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Curso de postgrado: Procesos de regulación emocional.

Evaluación artículo: Koole, S. L. (2009). The psychology of emotion regulation: An


integrative review. Cognition & Emotion, 23(1), 4–41.

En la época de la publicación hubo un aumento de investigaciones a nivel multidisciplinar sobre la


regulación de las emociones. Este artículo proporciona una revisión integradora de la investigación sobre
este tema centrándose en adultos sanos.
1. ¿Qué es la regulación emocional? ¿Relación con otras formas de procesamiento emocional? La
regulación emocional puede definirse como “el conjunto de procesos mediante los cuales las personas
buscan redirigir el flujo espontáneo de sus emociones”. Se entiende como un proceso de control y,
aunque también puede existir una regulación emocional externa, este artículo se ha centrado en la
autorregulación emocional. La regulación emocional determina la facilidad para salir de un estado
emocional determinado, mientras que la sensibilidad emocional determina la facilidad para entrar dicho
estado. No necesariamente tiene que ocurrir primero una respuesta emocional no deseada para que
exista regulación emocional, ya que ésta puede ser previa al suceso. Ambas están determinadas por las
características de la persona, los estímulos que enfrenta y el contexto. Sin embargo, ambas son
diferentes en cuanto a su desarrollo y su funcionalidad en la vida de la persona.
2. Análisis de varios enfoques para clasificar las estrategias de regulación de las emociones. La
regulación emocional no tiene por qué ser un proceso consciente. Ninguno de los diferentes enfoques que
han intentado clasificar la gran variedad de estrategias de regulación emocional ha tenido éxito hasta el
momento. Sí parece que pueden clasificarse las estrategias de regulación emocional en categorías de
orden superior en función del sistema generador de la emoción sobre el que actúan y de las funciones
psicológicas que desempeñan. Los tres sistemas generadores de emociones más estudiados son la
atención, el conocimiento y el cuerpo. Las funciones de regulación de las emociones son: la satisfacción
de necesidades hedónicas; la facilitación de objetivos y tareas específicas; y la optimización del
funcionamiento global de la personalidad. Estas funciones se pueden combinar y existen diferencias
individuales en el uso preferencial de cada función. En el artículo se realiza una revisión de la
investigación empírica en función de una clasificación dual de ambos criterios de clasificación: 1.
Regulación de las emociones orientada a las necesidades. La literatura ha enfatizado la necesidad de
minimizar las emociones negativas sobre la necesidad de maximizar las positivas, buscando un alivio
inmediato a expensas del bienestar a largo plazo. Atención: se regula evitando información amenazante o
distracción con información positiva, especialmente las personas represoras. Conocimiento: sesgos
interpretativos para reducir la ansiedad. Corporal: regulación a través de conductas como comer, hacer
ejercicio, buscar proximidad. 2. Regulación de las emociones orientada a objetivos. Impulsadas por un
único objetivo, tarea o norma explícita. Atención: algunas estrategias se orientan a desviar la atención de
los estímulos que pueden desencadenar emociones no deseadas, especialmente recurriendo a la
memoria de trabajo. Conocimiento: codificado en un formato lingüístico, se reduce el impacto emocional
a través de la reevaluación cognitiva, reinterpretando aspectos situaciones o contextuales de los
estímulos o distanciándose desde una perspectiva en tercera persona. Cuerpo. Son menos efectivas que
las cognitivas, se realizan a través de procesos de supresión de la expresión, de la exageración de la
respuesta o el desahogo emocional. 3. Regulación de las emociones orientada a la persona: Tiene un
enfoque holístico, posee sensibilidad contextual e integra sistemas de personalidad tradicionalmente
antagónicos. Se asocia con beneficios a largo plazo. Atención: algunas estrategias se basan en la
contrarregulación atencional. Puede estimularse a través de la meditación y el entrenamiento en
mindfulness/atención plena. Conocimiento: una importante estrategia es la integración de experiencias
emocionales aversivas para el crecimiento personal, puede ser fomentada a través de la escritura
expresiva. Los pensamientos concretos y experienciales, al contrario que los abstractos y atribucionales,
pueden fomentar en la persona un alto conocimiento autobiográfico que puede ayudar aún más en la
regulación a la baja de las emociones no deseadas orientada a la persona. Cuerpo: la mente y el cuerpo
se consideran igual de importantes, se promueven ejercicios de control voluntario de la respiración y de
relajación muscular.
3. Principales conclusiones y futuras vías de investigación. Pocos estudios han abordado el papel de
la fisiología en la regulación de las emociones. Continuar en la línea del interesante trabajo que aborda la
importancia del tono vagal cardíaco sería de interés científico. El estudio de los procesos sociocognitivos
y de aprendizaje social también puede generar nuevos conocimientos interesantes y mejorar las
intervenciones en este ámbito. Aumentar la capacidad de las personas para regular sus emociones no
solo no reduce la experiencia emocional, si no que estas personas son más autorreflexivas, tienen una
conciencia más profunda de sus emociones y probablemente tendrán una vida emocional más rica.

Profesor: JAVIER DOMÍNGUEZ SÁNCHEZ Curso 2023-2024

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