Las estudiantes de grado quinto escucharon la lectura de diferentes cuentos de

Augusto Monterroso e hicieron sus propias creaciones:

El grillo maestro

Allá en tiempos muy remotos, un día de los más calurosos del verano, el Director
de la Escuela entró sorpresivamente al aula en que el Grillo daba a los Grillitos su
clase de práctica para su futura presentación aún no asegurada, precisamente en
el momento de la exposición el director descubrió que el Grillo era un gran
profesor, lo felicitó y le dijo que podía pesentar con sus grillitos en otra laguna
para que todo el mundo viera lo bien que enseñaba. Al escuchar aquello, el Grillo
muy contento con sus grillitos aceptó la propuesta y le preguntó al Director si
todos sus estudiantes podían presentar con él, el Director asintió varias veces con
la cabeza y se retiró, satisfecho de que en la Escuela siguiera ese magnífico Grillo
maestro que les enseñaba a los estudiantes el arte del cantar.