de la idea de no estar ya bajo la ley (“Pero si sois Andar en el Espíritu. guiados por el Espíritu, no Gálatas 5:16, 18. estáis bajo la ley” El conflicto del cristiano. Gálatas 5:18). Gálatas 5:17. ¿Cómo debe vivir el Las obras de la carne. cristiano, liberado del yugo Gálatas 5:19-21. de la ley? Pablo plantea El fruto del Espíritu. dos caminos, dos maneras Gálatas 5:22-23. de vivir: seguir las obras de la carne, o manifestar el Vivir por el Espíritu. fruto del Espíritu. Gálatas 5:24-26. “Digo, pues: Andad en el Espíritu, y no satisfagáis los deseos de la carne. […] Pero si sois guiados por el Espíritu, no estáis bajo la ley” (Gálatas 5:16, 18) ¿Qué quiere decir la Biblia cuando nos habla de “andar” en los caminos de Dios (Deuteronomio, 13: 4-5; Romanos, 13: 13; Colosenses, 1: 10)? Temer a Dios Guardar sus mandamientos Escuchar su voz Servirle Seguirle Agradarle en todo Llevar fruto de buenas obras Crecer en el conocimiento de Dios Comportarse honestamente
La voluntad de Dios está claramente indicada en la Biblia, para que “andemos” en
ella. Esto incluye, por supuesto, acatar los Diez Mandamientos y otras normas que nos ayudan a vivir como Dios desea que lo hagamos. Sin embargo, acatar estos mandamientos como un medio de salvación es apartarnos del Camino, andar sin tener en cuenta lo que Dios ha hecho por mí. “Porque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el del Espíritu es contra la carne; y éstos se oponen entre sí, para que no hagáis lo que quisiereis” (Gálatas 5:17)
El “deseo de la carne” es el deseo de pecar, de
satisfacer nuestra naturaleza egoísta. Ésta es la naturaleza de todo ser humano (Romanos 8:7). Al aceptar el sacrificio de Jesús, el creyente adquiere una nueva naturaleza —espiritual— que entra en conflicto con la “carnal” (Romanos 7:14-25). Aislarnos del mundo, o esperar que Dios anule milagrosamente toda tendencia carnal no soluciona el problema. Solo en la Segunda Venida, seremos librados de este conflicto. Cada día debemos tomar la decisión de ponernos del lado del Espíritu, aferrándonos de su mano poderosa. 1) Adulterio 20) Perjurio 38) Desobediencia a los 2) Fornicación 21) Mentira padres 3) Inmundicia 22) Malos 39) Ingratitud 4) Lascivia pensamientos 40) Impiedad 5) Idolatría 23) Avaricia 41) Desafecto 6) Hechicería 24) Maldades 42) Implacabilidad 7) Enemistades 25) Maledicencias 43) Calumnia 8) Pleitos 26) Soberbia 44) Intemperancia 9) Celos 27) Insensatez 45) Crueldad 10) Iras 28) Engaño 46) Aborrecimiento de 11) Contiendas 29) Concupiscencia lo bueno 12) Disensiones 30) Embriaguez 47) Traición 13) Herejías 31) Orgías 48) Impetuosidad 14) Envidias 32) Disipación 49) Infatuación 15) Homicidios 33) Cobardía 50) Amar los deleites 16) Borracheras 34) Incredulidad 17) Orgías 35) Abominaciones Gálatas 5:19-24; Jeremías 7:9; 18) Vanagloria 36) Egoísmo Oseas 4:2; Marcos 7:21-22; 19) Hurto 37) Blasfemia 1ª de Timoteo 3:2-4; 1ª de Pedro 4:3; Apocalipsis 21:8 “Y manifiestas son las obras de la carne… Mas el fruto del Espíritu…” (Gálatas 5:19, 22) Pablo contrasta el resultado de vivir conforme a la carne con el de vivir conforme al Espíritu. Estas listas tienen dos diferencias significativas: La carne demanda, pide, nos La primera obliga a pecar son “obras”, la segunda El Espíritu produce en nosotros “fruto” una conducta santa
“Obras” está La naturaleza pecaminosa produce
en plural, división, confusión y desunión “fruto” en La naturaleza espiritual singular fomenta la unidad
El pecado quiebra las relaciones humanas
y produce dolor. El Espíritu restaura las relaciones y produce vida eterna. En cuatro listas, Pablo nos da 19 virtudes cristianas: Gálatas 5:22-23 1 Timoteo 4:12 1 Timoteo 6:11 2 Timoteo 2:22 Amor Palabra Justicia Justicia Gozo Conducta Piedad Fe Paz Amor Fe Amor Paciencia Espíritu Amor Paz Benignidad Fe Paciencia Bondad Pureza Mansedumbre Fe Las únicas virtudes coincidentes Mansedumbre en todas las listas son la fe y el amor, “pero el mayor de ellos es Templanza el amor. (1ª de Corintios 13:13). “Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley” (Gálatas 5:22-23)
El amor encabeza el fruto del
Espíritu y de él emanan todas las demás virtudes. Es precisamente el amor la virtud que resume el cumplimiento de los Diez Mandamientos (Mateo 22:35-40). El amor es contrario a la naturaleza pecaminosa del hombre. Es por ello que el amor es el distintivo principal del creyente. El amor que emana de Dios fluye en nosotros, y emana desde nosotros hacia Dios y hacia nuestro prójimo. “Si vivimos por el Espíritu, andemos también por el En Gálatas 5:16-26, Pablo usa cinco verbos para Espíritu” (Gálatas 5:25) describir el tipo de vida en el que reina el Espíritu. Andar [peripateō] (v. 16). • Debemos seguir cada día a Jesús, convivir con Él.
Ser guiados (v. 18).
• Debemos permitir que el Espíritu nos indique dónde debemos ir y qué debemos hacer. Crucificar (v. 24). • Debemos dar muerte a nuestra naturaleza carnal, alimentando nuestra naturaleza espiritual. Vivir (v. 25). • Debemos nacer de nuevo día a día.
Andar [stoicheō] (v. 25).
• Debemos “mantener el paso” al ritmo que marque el Espíritu, dejando que Él dirija nuestra vida. “El Espíritu Santo es nuestra suficiencia en la obra de edificar el carácter, de formarlo de acuerdo con la semejanza divina. Cometemos un grave error cuando pensamos que somos capaces de modelar nuestra propia vida. Nunca podemos por nosotros mismos vencer la tentación. Pero los que tienen una fe genuina en Cristo serán movidos por el Espíritu Santo. El alma en cuyo corazón habita la fe, crecerá constituyendo un bello templo para el Señor. Será dirigida por la gracia de Cristo. Crecerá en la misma proporción en que dependa de las enseñanzas del Espíritu Santo” E.G.W. (A fin de conocerle, 20 de febrero)