados, a toda la población, en vez de eliminar uno para implantar otro Sujeto soberano particular