Óscar Herrero es perseguido por la policía y además no puede salir a la calle ni usar algún aparato electrónico.

Un día un conocido del

colegio, Mario muere en un accidente mientras iba en una moto y, dos días después, recibe un paquete de Mario. En este paquete hay un
pendrive y una carta en la que Mario le pide a Óscar que guarde el pendrive y que en los próximos días iría a recogerlo, si le sucediese algo a
Mario, Óscar tendría que entregárselo a Ernesto Figuerola y si él no estaba, Óscar quedaría solo. Mario continúa diciendo que en el pendrive
estaban los archivos “Camaleón” y “Miyazaki”, para abrir el pendrive tendría que formatear el disco duro del ordenador y no conectarse a la
red. Mario decidió investigar sobre Miyazaki y no llamar a la policía. Al día siguiente se fue a la Facultad de Informática para buscar a Ernesto
Figuerola, pero solo descubrió que llevaba un mes sin aparecer en la facultad

Después de que el funcionario se negase a dar información, Óscar preguntó por Mario en el aula donde Figuerola daba sus clases. Tomas
Rodriguez, compañero de Mario, le contó que él tenía un amigo, Fran Melgar y una novia, Judit. Mario estaba preparando una tesis doctoral y
su tutor era Figuerola. Finalmente Tomas le dió el número de Figuerola y el suyo para que le dijese el número de Fran Melgar. Mario intentó
llamar a Figuerola pero el número no existía. Después, fue a buscar a Judit, con la que se fue a su casa para que esta leyese la carta, Judit le
contó que Mario estaba paranoico porque descubrió algo relacionado con internet. Cuando Judit se fue, Óscar buscó en internet sobre
Figuerola y Tesseract Systems, una fábrica de equipos informáticos. Esto hizo que los datos de sus búsquedas se cruzaran y que sus datos
personales fueran copiados y procesados.

Al día siguiente, el funcionario de la secretaría le dijo la dirección y el número de Figuerola a Judit. Con esta información, Judit y Óscar fueron
a la casa de Figuerola pero él no estaba y no contestaba al móvil. Después, se fueron a la Unidad de Atestados de Tráfico, donde tenían una
cita con José Hermida, el cual les iba a dar información sobre el accidente de Mario. Hermida les contó que, cuando ocurrió el accidente, la
cámara de vigilancia que había allí no funcionó en ese tiempo. Por suerte una cámara de un banco dejaba ver el momento del accidente y se
pudo ver como uno de los semáforos estuvo menos tiempo en rojo de lo normal lo que hizo que los dos semáforos estuviesen en verde a la
vez y que así se produjese el accidente. Hermida dijo que el semáforo no podía haber sido manipulado por alguien. A continuación Judit y
Óscar se retiraron del lugar.