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LOS SÍMBOLOS DEL CALENDARIO

UN COMPENDIO

I. LOS VEINTE SIGNOS

1. CIPACTLI. COCODRILO (DRAGÓN)


Orientación: Tlahuistlampa o Tlacopa, rumbo este u oriente. Color: Rojo. Regente: Tonacatecuhtli
Tradicionalmente se le identifica con el cocodrilo, aunque algunos autores refieren que se trata de un dragón. La
etimología de la palabra Cipactli ha pretendido referirse como ligada a “ce pahtli”, “uno medicina” o “primera medicina”,
ya que el cocodrilo representa justamente el primer signo calendárico. Es el momento en que el ser toma conciencia, ya
que el agua representa el mundo de lo espiritual o lo inmanifestado y la tierra es el mundo físico y de la manifestación.
Así, el cocodrilo es ese ser que emerge del agua para vivir en la tierra, indicando el inicio del viaje espiritual del ser
humano, el contacto con lo sutil, lo etéreo, además de lo burdo y lo terrenal. El hombre ES ahí donde ambas cosas, el
espíritu y la materia, el cielo y la tierra, se juntan. Cipactli es también la isla que flota sobre las aguas primordiales, el
lugar de origen donde todo se revela como nuevo. En su acepción de “dragón”, representa una potencialidad completa,
este signo sintetiza lo terrenal y lo celeste, incluso se ha dicho que contiene en sí mismo a todos los signos, es la unidad
indivisa que lo contiene todo.
El cocodrilo puede sumergirse en las aguas y pasar desapercibido, y así los nativos del signo suelen ser discretos, pero
saben emerger cuando es necesario. Son gente de principios firmes, emprendedores y tenaces, con responsabilidad en la
vida. Gente curiosa y reflexiva, con tendencia natural a la espiritualidad y la mística, que pueden desarrollar sin
dificultad. Sus cualidades menos positivas los hacen fáciles de sugestionar y los vuelven gente nerviosa.
En tradición maya se asocia a Imix o Imox (nombre maya de Cipactli) con el vientre, el seno materno y la nutrición, y
por lo tanto se hace alusion a la capacidad de sostener y mantener, lo que tendría mucho que ver con el regente de la
versión nahua, Tonacatecuhtli, “señor de nuestro sustento”. Indica que se debe confiar en los dones de naturales, se ha de
tener confianza en el padre-madre espiritual y llegara la abundancia.
Cipactli significa cocodrilo representa el cuerpo físico sin mayor determinación, es un día en el que se propone observar
la salud y el desempeño del cuerpo con miras a lograr identificar probables alteraciones que deban ser atendidas. De los
nacidos en un día Cipactli se dice que son emprendedores, tenaces y de principios firmes.

2. EHECATL. VIENTO
Orientación: Mictlampa, rumbo del norte. Color: Blanco. Regente: Ehecatl-Quetzalcoatl
En la iconografía se representa como la cabeza de la deidad Ehecatl-Quetzalcoatl, la cual tiene un pico prominente
simbolizando quizá la acción de soplar, dar aliento, ya que el signo viento representa el halito que da vida, el cual es
insuflado en el momento del nacimiento. Es un tiempo en el que hay que poner especial atención en el sistema
respiratorio e incluso se ha descrito como propicio para la diciplina respiratoria, que diversos maestros espirituales hacen
mención como la base de una buena salud e incluso como medio de acceso a realidades mas elevadas. Ehecatl también
significa la palabra, por lo cual en el tonalli viento se ha de poner especial atención a nuestras palabras, las cuales deben
ser armónicas. La palabra, para los ancestros, era sumamente sagrada, habiéndose incluso ha hablado de “las tres flores
del habla” en un contexto tradicional, diciendo que el habla florida, la palabra elevada, ha de ser con verdad, con respeto y
con oportunidad, es decir que ha de evitarse mentir, ofender y también decir las cosas en momentos inapropiados. La
acepción del signo como “atmósfera” indica la necesidad de estar atentos a nuestro entorno inmediato, buscando el
equilibrio. Este entorno inmediato puede incluir cualquier clase de espacio, desde el lugar que se comparte con la familia
hasta el lugar donde se trabaja. Es un tiempo para preguntar ¿cómo está mi entorno? ¿Qué puedo hacer para mantener o
recuperar la armonía del mismo?. El viento también es aquello que no puede ser aferrado con las manos, pero sin
embargo puede ser percibido, por lo cual es una metáfora de lo espiritual. De la deidad suprema, se decía que uno de sus
nombres era “Yohuali-Ehecatl”, “noche-viento”, en alusión a que es invisible e impalpable. Ehecatl nos habla también de
libertad, de ir por donde el corazón mande sin obstáculos de ningún tipo, “libre como el viento” dice la sabiduría popular.
Sólo hay que cuidar no volverse superficial e insconstante, lo cual es un riesgo que se puede correr al ejercer esta
aspectación del signo. Se dice que los nacidos en día viento tendrán facilidad de palabra, serán grandes comunicadores o
tendrán alguna cualidad relacionada con la voz, como puede ser el canto. Son gente que va de aquí para allá de manera
libre, sin apegos de ningún tipo. Pueden ser cambiantes, tranquilos y sosegados como la brisa o tempestuosos como una
tormenta, pero también son adaptables y flexibles. Amantes de la intelectualidad, deben cuidar, como se dijo, no caer en
la inconstancia y la superficialidad.
Ehecatl se traduce como viento. Es un día apto para evaluar el entorno personal (el viento o atmosfera que nos rodea), en
todos los sentidos, para determinar puntos de conflicto o mejora que nos permitan armonizarnos mejor con el mismo. Se
dice que los nacidos bajo este signo suelen tener facilidad de expresión y armonía en el canto.

3. CALLI. CASA
Orientación: Cihuatlampa, rumbo del oeste. Color: Negro. Regente: Tepeyolotl
La casa es un símbolo que alude a varias cosas, comenzando con el cuerpo físico que es la casa donde habitamos.
Obviamente, también refiere al hogar de cuatro paredes y un techo que nos cobija. Ambos contextos brindan oportunidad
de reflexión y trabajo.
Calli, como símbolo abstracto, refiere al mundo interno, mental y emocional, aquello que sucede dentro de nosotros
mismos. Por ello, indica introspección y viaje por nuestro mundo simbólico. Algún contador de días decía que es un
tiempo propicio para la meditación, la psicoterapia, todo aquello que nos ayude a mover las estructuras internas.
Calli alude también a las cualidades de la protección, seguridad y reposo, pues esa es la función de la casa como
vivienda, y en este sentido nos gusta recordar un simbolismo que escuchamos alguna vez: “tu casa es tu reflejo”, decía
cierto autor, “¿en ella reina el desorden o la falta de higiene? Podría ser un síntoma de que tu persona es también
desordenada y requiere limpiar partes de si misma”.
En ciertas ocasiones, al referirse a este signo se habla también de una acepción que involucra el linaje de las personas, e
inclusive a la función reproductiva, particularmente el útero de la mujer que, efectivamente, es una casa que genera y
alberga vida.
Para los mayas, el nagual Akbal, equivalente de Cali, ha sido traducido a veces como “noche”, pero un acercamiento mas
profundo nos habla de “aurora y crepúsculo”, “amanecer y atardecer”, y se habla de cuestiones de renovación y
esperanza, así como de la acción de iluminar lo oscuro. Se dice que es tiempo bueno para hacer las cosas con trasparencia
y claridad, pedir días de paz para nuestro pueblo, para descubrir las cosas que están ocultas y para pedir protección.
Las personas que nacen en el tiempo de la casa se dicen que son analíticas, hogareñas, pausadas, protectoras. Sus
aspectos negativos incluyen la trasgresión de limites y si están mal equilibradas pueden ser ermitañas y con poca
capacidad para tratar con las personas.
Cali significa casa. La casa que habitamos, puede nuevamente referirse al cuerpo físico, pero también el lugar donde
habitamos y pernoctamos. Representa asimismo la capacidad de introspección, la necesidad de seguridad y la vida
interior. Se dice que los nacidos en un día Cali son creativos, hogareños y protectores.

4. CUETZPALIN. LAGARTIJA
Orientación: Huitztlampa, rumbo del sur. Color: amarillo. Regente: Huehuecoyotl
El signo lagartija posee diversos significados. Alude a la sexualidad masculina, ya que es un animalito que penetra en la
tierra y se introduce en las grietas de las paredes, en una metáfora que se relaciona a la penetración del órgano masculino
en el femenino. En este aspecto, se orienta sin embargo mas hacia el goce que hacia la fertilidad, al contrario, por
ejemplo, del signo serpiente. Ambos signos, serpiente y lagartija, se asumen como “cercanos a la tierra” debido a que
ambos viven con el cuerpo tocando la superficie de esta, pero mientras el signo coatl habla de la sexualidad como modo
de generación de vida y de conciencia, en el signo lagartija encontramos a lo sexual como medio para el goce. La
dicotomía entre ambos signos se ve reforzada cuando leemos en diversas descripciones que se hacen del signo que las
personas lagartija pueden llegar a ser estériles y no generar descendencia, pero siempre serán seductores y afectos a lo
sexual. Cuetzpalin igualmente indica supervivencia y capacidad de resiliencia, pues los ancestros observaron como la
lagartija es un animalito que no tiene miedo de caer de la pared, cuando lo hace se levanta rápidamente y sigue corriendo,
sin que el golpe la lastime. Además, muchas lagartijas pierden la cola intencionalmente cuando han sido aferradas por un
depredador, la cual vuelve a crecer tiempo después.
De cerca a estos atributos tenemos los que indican dinamismo y oportunidad: estar atento buscando el momento oportuno
para comenzar a movilizarse (en todos sentidos, mental, física, emocional y espiritualmente) y al hacerlo ser decidido,
como una lagartija permanece expectante y se mueve rápida y decididamente llegado el momento. Esta cualidad se hace
patente también en el equivalente maya del signo, que significa dos cosas, puede ser “semilla”, la cual espera el momento
oportuno para germinar, y también “red”, indicando la conexión de las cosas y la abundancia (en la red se guardan
mazorcas). Por estas razones, cuetzpalin también se dice tiempo asociado a la abundancia y la riqueza. Esto es obvio, ya
que saber aprovechar la oportunidad ciertamente generará bienestar en el mundo material. Todas estas cualidades
explican la aspectación del signo para los nativos del mismo: dinámicos, resistentes, capaces de dejar atrás lo necesario
para poder prevalecer. Son personas extrovertidas, trabajadoras, inteligentes y saludables que saben imponer su opinión y
que se recuperan rápidamente de los problemas en los que puedan verse inmersos. Con tendencia al hedonismo, pueden
llegar a ser excesivamente sexuales, con lo cual pueden perder tiempo y energía valiosos.
Cuetspalin significa lagartija, y es símbolo de los deseos y de la capacidad que se propone desarrollar para esperar el
momento justo para actuar, del mismo modo en que una lagartija observa quietamente y se pone en movimiento de
manera ágil y decidida cuando llega el momento de hacerlo. Las personas lagartija, se dice, son personas dinámicas e
inteligentes con un gran sentido del placer

5. COATL. SERPIENTE
Orientación: Tlahuistlampa o Tlacopa, rumbo este u oriente. Color: rojo. Regente: Chalchiuhtlicue
La serpiente representa entre otras cosas la fertilidad, el arraigo a la tierra, la energía sexual y la medicina. El signo habla
también de claridad mental, facilidad para los negocios y las planeaciones, para relacionarse con otros y formar
amistades.
La serpiente percibe el mundo a través de la vibración, por lo que es un animal que representa el uso de la intuición y el
sentimiento para relacionarse con su medio, y se dice que la serpiente es un animal sabio porque vive en permanente
contacto con la tierra. Es un signo de la renovación y el cambio, la serpiente muda de piel periódicamente y la deja detrás,
lo que aterrizado a la esfera humana indica necesidad de desarrollar la capacidad para desprenderse de situaciones, objetos
e incluso personas.
Serpiente está fuertemente asociada a la sexualidad, pero en su aspecto de fertilidad y herramienta de elevación espiritual,
al contrario de otros signos que aluden al sexo como búsqueda de placer. Como un ofidio trepa por las ramas de un árbol,
así se dice que las energías telúricas (sexuales) pueden ascender por la columna vertebral hasta llegar a la coronilla,
conectándonos con el Ser Universal
En otro nivel, se asocia a la serpiente con el movimiento del agua, con la subsiguiente connotación de fertilidad. Algún
maestro de náhuatl notaba como el vocablo “coatl” se puede descomponer en dos raíces “co”, lugar, y “atl”, agua, “lugar
de agua”, en relación a como los ofidios se mueven de manera ondulatoria, como el agua misma. Interpretaciones más
modernas han querido asociar también este signo con el movimiento ondulatorio de la luz y la energía en general.
No hay que explicar mucho la conexión tan fuerte que existe entre este símbolo animal y la tierra, que está presente en
deidades como Coatlicue, representación de la Madre Tierra que lo mismo alimenta que devora la vida. Esta dualidad de
la serpiente, que lo mismo otorga la vida como la reclama está presente en el ofidio más venerado de Anáhuac, la
serpiente de cascabel, que posee un potente veneno pero que ha querido asociarse también con curación. “Coatl” también
alude a “cuate”, “gemelo”, no estando exenta la serpiente anahuaca de las connotaciones ambivalentes que se observan en
otras culturas: lo mismo puede ser un signo muy propicio a todo lo contrario, y que sea medicina o veneno radica en la
dosis y en la honra que demos al signo.
En tradición maya, el nagual equivalente es Kan, que también significa serpiente y que se asocia con la creación, la
evolución humana, la inteligencia, la trasmutación y la energía del fuego interno. Se dice tiempo de pedir justicia,
sabiduría, fuerza, igualdad y equilibrio. Tambien se pide fuerza física y buena salud en días Kan
Los de signo serpiente personas meticulosas, pulcras, con facilidad para los negocios y las planeaciones, con facilidad
para relacionarse con otros y formar amistades. Gustan de los lujos y por lo general son capaces de conseguirlos, ya que
se trata de personalidades energéticas y de gran voluntad. Es un signo de la renovación y el cambio, lo que indica en estas
personas capacidad para desprenderse de situaciones, objetos e incluso personas. Sexuales, aunque bien pueden
decantarse por el uso de la sexualidad como herramienta de elevación espiritual. Sus aspectos negativos son la pereza y la
posibilidad de perderse en banalidades. Cuando se encuentran equilibradas son muy agradables, pero si no controlan su
ira pueden ser extremadamente hirientes y dañinas.
Coatl significa serpiente. Es un tonalli que simboliza la energía vital, la sensibilidad corporal y la conexión con la tierra,
así como la columna vertebral. Los que nacen en un día Coatl se dice que son personas muy sensibles, con capacidad para
tolerar y generar cambios, que gustan de vivir cómodamente y que poseen una inteligencia muy despierta, siendo un
símbolo de sabiduría.

6. MIQUISTLI. MUERTE
Orientación: Mictlampa, rumbo del norte. Color: blanco. Regente: Tecciztecatl
Para la cosmovisión anahuaca, la muerte no es algo que se deba temer. Es sólo un componente más de la realidad, que se
considera necesario para que exista el equilibrio. Más aún, nuestros ancestros sabían que sin muerte no es posible que
exista vida. La carne putrefacta abona la tierra, de donde surgen las plantas que alimentan al venado, que es comido por el
ser humano el cual al morir alimenta a la tierra en un ciclo que habla de constante regeneración. De hecho, algunas
tradiciones hablan de este signo mas con el nombre de “trasformación” que de “muerte”, ya que si observamos desde un
punto mas elevado, veremos
que nada muere en realidad, sólo tomamos nuevas formas una y otra vez… “Un día mi cuerpo renunciará a la lucha y
devolverá al mundo esta materia de que estoy hecho. Esta galaxia de miles de millones de átomos que era una vez yo,
morirá como mueren las estrellas, sembrando su materia a través del espacio. Estos átomos que vinieron a danzar dentro
de mí, irán a danzar a otra parte. Uno, dos, tres. Uno, dos, tres. Y se irán. Ellos migrarán a las alas de una mariposa, a la
corteza de un árbol, al paisaje de una nube o al pelo de una pulga. Y yo deberé terminar mi canción allí, para que otros
puedan cantar a su manera” (“Genesis”, Nuridsany ,Perennou, 2004) En este contexto se puede citar a Carlos Castaneda,
escritor que en boca de sus personajes nos deja dicho que la muerte es una buena consejera. Una persona que es conciente
de que va a morir y de que la muerte lo puede sorprender en cualquier momento (en el trafico de la mañana, en medio de
una multitud de gente, en forma de una enfermedad fulminante o incluso durmiendo la siesta) tiende menos a comportarse
de manera mezquina o indolente. Tener en cuenta todos los días la realidad de nuestra propia mortalidad nos impide
postergar las cosas que realmente importan, o perder el tiempo en nimiedades. Hay que actuar siempre como si las
maletas estuvieran hechas ya…
En tradición maya Kiche, el nagual Keme, que también significa muerte, se asocia con los ancestros, y se dice que es un
tiempo propicio para pedir su guía y honrar su memoria.
De los de signo miquistli se dice que son personas mentales, que tienden a relacionarse con personas en elevada posición,
son gente con capacidad para la mística y que no son engañadas fácilmente, debido a su intuición desarrollada. Su lado
negativo incluye tendencia al pesimismo, la melancolía y el abandono.
Mikiztli significa muerte. Es un signo que representa la trasformación en todos los sentidos. Enfocado desde un punto de
vista práctico, indica la propuesta de reconocer la capacidad trasformadora de nuestros pensamientos, de manera que
entendamos y ejerzamos esta cualidad de cambiar nuestros pensamientos o utilizar los mismos para lograr cambios a
otros niveles. Los nacidos en un día Mikiztli tienden a la reflexión, valoración y evaluación antes de emprender cualquier
actividad y tienen la tendencia a ser introvertidos.

7. MAZATL. VENADO
Orientación: Cihuatlampa, rumbo del oeste. Color: negro.Regente: Tlaloc
El venado es un animal que simboliza entre otras cosas la percepción, la inofensividad y el sustento. El venado siempre
esta alerta, escucha, olfatea el aire, mira su entorno. De esa forma se mantiene a salvo de los peligros que detecta antes de
que puedan originarle problema Es un animal por lo general inofensivo que se contenta con alimentarse y andar de aquí
para allá, y la imagen de un venado pastando en un claro del bosque es un arquetipo de la paz y la tranquilidad. Así pues,
a nivel simbólico también representa ese estado de la mente, el cuerpo y el espíritu donde se reposa y se percibe, que se
puede entender como quietud mental pero también como todo lo contrario, siendo asociado con el chamanismo y la
visión. Incluso al cactus visionario que los nahuas llamaron peyotl se le conoce en el argot tradicional como “venadito”, y
las practicas huicholes y de otras naciones asocian a este animal con estados místicos donde se perciben cosas por lo
general vedadas a la conciencia no modificada. También es muy importante su relación con el sol, pues algunos pueblos
autóctonos conciben al astro rey como “levantado por los cuernos del venado” todas las mañanas. El venado pues es el
que trae la luz, el calor, y en la práctica ancestral del temascal se usan cuernos de venado para manejar las piedras
incandescentes que dan calor al ombligo del recinto. Puede verse pues la asociación del venado con el fuego sagrado, de
quien es portador.
A otro nivel, el venado representa el sustento y la prosperidad, ya que a este animal se le daba caza para obtener pieles y
carne, además de huesos y cornamenta que se usaba una como herramientas. Acaso su simbolismo se pueda asociar
mucho con el del búfalo de la cosmovisión de las tribus del norte, diferentes aunque emparentadas con la cultura de la así
llamada “Mesoamérica”. Al animal cazado se le presentaba siempre respeto, pues se entendía que el sacrificio que el
mismo hacia para la subsistencia de la tribu era algo sagrado. Por esto, venado se puede asociar también con la
autodiciplina y el autosacrificio. En un nivel mas mundano, el venado es símbolo de la alegria y la belleza, asociado
fuertemente con lo femenino y lo frágil, asi como con la agilidad y la danza.
En tradición maya Kiche, el nagual Kej, nombre del signo venado para ellos, representa también la mano, que se asume
como una metáfora de los 4 puntos cardinales y un centro, se dice que es un signo que indica “aquello que sostiene”,
siendo entendido como un momento oportuno para realizar ofrenda y reflexionar acerca de nuestra responsabilidad para
con el cosmos.
Los de signo venado se dice que son gente responsable, que tiene capacidad para prosperar en base al trabajo y la
diciplina, son grandes lideres, reflexivos y con capacidad para la actividad fisica. Su lado negativo incluye la
impaciencia, el autoritarismo y la tendencia a aislarse socialmente.
Mazatl es el signo venado. Este signo es representante de la percepción. Durante este día se propone enfocarse en lo que
estamos percibiendo a nuestro alrededor. Las personas nacidas bajo este signo son nerviosos e inquietos y siempre están
atentos a lo que pasa a su alrededor. Son muy afectuosos llegando en ocasiones hasta el sacrificio por los que aman.

8. TOCHTLI. CONEJO
Orientación: Huitztlampa, rumbo del sur. Color: amarillo. Regente: Meyahuel
El conejo es símbolo de fertilidad en todos sentidos, desde el físico (es un animal que se reproduce rápidamente) como
también en lo mental y espiritual. Esto se traduce en que los nativos de signo conejo son gente inquieta con una mente
muy activa, siempre están generando ideas y proyectos, son gente muy trabajadora, previsora y productiva, tanto que se
le augura éxito en la vida si esta bien equilibrado. El conejo se asocia con los ciclos lunares de una manera muy marcada,
e incluso en las representaciones iconográficas de este astro suele aparecer un conejo en la misma, esto debido tanto a la
idea de que las manchas de la superficie lunar semejan un conejo como porque, se dice, los ancestros se dieron cuenta de
que el periodo de procreación de estos animales se acerca a un ciclo lunar de 29.5 días. En el acervo cultural de Anahuac
tenemos muchas leyendas acerca del conejo y la luna. En uno de ellos se dice que este animal fue elevado al cielo por
Quetzalcoatl quien lo premia por haber sacrificado su vida para alimentarlo, en otro se afirma que a Tecciztecatl le fue
arrojado un conejo en la cara para disminuir su luminosidad, ya que esta deidad había nacido como un segundo sol y los
dioses no podían permitir 2 astros diurnos en el cielo.
En otro nivel, al conejo se le relaciona con la embriaguez y el pulque, habiendo una designación para todos los tipos de
borrachera que existen (que son muchos), denominándose Centzontotochctin, los 400 conejos. El tonal Ome Tochtli, 2
conejo, también era el nombre calendárico de la deidad del pulque y la embriaguez. Por todo esto quizá, se dice que la
gente conejo es muy dada al disfrute de los placeres de la vida, lo cual debe saber equilibrar para no caer en hedonismos
y en excesos de todo tipo.
El conejo también es uno de esos animales denominados por los antropólogos como “el trickster” o payaso sagrado. Se
trata de símbolos, generalmente animales, que indican la cualidad de presentar las grandes verdades y las grandes
lecciones de forma inusual, mediante bromas o engaños. Quizá esto pueda asociarse a aquel refran popular que dice que
“un borracho siempre dice la verdad”. En cualquier modo, la figura del conejo como “trikster” alude a esa capacidad de
aprender y enseñar mediante el ingenio y la festividad.
Los conejos, como se dijo, son animales muy fértiles que forman grandes núcleos familiares, por ello quizá se dice que
las personas conejo tienden a formar relaciones fuertes y duraderas, son grandes parejas y padres o madres de familia.
Los aspectos negativos de este signo incluyen la tendencia a ser entrometidos o chismosos. También se dice que pueden
ser personas muy nerviosas con tendencia a la ansiedad.
El día Tochtli o conejo indica la fertilidad, nuevamente en todos sentidos, pero principalmente en el aspecto mental. En
este día se propone hacer conciencia de que la mente es terreno fértil para la energía del pensamiento, con el fin de
aprovechar esta fertilidad de una mejor manera. Las personas nacidas bajo un signo Tochtli se dice que son muy
fecundos, que pueden llegar a tener ideas innovadoras y que tienden a gozar las cosas placenteras de la vida, debiendo
tener cuidado de no llegar a los excesos.

9. ATL. AGUA
Orientación: Tlahuistlampa o Tlacopa, rumbo este u oriente. Color: rojo. Regente: Xiuhtecuhtli
El agua es el símbolo universal de las emociones. Representa los flujos emocionales que se mueven en nuestro interior,
ascienden y descienden, nos nutren pero también nos pueden arrasar cuando se desbordan. Es una trecena que indica
trabajo en este aspecto, requiriendo lograr un equilibrio para manejar nuestras “aguas internas”. Se nos pide la aceptación
de nuestro mundo emocional, para dejar fluir nuestro sentir. No hacerlo sólo genera acumulación de tensión, como una
represa que no se desazolva en mucho tiempo, llegando a un punto donde se rompe, liberando tal cantidad de agua que
destruye todo a su paso. Agua indica también la capacidad de adaptabilidad, ya que este líquido toma la forma del
recipiente que la contiene. Un río no se detiene porque el paisaje le pone una roca enfrente, antes bien la rodea y sigue su
curso. Esto es otra forma de guerrear, no confrontando sino adaptándose y fluyendo con las circunstancias.
Otra de sus acepciones es la dualidad estabilidad-inestabilidad, ya que el agua puede estar en calma (como en un lago) o
moverse sin cesar (como en un río). Agua nos enseña entonces el aprender a distinguir cuando movernos en la vida y
cuando tomar una pausa, un descanso, equilibrando ambas actitudes para estar en armonía. Fluyendo demasiado no
conseguimos empuje, como el agua que es capaz, a través de la constancia, de modificar la piedra, erosionarla a través del
golpeteo contino, no al punto de hacer rodar la roca sino solo puliéndola poco a poco: lo blando es mas fuerte que lo
duro, gracias a la constancia y la dosis adecuada de fluidez. Por otro lado, el agua que no fluye se estanca, se pudre y se
vuelve nociva.
No puede dejar de hablarse del agua como modo de purificación. Evidentemente se asocia al agua con la limpieza, e
incluso en la leyenda de los soles se hace alusión a un diluvio que habría terminado con una de las eras previas a este
quinto sol. Así pues, es posible sumar este simbolismo al significado de la trecena, llegándose en algunas tradiciones
contemporáneas, incluso, a mencionarse el tiempo de atl como un periodo para purificar faltas o pecados. Del mismo
modo, hay que recordar que el vocablo ritual que se usaba para referirse a la sangre es “chalchiuhatl”, “agua preciosa”.
La sangre es un elemento que se asocia fuertemente con la ofrenda que se hacia a la deidad, siendo bien conocidas sus
asociaciones con el sacrificio y autosacrificio para “pagar” a los dioses. Todo esto viene a consonancia con el significado
del glifo maya equivalente al signo atl. Este símbolo se dice Muluk (yucateco) o Toj (kiche), que vendría a querer decir
“ofrenda”. Esto es símbolo de los pagamientos y la reciprocidad, la ley de causa-efecto que rige el cosmos: así como se
recibe, debe darse para que haya un equilibrio. Tal es la acepción del signo agua u ofrenda, mas allá del ritual de
sacrificio: es tiempo de reciprocidad, en el que debemos regresar un poquito de lo que nos ha sido dado.
Los nativos de este signo suelen ser pacientes pero también tenaces, saben ser trasparentes en sus acciones y suelen tener
facilidad para relacionarse siendo sus vínculos fuertes y profundos. Si está desequilibrado puede tener dificultad para
adaptarse y acarrear dolencias emocionales y rencores
Atl es el nombre que recibe el agua. En el tonalli atl observamos nuestro fluir, analizando todo lo relacionado con la
manera en que afrontamos las situaciones externas e internas y les permitimos su libre canalización y expresion. Los
nacidos en un día atl tienen facilidad para adaptarse a las diferentes circunstancias de la vida, saben ser transparentes en
sus acciones y aprovechan penetrar en la mente de los demás sugiriendo con sutileza.

10. ITZCUINTLI. PERRO


Orientación: Mictlampa, rumbo del norte. Color: blanco. Regente: Mictlantecuhtli
El perro es siempre señalado como un animal leal, arquetipo del compañero fiel. Esa es su naturaleza, y siendo así el
animalito no requiere condicionantes externos para ser leal a su propia esencia, que es gregaria y con un fuerte sentido de
pertenencia a la manada. Es decir que, a diferencia de los seres humanos, que frecuentemente condicionamos nuestro
“amor” a la conducta o la actitud de nuestros seres “amados”, el perro ama y eso es todo. Es amigable, leal y protector
porque esa es su escencia, que no depende de lo externo, ya que el amor y la lealtad surgen de dentro hacia afuera. Los
humanos casi siempre hacemos lo contrario: exigimos condescendencia, atención, sentido de pertenencia y un montón de
cosas más, sin lo cual no “podemos” seguir amando. La primera lección del perro es esa, que si eliminamos la
importancia personal (la egolatría) descubriremos que en nuestra esencia también está el amor incondicional.
El perro también indica la aventura, “el andar de pata de perro”, como se dice en México, es ser un viajero y andar de
aquí para allá. Esto refleja la naturaleza curiosa que tiene este animalito, pero la cualidad que equilibra esta característica
es que el perro que siempre regresa a casa: seguramente el lector conocerá de primera mano o a través de historias de
terceros algún caso de perros que viajaron kilómetros para encontrar a su familia, o que se habrán ausentado durante días
para finalmente reaparecer un buen día. Esto nos trasmite apego a la raíz, gusto por la estabilidad, a pesar de que exista
esa tendencia a viajar y conocer.
En otro contexto, perro es protección a lo propio, siendo el animal protector de la casa por antonomasia. Es el sentido de
manada de estos seres, que nos habla también de cooperación y orden jerarquico. Este aspecto, mal equilibrado, puede
degenerar en su acepción negativa, que incluye apego excesivo, celos y posesividad. Un perro excesivamente territorial
se vuelve peligroso, incluso para la casa a la que sirve.
Existe una creencia antigua, según la cual el perro es el animal que ayuda a las almas de los difuntos a cruzar cierto rio,
mas alla del cual inicia su viaje en búsqueda del descanso eterno. Se dice que si maltrataste a tu perro en vida, este te
abandonará y no podrás cruzar hacia el camino hacia el reposo, y te quedaras abandonado penando en este plano. Mas
allá del componente puramente mítico de esta creencia, este autor se pregunta si esto no tendrá algo que ver con la forma
en que nos tratamos a nosotros mismos y a nuestra envoltura egoica en vida. Si no fuimos leales a nosotros mismos, si no
conocimos la dicha de amar sin condición, si nos maltratamos o nos abandonamos, acaso el cruce de la conciencia “al
otro lado” resulte difícil. Por su carácter gregario, este signo se relaciona con la familia y la guía y protección que los mas
experimentados le confieren a los jóvenes. Asimismo, nos habla de cooperación y trabajo en equipo, ya que lo que un
solo perro (lobo, coyote o cualquier otro cánido) no puede lograr en solitario, lo alcanza cuando trabaja en conjunto con
sus pares.
Para los mayas, el signo perro se identifica con los vocablos Tzi (Kiche) y Oc (maya yucateco). Representa cualidades
tales como la autoridad y la justicia. Habla de orden y de respeto y obediencia. Se dice que este tiempo es apto para que
las personas con autoridad eleven su conciencia y su entendimiento. El mayista Sergio Calderon dice que este signo se
traduce como “jornada o huella”, y nosotros no podemos dejar de relacionar esta alusión con la autoridad que emana de
haber caminado mucho en la vida. De ahí que para los mayas este signo se relacione con el respeto a los ancianos, las
autoridades y las leyes. Los nativos de este signo se dice que son leales, excelentes compañeros, gente de familia que
muestran generosidad en la vida, con capacidad de liderazgo. Mal equilibrados pueden ser imprudentes, irreflexivos y
metiches.
En el tonalli Itscuintli, que significa perro, ponemos especial atención a nuestra lealtad, principalmente hacia nosotros
mismos, para después proceder con el análisis de la lealtad hacia los demás Del nativo del signo perro se dice que es un
inmejorable compañero de juego, leal y excelente guardián. Andariego por naturaleza siempre 15 retorna feliz al hogar.

11. OZOMATLI. MONO


Orientación: Cihuatlampa, rumbo del oeste. Color: negro. Regente: Xochipili
El mono simboliza entre muchas otras cosas la alegría, el juego, la inocencia. Es ese ser que siempre está jugando y
deleitándose brincando de rama en rama y generando todo tipo de ocurrencias. Es la capacidad de usar el humor y la
broma para salir adelante en las dificultades, usando la espontaneidad y la capacidad de asombro para resolver problemas.
Mono, por sus características, también alude a la habilidad manual y a la sensibilidad artística, siendo un signo propio de
musicos, pintores, artesanos, poetas y todo tipo de personas afectas al arte, y se dice que las personas nacidas en este día
tendrán facilidad en cualquiera de estas disciplinas. Ozomatli tambien tiene un componente sexual muy importante e
incluso se habla del uso de este aspecto para solucionar conflictos. Sobre todo en relación a la mujer, las fuentes históricas
nos hablan de un gran componente sensual asociado a este signo.
El lado menos positivo del signo mono consiste en la burla, la banalidad y la falta de respeto, lo cual debe evitarse en este
día y si se tiene como signo de nacimiento al mono. En otro nivel también habla de mal humor, ya que la energía
desarmonizada de ozomatli lo transforma de un monito juguetón a un gorila malhumorado, que en un segundo pasa de
hacer malabares con las papayas y bananas a lanzárnoslas en la cabeza…
Ozomatli es además un símbolo del ser que a través del juego y la alegria se vuelve divino, pues en la naturaleza el mono
es un animalito que trepa por las ramas de los árboles hasta llegar a lo más alto de ellas, mas cerca del cielo que la
mayoria del resto de los animales no voladores. Esta es una muy bella metáfora que nos habla de que en la vida la
seriedad puede llegar a ser un lastre, incluso cuando nos referimos a algo tan “serio” como la via espiritual. En realidad,
la vía espiritual no proscribe la risa y la alegría, antes bien las personas de espiritualidad mas manifiesta son a su vez
personas amables e incluso festivas. Carlos Castaneda decía a través de sus personajes que “el mayor logro de un
guerrero es poder reír todo el tiempo”.
En la zona maya, Batz/Chuen es el signo equivalente al ozomatli. Es un signo que se ha leido como "hilo", representando
el "hilo del destino o del tiempo" que se desenreda cuando se da la creacion del mundo. Se dice que en Batz/Chuen "estan
escritos todos los acontecimientos" y que esto simboliza el destino de cada uno de nosotros. Tambien se habla de que en
este signo se representa la union familar y de la pareja
Las personas nacidas en signo mono son alegres y festivas, multifacéticas, con habilidades tanto físicas como mentales.
Sus lados negativos incluyen la holgazanería, la irresponsabilidad, el uso excesivo del sarcasmo y el mal humor, incluso
explosivo.
Osomatli significa mono. Es un signo representante de la festividad, la alegría y la sexualidad, así como del movimiento
de la mano. Los nacidos en un día Osomatli suelen ser graciosos, divertidos y ocurrentes aunque en algunas cosas suelen
ser personas superfluas y en ellos se manifiesta una gran sensualidad.

12. MALINALI. HIERBA TORCIDA


Orientación: Huitztlampa, rumbo del sur. Color: amarillo. Regente: Pahtecatl
Malinali es un signo que representa el cambio y la renovación, pero a través de la actividad. Expresa la acción de ser
como la hierba, que se expande y crece por todos lados, ningún muro es suficiente para retener su avance, pues se mete
entre las grietas y las hendiduras. En ocasiones se representa brotando del esqueleto de una mandíbula humana, indicando
la regeneración de la vida. La vida no se puede contener, se expresa en todas las formas posibles y resurge de los sitios
mas insospechados, igual que la hierba.
También se asocia al signo con la cualidad de las cosas de regresar en ciclos de tiempo. Malinali no es solo una hierba,
sino una hierba torcida, indicándose la cualidad de algunas clases de plantas que se trenzan y tuercen para lograr tejidos
con los que se elaboran toda clase de cosas, canastas, mecates, etc. Acaso esta pueda ser una alusión a la capacidad de
creación inherente al signo.
En otro nivel, malinali es un símbolo de la mente y la voluntad humanas, que buscan conocer y lograr, que no se detienen
en su avance, que acceden y toman contacto con las cosas sobre la marcha, abriéndose paso de maneras insospechadas.
Es pues un símbolo de mucha voluntad pudiendo llegar incluso a ser, a veces, algo difícil de sobrellevar: la gente malinali
puede ser de esa gente voluntariosa que casi siempre se sale con la suya en todos los aspectos, que no se mide para
expresar su opinión y que busca la manera de prevalecer. De modo equilibrado, sin embargo, es signo propio de gente
que va al fondo de las cosas cuando quiere hacerlo, gente tenaz que logra lo que se propone a pesar de las dificultades.
Malinali también se asocia a la medicina e incluso a las plantas de poder. Se dice que es un signo propicio para generar
médicos y curanderas, y su regente Pahtecatl es patrono de todas las plantas medicinales, por lo cual se habla de la
capacidad de ayudar y servir a los demás de este modo, pero también de cualquier otra manera.
En tradición maya, el nagual "ee" o "eb", puede entenderse como "camino", en alusión a que representa un día de
voluntad logradora que nos permite ponerse en marcha para encontrar nuestro destino. De la gente nacida en día malinali
se dice que son personas altruistas, con capacidad para influir en otros, con gran creatividad y una voluntad muy firme.
Pueden tener altibajos en la vida lo que puede hacerlas pesimistas y amargas. Mal equilibradas tienden a ser necias y
poco mesuradas.
Malinalli se traduce como Hierba torcida. Representa la regeneración de las cosas, a la vez que las ambiciones que
poseemos, proponiéndose durante este día hacer un análisis de estas para buscar llevarlas a cabo, modificarlas o bien
desecharlas Los nacidos bajo este signo suelen ser personas con gran voluntad que se renuevan constantemente por medio
de la autoevaluación como resultado del propio conocimiento interno.

13. ACATL. CAÑA O CARRIZO


Orientación: Tlahuistlampa o Tlacopa, rumbo este u oriente. Color: rojo. Regente: Ixkimili
Acatl indica la necesidad de poner atención sobre el equilibrio que debemos guardar entre nuestra flexibilidad y nuestra
rigidez, para ser tal como una caña o carrizo que ni es completamente flexible, ni completamente rígido. Igualmente,
alude a la conciencia de la colectividad y su fuerza: un carrizo aislado se rompe fácilmente, pero un atado de ellos es
resistente. Es un signo muy mental, que trasmite inteligencia y buen juicio, y tiene que ver con el liderazgo, siendo la caña
un símbolo de mando (vara de mando). No por nada Ce Acatl, como signo, es también el nombre calendárico de
Quetzalcoatl, deidad tan querida y venerada por los ancestros.
La caña simboliza también el eje del mundo que conecta el cielo, la tierra y el inframundo, por lo cual se asocia este
signo con capacidad para mediar. Es un equivalente del arquetipo del árbol, la sagrada ceiba maya o los pilares de los
cuatro rumbos del universo. A traves del eje del mundo se comunican los diferentes niveles de la existencia, y la Mente y
el Corazón del Universo bajan a este plano como maestros y lideres espirituales. Por ello, Acatl es un tiempo propicio
para conectar con nuestro maestro interior y también con aquellos que se encuentran fuera de nosotros. Tiempo de ser
nuestro propio sacerdote o sacerdotisa, y de honrar a los guías espirituales. Tiempo de buscar el crecimiento hacia arriba
como lo indica la dirección en que crece y apunta el carrizo.
En otro contexto, Acatl alude a la columna vertebral, eje de nuestro cuerpo y por donde, se dice, ascienden las energias
telúricas para hacerse celestes.
En tradición maya Kiche, el nagual Aj, que equivale a Acatl, es la caña o el arbol, y tambien la milpa y la vara de mando,
y se dice que este signo trae consejo y ayuda de los planos superiores a este mundo. Indica también la familia y la
comunidad.
La gente relacionada con el signo caña es gente firme, honesta y recta que con frecuencia muestra capacidad de auxiliar y
servir de ejemplo a los demás. Siempre están analizando y observando todo, son gente de inteligencia notable y aunque
pueden ser poco afectivos, suelen inspirar confianza. Bien equilibrados poseen capacidad de liderazgo, mal equilibrados
pueden tener tendencia a la ociosidad, la pobreza, la indignidad.
Acatl quiere decir caña o carrizo. indica la necesidad de poner atención sobre el equilibrio que debemos guardar entre
nuestra flexibilidad y nuestra rigidez, para ser tal como una caña o carrizo que ni es completamente flexible, ni
completamente rígido. Los que nacen influidos por este día son observadores, analíticos y con objetivos muy presentes,
personas centradas y poco emocionales, muy francos en su trato.

14. OCELOTL. JAGUAR


Orientación: Mictlampa, rumbo del norte. Color: blanco. Regente: Tlazolteotl
El jaguar es un animal que simboliza al sol su paso por el inframundo. Cada noche el sol baja al mismo y pelea con las
fuerzas de la noche, emergiendo victorioso por el oriente al amanecer. Esta metáfora no requiere gran explicación: el
jaguar indica la guerra espiritual que debe librarse para iluminar al ser. La piel moteada del felino representa el manto
estelar, y al ser un animal que caza de noche, su visión es una alegoría del chamán o sacerdote que pueden “ver en la
noche”, esto es, que pueden entender el mundo espiritual.
Jaguar también representa la fuerza masculina, es el vivir sin miedo confiando en su propia potencia, la cualidad de la
astucia y el actuar en el momento oportuno: se dice que al jaguar no se le ve hasta que se le tiene encima, y una vez que se
le tiene encima es poco probable seguirlo viendo por mucho tiempo. Esta fuerza y eficacia como depredador hace que este
animal haya sido símbolo propio de militares y gobernantes. Es requerido el trabajo de introspección orientado a saber
controlar esa fuerza tan grande que posee, para que no se torne en desequilibrio y destructividad. Por ello, el signo del
jaguar en la cueva alude al viaje de introspección en el que el guerrero penetra sin miedo en el interior de si mismo para
acechar, cazar y matar sus debilidades. Al hacerlo, el signo adquiere una connotación igual de poderosa pero mas
enfocada al mantenimiento y la protección: es el símbolo de la “madre jaguar”, que provee y protege. Incluso la deidad
asociada al signo jaguar, Tlasolteotl, es un arquetipo asociado a la maternidad y la protección.
En tradición maya Quiche se asocia a Ix, nombre como es conocido el ocelotl, con la mujer, la madre y la energia
creativa. Algunos contadores también lo aluden como “chaman”, y según Sergio Calderón, renombrado mayista, la
alusión del signo es “limar asperezas”. En todos los casos parace haber un sustrato común: viaje interior, poder para
crear, protección y espiritualidad.
De los nacidos en día jaguar se dice que son atractivos por naturaleza, decididos y tenaces. Calculan las cosas antes de
lanzarse a su realización, como un jaguar espera el momento oportuno para atacar. Por regla general son cariñosos y
agradables, pero cuando se desata su enojo pueden ser violentos y peligrosos. Son gente valiente y arrojada, aunque por
su naturaleza calculadora difícilmente esto se traducirá en imprudencia. Lideres natos y que sobresalen de entre la
multitud, por regla general son confiables y responsables. Se dice también que los nativos de jaguar son atractivos por
naturaleza, decididos y tenaces. Por su asociación con el liderazgo y la profesión militar, en la antigüedad se decía que
podían ser de vida corta.
Ocelotl es el Jaguar. Indica la necesidad de reconocer nuestra capacidad de adentrarnos en nuestra “noche interior”, para
acechar y cazar a nuestra presa, que no es otra que nuestros propios defectos y errores. Por tanto, indica introspección.
Los que nacen en un día ocelote son cautelosos, tenaces y decididos, personas con don de mando y capacidad de saber
guiar a otras personas.

15. CUAUHTLI. AGUILA


Orientación: Cihuatlampa, rumbo del oeste. Color: negro. Regente: Xipe Totek
El águila es el ave solar por antonomasia, representando todas las cualidades de este: masculinidad, poder, majestuosidad,
fertilidad incluso, ya que se dice que todo lo que haga una persona de signo águila tenderá a llegar a buen término. Águila
es también la visión espiritual y la guía, es el ave que mira a lo lejos y puede aconsejar al caminante.
Confiere pues clarividencia y fortaleza espiritual, siendo un signo propio de sacerdotes y chamanes. Las plumas de águila
son no solo símbolo de nobleza, sino se asocian con la limpieza y la curación espiritual.
Se dice que este signo confiere la habilidad de volar sobre los problemas, los cuales no arrastran al nativo de este signo,
antes bien le conminan a elevarse y a sobresalir. Es un signo que confiere mando y liderazgo, capacidad de planeación y
ejecución. Los de signo águila suelen sobresalir sobre los demás, lo cual deben aprender a utilizar para el bien común. Su
visión aguda los puede hacer particularmente prósperos, la abundancia no falta en su casa.
En cierto nivel el águila indica la cualidad de desprendimiento, de desapego, ya que esta ave alza el vuelo y no mira hacia
atrás, vuela alto y lejos dejando lo terrenal y mundano allá abajo. Justamente, en alusión al signo muchos contadores del
tiempo indican que para adquirir y usar las alas del espíritu es necesario dejar atrás lo caduco. Por supuesto esto nos habla
de la cualidad de la libertad, del volar a donde nuestro anhelo mas legítimo nos lleve.
Tradiciones contemporáneas nos hablan de la metáfora del “Aguila” como ese ser que otorga la conciencia a los seres
vivos y que la reclama llegado el momento, lo cual recuerda las alusiones que se hacen en ciertas tradiciones mayas, cuyo
signo equivalente es Tzikin (kiche) o Men (Yucateco), el que se asocia también con las aves en general y con las águilas
en particular. Se dice que este es un nagual que representa al creador del universo y representa la totalidad de lo que
existe. También se describe como un día bueno para los negocios, en el que nacen personas con grandes expectativas,
prosperas y de gran carácter, que sin embargo tienden a ser volubles y abandonarlo todo en un minuto.
En cierto punto se le han conferido a este signo las cualidades del signo jaguar, sobre todo las relativas a la visión aguda,
el valor y el poder. De los nacidos en este día se dice que son gente valiente y decidida, con gran ambición y habilidad.
Su capacidad de planeación los hace grandes líderes. Entre sus defectos destacan la ambición desmedida y el egoísmo,
pudiendo además ser personas autoritarias, arrogantes e impulsivas
Cuauhtli significa águila. Es un signo que nos habla de la capacidad de observación y planeación. De manera análoga a
la de un águila, que observa y calcula todas las variables antes de proceder, la propuesta de este día en particular en la de
poner atención en lo que podemos observar, y calcular mejor nuestro actuar antes de comenzar cualquier actividad Es
símbolo de quienes sobresalen de los demás alcanzando las alturas, aman la libertad y son inteligentes y decididos.

16. COSCACUAUHTLI. AGUILA DE COLLAR, BUITRE O CONDOR


Orientación: Huitztlampa, rumbo del sur. Color: amarillo. Regente: Itzpapalotl
El buitre (cóndor o águila de collar) representa los linajes, la ancianidad, la sabiduría y la experiencia de vida. Representa
también la visión profunda y la autoridad, siendo el ave que mas alto vuela en el cielo, incluso mas que la propia águila
real. Indica la capacidad de reciclar, usar lo viejo en favor del desarrollo y el avance de lo nuevo: el buitre se alimenta de
lo muerto y con ello obtiene vida, metáfora que indica los ciclos de la existencia y la continua generación mutua entre la
vida y la muerte, así como la asimilación de todo lo que nos es dado, incluso lo que a primer vista podrá parecer negativo
o inservible. También existe la alusión a la función en la naturaleza de estas aves, que es de servicio: al comer la carroña,
realizan limpieza del medio. De los nativos del tiempo de coscacuauhtli decía que eran longevos y su destino era ser
maestros y autoridades. El lado negativo del signo incluye el sentirse demasiado importante, hasta el punto de actuar de
forma desconsiderada o con crueldad. Mas que esto, se debe poner los dones al servicio de otros, como se dijo este signo
indica la experiencia y sabiduría, y por ello nos llama a ejercer labor de servicio, enseñando y guiando a los que menos
saben. Un buen amigo y maestro de tradición neomexica explicaba alguna vez que el coscacuauhtli es un ave que vuela
más alto que el águila real pero que a la vez baja a la tierra. Mientras el águila real anda siempre allá arriba en sus asuntos
y solo de vez en cuando lanza un silbido audible desde la tierra, el coscacuauhtli desciende desde las alturas y se posa
sobre la tierra, lo que ha sido interpretado como la capacidad de “bajar” el conocimiento, la visión o la sabiduría a la
tierra. Llama pues a aprender pero sobre todo a enseñar.
Para las tradiciones mayas, este signo se dice Ajmaq (maya Kiche) o Kib (maya yucateco). Ajmaq llega a ser traducido
como “pecado”, pero también “perdón” en alusión a que es un tiempo en donde debe haber reconocimiento de lo que se
ha hecho erróneamente, para proceder a enmendarlo. Es un día que nos habla de corrección y enseñanza, quizá en alusión
también a como los mas ancianos corrigen a los más jóvenes, mostrándoles la senda correcta. Para el Mayista Sergio
Calderon, el signo se traduce mejor como “copal” o “entendimiento”, probablemente en alusión a lo mismo, siendo un
tiempo propicio para entender el camino correcto, la forma correcta de vivir, que nos enseñan los ancianos que han
llegado a avanzada edad. El término “copal” sin duda alude a lo ceremonioso, a la elevación de plegaria.
Son buenos lideres y padres de familia, cuya visión práctica de la vida les permite tener éxito y alcanzar metas muy
elevadas.
Durante el día Coscacuauhtli, que se traduce como águila de collar y está asociado al buitre, la propuesta es poner
atención en aquellas cosas que consideramos desecho, para decidir si es posible reutilizarlas. El buitre, Zopilote o
zopilote es un ave que justamente recicla la materia muerta, y de este mismo modo nosotros debemos estar atentos a todo
aquello que aparentemente ya no tienen ningún valor, y buscar transformarlo en algo útil. Los nacidos en un día buitre
suelen ser gente que sabe aprovechar hasta el máximo las oportunidades que se les presentan y son muy hábiles para
encontrar utilidad práctica a ideas, objetos, instrumentos y toda clase de materiales que otros hayan desechado.

17. OLIN. MOVIMIENTO


Orientación: Tlahuistlampa o Tlacopa, rumbo este u oriente. Color: rojo. Regente: Xolotl
El signo movimiento es rico en significados. Por supuesto el mas evidente alude justamente a la cualidad de moverse,
indicando la cualidad del universo de estar constantemente dinamico. Incluso lo que parece estar inmóvil “vibra” a un
nivel fundamental, hoy sabemos que las partículas subatómicas están en constante cambio y movimiento, e incluso el
planeta tierra, que nos parece estático, se mueve a la vertiginosa velocidad de 29 kilometros por segundo en su recorrido
alrededor del sol. Olin alude también al constante cambio de las cosas en el universo, pues todo esta siempre deviniendo
en otra cosa distinta. “El cambio es lo permanente” dicen los místicos de oriente.
En otro nivel, olin representa las fuerzas del universo que crean y destruyen. Por esa causa frecuentemente se dibuja al
signo en dos colores distintos, muchas veces negro y rojo, indicando la dualidad manifestada que subyace a todo, según
el pensamiento de los antiguos mexicanos: lo masculino y femenino, lo creativo y destructivo, lo frio y lo caliente.
Ambas fuerzas aparentemente encontradas en realidad se complementan e interactúan constantemente. El ícono del signo
movimiento también suele semejar a una mariposa, insecto que, justamente, se caracteriza por andar siempre moviéndose
de aquí para alla. El vocablo “olin” se relaciona de cerca con hulli (hule) y por ende con el juego de pelota, que según los
estudiosos simbolizaba el movimiento de los astros y la dinámica de las fuerzas que crean y renuevan el cosmos. La
misma pelota de hule, un elemento circular, alude a movimientos cíclicos (circulares) del tiempo, donde periódicamente
todo retorna al mismo estado y/o lugar.
Otro nivel de entendimiento del signo permite asociarlo con los terremotos, los movimientos de tierra que, según la
leyenda de los soles, están destinados a terminar con el quinto sol que nos alumbra, cuyo nombre es 4 olin, 4
movimiento.
Para los mayas, el signo equivalente es Noj, que según varios sitios web significa sabiduría o inteligencia. El Nawal Noj
es la sabiduría y la inteligencia de cada ser vivo, y se dice que “no hay sabiduría completa, todos tenemos una porción de
sabiduría, por eso nadie es completamente sabio o enteramente inteligente” (sic).
Quizá sea posible correlacionar este significado con la necesidad de permanecer en movimiento intelectualmente,
siempre aprendiendo, siempre indagando. Por supuesto, a Noj se le asocia también al movimiento de la bóveda celeste y
a los terremotos. Este dia se considera propicio para pedir consejo y escuchar la sabiduría de los mayores.
Este es un signo de personas dinamicas, que siempre están en constante movimiento físico, mental o energético,
continuamente se encuentran planeando y ejecutando cosas, gustan mucho de viajar y pueden tener facilidad para
actividades como la danza. Se dice que son gente afortunada que brilla naturalmente, que sabe llamar la atención y que es
poseedora de gran valor. Gran capacidad de cambio y adaptación. Su lado menos positivo les otorga una tendencia a ser
distraídos u olvidadizos, a ser volubles y arrogantes y a reaccionar con un exceso de emocionalidad. Si no están bien
equilibrados también pueden ser indecisos o desistir fácilmente de sus empresas.
Ollin es el movimiento y un símbolo de actividad constante partiendo del principio que dicta que nada es estático en la
naturaleza. Es indicativo de observar los movimientos que se dan a nuestro alrededor, así como en nuestra propia
persona. Los que nacen regidos bajo este signo son sumamente activos e inquietos, con gusto por viajar.

18. TECPATL. CUCHILLO DE PEDERNAL


Orientación: Mictlampa, rumbo del norte. Color: blanco. Regente: Chalchiuhtotolin
El cuchillo de pedernal, como símbolo, tiene variadas acepciones. En algunos círculos se dice que representa la mente y
su actividad, que “corta” las cosas, las examina, las desmenuza, como un hombre de ciencia diseca su espécimen de
estudio o como un cirujano va abriendo capas de tejido hasta llegar a la raíz del problema. Otro de sus aspectos es el del
pedernal que se usa para encender el fuego, que ha sido comparado con la acción de generar ideas, que brotan como
chispas de fuego, iluminando la mente. En todo caso, se le asocia a este signo con agudeza mental e inteligencia. La
acción de cortar es metáfora de indagar, cortar capa tras capa hasta llegar a la medula de las cosas, al conocimiento cierto
de algo. También se asocia a las personas que van “abriendo camino” por la vida, indicando dotes de liderazgo y firmeza
de carácter. Consideramos que es un signo muy poderoso, de naturaleza muy mental, aunque veremos que muchas de sus
acepciones aluden también al lado opuesto, intuitivo y espiritual.
El cuchillo nos remite de inmediato también a la obsidiana, y en tradiciones mayas su glifo parece indicar el símbolo del
espejo, siendo relacionado con la acción de “pulir”. En este sentido se concibe como tiempo de pulir nuestra personalidad
para reflejar mejor (pulir tu espejo), lo cual puede indicar mucho trabajo con el ego y la importancia personal. El espejo
de obsidiana es un elemento presente en tradición autóctona, que nos habla de esto justamente. Tezcatlipoca, relacionado
con el norte y el espejo de obsidiana, es aquel que nos muestra nuestro rostro tal cual es, sin agravio, pero también sin
piedad.
Al hablar del cuchillo, tanto de pedernal como de obsidiana, sin duda hay que referirse al tema del sacrificio, ya que lo
cierto es que el símbolo del cuchillo no escapa a la vinculación con la muerte. Los animales de los que nos alimentamos
son sin duda, también, un sacrificio. Pierden la vida para que nosotros podamos conservarla. Así, el cuchillo, la muerte y
la sangre están relacionados de cerca. Por ello, Tecpatl nos puede hablar de los sacrificios que debemos hacer para crecer,
lo que es sin duda una de esas partes difíciles de este signo. En la cosmovisión ancestral, la sangre es portadora del
tonalli, la energía circulante en el universo. El sacrificio o autosacrificio en el que se ofrendaba esta, era en realidad una
“paga” con tonalli, una manera de devolver el preciado don de la vida que nos fue otorgado.
Por ser productos surgidos de elementos volcánicos, el pedernal y la obsidiana se asocian tambien al fuego y al sol. Y al
ser el fuego un símbolo por antonomasia de lo espiritual, no es de extrañarse que Tecpatl tenga estas acepciones, como
decíamos anteriormente. En tradición maya, el nagual Edznab o Tijax, se asocia con el espejo lo mismo que con el
cuchillo. Se dice que es un tiempo para enfrentar dificultades, para reflexionar en la igualdad de todos los seres, para
dejar de tener enemistades con los semejantes. Sergio Calderon, reconocido mayista, quien tiene una visión un tanto
distinta de los signos de la cuenta maya, nos habla de que este signo debe leerse como “medirse con el eco”, en una
hermosa metáfora que nos habla nuevamente de equidad, justicia, de reflejarse en el espejo del otro.
De las personas de signo Tecpatl se dice que son gente de gran inteligencia, metodicas y analíticas, rectas y valientes y
con capacidad de sacrificarse por un bien común o un objetivo elevado. A pesar de su apariencia fría y dura, generan gran
confianza cuando se les conoce bien. Su lado menos positivo los puede hacer hirientes, conflictivos y personas que llegan
a generar confrontaciones y discusiones inecesarias.
Tecpatl, el cuchillo de pedernal, simboliza el acto de cortar de raíz situaciones inconvenientes a nuestro desarrollo. Su
extremado filo nos lleva a pensar que representa el análisis metódico que nace en ocasiones de la simple curiosidad,
haciendo incisiones de todo aquello que queremos conocer desde el exterior hasta adentro, abriendo capa por capa hasta
llegar al fondo de la estructura para descubrir la esencia original. Los nacidos en un día Tekpatl son muy estudiosos.
siempre están llenos de inquietud por saber mucho mas de las cosas que les interesan hasta llegar a los mas recónditos
lugares, en ocasiones demasiado racionales dado que siempre justifican sus actos y pensamientos a través de la razón.

19. QUIAHUITL. LLUVIA


Orientación: Cihuatlampa, rumbo del oeste. Color: negro. Regente: Tonatiuh
Iconográficamente, se representa con la cabeza de la deidad de la lluvia, Tlaloc. Filosóficamente, lluvia nos habla de
conexión del cielo y la tierra y de purificación por agua (aquí cabe el mito universal del diluvio purificador), pero también
de trasmisión de información (linajes ancestrales).
La lluvia es aquello que se requiere para que haya vida y alimento, no solo en el sentido físico sino también en el sentido
figurado. Si bien es necesario sembrar las semillas, estas no germinarán si no existe la bendición de la lluvia que las hagan
madurar. Esta es una bella metáfora, que habla de cómo no somos autosuficientes, siempre se requiere un “algo mas” que
nos de ese impulso que requerimos. En realidad, “ese algo más” está siempre presente, siendo labor del
macehual agradecer por las bendiciones del cielo mas allá que pedir por ellas (en este contexto, recordar que si bien había
ceremonias de petición de lluvias antes de la siembra, también tenían su peso especifico las ceremonias de
agradecimiento por la misma, después de la cosecha). Esta trecena esta apta pues para reconocer lo que nos ha sido dado
y constantemente nos está “lloviendo” gratuitamente. Aquí cabe otra de las acepciones de Quiahuitl: imparcialidad (la
lluvia cae para todos).
No obstante todo lo anterior, la lluvia tiene una dualidad implícita, ya que no es lo mismo una lluvia suave que una
tormenta destructiva. La primera fertiliza los campos, la segunda puede ser un obstáculo para que produzca maíz. Se
llama pues a reconocer la dualidad en la que estamos insertos, y adaptarse a ella, mas allá de que la forma en la que nos
esta lloviendo nos resulte agradable o desagradable, favorable o desfavorable. Porque ya sea con lluvia moderada o con
tormenta abundante la tierra debe seguir siendo trabajada, los campos mantenidos y la familia alimentada. Por ello quizá,
lluvia es un signo que implica voluntad, siendo considerado tiempo para esforzarse y lograr. Sin esfuerzo no hay
crecimiento, y por ello incluso la dificultad es una bendición, si se le observa con la actitud correcta.
En tradición maya Kiche, el nagual Kawok, que significa “tormenta” o “trueno”, tiene asimismo la acepcion de
"resurgimiento" (quizá porque con la lluvia todo crece de nuevo), y habla de la familia, la regeneración de la vida y el
conocimiento a través de la descendencia y los linajes.
De los nativos de este signo se dice que son gente sensible, de pensamientos profundos, muy imaginativos y que tienden
a causar impacto en los demás. Sus proyectos suelen ser fértiles y llegar a buen término. Pueden llegar a ser furibundos y
tormentosos, en esos momentos llegan a ser destructivos.
El tonalli Quiahuitl representa nuestra capacidad de ser como la lluvia, fertilizando y alimentando nuestros proyectos
para hacerlos fructificar, o bien echarlos a perder con un exceso de ímpetu, como una lluvia torrencial que acaba con la
siembra antes de ser cosechada. Los nacidos bajo este signo son sumamente imaginativos, tienen un carácter cambiante,
son obstinados cuando se proponen algo arrasando cualquier clase de obstáculos.

20. XOCHITL. FLOR


Orientación: Huitztlampa, rumbo del sur. Color: amarillo. Regente: Xochiquetzal
Xochitl es el signo que ocupa la posición ordinal numero 20 en la rueda de arquetipos, siendo el último de ellos. Esto ya
de por si expresa la cualidad de culminación de las cosas: lo “florecido” es aquello que se llevó a término, aquello que
llegó a su culmen. Esta idea empalma inmediatamente con la orientación de la trecena hacia el sur, rumbo de la voluntad:
es tiempo de generar para culminar, para florecer, para obtener lo que nuestro corazón desea.
Justamente la metáfora del florecimiento como culmen de las cosas produce los conceptos de “habla florida” y
“pensamiento florido”, indicando que tanto nuestros pensamientos como nuestras palabras han de orientarse hacia lo
positivo, lo elevado, y debemos esforzarnos hasta lograr que tanto nuestro pensamiento como nuestra palabra sea elevada.
La flor ha sido asociado con todo lo bello que hay sobre el mundo, y en este aspecto la indicación es hacia generar belleza
también nosotros: todo lo que salga de ti debe ser florecido.
Es un signo que, por las mismas razones, se relaciona con la cultura y las artes, la música, la pintura, la poesía, la
artesanía y la danza.
Flor tambien se asocia con el placer y el goce, y por ello las advertencias sobre la forma desequilibrada de vivir este
signo están orientadas hacia evitar la vanidad y la banalidad. Lo bello es también perecedero, y la apariencia nos engaña.
La vida centrada en los placeres de todo tipo frecuentemente lleva al desequilibrio. En tradición maya Kiche, el nagual
Ajpu, nombre del signo flor, se asocia con el sagrado cazador con cerbatana. Hun Ajpu (que significa 1 Ajpu, 1 flor para
los nahuas) es el nombre calendárico del dios padre, que engendró milagrosamente al sol y la luna, una deidad primigenia
de quien surge la vida. A la vez, se asume a Ajpu (o Ahau, en maya yucateco) como el símbolo por antonomasia de “la
conciencia solar”, esto es, Aquel Ser que rige y gobierna el universo, que es también parte de nosotros mismos. A través
de la materia, este Ser florece en incontables formas…
Los nacidos en signo Xochitl se dice son personas sensibles, románticas, con un gran encanto, pueden ser de gran belleza
exterior o interior, amantes de la cultura y las artes. Deben cuidar no volverse mundanas o banales, a veces tienden al
excesivo idealismo lo cual les acarrea frustraciones e incluso les impide el bienestar material.
Xochitl traduce literalmente como Flor. Indica observar nuestro florecimiento, los frutos que hemos dado o que hemos
sembrado a lo largo de todo el proceso. Xochitl es todo lo hermoso y lleno de cualidades. Las personas nacidas bajo este
signo son muy creativas con sensibilidad que da origen a la creatividad artística.Los de signo flor tienen la
responsabilidad de dar buenos frutos.
II. LAS TRECENAS
1) Ce Cipactli es un tiempo que nos mueve a emprender proyectos, a hacer un repaso de nuestra salud física y a nutrir y
dejarnos nutrir, como el padre-madre existencial-divino nos nutre. Nos llama a ser generosos y abiertos para recibir
los dones de la vida.
Orientación: Tlahuistlampa o Tlacopa, rumbo este u oriente. Color: rojo. Regente: Tonacatecuhtli.
2) Ce Ocelotl es un tiempo que nos mueve a la introspección y el mejoramiento de nosotros mismos a través de la
reflexión, a enfrentarnos con valentía con aquello que nos impide crecer espiritualmente, a buscar usar nuestros
dones, cualesquiera que estos sean, para servir a otros. Nos pide honrar la parte creativa del universo, incluyendo al
sexo femenino. A buscar lo trascendente, a expresarnos cuidadosamente y a estar en sintonía con la sabiduría que nos
viene de nuestros ancestros.
Orientación: Mictlampa, rumbo del norte. Color: blanco. Regente: Ehecatl-Quetzalcoatl.
3) Ce Mazatl nos mueve a trabajar con nuestra percepción, tanto externa como interna, nos llama a poner atención en
todo momento a nuestro entorno inmediato y a nuestro mundo emocional interior, a respetar y honrar aquello de
donde nos viene el sustento y a aceptar nuestra responsabilidad en la vida, buscando el equilibrio y lo elevado, lo
solar, en ella.
Orientación: Cihuatlampa, rumbo del oeste. Color: negro. Regentes: Tepeyolotl, Tlazolteotl.
4) 4) Ce Xochitl nos propone tener la voluntad necesaria para florecer, en todos los aspectos posibles, a enfocarnos en
lo que es bello y en lo que es positivo, a disfrutar lo que la vida nos ofrece y a nutrirnos de la experiencia que
adquirimos en el camino. A su vez, nos pide no abandonarnos a los placeres sino a disfrutarlos con templanza, a no
ser negligentes con nuestras palabras, nuestros pensamientos o nuestros actos y a reconocernos como seres sagrados,
partícipes de la Conciencia Universal (solar) que ha florecido a través de nosotros.
Orientación: Huitztlampa, rumbo del sur. Color: amarillo. Regente: Huehuecoyotl.
5) Ce Acatl es un tiempo que nos pide conectarnos con nuestros maestros interiores y exteriores, recibir su enseñanza,
buscar crecer espiritualmente, aprender a mediar, a no ser sumamente rígidos ni exageradamente flexibles. Nos pide
cultivar la rectitud y el buen juicio, poniendo en orden nuestra mente y nuestros sentimientos.
Orientación: Tlahuistlampa o Tlacopa, rumbo este u oriente. Color: rojo. Regente: Chalchiuhtlicue.
6) Ce Miquistli es un tiempo que nos orienta a ser conscientes de nuestra mortalidad para aprovechar mejor la vida,
recordar y observar los ciclos en los que estamos inmersos, ya sean personales o colectivos, honrar a nuestros
ancestros y a las generaciones que nos precedieron, y observar nuestros pensamientos para aprender a gobernarlos
Orientación: Mictlampa, rumbo del norte. Color: blanco. Regente: Tecciztecatl.
7) Ce Quiahuitl llama a trabajar mucho con los agrados y desagrados, buscando ser como la lluvia, que cae para todos
(ideal de justicia y generosidad), buscando reconocer lo que “nos llueve” todo el tiempo. Llama a dar tu fertilidad en
todos sentidos, para nutrir a los otros (aportar ideas, acciones, rezos). Se puede dedicar tiempo a reflexionar alrededor
de la familia, el linaje, la tradicion.
Orientación: Cihuatlampa, rumbo del oeste. Color: negro. Regente: Tlaloc.
8) La trecena de Ce Malinalli es un tiempo propicio para favorecer la cualidad humana de lograr, conocer, abrirse paso.
Tiempo de afianzar proyectos y buscar ampliar conocimientos en cualquier área que nos interese y apasione. Una
trecena para sanar y hacer ofrendas para sanar (merecer la salud, cambiar el estilo de vida, comprometerse con el
bienestar). Darse a nuestros semejantes, para servir al bien común.
Orientación: Huitztlampa, rumbo del sur. Color: amarillo. Regente: Meyahuel.
9) La trecena de Ce Cóatl esta propicia para equilibrar el cuerpo, reflexionar sobre los cambios y los ciclos, aprender a
cursarlos armónicamente. Propone enfocarse en hacer buen uso de nuestro fuego interno para ascender, quizá
trasmutando la energía sexual y elevando con ello la conciencia. Escuchar el cuerpo, armonizarnos con él. Revisar
nuestra salud, hacer uso de nuestra inteligencia en equilibrio con nuestras emociones. Planear y ejecutar,
relacionarnos con el mundo de manera armónica.
Orientación: Tlahuistlampa o Tlacopa, rumbo este u oriente. Color: rojo. Regentes: Xiuhtecuhtli,
Tlahuitzcalpantecuhtli.
10) La trecena de Ce Tecpatl esta propicia para reflexionar sobre los sacrificios que estamos dispuestos a hacer para
crecer o avanzar en todas las áreas de nuestra vida. Es un tiempo que nos pide disciplina y disposición para examinar
nuestra aéreas de interés, aprender a ser metódicos, ordenados. Trabajar con nuestro ego, “pulir nuestro espejo”, a
través de nuestras relaciones con los demás, buscando hacerlas mas armónicas. Reconocer nuestro legado ancestral,
profesar respeto por los que nos antecedieron. Buscar iluminar nuestra noche interior.
Orientación: Mictlampa, rumbo del norte. Color: blanco. Regentes: Mictlantecuhtli, Tonatiuh.
11) La trecena Ce Ozomatli propone trabajar con nuestras emociones, y hacer uso de la alegría para crecer,
permitiéndonos jugar un poco, ser como el mono, espontáneos y alegres. Conectar quizá con nuestro lado artístico y
buscar sanación de cualquier afección que tengamos, sea esta física, mental u emocional. Armonizar nuestro entorno
familiar y con la pareja.
Orientación: Cihuatlampa, rumbo del oeste. Color: negro. Regente: Tlazolteotl, ¿Tepeyotlotl?
12) Ce Cuetzpalin es una trecena de mucho trabajo interior, que nos pide ser honestos con nosotros mismos, ser agiles
como la lagartija, confiando en la sabiduría interior sin temer caerse de la pared. Recordar que así como la semilla no
necesita instrucciones para germinar, ya que dentro de nosotros existe la sabiduría necesaria para tal fin, hay que
confiar en la propia intuición y en la conexión con la red universal, que nos une y nos da mantenimiento.
Orientación: Huitztlampa, rumbo del sur. Color: amarillo Regentes: Iztacoliuhqui, Tezcatlipoca.
13) Ce Olin es una trecena que nos mueve a reconocer la dinámica de las cosas en el universo, a reconocer esta misma
dinámica en nosotros mismos, a buscar conocer permanentemente, a escuchar el consejo y la sabiduría, y a
reflexionar en la polaridad que crea y renueva el cosmos, y por supuesto en la capacidad del amor para movernos en
la vida.
Orientación: Tlahuistlampa o Tlacopa, rumbo este u oriente. Color: rojo Regente: Tlazolteotl.
14) La trecena de Ce Itzcuintli nos llama a reflexionar sobre la lealtad y el amor incondicional, sobre la capacidad de
formar parte de un grupo y trabajar en equipo, permitirnos ser curiosos, conocer nuevos horizontes aunque siempre
guardando un respeto y una afinidad por aquello que es nuestra raíz, nuestro hogar. Nos habla sobre proteger y
enseñar, sobre respeto a la autoridad, obediencia y trasformación, estar siempre dándonos con generosidad y
buscando la sabiduría que se puede encontrar en el amor y el servicio al prójimo.
Orientación: Mictlampa, rumbo del norte. Color: blanco. Regente: Xipe Totec.
15) La trecena de Ce Cali puede aprovecharse para generar introspección, meditación, reflexión sobre nosotros mismos.
Para armonizar nuestro hogar. Para trabajar con los sueños y develar conocimiento oculto. Para buscar los rayos del
sol que anuncian el amanecer en nosotros mismos.
Orientación: Cihuatlampa, rumbo del oeste. Color: negro. Regente: Itzpapalotl.
16) El tiempo de Ce Coscacuahtli es tiempo propicio para reconocer a nuestros mayores, para conectarnos con la
sabiduría de los ancianos, para aprender a ser prácticos, a usar todo lo que nos es dado, incluso lo que parece simple
basura o materia muerta, para brindar el servicio de enseñar lo que podamos enseñar, todos tenemos algo que aportar.
Es un tiempo para reconocer y enmendar errores y reflexionar en nuestra dualidad como seres imperfectos pero que
pueden elevarse por encima de sus limitaciones.
Orientación: Huitztlampa, rumbo del sur. Color: amarillo. Regente: Xolotl.
17) El tiempo de Ce Atl es tiempo propicio para trabajar con las emociones generando la inteligencia emocional
necesaria para gestionarlas sanamente, aprender a distinguir cuando movernos en la vida y cuando tomar una pausa,
un descanso, equilibrando ambas actitudes para estar en armonía. La trecena nos pide tener siempre reciprocidad con
nuestros semejantes y con el universo mismo, y nos propone trabajar con nuestro ego para poner nuestros logros y
talentos al servicio del bien común.
Orientación: Tlahuistlampa o Tlacopa, rumbo este u oriente. Color: rojo. Regente: Chalchiuhtotolin
18) La trecena de Ce Ehecatl está apta para llevar a cabo todo lo que tenga que ver con comunicar mediante la palabra,
para reflexionar sobre la forma en la que usamos esta misma, buscando hacerla florida mediante el uso de la verdad,
la armonía y la oportunidad. Para analizar y armonizar nuestro entorno y para hacer contacto con nuestro fuego
interior. Para fomentar el orden y el bienestar de la familia y hacer conciencia de la importancia de la respiración.
Color: blanco. Regente: Chantico.
19) Ce Cuauhtli nos llama a buscar la visión elevada, la visión espiritual, a adquirir la habilidad de volar sobre los
problemas, planeando y ejecutando con arrojo lo que haga falta pare trascenderlos. Se nos pide desapego para poder
ser libres y volar a donde nuestro anhelo mas legítimo nos lleve. Es un tiempo bueno para los negocios y todo aquello
que genere prosperidad material. No olvidar disfrutar de la belleza de la vida con mesura y moderación
Orientación: Cihuatlampa, rumbo del oeste. Color: negro. Regentes: Xochiquetzal, ¿Ixtliton?
20) El tiempo de Ce Tochtli se nos muestra como un periodo que cierra y abre ciclos, en donde podemos usar la
inteligencia y el ingenio para generar nuevos proyectos, donde se nos es permitido el goce con moderación y nos
debe hacer reflexionar sobre los ciclos de la vida y el universo. Tiempo de aprender mediante la faceta festiva de la
vida.
Orientación: Huitztlampa, rumbo del sur. Color: amarillo. Regentes: Xiuhtecuhtli, Itztapaltotec
III. DEIDADES REGENTES
CENTEOTL. Se puede nombrar también como Cinteotl, Centeotecuhtli (señor del maíz) y Tlazohpilli (niño amado), y
como sus nombres dejan ver de inmediato, está asociado al maíz. En la iconografía es fácilmente identificable por las
mazorcas presentes en su tocado. Centeotl habla de fertilidad, de sustento, era una deidad sumamente venerada debido a la
evidente razón de que sin maíz no pudo existir civilización ni progreso en la antigua Anahuac. Para lo relativo a la lectura
de la cuenta, cuando esta deidad aparece también proponemos siempre tener en cuenta la metáfora de la semilla, que nos
alude a los linajes, la sabiduría interna, la necesidad de trasmutar. La metáfora del maíz como alusión a aquello que es
salvaje y es mejorado y culturizado no debe dejarse tampoco de lado:el teocintle, planta silvestre que fue domesticada por
los antiguos mexicanos, se convirtió en su versión mejorada, el maíz, y así pudo servir como sustento para toda una
civilización. El vocablo Centeotl también se ha querido relacionar con la unidad cósmica de la que proviene todo,
pareciéndonos a nosotros que este es otro reforzamiento de la metáfora de la semilla que puede leerse en esta deidad: en la
semilla se encuentran condensadas todas las generaciones de plantas pasadas, y en cierto modo, como potencialidad,
también las del porvenir. Somos nuestros ancestros a la vez que nuestra descendencia, y en la diversidad está presente la
impronta de la unidad primordial. Centeotl rige el numeral siete de la secuencia diurna, el numeral cuatro de la secuencia
nocturna y la veintena de Huey Tosostli.

CHALCHIUHTLICUE. En la iconografía destaca su nariguera de serpiente bicéfala tanto como su tocado con forma de
cráneo de cocodrilo. Chalchiuhtlicue es la esencia de las aguas terrestres, ríos, lagos, mares y aguas subterráneas. El agua
siempre se relaciona con el cuerpo emocional, por lo cual esta regencia indica trabajo con el mismo. Chalchiuhtlicue
indica la necesidad de fluir y no estancarse, pues el agua que se estanca se pudre, mientras que el agua en movimiento
representa vida y fertilidad.
Aquí se nos habla de la necesidad de fluir con los sentimientos y las emociones, para encontrar equilibrio.
Chalchiuhtlicue
también es una escencia maestra que “pule las piedras preciosas que entran a la corriente”, en una metáfora de cómo el
individuo ha de buscar “lavarse” del barro que lo rodea para encontrar su brillo interno, como un jade que es lavado por
las aguas del rio. Obviamente, todas las asociaciones del agua caben en la descripción de esta deidad: adaptabilidad,
equilibrio entre el movimiento y la quietud, purificación, tenacidad. La asociación agrícola y que tiene que ver con la
fertilización d ela tierra tampoco ha de pasarse por alto.
Esta diosa rige el signo Coatl de la secuencia de los días, la trecena de Ce Acatl, el numeral tres de la secuencia diurna,
el numeral seis de la secuencia nocturna y las veintenas de Acahualo, Etzalcualistli y Atemostli.

CHALCHIUHTOTOLIN. Se traduce como “pájaro de Jade”, y se ha descrito como un símbolo del trabajo con el ego.
Se representa como un guajolote muy bello y adornado, del que se dice es una encarnación de Tezcatlipoca. El guajolote,
como dijimos, simboliza al ego, ese que se puede llegar a inflar como esta ave infla el pecho y extiende su plumaje para
pavonearse. Se dice que “hacer el ego de jade” consiste en ejercer control sobre el mismo para evitar que nos vuelva
egoístas, con la finalidad de ponerlo al servicio de los demás. Un ego firme se relaciona, casi siempre, con un carácter
fuerte, que es propicio para ejercer el liderazgo, pero que si no se aprende a controlar puede degenerar en la tiranía y el
despotismo. Este es justo el trabajo que se propone mediante esta esencia: no la negación de aquello que nos hace ser lo
que somos, incluida nuestra historia personal, nuestros logros y nuestras medallas, nuestro estatus o nuestra condición
social, ganada con esfuerzo en muchos casos, sino el uso de todo esto para buscar el bien común. El líder, el experto o el
gobernante debe poner su estatus al servicio de los demás, y no servirse de los demás para el mayor engradecimiento del
ego propio. Por esta razón, se ha escrito, este signo y este trabajo era propio de gobernantes y líderes, que buscaban hacer
de jade su ego, su personalidad, para poder dirigir con bien y hacia a la armonía a la sociedad toda. Incluso el autor
escucho alguna vez una leyenda acerca del guajolote, que asume que fue un ave que no quiso volar, sino que asumió la
misión de permanecer sobre la tierra, enseñando y alimentando. Esta última acepción es literal (hasta nuestros días, el
guajolote es una comida propia de momentos solemnes y personas a las que se les quiere presentar respeto) pero también
metafórica: el líder o maestro experto nos sustenta y nos alimenta con su trabajo o su conocimiento.
Chalchiutotolin rige el signo Tecpatl de la secuencia de los días y la trecena de Ce Atl.

CHANTICO. Deidad femenina, consorte de Xiuhtecuhtli, representa al fogón del hogar, el que da calor y seguridad a la
casa y con el cual se cocinan los alimentos. Esta diosa también se asocia con el fuego ctonico, el que habita dentro de la
tierra, por lo cual se vincula con los volcanes y trasforma los minerales del interior de la tierra. Quizá por esto se le ha
descrito como deidad protectora de los joyeros, los talladores de piedra y los canteros. Chantico no escapa hoy en día de la
asociación con el “fuego interno” de cada ser vivo, mencionándosela a veces como “el fuego del corazón”, ese elemento
que anima al cuerpo y genera calor, pero también la esencia de los sentimientos que vinculan a las personas de un hogar.
Su nombre calendárico es 9 perro, día que sucede durante esta misma trecena y que denota cierta leyenda que refiere que
a esta deidad se le castigo convirtiéndola en perro por no haber realizado ofrenda de agradecimiento al comer pescado. En
la antigüedad, debajo del fogón del hogar, donde mora Chantico, se enterraba el cordón umbilical de las niñas recién
nacidas, para que estas mostraran devoción y amor por sus hogares.
Esta diosa rige la trecena de Ce Ehecatl.

CHICOMECOATL. Es la escencia femenina del maíz, dualidad complementaria de Centeotl. Se considera parte de un
complejo de varias diosas relacionadas al maíz, que incluyen a Xilonen (el maíz tierno) Chicomecoatl (el maíz maduro) e
Ilamatecuhtli (el maíz seco). También se ha argumentado que formaba una triada con Chalchiuhtlicue, diosa de las aguas,
y Huixtocihuatl, diosa de la sal.
Se le asocia con la fertilidad y la vegetación. Su advocación principal es la mazorca, y se dice que es la deidad que
inventó las tortillas, Rige la veintena de Huey Tozoztli, en donde se le realizaban grandes ceremonias.

CIHUACOATL. Su nombre significa “Mujer serpiente”, y en las fuentes hay referencias a ella como Quilaztli, que
quiere decir “la que propicia el verdor”. Es una diosa que se confunde con Coatlicue y con Tlazolteotl, pues se la
menciona como diosa de la tierra, la fertilidad y protectora de los partos y de las almas de las mujeres muertas en el parto.
Su santuario estaba en el recinto sagrado de Tenochtitlan y representaba las propiedades del inframundo y del vientre
materno. Al encontrarse relacionada con el numeral 13 de la cuenta, podemos suponer que nos habla de generación de un
nuevo ciclo y de protección y bendición de un ciclo concluido, ya que el numeral 13 va asociado con la culminación, el
florecimiento y, paralelamente, con la trascendencia de un ciclo previo para “saltar al siguiente nivel”. El sumo sacerdote
de los mexicah era llamado justamente Cihuacoatl, por lo que podría haber connotaciones de comunión con los planos
espirituales. En todo caso, nos habla sin duda de energía femenina equilibrada, sin que esto signifique que no tenga
connotaciones menos amables: se dice que puede también anunciar cambios drásticos, e incluso se identifica a esta deidad
con la famosa “Llorona”, leyenda que nos habla de cómo la diosa Cihuacoatl aparece previo a la llegada de los españoles
al Anahuac, para llorar la futura tragedia que se avecinaba sobre sus amados hijos. Como ya se dijo, rige el numeral 13 de
la secuencia diurna, aunque dependiendo de la tradición, se puede llegar a sustituir por Citlalmine.

CITLALMINE. Su nombre puede traducirse como “Falda de estrellas”. Cuesta un poco de trabajo acceder a
información sobre esta deidad, fuera de un contexto de tradición oral. Se supone que simboliza la armonía con el
universo, el cielo estrellado irradiando sabiduría y conciencia. Rige el numeral 13 de la secuencia diurna, aunque
dependiendo de la tradición, se puede llegar a sustituir por Cihuacoatl.

EHECATL- QUETZALCOATL. QUetzalcoatl, en su advocación de Ehecatl,nos habla de todos los significados


incluidos en el signo viento. Se asocia con la palabra, la sabiduría y la armonía que se debe buscar en el entorno
inmediato. Como dios de la fertilidad, Quetzalcóatl llama siempre a generar para los demás: el líder debe servir y no
servirse. También indica que bajo la tutela de esta regencia se debe buscar lo trascendente, lo precioso. En realidad,
reducir los significados que la deidad mas venerada de Anahuac a unas cuantas líneas es imposible, así pues se conmina al
estudiante a revisar el riquísimo acervo de conocimientos que sobre esta deidad existen. Quetzalcóatl rige el signo Ehecatl
y era celebrado durante las veintenas de Acahualo y Etzalcualistli.

HUEHUECOYOTL. Su nombre es “Coyote viejo”. El coyote es un animal muy inteligente, que es exitoso a pesar de ser
de menor tamaño que otros depredadores. Representa por ello la cualidad de resiliencia, de adaptabilidad. Un coyote viejo
es pues un animal doblemente eficaz, ya que a sus cualidades naturales se le agrega la experiencia de haber llegado a
avanzada edad. En las naciones del norte, sobre todo, Coyote es un dios bromista y en ocasiones mentiroso que suele salir
adelante en sus proyectos, pero al que frecuentemente sus bromas se le voltean haciéndolo padecer. En el centro de
México, además, había una cierta asociación del coyote con los apetitos de todo tipo, incluyendo el apetito sexual, los
cuales se pueden disfrutar pero que se deben también aprender a refrenar (viene aquí a la mente el nombre de
Nezahualcoyotl, que significa “coyote que ayuna” y que alude a un gobernante experimentado y resiliente que no
obstante, se dice, era capaz del
refrenamiento, siendo recordado por su cultura y rectitud). Así pues, Huehuecoyotl es un símbolo de la experiencia en la
vida, de aprender sobre la marca misma, mediante el contacto directo con las cosas, pero también nos indica la necesidad
de no dejarse llevar sólo por los apetitos. En otro contexto, Huehuecoyotl se relaciona con la danza, siendo como el
regente de esta actividad.

HUIXTOCIHUATL Se le conoce como la diosa de la sal, y en las fuentes el Padre Sahagun la ubica como la hermana
mayor de los Tlaloque, deidades del agua. Se dice que a ella se le debe que el agua del mar se haya salado, pues es
expulsada del Tlalocan (paraíso de Tlaloc) justamente pro salar el agua dulce, y al llegar al mar continúa haciéndolo hasta
dejar las aguas marinas en su condición actual.Por ello, quizá pueda considerarsele de algún modo patrona de las aguas
saladas. También se ha argumentado que formaba una triada con Chalchiuhtlicue, diosa de las aguas, y Chicomecoatl,
diosa del maíz.. Huixtocihuatl rige la veintena de Tecuilhuitontli.

ILAMATECUHTLI. Se le representa como a una anciana. Su nombre probablemente ha llegado a nosotros tergiversado,
pues hay referencias a que lo mas correcto sería llamarla “Ilamacihuatl” o algún vocablo parecido, ya que es una deidad
femenina y la “particula “tecuhtli” indica sexo masculino. Como sea, su nombre suele traducirse como “la de la falda
vieja”, en relación a que representa el maíz seco. Se considera parte de un complejo de varias diosas relacionadas al maíz,
que incluyen a Xilonen (el maíz tierno) Chicomecoatl (el maíz maduro) e Ilamatecuhtli (el maíz seco). También se
entiende como la madre tierra que entra en proceso de reposo, en su etapa de vejez en la cual se arruga y agrieta como
resultado de la sequedad y el frío que prevalecen al final del año. Rige la veintena de Tititl.

ITZPAPALOTL Itzpapalotl, significa “mariposa de obsidiana”. Es una deidad femenina relacionada con la noche y el
cielo nocturno. El simbolismo de la mariposa, por si mismo, es muy rico en significados. Se dice que la mariposa era la
heraldo de Xochiquetzal, la diosa del amor, la belleza y los placeres, siendo este insecto quien llevaba las peticiones de la
gente a la diosa. La mariposa es también símbolo de trasformación radical, pues la oruga , un ser terrenal, se trasforma en
un ser alado. También es bien conocida la idea de que la mariposa representa el alma de los muertos que se eleva al cielo
y puede regresar a la tierra para embellecerla y quizá a dejar alguna enseñanza a los vivos.
El matiz arquetípico de la Itzpapalotl, como tal, puede relacionarse a dos cosas: una, a la mujer de experiencia en artes
“nocturnas”, curandera y bruja poderosa. En segundo lugar, es un númen de la trasformación en su faceta destructiva,
pues de esta diosa se dice que es la jefa de las tzitzinimeh, escencias destructivas ("demonios", para la mentalidad
occidental) de las que se dice que aparecerán para destruir al mundo, llegado el momento. Mas allá del componente
mítico de este aspecto, al autor de estas líneas le parece que Itzpapalotl quizá pueda representar un signo de la mente
subconsciente. La mariposa es en muchas culturas símbolo del pensamiento, y si en Anahuac existió la misma acepción,
aquí tenemos a una mariposa negra, una mariposa nocturna, de la cual se ha ha dicho que “anuncia muertes”, lo cual hace
eco con su faceta como escencia destructiva líder de las tzitzinimeh. Al autor se le ha ocurrido que quiza todo ello pueda
entenderse como un simbolismo para representar a esa corriente de ideas “nocturnas”, un flujo de pensamientos
subconsientes y condicionantes que hacen al individuo ser como es, pero que también deben atenderse porque de no
hacerlo así pueden generar conductas destructivas (la psicología moderna sabe que si el subconciente aflora sin control
ello condiciona la “destrucción” psicológica del individuo). La asociación de esta diosa con el mundo de los sueños
también puede aparecer aquí, quizá por causas similares a lo anteriormente dicho. Itzpapalotl rige el signo Coscacuahtli
de la secuencia de los días y la trecena de Ce Cali.

IZTLACOLIUHQUI A esta deidad masculina se le relaciona en los documentos fuente con Centeotl, y se dice que
representa también las transgresiones de los dioses a los principios divinos. En los mitos se dice que es el hijo de la
relación adúltera entre Tezcatlipoca y Xochiquetzal, y que su nacimiento representa la trasgresión que genera la
expulsión de los dioses del Tamoanchan, paraíso primordial. Itztlacoliuhqui nace ciego, lo cual, se dice, representa la
"disminución" de sus facultades.
En gran cantidad de imágenes se le pinta con los ojos vendados, o incluso sin ojos, pero además sin cuerpo o
extremidades. Nosotros hacemos una lectura de esto, además de la ya mencionada alusión a la “inferioridad” de lo
humano ante lo divino, como una alusión a la naturaleza etérea e intuitiva de la deidad, es decir el uso no de la vista o los
sentidos clásicos, sino más bien de la introspección y la intuición para experimentar el mundo.
La parte menos amable del regente es el castigo, ya que Itztlacoliuhqui indica también juicio propio y ajeno (de hecho,
hay informaciones acerca de que en la antigüedad en esta trecena se castigaba a los adúlteros mediante lapidación),
hablando un poco de la vocecita interior que todos poseemos y que no siempre es amable. Cabe aquí quizá el adagio que
reza que “no hay juez mas severo que el hombre que se juzga a si mismo”: en introspección honesta se puede ver la
realidad sin rodeos ni atenuantes, y los actos se califican de una forma tan objetiva como carente de matices.
Personalmente entendemos todo este complejo simbólico como el trabajo con la critica y sobre todo la autocritica, la cual
no es buena ni mala sino simplemente una función mas de la mente que hay que aprender a dominar. Itztlacoliuhqui alude
también al frio, los cuchillos de obsidiana y el viento helado, y estas cualidades, además de su obvia asociación con los
fenómenos meteorológicos como las heladas y el congelamiento, puede relacionarse de algún modo con lo arriba dicho.
Este dios rige la trecena de Ce Cuetzpalin.

ITZTLI TEZCATLIPOCA El segundo señor nocturno, Tezcatlipoca en su


advocación de Iztli se conoce como como “Señor de Obsidiana”. La
pintura facial negra que atraviesa su rostro a la altura de los ojos y la
mandíbula, un elemento redondo en el pecho que simboliza el espejo de
obsidiana y el pie derecho descarnado que muestra el hueso (o algún
otro elemento como en este caso) son características de Tezcatlipoca,
que aquí presenta además el pie izquierdo sustituido por un cuchillo de
pedernal. Itztli Tezcatlipoca es un símbolo de introspección, que nos
puede hablar tanto de necesidad de “verse en el espejo del otro” como
de la capacidad de tomar conciencia de procesos personales necesarios
para crecer. La obsidiana también se asocia con el cuchillo y el cortar, por
lo que este símbolo puede usarse para eliminar procesos indeseables,
“cortando por lo sano” con las cosas. Rige el numeral 2 de la secuencia
nocturna
IXKIMILI. Es una esencia que se representa con los ojos
vendados, probablemente indicando aquello que no se ve con
los ojos, como pudiera ser la intuición, el uso de los sentidos no
visuales y por supuesto el mundo mental interno. Este dios se
confunde con Iztlacoliuhqui, pudiendo ser una advocación del
mismo, en todo caso es con seguridad una faceta de
Tezcatlipoca. Se relaciona con el viento frío y con las heladas, y
se dice también que es representación del castigo y la justicia.
Indica necesidad de no juzgar únicamente por la apariencia y de
relacionarse con el mundo a través de sentidos distintos a la
vista (tacto, olfato, oído, gusto). Tambien requiere atender al
mundo interno para estar equlibrado, y confiere una fuerte
carga de autoexigencia que se debe aprender a manejar para no
caer en autojuicio o autosabotaje. Rige el signo Acatl de la secuencia de los días
MEYAHUEL. El nombre Meyahuel, con “e”, aparentemente es
la acepción correcta para nombrar a esta diosa, conocida
comúnmente como Mayahuel, con “a”. Esta deidad es la
patrona del pulque y la embriaguez, pero además es un bello
símbolo del nutrir mediante el sacrificio, como un maguey
sacrifica sus pencas y su corazón mismo para dar todo lo que
esta planta le daba a los antepasados, que en cierto momento
fue casi todo. De ella se obtenía medicina, fibras y puas para
tejer y usar como herramienta de penitencia, las plantas
sembradas una junto a la otra proporcionaban un seto natural
para los cultivos, de su corazón se obtenía el aguamiel que
servia para preparar pulque y proporcionaba alegria, se
usaban también sus pencas como material de construcción y una vez seca la materia vegetal proveniente de la planta se
usaba como combustible para el fuego, Esta planta representa pues el sustento y la generosidad, se puede cortar sus
pencas y la planta seguirá dando siempre. Todas estas cualidades le valieron a Meyahuel el sobrenombre de "la señora de
los muchos pechos", en alusión a que nos amamantaba en todos sentidos. En otros contextos, se ha señalado que la púa
del maguey representa el propio ser, que se proyecta hacia el cielo, en una metáfora de elevación espiritual, y que al estar
asociada al pulque, a Meyahuel se le relaciona con la modificación de la conciencia (plantas de poder). Esta diosa rige el
signo Tochtli de la secuencia de los días y la trecena de Ce Malinali
MICTLANTECUHTLI Es el así llamado “señor de los muertos”,
pues gobierna el Mictlan, inframundo nahua donde van a
reposar los descarnados. Para los ancestros de Anahuac, la
muerte no era una presencia a la que se debía temer, sino
parte de la vida misma y una energía mas con la que se
convivía. Además representa las trasformaciones o “muchas
muertes” que suceden en la vida, lo cual podría ser una de las
propuestas de trabajo cuando aparece esta regencia: hacer
conciencia de los cambios y las trasformaciones y como nos
relacionamos con ellas. Mictlantecuhtli indica también
posición de respeto a los ya trascendidos, no olvidar que nos
debemos a ellos. Rige el signo Itscuintli de la secuencia de los
días, la trecena de Ce Tecpatl, el numeral seis de la secuencia diurna, el numeral cinco de la secuencia nocturna y la
veintenas de Xocotl Huetsi o Huey Micaihuitl
PAHTECATL Patrón de las plantas de poder, Pahtecatl también
está asociado con el uso de todo tipo de plantas medicinales, por
lo cual se considera que está regencia está indicada para todo lo
relacionado con las mismas, ya sea aprender sobre ellas o tener
curación a través de ellas. Asimismo, al ser Pahtecatl una deidad
íntimamente relacionada con el pulque, pide la reflexión acerca
de cómo los estados de embriaguez pueden ser utilizados para
la curación espiritual, ya que según se sabe esta bebida
fermentada poseía connotaciones sacras en la antigüedad, no
era un simple medio de obtener placer sensorial. Pahtecatl rige
el signo malinali de la secuencia de los días
PILTZINTECUHTLI Esta esencia, cuyo nombre significa “el señor niño”
simboliza al sol que va tomando fuerza, el sol naciente o el sol luego del
solsticio invernal. Puede indicar la necesidad de mantener encendido el sol
interior y buscar la luz de la inocencia para atravesar momentos de
necesidad. Esta deidad se asocia con la juventud y en ocasiones con el maíz
tierno. Nos puede hablar pues de la inocencia, la capacidad de juego y la
alegria. Rige el numeral tres de la secuencia nocturna
TECCIZTECATL. Esta deidad es aquella que estuvo presente en la leyenda de
la creación del quinto sol en Teotihuacan. Se trata de aquel que fue elegido
para ser el sol, pero que se acobardó en el momento de lanzarse al fuego
sagrado, arrepintiéndose de su falta de valor posteriormente y lanzándose
en segundo lugar, emergiendo como un segundo sol que fue opacado
convirtiéndose así en la luna. Es, pues, la escencia de la luna
en su faceta activa, no como energía femenina y pasiva sino
como movilidad y ciclicidad. La luna controla las mareas y se
asocia con los muertos, habiendo algunas tradiciones que
refieren que el cuerpo energético del ser consciente es de
algún modo asimilado y trasformado por la luna. De ahí su
asociación con esta trecena. Tecciztecatl es además, según
otras fuentes, representación de la arrogancia, la inteligencia
y la creatividad. En cierto modo es una faceta de Tezcatlipoca,
con todo el simbolismo asociado a este último. Su nombre
significa “portador de caracoles marinos” o aún “morador
del caracol”, quizá en alusión a su faceta como deidad lunar
asociada al mar, o bien como simbolismo de la espiralidad del
tiempo y los ciclos, representada por la espiral de la concha del caracol. En Tecciztecatl se observa la indicación de
atender los ciclos de los que se compone la vida, para no estancarnos en repeticiones de los mismos, sino fluir con los
cambios y las trasformaciones que se nos dan a cada momento. Rige el signo Miquistli de la secuencia de los días y la
trecena de Ce Miquistli
TEPEYOLOTL O TEPEYOLOHTLI, Tepeyolohtli se puede traducir como
“camino de la montaña”, mientras que Tepeyolotl vendría siendo
“corazón de la montaña”. Es, en todo caso, la esencia de las montañas,
y se le representa como un jaguar, que puede aparecer emergiendo o
resguardándose en una cueva,. Es relacionado con los terremotos
pero también, a otro nivel, con introspección profunda: la conciencia
ha de ir, como un jaguar, por la noche de la mente, cazando a su presa,
los pensamientos y emociones Como símbolo abstracto puede indicar
el monte, el cerro, el lugar no-civilizado, el lugar peligroso a donde se
va de cacería o a buscar visión espiritual. Puede encontrarse tambien
cierta metáfora que indica el equilibrio que debemos buscar en lo
interno, y de cómo lo que llevamos dentro debe ser trabajado para que no “nos devore”, como un jaguar que nos tomó
desprevenidos en una caverna. Esta deidad rige el numeral ocho de la secuencia nocturna y las veintenas de Teotleco y
Tepeihuitl
TEZCATLIPOCA . Después de Quetzalcoatl, Tezcatlipoca es
posiblemente la deidad con mayor riqueza simbólica en
todo Anáhuac. Se ha llegado a decir que Tezcatlipoca lo
representa prácticamente todo, pero para efectos de la
lectura calendárica es muy útil su acepción como “espejo
humeante”, que es lo que justamente significa su nombre.
Esto es una metáfora de la toma de conciencia, el espejo de
obsidiana en el que nos vemos, aquello que ha de ser
reflexionado y reflejado en nosotros mismo y a través de los
demás. El “humo en el espejo” son todos eso conceptos
falsos, esas máscaras que deben ser disueltas para acceder
a la pureza del ser elemental. Por lo tanto, habla de
honestidad consigo mismo, de empatía y también de
justicia, se dice que Tezcatlipoca daba y quitaba con total
justicia, ya que representa la propia conciencia, el propio ser que se esta evaluando a si mismo. Siempre indica pruebas,
pero a la vez fortaleza mental para atravesarlas. Rige el numeral 10 de la secuencia diurna y la trecena de Ce Cuetzpalin
TLAHUITZCALPANTECUHTLI. A esta esencia se le conoce como
“señor de la aurora” debido a que representa al planeta Venus
como estrella de la mañana. El planeta Venus solo es visible en
dos momentos del día, es la primera estrella que aparece durante
el anochecer (estrella de la tarde) y también una estrella que
aparece minutos antes de que el sol renazca por la mañana.
Tlahuitzcalpantecuhtli es este último lucero, que anuncia la
llegada del nuevo día. Es una luz que nos dice “pronto terminará
la noche” por lo cual en algunos círculos representa la esperanza
por un nuevo día y es heraldo de ciclos a nivel cósmico y también
personal. Se dice que dependiendo los signos calendáricos y/o
astrológicos que le acompañen, puede anunciar ciclos positivos o
negativos, pero en todo caso indica cambios en todo momento.
Aterrizando a la vida cotidiana la simbología de
Tlahuitzcalpantecuhtli, se diría que indica la necesidad de estar
atentos a los cambios que experimentamos en la vida para utilizarlos a nuestro favor. Rige el numeral 12 de la secuencia
diurnia y la trecena de Ce Coatl
TLALOC. A Tláloc, “licor de la Tierra”, se le asocia con la
lluvia, con todos sus simbolismos asociados: bendición del
cielo, imparcialidad, fertilidad. Empero, su simbolismo no
termina allí, siendo también el rayo y el relámpago e
incluso la energía solar que esta constantemente
fertilizando la madre tierra, ya que sin luz solar no es
posible que exista la vida. Como rayo, es el fuego celeste
que cae fijando algunos elementos en la tierra, como el
nitrógeno, indispensable para los organismos vivos. Por
último, en Tlaloc está también presente la dualidad
implícita de la que se hablaba arriba: en muchos centros
de conocimiento se representaban 2 formas de Tlaloc, uno
"bueno", constructivo, y el otro "malo" o destructivo. Por
lo tanto habla de búsqueda de equilibrio para ser, verdaderamente, lluvia que fecunde y no tormenta que
destruya. Rige el signo Mazatl de la secuencia de los días, la trecena de Ce Quiahuitl, el numeral ocho de la secuencia
diurna, el numeral nueve de la secuencia nocturna y las veintenas de Acahualo, Tozoztontli, Etzalcualistli, Tepeilhuitl y
Atemostli
TLALTECUHTLI. Esta deidad masculina es la tierra, pero no una
tierra que da vida, sino su opuesto: la tierra que devora. La
lapida de Tlaltecuhtli descubierta en el templo mayor
probablemente fue usada para depositar en su boca las cenizas
de los gobernantes cremados, es decir, como representación
de la tierra que trasforma, que devora lo muerto. Indica pues
una ofrenda, algo que se debe abandonar o que se debe
trabajar negativamente, esto es, como para restarle fuerza a
una cualidad. Rige el numeral dos de la secuencia diurna
TLAZOLTEOTL. Esta diosa está relacionada con los partos, los
temascales y el perdón de los pecados. Igualmente se le denomina a veces como diosa del amor, confundiéndose o mejor
dicho fundiendose en este caso con Xochiquetzal. A nivel mundano es también la fuerza sexual, la cual no es otra cosa
que polaridad, que mantiene a los seres vivos en movimiento. La misma polaridad rige el “romance” de las partículas
subatómicas, en cuyo nivel de acción lo positivo y lo negativo se atraen mutuamente, permitiendo toda clase de
interacciones que crean todo lo que existe. En un nivel trascendental, baste recordar que toda la filosofía y cosmovisión
anahuaca está basada en la danza de los contrarios, y que no son
pocas las tradiciones espirituales que afirman que el amor
mueve al ser humano mas allá de sus propios limites, axioma con
el que estamos muy de acuerdo. Sin amor, ¿para que sirve
moverse en la vida? Algún tipo de amor nos debe motivar, sea el
amor hacia otros, hacia alguna actividad que nos apasione o, por
lo menos, el amor a uno mismo. Tlazolteotl, como se dijo, podía
perdonar los pecados, era la diosa ante quien se hacia confesión
de las faltas.
Tlazolteotl rige el signo Ocelotl de la secuencia de los días, la
trecena Ce Olin, el numeral cinco de la secuencia diurna y el
numeral siete de la secuencia nocturna
TOCI. El vocablo vendría a ser un apócope de “Tocijtli”, cuyo significado es
“nuestra abuela”. Es una deidad que se confunde con Tlazolteotl y con
Ilamatecuhtli, formando con estas diosas y las deidades del maíz un complejo
simbólico interrelacionado. Se le considera patrona de curanderos y adivinos, así
como de los temascales y los partos. Se le denomina a veces “Teteo Inan”, que
quiere decir “madre de todos los dios”. Resulta curiosa la alusión a que, mientras
los dioses son sus hijos, los seres humanos somos sus nietos. Se puede identificar
también con la tierra en fase de reposo. Rige la veintena de Ochpanichtli
TONACATECUHTLI. Esta escencia representa el sustento y la alimentación. Es
símbolo del padre y madre proveedores que cuidan de su decendencia. Representa al dador de vida que procura a todas
las criaturas y les da lo necesario para vivir. También epresenta el principio del tiempo y la creación, y en ocasiones se le
identifica como el padre de todos los dioses Jose Arguelles, en su particular interpretación calendárica, dice al respecto
del primer signo de la cuenta que el mismo nos llama a tener fe en la existencia tal cual es, confiando en las
circunstancias que el espíritu propicia. Hay que abrirse a recibir
las bendiciones que se derraman sobre uno, teniendo en
mente que “siempre estás acunado en los brazos de los
Divino, no importa cómo aparezcan ser las circunstancias o
situaciones de tu vida”. Creemos que esta interpretación es
acertada: Tonacatecuhtli, el señor de nuestro sustento,
siempre está dando, en realidad la vida siempre está llena de
abundancia si aprendemos a percibirla. Como en el seno
materno, donde el ser que se desarrolla tiene lo que requiere
(no mas, no menos), así todas las circunstancias de la vida
suceden como suceden porque no pueden suceder de otro
modo. La labor espiritual radica en asimilar este hecho y fluir
con él. Así se aprende y así se depura la conciencia. Rige el
signo CIpactli de la secuencia de los días y la trecena de Ce
CIpactli
TONATIUH. Es la representación del sol, símbolo de la fertilidad
que viene del cielo y la conciencia elevada en su máxima
expresión. Se le reconoce fácilmente en la iconografía por su
disco solar en el pecho o la espalda, así como por su color rojo
intenso y su característica nariguera Su aparición es augurio de
buena fortuna, fertilidad en todos los sentidos, elevación y
majestuosidad. Rige el signo Quiahuitl de la secuencia de los días,
la trecena de Ce Tecpatll, y el numeral cuatro de la secuencia
diurnaa
XILONEN Se considera parte de un complejo de varias diosas
relacionadas al maíz, que incluyen a Xilonen (el maíz tierno) Chicomecoatl (el maíz maduro) e Ilamatecuhtli (el maíz
seco). A esta diosa se le conoce como “la peluda” ya que representa el maíz en la fase en la que empieza a arrojar jilote.
Posee todos los atributos de una deidad del maíz, como fertilidad y sustento. Rige la veintena de Huey Tecuilhuitl, donde
se le realizaba su ceremonia.
XIPE TOTEC. Su nombre significa “Nuestro Señor Desollado”. Xipe
Totec es una figura que se pinta generalmente con la piel desprendida
de la carne, en alusión a la renovación, la regeneración de la tierra que
“cambia de piel” de forma estacional. Puede aparecer bajo la máscara
de Camaxtle, quien se relaciona con la actividad de la cacería y la de
adquirir sustento. Ambas interpretaciones nos sirven para realzar la
fuerza de la regencia. Xipe, la escencia de la piel desollada, nos alude
la capacidad de “cambiar pieles”, renovarse, para darse a los demás,
como la madre tierra se regenera cada año para alimentar, para dar
alimento. Algunos lideres espirituales contemporáneos han hecho
alusión a esta cualidadcomo vinculada al amor incondicional que
requiere una generosidad y un desapego máximos, pues solo aquel
que puede desprenderse de lo suyo para darlo a los demás puede
amar verdaderamente, en un acto que no es ajeno a la acepción de
autosacrificio: darlo todo, hasta la piel, al otro. Mas allá de esto, la simple alusión a la regeneración y el cambio, así
como al desapego, son una indicación siempre presente en esta deidad, que también tiene que ver con la fertilidad de la
tierra y por lo tanto con el maíz
Rige el signo Cuauhtli de la secuencia de los días, la trecena Ce Itzcuintli y Ce Tochtli (como Itzpaltotec) y la Veintena
de Tlacaxipehualistli
XIUHTECUHTLI. Xiuhtecuhtli, es la esencia del fuego celeste,
que se asociaba siempre con cambios de ciclos. Indica pues la
cualidad de encontrarse en constantes cambios y
renovaciones, necesarias para que pueda manifestarse la
fertilidad que también representa, pues un universo que no
cambiara constantemente no podría albergar la vida.
Xiuhtecuhtli es el fuego que viene del cielo, metáfora del
espíritu que desciende para habitar la materia. Ese mismo
fuego (espíritu) ha de retornar a su origen cerrando el ciclo. A
Xiuhtecuhtli se le puede asociar en cierta medida con el sol,
que brinda su energía (tonali) a todas las cosas. Los ciclos de
fuego nuevo se celebraban en momentos calendáricos
asociados a esta esencia. La presencia de este símbolo en la lectura de tonalpohuali resulta propicia para generar
arranques de ciclos personales y colectivos, o celebraciones de amarres de ciclos. Xiuhecuhtli rige el signo Atl de la
secuencia de los días, las trecenas de Ce Coatl y Ce Tochtli,, el numeral uno de la secuencia diurna, el numeral uno de la
secuencia nocturna y las veintenas de XOcotl Huetsi o Huey MIcailhuitl e Iscali
XOCHIPILI. Se trata de una deidad compleja asociada al maíz y a la
vegetación en general, principalmente las flores e incluidas las
plantas de poder. Nos habla pues de los estados visionarios y del
éxtasis espiritual, tanto como de fertilidad, sustento y renovación.
Otra de sus acepciones es como representación del sol naciente. Su
nombre significa “príncipe flor” y también simboliza la belleza y la
búsqueda de placer. Finalmente, su Asociación con las actividades
artísticas es muy importante.
Rige el signo Osomatli de la secuencia d ellos días y la veintena de
Tlaxochimaco o Micailhuitontli
XOCHIQUETZAL. Es un arquetipo que representa la sensualidad, la
carnalidad y la belleza. En este contexto, indica la cualidad de
florecer como ser humano (Xochiquetzal significa “flor preciosa”),
aunque también el riesgo de caer en la liviandad y la superficialidad.
Esta es también la diosa del amor y está implicada en diversas
leyendas cosmogónicas de Anáhuac. En varias de ellas se le asocia
con la caída de los dioses del Tamoanchan, el equivalente del Edén
o del Monte Olimpo en Anahuac. Debido a una trasgresión que
difiere según la versión consultada (en una de ellas corta flores de
un árbol sagrado, en otras comete adulterio) la diosa castigada y
expulsada del Tamoanchan, a veces junto con los demás dioses, y
ciertas advocaciones de la diosa se describen como marcadas con
la condena de no poder mirar nunca más hacia el cielo. La metáfora parece clara: podemos disfrutar de lo que es bello,
pero si nos consume el deseo, la avaricia o la vanidad, habrá desequilibrio, la casa se destruye, el sufrimiento aparece y,
lo peor quizá, es posible que estemos tan distraídos en las cosas mundanas que “no podamos volver a ver el cielo”, esto
es, nos incapacitemos para apreciar la dimensión sagrada de la vida.
Rige el signo Xochitl de la secuencia de los días, la trecena de Ce Cuauhtli y la veintena de Quecholi
XOLOTL Este regente es un símbolo muy interesante. Como se menciona en la leyenda de la creación del quinto sol,
Xolotl es el único dios que se negó al autosacrificio. En la mencionada leyenda, los dioses se reúnen en Teotihuacan
después de 4 soles o eras caducas, y deciden que deberá realizarse el sacrificio por fuego, siendo los elegidos para tal fin
dos deidades, Tecciztecatl que primero se acobarda aunque después se avergüenza y termina sacrificandose, y
Nanahuatsin, que se lanza valientemente a la hoguera sin dudar y emerge convertido en sol. Se cuenta que una vez
aparecido el astro que alumbraría al Anahuac, este permanecía quieto. Ehecatl-Quetzalcoatl sopla con fuerza y lo hace
moverse, pero para garantizar que el
movimiento del sol no se perdiera, se requiere del sacrificio de todos los dioses. Uno a uno estos van muriendo en la
piedra de los sacrificios pero Xolotl rehuye a su destino y escapa, siendo perseguido y sometido por la fuerza por el
propio Quetzalcoatl, no sin antes dar origen al ajolote y a todas las cosas dobles (incluidos los gemelos), de las cuales es
patrono. Aquí caben dos comentarios muy interesantes.
El primero, que Xolotl es conocido como el “gemelo
oscuro” de Quetzalcoatl. En Anáhuac los dioses con
frecuencia manifestaban aspectos opuestos. Xolotl puede
ser considerado pues el mismo Quetzalcoatl, en una
faceta no luminosa. Este simbolismo puede entenderse
como “uno persiguiendose a si mismo”, para obligarse a
dar lo que se sabe debe darse, a pesar de nuestra
reticencia a hacerlo. El simbolismo es inmenso, y muy
bello por otro lado. En segundo lugar, hay que apuntar que
Xolotl y Nanahuatzin frecuentemente se mezclan uno con
otro, al punto de poder identificarse casi como la misma
esencia. Esto quizá nos pueda hablar de otra metáfora: la
de los altibajos en la vida y de los papeles diversos que podemos representar en ella: Nanahuatzin salta, valiente, al
fuego, pero Xolotl rehuye cobardemente el sacrificio.
Xólotl también pareciera indicar la animalidad inherente al hombre, así como lo espiritual inherente a la materia,
dualidad que indica que lo material contiene la semilla de lo divino y lo divino no deja de contener la impronta de lo
material. Se le representa a veces con la forma de animales antropomorfos (como un ser de cuerpo humano y cabeza de
perro, por ejemplo) y en otras ocasiones como un ser deforme y feo. En esto se parece a Nanahuatzin, quien no obstante
termina siendo sol. Al autor le parece que estos simbolismos nos hablan de como en lo mas bajo (la materia) germina la
semilla de lo mas alto (el espíritu, simbolizado por el sol mismo). Y de cómo lo mas alto, el sol mismo, posee orígenes
humildes
en el cieno de lo material. Xolotl rige el signo Olin de la secuencia de los días
y la trecena de Ce Coscacuauhtli
YOHUALTECUHTLI. Este dios, cuyo nombre significa “señor de la noche”, se
asume como la función justamente de guiar en la noche, metafóricamente
en lo no conocido. Es una esencia maestra que nos brinda guía en nuestro
camino, de la que se decía protegía el sueño de los niños por la noche. Según
algunas fuentes, se le identificaba con la estrella Aldebaran, de la
constelación de Tauro. Rige el numeral 11 de la secuencia diurna.
Ocasionalmente es sustituido por Chalmatecuhtli, deidad asociada con la
curación y la magia
4. NUMEROLOGÍA, LOS 13 SEÑORES DEL DÍA Y LAS 13 AVES
PRECIOSAS
Como se dijo en el texto base del círculo de estudio que motiva este compendio, las influencias estudiadas para los
signos del tonalpohuali se completan con la adición del numeral, que se define en función del lugar consecutivo que
ocupa cada tonalli en su trecena particular. Cada numeral añade una cualidad intrínseca al signo, y además le confiere la
compañía de un regente que es propio para cada número. Estas influencias acompañan al individuo de manera natural,
denominándoselos “señores del día”. Del mismo modo, a cada número en particular se le asocia un ave acompañante
(denominada patlani o mejor aún patlapohtli), que también influye en la carga del signo. Una versión muy socorrida de
estas aves puede encontrarse en la lámina 71 del códice Borgia, en el cual se puede ver a la primer ave en el extremo
inferior izquierdo de la imagen, siguiendose a la secuencia primero a la derecha, luego arriba y al final a la izquierda.
Ilustramos con esta lámina este texto
Para lo referente al significado simbólico de cada regente basta acercarse a lo que se sabe sobre cada deidad implicada,
pero en lo referente a la interpretación de los números de la cuenta y sus aves asociadas frecuentemente encontramos
polémicas. Tan solo el autor de estas líneas ha documentado tres o cuatro versiones distintas cuyas diferencias no
siempre son tan insustanciales. La lista que sigue es un intento por condensar en un solo texto distintos puntos de vista.
Se mencionarán los significados del número en particular, así como su ave y su regente acompañantes. La descripción de
este último deberá buscarse en el apartado “deidades regentes” en este mismo documento.
CE. UNO.
Representa la unidad primordial, lo existente antes de la manifestación de la diversidad. El inicio de las cosas, los
proyectos, la vida. La pureza. Se asocia con la madre que genera y con la deidad lunar. Patlapohtli: Nexhuitzilin, el
colibrí gris, que representa las cualidades de la agilidad y la rapidez. Regente: Xiuhtecuhtli
OME. DOS.
Evidentemente, es la dualidad. El análisis de los “pro” y “contra” de algo, el complemento y el apoyo. Puede representar
encrucijada e indecisión, y en otro nivel el corte y separación, el sacrificio incluso, el parto, momento en que el ser se
disocia de la unidad preexistente en el vientre materno. Patlapohtli: Quetzalhuitzilin, colibrí verde, indica el desarrollo
de la intuición y la voluntad. Regente: Tlaltecuhtli
YEI (O EYI). TRES.
Es el ritmo, la decisión tomada después de evaluar el pro y el contra, el resultado o el fruto de algo, por lo tanto
asociado con los hijos y la familia. La libertad, la expresión, la fluidez y la creatividad. A nivel existencial, el ser pasa de
la unidad (“yo”) a la fragmentación en la dualidad (“yo y tu”), y el tercer elemento (“el, ella, o ellos”) permite el contacto
real con todo lo existente. Patlapohtli: Tohtli, el halcón, representando el arrojo, la decisión, la visión aguda. Regente:
Chalchiuhtlicue
NAHUI. CUATRO
Es la integracion, el equilibrio y la organización. AL estar en equilibrio las cuatro fuerzas primordiales del universo,
surge el orden. Indica también la toma de conciencia, después de escindirse de la unidad y categorizar la dualidad y el
tercer elemento, ya se puede hablar de un orden de una multiplicidad de la cual se puede ser consciente. Algunos
maestros asocian al 4 con los bienes materiales, Patlapohtli: Zollin, la codorniz, que representa la paciencia y la
integración. Regente: Tonatiuh/Huitzilopochtli
(NOTA: ciertas tradiciones opinan que el orden de la tercer y cuarta ave preciosa debe invertirse, en cuyo caso Tohtli, el
halcón, corresponde al 4 y Zollin, la codorniz, al 3. Nosotros lo presentamos como puede verse debido a que el códice
Borgia parece prescribir primero al halcón y después a la codorniz)
MACUIL. CINCO.
Indica centralidad, solidez, estabilidad. Es la manifestación, lo que se ejecuta, por lo tanto la mano. Probablemente
debido a su regencia se le ha relacionado con el amor. Patlapohtli: Cacalotl, el cuervo, que representa la astucia, la
resistencia y la fuerza interna (NOTA: alguna tradición habla de que esta quinta ave es en realidad un águila de color
oscuro). Regente: Tlazolteotl
CHICOACE. SEIS.
Es la introspección, el análisis, la evaluación. Se asocia con las cualidades de la expresión influyente y la pasión. Alguna
tradición le confiere características de bondad notable. Patlapohtli: Chicuauhtli, la lechuza, representa el dominio de si
mismo, pero también el magnetismo y la capacidad de influir en otros. Regente: Mictlantecuhtli
CHICOME. SIETE.
El siete indica el equilibrio, pues representa el punto central de la trecena, y el orden. Se asocia con el poder oculto de la
persona, la trasformación de la misma por medio de la aceptación. En otro nivel se habla de inquietud y tendencia a
modificarse. Patlapohtli: Papalotl, la mariposa, que representa la transformación radical y la elevación del espíritu.
Regente: Centeotl/Xochipili
CHICEYI O CHIYEI. OCHO.
El ocho es la decisión, el desarrollo y el crecimiento. Se le ha asociado con la energia masculina, la generosidad y el
maíz. Algún maestro prescribe pruebas asociadas a este numeral. Patlapohtli: Cuauhtli, el águila, que es símbolo de
intuición despierta y conocimiento interno. Regente: Tlaloc
CHICNAHUI. NUEVE.
Es un numeral que sin duda se debe asociar también a la transformación, la periodicidad cíclica, al ser el numero de
capas del inframundo. Indica poder de acción, energía femenina. Se habla de ingenio y prudencia, sabiduría asociada al
héroe mítico. Patlapohtli: Huexolotl, el guajolote, que brinda impulso de trascendencia. Regente: Quetzalcoatl
MAHTLAHTLI. DIEZ.
Se le prescribe como el descanso, la abstracción y el razonamiento. Tambien es la ley y la autoridad, rectitud, toma de
conciencia y desapego. Patlapohtli: Tecolotl, el tecolote, indicando armonía, equilibrio y manifestación. Regente:
Tezcatlipoca
MAHTLAHTLI IUAN CE. ONCE.
Es el placer, el ocio y la diversión. En otro nivel indica re-iniciación conciente, constancia, autoridad y diciplina. Así
como ayuda divina. Patlapohtli: Chiconcuetzali o alotl, la guacamaya, que se asocia con las cualidades de la festividad,
pero también tendencia a ser exagerado y sedentario. Regente: Yohualtecuhtli/Chalmatecuhtli
MAHTAHTLI IUAN OME, DOCE.
Es la fuerza de voluntad, la claridad y lucidez. Se le asocia con la comunidad, el grupo, y la protección d eeste, por lo
tanto es un signo bélico que orilla a vencer obstáculos o a adquirir aprendizaje. Patlapohtli: Quetzal, que es la
trascendencia y la belleza interior. Regente: Tlahuitzcalpantecuhli
MAHTLAHTLI IUAN YEI. TRECE.
Es el conocimiento cierto, el florecimiento y la trascendencia. Aporta capacidad de síntesis, diplomacia y buena fortuna.
Patlapohtli: Toznene, el papagayo, que representa autosuficiencia y facilidad de palabra. Regente:
Citlalmine/Cihuacoatl
5. LOS 9 SEÑORES DE LA NOCHE
Los “señores de la noche” o “acompañantes nocturnos”, conocidos como yohualtecuhtin en lengua nahua (plural de
“yohualtecuhtli”, “señor de la noche”) y como Bolon Tiku en lengua maya, son una secuencia de 9 deidades que
acompañan a una secuencia de 9 numerales alterna a la de los 13 numerales diurnos, que se asocian a la noche. Una
versión muy socorrida de esta secuencia se encuentra en la lámina numero 14 del códice Borgia, que es la que acompaña
a estas líneas
.
En esta lámina vemos a Xiuhtecuhtli, primer señor de la noche en el extremo inferior derecho de la lámina, acompañado
por el signo cipactli. A partir de allí se sigue la secuencia en el recuadro siguiente inmediatamente a la izquierda (el de en
medio de los tres que vemos hasta abajo), en donde se plasma al segundo Yohualtecuhtli que es Itztli Tezcatlipoca,
relacionado al glifo del tonal ehecatl. El tercer señor nocturno, Piltzintecuhtli, esta en el extremo inferior izquierdo,
asociado al glifo cali, y de ahí debemos subir a la línea de en medio, inmediatamente arriba del tercer señor nocturno. En
este recuadro vemos al cuarto yohualtecuhtli, Centeotl, asociado al signo cuetspalin. Seguimos ahora a la derecha, en
medio encontraremos a Mictlantecuhtli, y llegando al sexto (el del extremo izquierdo de la línea de tres de en medio) que
es Chalchiuhtlicue, subimos al recuadro de arriba, para encontrarnos con Tlazolteotl, y volver a contar a la izquierda los
dos últimos regentes nocturnos, Tepeyolotl y Tlaloc. El resultado es pues una lectura en forma de “S” invertida, y basta
seguir la secuencia de los primeros 9 glifos del calendario (cipactli, ehecatl, cali, cuespalin, coatl, miquistrli, mazatl,
tochtli y atl) para aclarar cualquier duda de cómo se debe leer esta lámina del códice.
En el contexto de la “lectura de tonalamatl”, lo que hemos recibido de nuestros maestros y maestras es variado, y no
puede abarcarse en una cuantas lineas. Se nos ha dicho por ejemplo que el señor nocturno simboliza cualidades presentes
en la persona de manera velada, no evidente. También hemos escuchado que estas cualidades nos ayudan en momentos
de necesidad, y por supuesto nos pueden hablar mucho de nuestra forma de trabajar con nuestros procesos internos,
incluso subconcientes, con “la noche” de nuestro ser. En este contexto, vale la pena también mencionar que, en el
método de la continua tradición Tetzkatlipoka, en la lectura de tonalamatl se incluyen los “tekuanes”, animales nocturnos
asociados a los 9. Este es otro elemento mas que nos puede ayudar para el trabajo interno, una especie de tótem
nocturno incluso. La lista que conocimos cuando estudiamos en dicha tradición la ponemos a continuación, aclarando
que ha sido el único espacio donde hemos encontrado este elemento. Ningún otro tonalpouhque o estudioso que hayamos
conocido hace uso de estos 9 animales.
1. El primer señor nocturno se asocia con el ocelote
2. El segundo señor nocturno se vincula con el jaguar
3. Al tercer señor nocturno se le asigna el zorro
4. El cuarto yohualtecuhtli se asocia con el armadillo
5. El quinto yohualtecuhtli se vincula con el perro
6. Al sexto yohualtecuhtli se le asigna el tlacuache
7. El Séptimo acompañante nocturno se asocia con el coyote
8. El Octavo acompañante nocturno se vincula con el lobo
9. Al Noveno acompañante nocturno se le asigna el mapache

Consúltese para mayor profundidad.


• El 1 es el inicio de un ciclo, propone, justamente, comenzar a realizar una tarea.
• El 2 nos habla de la dualidad, de observar el pro y el contra de las cosas que emprendemos
• El 3 se refiere a la continuidad y a la planeación, para no dejar inconclusa una tarea
• El 4 habla del equilibrio, el hecho de “poner los pies en la tierra” y observar la realidad tal cual es.
• El 5 es la manifestación, la primera acción que tomamos para lograr un fin.
• El 6 nos habla de la evaluación, el observar de que manera han tenido su curso los acontecimientos para
decidir cómo proceder.
• El 7 implica la aceptación de las cosas, asumir consecuencias y retos.
• El 8 nos habla de la decisión, el reflexionar seguir en la misma línea o cambiar.
• El 9 es la transformación, el hecho de llevar a cabo lo decidido y de este modo manifestarlo o no.
• El 10 es el descanso, el tomar un respiro para reflexionar acerca de lo realizado.
• El 11 es la iniciación, o el reinicio de las actividades, ya con nuevos bríos y nueva visión.
• El 12 nos habla de la fuerza de voluntad, el impulso y la tenacidad necesarias para seguir adelante.
• El 13 significa el florecimiento, el observar los frutos obtenidos del trabajo previo.

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