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Tema 9.

- La dictadura de Primo de Rivera (1923-1931)


1.- La quiebra de la monarquía parlamentaria.
2.- Desarrollo político y cambios económicos.
3.- El final de la Dictadura y de la Monarquía.

1.- EDUARDO DATO ASESINADO. 1921

Ante el atentado de que acaba de ser víctima el señor Dato, nuestro lenguaje y nuestra actitud no pueden variar en lo más
mínimo.
Lo doloroso es que tampoco varíen la actitud y el lenguaje de los periódicos órganos de las clases conservadoras, los cuales
atribuyen la muerte de don Eduardo Dato a lenidad de las autoridades en el empleo de procedimientos coercitivos y piden, claro
está, que se extreme (¡todavía más!) la política de la persecución y de la crueldad.
Afortunadamente, la prensa liberal da esta mañana una nota muy distinta. Y si en las clases gobernantes de nuestro país no se ha
perdido completamente el espíritu de justicia y hasta el instinto de conservación, será el espíritu liberal, de cordura, de
comprensión, de sensatez y de equidad el que predominará en definitiva sobre los deseos de violencia, de castigo, de provocación
y de venganza manifestados por los eternos enemigos de España y de la civilización.
Los políticos liberales que han gobernado o que aspiran a gobernar dentro del presente régimen tienen en los graves momentos
actuales una inmensa responsabilidad. Si carecen de la energía y de la audacia necesarias para aplicar sus principios, entablando
una batalla decisiva contra inquisidores y reaccionarios, serán los verdaderos culpables de que estalle en nuestro país una furiosa
guerra civil que acabe con todos y con todo.
No es posible (como sucede ahora con los gobiernos de España) que se siga predicando justicia y practicando la injusticia. No
puede tolerarse ni un minuto más que, en vez de "resolver" las cuestiones sociales, quieran "soslayarse o suprimirse por la
fuerza".
Conocemos ya sobradamente lo que hasta ahora ha producido la violencia y la intolerancia.
Hora es ya de que se inaugure un régimen de justicia y de libertad.
"El atentado de ayer", en El Socialista. Madrid, 9-III-1921

2.- LOS PROBLEMAS DEL SISTEMA

Ante esta fragmentación de fuerzas y problemas —social, regional, militar, marroquí— el régimen está desbordado. (...)
Los partidos están atomizados. El sistema de turno se sustituye no ya por «gobiernos de gestión», sino por «gobiernos de
concentración» que agrupan a personalidades de una misma tendencia o de tendencias diversas. (...) La Lliga ha entrado en el
Gobierno. Es la consumación de la llegada al poder de la burguesía catalana, iniciada en 1917. Se lo jugó todo y lo perdió. La
colaboración agraria-industrial duró más o menos dos años. Cambó en 1921, ministro de Hacienda, encarnó las aspiraciones de
la burguesía; sus reformas no gustaron, chocaban con los intereses de los terratenientes. Tuvo que retirarse, la burguesía había
fracasado, no supo crear las condiciones económicas que le dieran el Poder.
Los gobiernos de estos años eran de por sí débiles. La desintegración del sistema es patente. El problema social se agrava,
los movimientos obreros se robustecen, el problema regional se radicaliza, los militares están preocupados por la inestabilidad
política agravada por el desastre de Annual. Todas las fuerzas de la Restauración están en crisis.
La situación desemboca el 13 de septiembre de 1923 en el golpe de Estado del General Primo de Rivera, capitán general
de Cataluña. Primo de Rivera reclamó el poder. Nadie se opuso y lo tomó en nombre del rey.

García Nieto, M. C. y otros: Historia de España 1808-1978. Barcelona, Crítica, 1987-88 pág. 33.

3.- MANIFIESTO DEL GOLPE DE ESTADO DE PRIMO DE RIVERA

“Al país y al ejército españoles: Ha llegado para nosotros el momento más temido que esperado (porque hubiéramos querido
vivir siempre en la legalidad y que ella rigiera sin interrupción la vida española) de recoger las ansias, de atender el clamoroso
requerimiento de cuantos amando la patria no ven para ella otra salvación que libertarla de los profesionales de la política, de los
hombres que por una u otra razón nos ofrecen el cuadro de desdichas e inmoralidades que empezaron el año 98 y amenazan a
España con un próximo fin trágico y deshonroso. La tupida red de la política de concupiscencias ha cogido en sus mallas,
secuestrándola, hasta la voluntad real. [...]
Pues bien, ahora vamos a recabar todas las responsabilidades y a gobernar nosotros u hombres civiles que representen
nuestra moral y doctrina. Basta ya de rebeldías mansas, que sin poner remedio a nada dañan tanto y más a la disciplina que esta
recia y viril a que nos lanzamos por España y por el Rey.
Este movimiento es de hombres: el que no sienta la masculinidad completamente caracterizada, que espere en un
rincón, sin perturbar los días buenos que para la Patria preparamos. Españoles: ¡Viva España y viva el Rey!.

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No tenemos que justificar nuestro acto, que el pueblo sano demanda e impone. Asesinatos de prelados, exgobernadores,
agentes de la autoridad, patronos, capataces y obreros; audaces e impunes atracos; depreciación de moneda; francachela de
millones de gastos reservados; sospechosa política arancelaria por la tendencia, y más porque quien la maneja hace alarde de
descocada inmoralidad; rastreras intrigas políticas tomando como pretexto la tragedia de Marruecos; incertidumbres ante este
gravísimo problema nacional; indisciplina social, que hace el trabajo ineficaz y nulo, precaria y ruinosa la producción agrícola e
industrial; impune propaganda comunista; impiedad e incultura; justicia influida por la política; descarada propaganda
separatista, pasiones tendenciosas alrededor del problema de las responsabilidades y... [...]”

4.- MANIFIESTO DEL GENERAL PRIMO DE RIVERA AL PAÍS Y AL EJÉRCITO. 1923

“PARTE DISPOSITIVA: Al declararse en cada región el estado de guerra el Capitán General, o quien haga sus veces, destituirá a
todos los gobernadores civiles y encomendará a los gobernadores y comandantes militares sus funciones. Se incautarán de todas
las centrales y medios de comunicación y no permitirán, aparte las familiares y comerciales, ninguna otra autoridad que no sirva
al nuevo régimen. De todas las novedades importantes que vayan ocurriendo darán conocimiento duplicado a los capitanes
generales de Madrid y Barcelona, resolviendo por sí pronta y enérgicamente las dificultades. Se ocuparán los sitios más
indicados, tales como centros de carácter comunista o revolucionario, estaciones, cárceles, bancos, centrales de luz y depósitos de
agua y se procederá a la detención de los elementos sospechosos y de mala nota. En todo lo demás se procurará dar la sensación
de una vida normal y tranquila. Mientras el orden no esté asegurado y el régimen naciente triunfante, serán preferente atención de
los militares en todos sus grados y clases los servicios de organización, vigilancia y orden público, debiéndose suspender toda
instrucción o acto que entorpezca estos fines, sin que ello signifique entregar las tropas a la molicie ni abandonar la misión
profesional.
Por encima de toda advertencia están las medidas que el patriotismo, inteligencia y entusiasmo por la causa sugiera a cada uno en
los momentos que no son de vacilar sino de jugarse el todo por el todo; es decir, la vida por la patria. Unas palabras más
solamente. No hemos conspirado; hemos recogido a plena luz y ambiente el ansia popular y le hemos dado algo de organización
para encauzarla a un fin patriótico exento de condiciones. Creemos, pues, que nadie se atreverá con nosotros y por eso hemos
emitido a solicitar uno a uno el concurso de nuestros compañeros y subordinados. En esta santa empresa quedan asociados en
primer lugar el pueblo trabajador y honrado en todas sus clases, el Ejército y nuestra gloriosa Marina, ambos aun en sus más
modestas categorías que no habíamos de haber consultado previamente sin relajar lazos de disciplina pero que, bien conocida su
fidelidad al mando y su sensibilidad a los anhelos patrióticos, nos aseguran su valioso y eficaz concurso.
Aunque nazcamos de una indisciplina formularia, representamos la verdadera disciplina, la debida a nuestro dogma y amor
patrio, y así la hemos de entender, practicar y exigir, no olvidando que como no nos estimula la ambición, sino por el contrario el
espíritu de sacrificio, tenemos la máxima autoridad.
Y ahora nuevamente, ¡Viva España y viva el Rey!, y recibid todos el cordial saludo de un viejo soldado que os pide disciplina y
unión fraternal en nombre de los días que compartió con vosotros la vida militar en paz y en guerra y que pide al pueblo español
confianza y orden en nombre de los desvelos a su prosperidad dedicados, especialmente, de este en que lo ofrece y lo aventura
todo por servirle.

Miguel Primo de Rivera. Capitán general de la cuarta región”. La Vanguardia, Barcelona, 13-IX-3.

5.- ALFONSO XIII AL EMBAJADOR FRANCÉS EN 1923:

“Yo explicaré porqué he actuado como lo he hecho; porqué he violado mi juramento a la Constitución; Diré que si lo he hecho
así es porque, en mi alma y en mi conciencia, estimé que era el único modo de salvar a España, que iba a la corrupción, la
desconsideración, la ruina y el deshonor”.

6.- MANUEL AZAÑA EN 1924:

“El golpe de Estado del 13 de septiembre no lo ha dado un partido político, agrupado en torno de un caudillo militar, o con su
ayuda, como solía suceder; lo han dado generales y oficiales solos contra los políticos, o mejor, contra los paisanos; gobiernan
usurpando el nombre y la fuerza del ejército y asumen colectivamente esa responsabilidad, a pesar de la docena de hombres
civiles que se prestan a ejecutar bajo sus órdenes (…)

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7.- FOLLETO DE BLASCO IBÁÑEZ ESCRITO EN 1924 :

”España hace un año que no puede hablar. Vive dentro de Europa como una mujer secuestrada en el interior de un cuarto forrado
de colchones que impiden oír sus gritos. El español no puede escribir porque los periódicos de su país, antes de imprimirse, pasan
por la previa censura del Directorio Militar. Leer un diario español es leer simplemente la literatura de Primo de Rivera, autor
extravagante que sólo inspira un interés festivo.”

8.- DOS NOTICIAS DEL DIARIO EL SOL DEL 22 DE FEBRERO DE 1924 ALUSIVAS A LA REPRESIÓN
DE INTELECTUALES CRÍTICOS.

“El gobierno ha resuelto clausurar el Ateneo de Madrid, destituir de su puesto y cátedra a don Miguel de Unamuno y desterrarle,
así como a don Rodrigo Soriano. La primera medida está fundada en la contumacia y tenacidad con que la citada Sociedad,
separándose de sus fines y aun contra la voluntad de gran número de sus socios, viene dedicándose a hacer política estridente y
perturbadora;: la segunda, en que no es tolerable que un catedrático, ausentándose continuamente de su cátedra y fuera de su
misión, ande haciendo propagandas disolventes y desacreditando de continuo a los representantes del Poder y al propio Soberano,
que tan benévola y noble acogida le dispensó en su palacio.”

“El excelentísimo señor jefe del Gobierno, presidente del Directorio militar, me comunica la siguiente Real Orden:
Ilustrísimo señor: Acordado por el Directorio militar el destierro a Fuerteventura (Canarias) de don Miguel de Unamuno y Jugo.
Su majestad el Rey (q.D.g.) se ha servido disponer:
1.- Que el referido señor cese en los cargos de vicerrector de la universidad de Salamanca y Decano de la Facultad de
Filosofía y Letras de la misma; y
2.- que quede en suspenso de empleo y sueldo en el de catedrático de la expresada Universidad”

Unamuno conoce el destierro en Fuerteventura, seguido del exilio en París.

9.- UNAMUNO A LOS JÓVENES ESPAÑOLES

"(...) el mezquino y profano negocio de la industria pedagógica de los frailes de El


Escorial y de Deusto no es nada ¡unto a nuestro gran negocio, el de la salvación de la
inteligencia, de la verdad, de la libertad, de la justicia, nuestra religión. ¿Que hacemos
política? Es nuestro deber, juventud estudiosa. Nuestra política es hacer justicia,
moralidad, verdad. La injusticia, a inmoralidad, la mentira son policía tiránica.
(...) Estáis amaestrando a vuestros profesores, enseñándoles a ser maestros y
ciudadanos. Despreciad a esos cuitados de ellos, ganapanes de la enseñanza que
aceptan, siervos del destino y del escalafón, comisarías regias para administra lo
Universidad y seguir royendo los mendrugos del pan de munición. Profesan la
servilidad. Algunos se dicen profesores de Humanidades. Necesitan de un maestro de
humanidad. Un poder, no gobierno, de verdugos erigidos en jueces (...) un poder de
odiadores de la inteligencia y de lo libertad, de ladrones, sobre todo, ladrones, quiere
robarnos lo más precioso, vuestro porvenir de ciudadanos españoles, libres (...)"
Carta de Miguel de Unamuno, exiliado en Fronda, de
abril de 1929, a los jóvenes de España.

Valle-Inclán ejerce una severa crítica de los «espadones» y


la naturaleza del régimen en su esperpento Los cuernos de don Friolera.

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10.- REFORZAMIENTO DE LA CENSURA

«El Gobierno ha dado órdenes a la censura para que impida la publicación de noticias e informaciones de carácter político, que
no tienen otra finalidad que la de inquietar el ánimo de los incautos o de los predispuestos a ello, pues es tan notorio el sentir de
la opinión pública y tan claros y palmarios los beneficios obtenidos por el país a favor del Gobierno del actual régimen, que se ve
obligado a defenderlos con mayor energía y sin caer en pusilanimidades ni empachos de legalidad, evitando, con tal actitud, que
el ánimo de los cuitados se encoja con el anuncio de determinaciones personales, que cada cual es muy dueño de tomar cuando
quiera y como quiera, pero sin soliviantar a nadie [...].
La dictadura tiene por principio no permitir, sobre todo, ni el elogio ni siquiera el recuerdo, ya que la justificación nadie la ha
intentado.
Después de esto, cada cual que haga lo que quiera y cuando quiera, procurando no entorpecer ni complicar la vida de la nación.»

ABC, 4 de septiembre de 1927

11.- DECLARACIÓN DE LOS CATALANES. BARCELONA, 13 DE JUNIO DE 1929.

“En estos últimos años, además de la supresión general del sufragio y de las garantías e los derechos individuales del ciudadano,
se ha prohibido, amenazando con fuertes sanciones, la exhibición de la bandera catalana; la mancomunidad (Consejo
Administrativo de Cataluña) ha sido disuelta; se ha limitado el uso de la lengua catalana, incluso en los actos religiosos, y se ha
prohibido en la enseñanza pública y privada en todos sus grados; se han suspendido periódicos, se han clausurado asociaciones y
otras han sido intervenidas por el Gobierno; los patriotas han sido perseguidos, y otros han sido juzgados y condenados
irregularmente por consejos de guerra; pero el Pueblo Catalán ha sufrido esos atentados sin que disminuyan ninguna de sus
características nacionales.
Ante estas persecuciones y ante la negación obstinada por parte del Gobierno español, no sólo de los derechos de Cataluña, sino
también de su personalidad, los catalanes se ven obligados a declarar:
Que la cuestión catalana subsiste, considerablemente agravada.
Que los catalanes reclaman la garantía de los derechos civiles generales, suprimidos por la dictadura.
Que Cataluña necesita el reconocimiento de sus derechos con amplias garantías que permitan el libre desenvolvimiento
de su personalidad en todas sus manifestaciones.
Que mientras no esté reglamentada, la cuestión catalana será para España causa inevitable de agitación y de inquietud,
al mismo tiempo que un foco eventual de conflictos que, dada la situación geográfica de Cataluña, podrían tener una importancia
internacional.”

12.- JUICIO DE CALVO SOTELO SOBRE PRIMO DE RIVERA

«La vida internacional española tomó brioso impulso en la Dictadura [...]. Me atrevo a asegurar que en los últimos cincuenta años
no contó España con ninguna figura mejor ambientada en los círculos internacionales. No se diga que ello era simple efecto de
una larga continuidad de mando; porque otros políticos han captado la presidencia del Consejo durante mayor número de años,
aunque con intermitencias, y su rango no llegó a traspasar la frontera. En el gratísimo fenómeno coadyuvó, sin duda, esta
circunstancia, pero actuó como causa generatriz la hidalguía procer, el celo fervoroso y el tesón inquebrantable con que el general
supo coordinar la postura exterior de España con ahincada defensa de sus prerrogativas y anhelos.
A juicio de Primo de Rivera, el gobierno de un pueblo necesita fuerte dosis de paternalismo. Más que acción de mando, es
función pedagógica y tutelar [...].
La cultura física, la formación patriótica del alma infantil, el estímulo a las virtudes cívicas, la pleitesía cordial ante la vejez, la
febril ansia de extirpar el analfabetismo, el exaltado culto a la acción femenina y la asistencia social en todas sus formas: lucha
antituberculosa, anticancerosa, antipalúdica, etc. [...] ocuparon puesto preferente en la mente y la actividad del gran caudillo [...].

Su temperamento repudiaba la violencia, por instinto. En su vida militar luchó aceradamente contra el castigo corporal [...]. En su
etapa de gobierno supo vencer los mayores escollos sin derramar una sola gota de sangre.»

JOSÉ CALVO SOTELO. Mis servicios al Estado

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13.- JUICIO DE MARTÍNEZ CUADRADO SOBRE LA DICTADURA

«Una vez que la Dictadura afrontó los dos problemas que parecían más graves en aquella fecha, el problema marroquí y el orden
público en Barcelona, perdió su posible oportunidad de poner término al régimen de excepción y retornar a la normalidad
revisada y puesta a punto.
Los enemigos de la liberalización y democratización reales, es decir, los intereses materiales dominantes del sistema social, se lo
impidieron mediante los fáciles halagos para perpetuar una obra de gobierno que en realidad amparaba no tanto intereses de clase
cuanto intereses de escasos núcleos de personas.
El sistema corporativista no tuvo resultados prácticos más que en el ámbito de las relaciones laborales a través del limitado
aunque interesante ensayo de comités paritarios, que habían sido preconizados muchos años antes de 1923 por el Instituto de
Reformas Sociales, también liquidado en 1924. En todo lo demás ni siquiera se propusieron ensayarlo o continuarlo, puesto que
hasta la aprobación de la constitución carecía de sentido hacerlo. El destino del proyecto constitucional no sufrió mejor suerte
[...].»
MIGUEL MARTÍNEZ LA burguesía conservadora (1874-1931) Alianza

14.- LA HERENCIA DE LA DICTADURA. LA OPINIÓN DE DÁMASO BERENGUER

«A más de la vuelta a la normalidad constitucional en el más breve plazo posible, imperativo inmediato de aquellas
circunstancias, aparecían también otros problemas que habían de abordarse, desde luego, para calmar los espíritus y devolver a la
vida política de la nación su dinámica normal, desarmando la nutrida y agresiva oposición que contra la Corona se manifestaba
[...].
Figuraba en primer término entre estos problemas, y de proceso resolutivo más urgente, el universitario, que de las protestas
colectivas dentro de los claustros, con estigma a veces de las más altas instituciones, habían invadido la calle, en forma más
airada justamente en aquellos días, manteniendo a la población en alarma continua por las algaradas y escándalos con los que se
manifestaba
[...].
Seguía en el mismo plano de urgencia e importancia, aunque de desarrollo menos aparente, el problema del Ejército, originado,
principalmente, por la actitud del cuerpo de Artillería contra determinadas posiciones del gobierno y sanciones a que dieron lugar
[...].
Por último, refiriéndome sólo a los problemas de mayor trascendencia [...] el problema de Hacienda [...] la depresión de las
finanzas del Estado, la tendencia bajista de los valores y de la moneda, origen de aquella poco afortunada intervención en los
cambios que explicaba el propio Dictador [...].»

DAMASO BERENGUER De la Dictadura a la República. Tebas

15.- ACUERDO PARA DERRIBAR LA MONARQUÍA: PACTO DE SAN SEBASTIÁN

"¡Españoles! Surge de las entrañas sociales un profundo clamor popular que demanda justicia y un impulso que nos mueve a
procurarla. Puestas sus esperanzas en la república, e pueblo está ya en medio de la calle (...).
Venimos a derribar la fortaleza en que se ha encastillado el poder persona , a meter la monarquía en los archivos de la historio y a
establecer la república sobre la base de la soberanía nacional representada en una asamblea constituyente. De ella saldrá la
España del porvenir y un nuevo Estatuto inspirado en la conciencia universal que pide para todos los pueblos un Derecho nuevo
ungido de aspiraciones a la igualdad económica y a la justicia social (...). ¡Viva España con honra! ¡Viva la república!

Niceto Alcalá Zamora, Alejandro Lerroux García, Fernando de los Ríos, Manuel Azaña, Santiago Casares Quiroga,
Indalecio Prieto, Miguel Maura Gamazo, Marcelino Domingo, Alvaro de Albornoz, Francisco Largo Caballero,
Luis Nicolau D'0lwer, Diego Martínez Barrios".

16.- FRANÇESC MACIÁ PROCLAMA LA REPÚBLICA CATALANA EL 14 DE ABRIL

“Catalans: Interpretant el sentiment i els anhels del poble que ens acaba de donar el seu sufragi, proclamo la República Catalana,
com Estat integrant de la Federació Ibérica. D´acord amb el president de la República Federal Española don Niceto Alcalá
Zamora, amb el qual hem ratificat els acords presos en el Pact de Sant Sebastiá, assumeixo provisionalment les funcions de
president del Govern de Catalunya, esperant que el poble espanyol expressins quina és en aquets moments llur voluntat [..].”
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17.- MENSAJE DE DESPEDIDA DE ALFONSO XIII

“Las elecciones celebradas el domingo me revelan claramente que no tengo hoy el amor de mi pueblo. Mi conciencia me dice
que ese desvío no será definitivo, porque procuré siempre servir a España, puesto el único afán en el interés público hasta en las
más críticas coyunturas.
Un Rey puede equivocarse, y sin duda erré yo alguna vez, pero sé bien que nuestra patria se mostró en todo momento
generosa ante las culpas sin malicia.
Soy el Rey de todos los españoles, y también un español. Hallaría medios sobrados para mantener mis regias
prerrogativas, en eficaz forcejeo con quienes las combaten. Pero, resueltamente, quiero apartarme de cuanto sea lanzar a un
compatriota contra otro en fratricida guerra civil. No renuncio a ninguno de mis derechos, porque más que míos son deposito
acumulado por la historia, de cuya custodia ha de pedirme algún día cuenta rigurosa.
Espero a conocer la auténtica y adecuada expresión de la conciencia colectiva, y mientras habla la nación suspendo
deliberadamente el ejercicio del Poder Real y me aparto de España, reconociéndola así como única señora de sus destinos.
También ahora creo cumplir el deber que me dicta mi amor a la Patria. Pido a Dios que tan hondo como yo lo sientan y
lo cumplan los demás españoles.”
ABC, 15 de abril de 1931

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