CÁNTICO 40

TESOROS INFINITOS DEL CORAZÓN DE JESÚS

1. Esta es la mayor maravilla, 8. ¡Maravilla! Humillado ante el Padre,

en mis versos le doy mi canción: le hallarás en amor noche y día
mira, atiende mi voz, elegido, alabando, adorando, implorando,
y cantemos al gran Corazón. por nosotros implora la vida.

2. Alzo el vuelo por sobre mí mismo 9. ¡Maravilla del todo inefable!,

y me asocio a los santos del cielo plenitud de la divinidad,
subo al trono del Rey de la gloria, Corazón adorable e infinito
más que el cielo y la tierra es excelso. en el seno de la Trinidad.

3. ¿Qué veo? Todo el cielo lo adora, 10. ¡Oh! ¡Qué llamas de amor a su Padre
todo el cielo contempla extasiado las que eleva constante en su amor!
maravillas que son inefables. ¡Qué amor siempre tan puro y ardiente
¡Ven, cristiano, a extasiarte a mi lado! muestra al hombre, su hermano menor!

4. Dime, ahora, ¡oh ángel del cielo!, 11. Corazón, horno ardiente y divino,
¿cuál es ese brasero inflamado? que realizas sublimes portentos;
¡Es el pecho del Hijo de Dios, en sus llamas ardientes se inflaman
es el pecho del Dios encarnado! en incendio de amor tierra y cielo.

5. Adoremos, mortal, con los ángeles 12. Desde que es Corazón, Él nos ama,
al divino e inmortal Corazón, sin dejarnos de amar un instante;
celebremos con cantos triunfales sí, nos ama al igual que a sí mismo,
a ese pecho transido de amor. en exceso infinito y constante.

6. ¡Oh prodigio y misterio de gloria, 13. Corazón de las almas sublimes,

que este mundo no puede entender! de las almas que Dios eligió,
¡Cuánto amor gustará quien se acerca, es la víctima santa que encierra
si le anima y conforta la fe! los secretos del Dios del perdón.

7. Corazón que al llegar hasta el Padre, 14. Corazón de las almas perfectas,
por nosotros alaba al Creador, predilectas del Padre y Señor,
y, exaltando su amor compasivo, las consume en incendio sublime
le celebra con digno loor. de divino e inefable fervor.
15. Esta sí que es la fuente admirable 24. Corazón que es un arca viviente
del Espíritu y todos sus dones; que contiene la ley y el secreto
éste sí que es tesoro sagrado de las almas que creen los mensajes
de Jesús, de sus gracias y favores. que contiene la fe en sus misterios.

16. Es la fuente feliz de la vida, 25. Corazón donde Cristo-Maestro

donde todos los santos bebieron, moldeó de su amor los secretos
y el incendio feliz que sus almas los pensó, proyectó y puso en marcha con
en transportes de amor encendieron. divino cariño y afecto

17. Corazón donde hallamos las armas 26. Corazón que forjó los oráculos
que nos llevan con Dios a triunfar, para luego venirlos a dar;
donde todo es fortísimo encanto Corazón que forjó sus milagros
y se vencen las fuerzas del mal. para luego venirlos a obrar.

18. Es el templo sagrado y perfecto 27. De esta fuente de espléndida lumbre

do se evita el pecado y el mal, los mejores amigos de Dios
donde el alma cubierta de manchas han sacado misterios profundos
logra todas sus culpas lavar. y los dones mejores de Dios.

19. Es ciudad de refugio segura, 28. Es tesoro de amor e inocencia,

que jamás puede ser expugnada; donde todos los santos se forman,
es el arca inmortal del diluvio donde encuentran la auténtica vida
que anegada jamás quedará. y sus grandes empresas se forjan.

20. Corazón lacerado que llega 29. Corazón que es asilo sagrado,
y desarma las iras de Dios; donde se halla la paz de verdad;
es su llaga la boca que implora Corazón paraíso terrestre
clama y triunfa logrando el perdón. do los hombres de Dios vivirán.

21. Corazón donde el Padre del cielo 30. Corazón donde encuentran reposo
nunca hiere al que peca, y le da, los más grandes amigos de Cristo;
superando su cólera, amable Corazón en el cual se disponen
su favor, su perdón y amistad. sin reservas por siempre a seguirlo.

22. Corazón que es la puerta sagrada 31. Corazón, el abismo más hondo
de la cámara santa de Dios de la más consumada humildad,
do las almas más puras se embriagan Corazón, trono excelso y sublime
con el vino feliz de su amor. del más grande y espléndido amor.

23. Corazón que embalsama y embriaga 32. Corazón, ¡oh milagro del mundo!,
con aromas y suaves olores donde todo el Señor escondió,
allí el alma se arroba e inflama todo el cielo, la tierra y el mar,
con la llama y el fuego mejores. y el Dios Santo, Uno y Trino Señor.
33. Corazón que yo adoro y celebro
mientras canto a la Madre y la alabo,
-admirable es su gran Corazón-;
¡tan estrecha es la unión de los dos!

34. A ti solo venero y adoro,

Corazón de mi Dios y Señor
y, adorándote, sirvo y venero
de mi Reina, María, el Corazón

35. Corazón de la Virgen María,

medio excelso de amar al Señor,
que en su pecho y virtud consumada
Jesucristo la vida asumió.

36. Corazón cuya sangre ha formado

al de Cristo inflamado de amor;
los dos laten con un solo pecho
y amor grande merecen los dos.

37. Sin reservas, arrójate, alma,

en los dos Corazones sagrados,
uno y otro a la vez comprometen
a entregarles el nuestro en pago.

38. Sube, alma, por el de la Madre

hasta el pecho eternal del Señor,
y perfecta te harás enseguida
al amarlo a cual más y mejor.

DIOS SÓLO.

San Luis María de Montfort